La Jornada miércoles 23 de junio de 1999

ASTILLERO Ť Julio Hernández López

El gran riesgo que implica el crecimiento de Roberto Madrazo Pintado en las preferencias electorales priístas es el de provocar la desesperación del aparato político del sistema (Los Pinos-Bucareli-Insurgentes Norte-Chapultepec-Constituyentes) y la tentación de aplastar a cualquier costo un factor (el factor Tabasco, que es una combinación de los intereses de los tres Carlos, de apellidos Salinas, Hank y Cabal) que a algunos genios de la tecnocracia comienza a parecerles incontrolable.

En cualquier momento y en cualquier circunstancia, ese eje político aliado (Presidencia-Gobernación-PRI-precandidatura oficial de Francisco Labastida-Sedeso) podrá contar con dos precandidatos de relleno que están plenamente dispuestos a hacer un postrer servicio al sistema al que nunca traicionarán: Manuel Bartlett, que entre más habla más se hunde, y Humberto Roque Villanueva, el primer brody del país.

Las angustias en el equipo político zedillista que trabaja en favor del candidato designado, Francisco Labastida Ochoa, provienen de hechos innegables: primero, que Madrazo Pintado impuso sus condiciones para dejar la gubernatura de Tabasco, instalando a un velador interino, evitando que hurguen en sus cuentas públicas (y en especial en los pagos de campañas de proselitismo en televisoras nacionales) y manteniendo una fuente de financiamiento oficial abierta para la campaña interna priísta; segundo, que gracias a la magia de la buena propaganda que se hizo, está colocado en un muy buen lugar en las preferencias mostradas en diversas encuestas de opinión, casi siempre en el primer lugar; tercero, que se posicionó políticamente bien al declararse contrario al neoliberalismo y abriendo la llave a la crítica demagógica e infundada pero muy redituable contra la política económica en vigor.

De alguna manera puede decirse que las zancadas de ventaja que ha logrado el gobernador con licencia son una reproducción de la rebeldía con la que en 1994 el propio Madrazo Pintado venció a la dupla Zedillo-Moctezuma, cuando pretendieron retirarlo de Villahermosa para hacerlo secretario de Educación. En aquella vez, como en esta, la clave fue un concepto: oficio político, sazonado con audacia y cinismo.

Cargada no mató propaganda televisiva

Hoy, Madrazo Pintado está sobreponiéndose a la endeble estrategia con la que el zedillismo creyó poder instalar a trasmano a su candidato real a la sucesión, que es Labastida Ochoa.

La cargada inducida, la suma de oficialismos, la manipulación regional a cargo de gobernadores afines, no han podido consolidar al ex (Ƒex?) secretario de Gobernación, cuya figura y discurso parecen viejos, diluidos, acartonados, frente a la acometida madracista que para fines propagandísticos aparece fresca, sonriente, propositiva, sin que los poco enterados televidentes sepan en realidad el turbio fondo de intereses que se mueven tras esa pregunta de 'Ƒquién dice que no se puede?'

Ciertamente, el avance madracista ha preocupado a los rectores de la política nacional, tanto por el daño que hace a su proyecto grupal de trasmisión del poder a un propio, como por el peligro que Roberto representa para la nación y su futuro, sustentado como está Madrazo Pintado en sus aspiraciones por grupos acusados de narco- tráfico, lavado de dinero y apropiación de la riqueza nacional mediante maniobras financieras tramposas.

El tabasqueño ha llegado hasta donde hoy está gracias a la falta de oficio político del zedillismo pero, además, merced a un ejercicio político propio, en aquella entidad del sureste, que ha sido represivo, manipulador, controlador de la prensa, utilizador del erario para construcción de imágenes y beneficio de posteriores socios agradecidos.

Pero, quiéranlo o no los zedillistas-labastidistas, Madrazo Pintado avanza y no parece haber fórmula fácil para frenarlo.

ƑOtro Bienestar para la familia?

Hoy, Labastida Ochoa comenzará su desfile de exposición frente a los sectores priístas. Su propuesta será fofa, según se conoció ayer: que los beneficios económicos lleguen a la gente, es decir, el demostradamente fallido Bienestar para la familia del zedillismo; además, el sinaloense insistirá en hacer bandera de campaña lo que no pudo hacer realidad desde el cargo de gobierno que tuvo, la lucha contra la inseguridad pública.

Con esas propuestas no podrá el sinaloense enfrentar con éxito al tabasqueño. Tal vez por eso ayer declaró Esteban Moctezuma Barragán que las campañas políticas se están quedando sólo en asuntos de imagen, sin discutir a fondo los problemas del país.

Contra el aplausómetro

Y, teniendo en cuenta sin lugar a dudas que Madrazo Pintado ha sido el principal beneficiario de los aplausos de los concurrentes a los actos priístas de campaña interna, el titular de la Secretaría de Desarrollo Social ha dicho, según nota de Víctor Ballinas: "Estamos viendo a quién se le aplaude más, quién tiene más imagen, pero no se va al análisis de los problemas reales que, muy pronto, no vamos a poder eludir".

(Mientras tanto, para tener la historia completa del día de los precandidatos priístas, Manuel Bartlett dedicó buen tiempo ante los cenecistas a analizar los problemas del pasado, a criticar vicios e inercias que antes él impulsó y protegió, y a tratar de mantenerse como una voz atendible aunque, en realidad, su discurso y su figura han quedado rápidamente rezagados frente a los dos candidatos reales, el de la cargada y el de los tres Carlos; Humberto Roque, por su parte, se reunió con personas de la tercera edad que son plenamente respetables en sí mismas pero que, para efectos de imagen política, parecieron ilustrar bien el declive sostenido de la presunta candidatura del brody).

Ni buena ni mala, sino todo lo contrario

La política económica no es la adecuada, ni la buena, ni la mala, pues en realidad está englobada, dijo ayer el filósofo obrero Leonardo Rodríguez Alcaine, mejor conocido como La Güera, El Periquín y El cuñado de los periodistas. El dirigente cetemista patinó de fea manera ayer a la hora de comentar la situación económica del país, en particular en lo referente a pobreza y marginación, e inclusive dijo que las preguntas que se le hacían sobre el tema eran, en realidad, tan estúpidas, que se llevarían mucho tiempo en ser respondidas adecuadamente. Eso sí, antes de calificar de estúpidas las preguntas fincadas en informes gubernamentales, don Leonardo precisó que lo hacía "con todo respeto.

El pragmatismo salvaje del PRD

En Nayarit, la dirigencia nacional del PRD consideró que la única manera posible de romper el cacicazgo cetemista que domina la política de aquella entidad sería mediante una escisión priísta de primer nivel. Por ello aceptaron que su candidato fuese Antonio Echevarría, quien además lo es a nombre del PAN, el PT y el Partido de la Revolución Socialista. Pero de esa visión altamente pragmática, a reconocer oficialmente que el citado Echevarría es una persona honesta, en la que se puede confiar plenamente, como que hay una gran distancia. Lo bueno es que muy pronto se podrá saber si el pragmatismo salvaje del PRD le acarreará buenos frutos a su futuro candidato presidencial o, como lo advirtió meses atrás el propio Echevarría, acabará apoyando a Vicente Fox, con quien compartió negocios como concesionario de la Coca Cola.

Tucanes ecologistas al mejor postor

A propósito de Fox, continúan las protestas en Guanajuato por el uso de los dineros públicos de aquella entidad para la compra de favores políticos. Representantes de maestros de las secciones 13 y 45 del sindicato nacional magisterial se han pronunciado contra la imposición de un libro de Jorge González Torres, dirigente de la empresa familiar llamada Partido Verde Ecologista de México, como texto obligatorio en primarias guanajuatenses. A nadie escapa la evidencia de que la selección del documento obedece a razones electorales relacionadas con el 2000.

Astillas: Porfirio Muñoz Ledo ha hecho saber algo así como que diversificará sus intereses declarativos y ya no se mantendrá como permanente tirador contra Cuauhtémoc Cárdenas. Lo cierto es que el siempre imaginativo Porfirio no logró nada bueno para su causa con los ataques frontales que dirigió contra el verdadero dirigente del partido del sol azteca. Por convicción, por estrategia, o por necesidad, pero Porfirio ha tomado una buena decisión: dejar la crítica de Cárdenas a los antiperredistas.

Fax: 5 45 04 73 Correo electrónico:
[email protected]