n Virtualmente concluido, el periodo extraordinario
No prosperó en la Cámara de Diputados la reforma electoral
Ciro Pérez Silva n Luego de 30 días de un periodo extraordinario en el que se celebraron apenas tres sesiones en la Cámara de Diputados, las bancadas de PAN, PRD y PRI dieron por "virtualmente concluido" éste, al no prosperar los intentos de las oposiciones por introducir reformas al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe).
Jorge Emilio González, presidente en turno del órgano de gobierno de la Cámara, aclaró que esperarán hasta el próximo martes para saber si se dictaminan las iniciativas sobre el Banco de México y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), temas pendientes de los seis para los que se convocó el extraordinario, para presentarlas al pleno el jueves y proceder luego con la clausura oficial.
El vicecoordinador panista, Francisco José Paoli Bolio, afirmó que con la resistencia del PRI a las reformas electorales se deja establecido claramente que ese partido no acepta tener mejores reglas para el desarrollo de las elecciones, luego de rechazar el "razonamiento" tricolor en el sentido de que al flexibilizarse las coaliciones, los partidos de oposición "le echarían montón" al PRI.
"Es un poco simplista y cínica esta posición, porque durante décadas el PRI, junto con sus partidos satélite, le echaron montón a la oposición y que ahora, cuando han crecido fuerzas auténticamente democráticas como el PAN y el PRD, el PRI se llama a sorpresa cuando por cinco décadas ha caminado en un proceso de alianzas con otros pequeños partidos", comentó el panista.
Demetrio Sodi de la Tijera, vicecoordinador perredista, consideró a su vez que el periodo concluyó con la aprobación de tres "temas interesantes", como las reformas constitucionales en materia de derechos humanos y fortalecimiento municipal, además de la Ley Orgánica del Congreso, en lo que toca a la Cámara de Diputados.
Pero no se obtuvo nada en el tema principal por el cual fue convocado el periodo extraordinario. "El tema central era lo electoral, los demás sí eran importantes pero de relleno, no había urgencia de que fueran tratados en un extraordinario, ahora el PRI quiere sacar una reforma, una simple simulación para no rechazar la minuta que aprobamos aquí en la Cámara de Diputados".
Menos pesimista sobre los resultados, el vicecoordinador del PRI, Fidel Herrera Beltrán, consideró que en el periodo se alcanzaron "éxitos" en los temas "fundamentales", como el de la ley orgánica, que aguardó 150 años de hegemonía priísta para ser aprobada en la primera legislatura con mayoría opositora.
Negó que su partido tenga miedo a cambiar la ley electoral, como lo piden las oposiciones, y destacó que con la ley actual se produjo la elección de 1997, en la que se recogieron datos confiables y creíbles que pueden garantizar el desarrollo con limpieza y transparencia en el 2000.
n "Pasen lista", exigían otros senadores al priísta Ignacio Vázquez Torres
"šEso es una trampa!", gritó el panista Jiménez Remus
Andrea Becerril n "šEso es una trampa!", gritó desde el fondo del salón de sesiones el panista Gabriel Jiménez Remus; "pasen lista", exigieron otras voces, pero el presidente en turno de la mesa directiva del Senado, el priísta Ignacio Vázquez Torres, no hizo el menor caso y en menos de dos minutos canceló la posibilidad de debatir sobre las reformas electorales rechazadas por su partido.
Se armó un gran alboroto; lo menos que le dijeron los legisladores de oposición es que actuó "como croupier" de casino.
El reloj del salón de sesiones de la Cámara de Senadores marcaba las 12:40 horas cuando Vázquez Torres, nervioso, bajaba a toda prisa de la tribuna, esquivando a los legisladores que le exigían pasar lista antes de suspender la sesión.
Los senadores habían llegado al recinto desde las 11:00 horas, como se les citó, pero la sesión no comenzaba. Se iba a discutir, según la agenda, el dictamen en contra que el PRI debía presentar en torno a las reformas al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe), aprobado por la oposición en la Cámara de Diputados.
Era ya un asunto cantado. Desde días antes los senadores del PRI anunciaron que regresarían la minuta a la colegisladora; el secretario de Gobernación anunció también -el martes, luego de reunirse con la fracción priísta- que el dictamen se presentaría este jueves y no tendría por qué haber problemas. Pero los hubo.
Desde su escaño, Gabriel Jiménez Remus se veía molesto, sobre todo luego de recibir una llamada a su celular. Era de la presidenta de la Gran Comisión, María de los Angeles Moreno, quien, según reveló después el panista, le notificó que no habría dictamen, ya que en las comisiones unidas en que debía elaborarse el dictamen no hubo quórum y, por lo tanto, no había qué discutir.
La responsabilidad del funcionamiento del Senado y de sus comisiones es de la mayoría priísta, explicaba Jiménez Remus, y aludió al compromiso de los priístas de presentar un dictamen, aun en contra, de las reformas al Cofipe.
Los minutos pasaban; a excepción de la bancada panista y de los ocho senadores del PRD, que se mantuvieron en el recinto, los priístas salían y entraban, pero poco a poco se fueron retirando, y para las 12:30 eran pocos los senadores del tricolor en el salón de sesiones.
A las 12:38, de manera intempestiva, el presidente de la mesa directiva del Senado, Ignacio Vázquez Torres, subió a tribuna y, sin más, anunció: "Ante la evidente falta de quórum y con base en el artículo 109 del reglamento, queda suspendida la sesión", tomó sus pertenencias de la mesa y bajó presuroso.
šPase lista antes!, le gritó, con su voz de barítono, el panista Juan de Dios Castro. "šLista, lista, lista!", demandaban otras voces opositoras. "Esto es una trampa", se dejó escuchar Jiménez Remus, y el vicepresidente de la mesa directiva, el panista Ricardo García Cervantes, intervino: "Señor secretario, haga favor de pasar lista....", decía, pero en ese momento se interrumpió el sonido.
De inmediato el priísta Eduardo Andrade se le enfrentó: "Señor senador, Ƒpara qué pasar lista ante la evidencia de que no hay quórum? Eso dice el reglamento".
De viva voz, Jorge Calderón insistió también en ese trámite. No se puede suspender la sesión con la sola presunción de ausencia de quórum; "es una decisión antidemocrática, una falta de respeto a una institución republicana", repetía el perredista, mientras salían de prisa los pocos priístas que aún permanecían en el recinto de la vieja casona de Xicoténcatl.
Se seguían escuchando los gritos de "tramposos" . La bancada panista abandonó el recinto conjuntamente. "No se puede sostener esta agresión que sufrió hoy el Senado, ellos -los priístas- no funcionan como mayoría, lo hacen como pandilla y como mafia".
Eduardo Andrade seguía en el salón, rodeado de reporteros, ante quienes insistía que lo único que se hizo fue aplicar el artículo 109 y, ante la evidencia de que no había quórum, no tenía caso pasar lista.
-ƑPor qué no está la bancada del PRI?
-Porque no hay dictamen, y no hay dictamen porque no hubo quórum en la reunión de las comisiones -respondió.
"Nosotros no estamos haciendo ninguna trampa.... la acción de formar o no quórum es parte de las estrategias, de las tácticas parlamentarias que se dan en todos los países democráticos", agregó.
Más claro, señaló luego que a las comisiones que debían dictaminar la minuta de reformas al Cofipe (que él mismo declaró días antes, se iba a rechazar y regresar a la colegisladora), de 33 senadores que la integran, sólo uno era panista y no había representante perredista.
Así que, "si ellos no asistieron, nosotros no estábamos obligados a emitir un dictamen", resumió Andrade.
El perredista Jorge Calderón hizo notar que de antemano sabían que la decisión política del Partido Revolucionario Institucional era en contra de la totalidad de las reformas al Código Federal de Procedimientos Electorales aprobadas en la Cámara de Diputados.
Por ello, "tenía el mismo efecto votar en contra que suspender la sesión, ya que el plazo para que los cambios electorales pudieran entrar en vigor en las elecciones del 2000 era el viernes, pero optaron por la salida que, según ellos, tendría menos costos políticos, aunque demuestre poco valor civil", agregó.
Es una falta de respeto a la institucionalidad republicana, terció Mario Saucedo, e hizo notar que la presidenta de la Gran Comisión, María de los Angeles Moreno, ni siquiera se presentó a la sesión.