n Se aplicaría con apoyos crediticios y donativos: Fernando Menéndez


Prepara BM plan ambiental para el DF

n Consideraría el control de gasolinas y de emisiones de industrias y transportes, entre otros aspectos

Laura Gómez Flores n El Banco Mundial prepara un segundo proyecto de calidad del aire para la ciudad de México, con apoyos crediticios y donativos. Su estrategia se enmarcaría en el control de la calidad ambiental de los combustibles, el control de emisiones de la industria y transporte, la planeación del desarrollo urbano y la restauración ambiental de los recursos naturales, entre otros aspectos, informó el consultor de la institución, Fernando Menéndez Garza.

Además, se prepara un proyecto para fortalecer la recarga de los acuíferos, con apoyo de recursos de donaciones que está otorgando el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y, eventualmente, habría recursos para su aplicación.

Representantes de la institución comentaron que nuestro país puede acceder a fondos por 50 millones de dólares provenientes de los países desarrollados, que se encuentran en el llamado fondo del carbón y otros instrumentos financieros internacionales, como el Fondo Ambiental Global.

En entrevista, Menéndez Garza recordó que el primer proyecto contó con 220 millones de dólares y permitió cambiar 4 mil 100 autobuses de la Ruta 100, reconvertir microbuses viejos y taxis para que pudieran usar convertidor catalítico, y financiar algunos proyectos de verificación de emisiones.

Con este segundo proyecto, enmarcado en el Programa 2001-2010, se busca ir más allá del transporte y avanzar en la aplicación de medidas de control de calidad en la ciudad de México, además de contar con los recursos suficientes para su realización, en un esfuerzo complementario de financiamiento entre las autoridades capitalinas y el Banco Mundial.

Sin embargo, aún no se definen montos, ni tiempos, pues apenas se iniciaron los estudios de prefactibilidad para conocer la viabilidad de las medidas. Todo dependerá de las dificultades técnicas, la parte social e institucional, quién lo aplicará, bajo qué normatividad, la parte legal, su costo y quiénes son los destinatarios de los recursos y proyectos, explicó.

Una vez que se concluya este trabajo, se determinarán las líneas de acción, aunque como todo trabajo de combate a la contaminación atmosférica atenderá seis líneas: calidad ambiental de los combustibles, control de las emisiones en la industria y en el transporte y planeación del desarrollo urbano para no estimular la generación de más viajes.

Asimismo, contemplaría la restauración ambiental de los recursos naturales de la zona, y la investigación científica, fortalecimiento institucional y participación ciudadana incluida la educación ambiental.

Actualmente, precisó el consultor del Banco Mundial, la ciudad de México es líder en Latinoamérica como la ciudad que ha avanzado más en asuntos como el saneamiento atmosférico. En 1988 se violaban las normas de todos los contaminantes, todos los días, y dos o tres veces estaban arriba de la norma internacional.

Hoy, sólo dos contaminantes violan la norma y éstas van en tendencia decreciente, que son el ozono y las partículas PM-10, indicó.

La Comisión Ambiental Metropolitana informó que la falta de integración de las políticas ambientales con las de transporte, uso de suelo, suministro de energía, y de precios de combustibles y otros servicios, constituye una de las principales barreras para una gestión ambiental adecuada.

Además, los frecuentes cambios de personal impiden la consolidación de una base calificada de recursos humanos para procesar y presentar la información ambiental de una forma útil a quienes toman decisiones y al público en general.

De ahí que la elaboración de un proyecto entre la comisión ambiental y el Banco Mundial permitiría aplicar acciones costo-eficientes que se dirijan a las causas estructurales de la contaminación atmosférica.