n Rechaza el CGH afirmaciones de Zedillo


Acepta la Comisión de Encuentro discutir parte del pliego petitorio

Karina Avilés n En su última oferta, la Comisión de Encuentro (CE) aceptó incluir en su agenda de diálogo un espacio en el que los paristas podrán argumentar sobre los temas que ellos quieran, en el entendido de que esto no constituye elemento alguno de negociación.

La comisión del rector señaló, en definitiva: "No podemos acordar ninguna modificación" sobre los reglamentos de exámenes e inscripciones, "no podemos tomar ningún acuerdo" sobre la relación entre la UNAM y el Ceneval, no "podemos ofrecer ninguna modificación" sobre el Reglamento General de Pagos (RGP) y, además, "un congreso resolutivo escapa del marco institucional", por lo tanto también se rechaza.

El CGH, por su parte, rechazó la propuesta de la CE, ya que "su documento pretende llevarnos a un proceso de argumentación que no implica diálogo, y de antemano son ustedes quienes se niegan a discutir las posibles salidas al conflicto", y reiteró que, para levntar la huelga, deben resolverse los seis puntos del pliego petitorio.

Los paristas precisaron que la comisión de rectoría pretende que su argumentación "culmine con el levantamiento de la huelga. Comprenderán que no podemos comprometernos a eso". En este sentido, propusieron a la delegación oficial sostener un quinto encuentro el próximo lunes, en la confianza de que "tengan la capacidad resolutiva de la que ahora carecen de acuerdo a lo que han manifestado hoy".

Rafael Pérez Pascual, miembro de esa instancia, afirmó: "Si este límite no es satisfactorio para ustedes, no les podemos ofrecer más". Además, dijo, "y si no es satisfactorio, no tiene sentido que sigamos negociando, porque no tenemos la capacidad de ofrecerles más".

En ese sentido, Arturo Bouzas aclaró que sólo pueden negociar sobre los tres puntos acordados por el Consejo Universitario el pasado 7 de junio, que se refieren a la no aplicación de sanciones contra estudiantes que participaron en el movimiento, dentro del marco de la legislación universitaria, los mecanismos para que los alumnos que no hayan completado sus materias lo puedan hacer y los espacios de discusión abiertos, en los que se aborden temas como los reglamentos de exámenes y de inscripciones, los vínculos entre la UNAM y el Ceneval y el reglamento general de pagos. Aclaró que los resultados de estos foros serán entregados al Consejo Universitario.

La CE reiteró que "los acuerdos sobre todo los puntos anteriores implican necesariamente el levantamiento del paro y la entrega de todas las instalaciones".

Por otro lado, señaló que la propuesta del CGH para firmar un acuerdo de declaración contra la violencia "no es congruente con las acciones agresivas que simultáneamente grupos de paristas realizan en contra de profesores, alumnos, instalaciones universitarias... No se pude desde la violencia proponer la firma de un acuerdo contra la violencia".

En respuesta, el CGH consideró "grave" que mientras se lleva a cabo el proceso de construcción del diálogo se desarrolle un clima de intimidación y represión en contra del movimiento estudiantil, y denunció que desde la madrugada de ayer el servicio de energía eléctrica fue cortada en las preparatorias 1, 8, 7, CCH Oriente, Vallejo y Azcapotzalco, con lo cual también se suspendió el suministro de agua.

Posteriormente, Silvia Torres, de la CE, cgh-comision enlace4 presentó una propuesta con los siguientes términos: "Consideramos que la forma idónea para avanzar en la solución de los conflictos universitarios es la búsqueda de acuerdos dentro del marco de la institucionalidad, y no la vía de la violencia". Planteamiento que hasta el cierre de esta edición no se había vuelto a discutir en la mesa de encuentro.

Por otra parte, el CGH consideró que son "irresponsables y lesivos a la autonomía universitaria" los planteamientos del presidente Zedillo en torno al conflicto de la UNAM. "Entendemos la posición contraria al movimiento estudiantil que ha mostrado Zedillo, debido a que la huelga atenta no sólo contra el proyecto neoliberal que Barnés y la burocracia universitaria han venido imponiendo en la UNAM, sino también ha puesto en tela de juicio el proyecto educativo que, contra el derecho del pueblo a la educación, está instrumentando su gobierno en todo el país, a partir de la exclusión, la tecnificación y la elitización de la educación en todos sus niveles".

El CGH definió como "una clara agresión al derecho de la educación popular, gratuita y democrática el plan de desarrollo educativo 1995-2000, que es una copia fiel de los dictados del Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE)".

A su vez, aseguró que las declaraciones de los juristas Ignacio Burgoa Orihuela y Raúl Carrancá y Rivas son una "provocación"; buscan, dijo, enrarecer el ambiente del diálogo y pretenden intimidar y preparar el terreno para una solución represiva contra los estudiantes en paro semejante a la realizada en 1968. Por otra parte, consideró que es más grave la declaración de la Conferencia del Episcopado Mexicano respecto de que la educación superior no puede ser gratuita. Esa postura de la Iglesia, reiteró, sólo refleja los intereses económicos que tiene en instituciones educativas.

En un cuarto encuentro tres horas después de la cita, las partes se preguntaban entre sí si aceptaban o no su propuesta de agenda. Al señalar que el CGH aún no tiene respuesta al planteamiento de la CE, Cristina Puga, integrante de esa instancia, afirmó que "no somos una comisión discutidora, somos una comisión negociadora" sobre los asuntos que le competen al rector, y urgió a los huelguistas a que se comprometan a buscar una solución al conflicto.

Por su parte, Ricardo Tapia calificó de "incongruente" entrar a una discusión sobre los órganos de gobierno, las políticas excluyentes de la UNAM y la participación de la comunidad en la toma de decisiones, sin "tener a toda la universidad junta".

Todavía no había pasado una hora cuando Rafael Pérez Pascual advirtió a los representantes del CGH: "no admito que nos insulten así, y si insisten nos retiramos".

Antes, los huelguistas habían dicho a la CE: "No queremos una negociación tipo priísta: Ƒcuánto quiere la CE por modificar el RGPƑ, Ƒcuánto quieren por invalidar las reformas del 97?".

Ricardo Tapia enfatizó que no se puede incluir en la agenda los puntos referentes al Ceneval y a las reformas del 97, ya que ambos planteamientos son competencia del Consejo Universitario.

Los delegados del CGH insistieron en su exigencia de que se acepte poner en agenda los seis puntos del pliego petitorio, y aclararon que "en este encuentro no les estamos pidiendo capacidad para resolver nuestro pliego petitorio, sólo les pedimos capacidad para agendarlo".

 

Reiteraron que ningún acuerdo de este tipo rompería con el marco universitario y además tampoco se sale de la competencia de la rectoría que la Comisión de Encuentro representa. "El CGH interpreta el proceso de diálogo como un libre intercambio de ideas que conduzca a los acuerdos necesarios para la resolución del conflicto, demandamos que la comisión de encuentro acepte la propuesta de discusión que el CGH presenta".

 

62 académicos entregaron un documento en el Palacio de Minería en donde exhortan a las partes en conflicto a eliminar todo aquello que lleve al alargamiento de la huelga y propusieron suscribir un compromiso público para llevar a cabo foros de discusión y decisión que aborden los siguientes temas: formas de gobierno y de representación, ingreso, permanencia y egreso de los estudiantes, reforma académica, y evaluación del personal académico.

También plantearon que durante el diálogo de Minería se acepte la demanda del CGH de exponer de cara a la nación sus argumentos y consideraciones respecto a las causas del conflicto y al contenido de su pliego petitorio y además se escuchen las consideraciones respectivas de la rectoría.