Ť Cien días del movimiento: las voces de un huelguista, un sindicalista y un académico
Reflexión crítica o acción legal, polos del análisis sobre el paro universitario
Karina Avilés Ť A 100 días de huelga en la UNAM, representantes de los diferentes sectores que integran la comunidad universitaria analizan la situación del conflicto. Mientras que para algunos es necesario hacer una reflexión crítica del movimiento, para otros "lo más natural sería recurrir a una acción legal" en contra de los paristas.
En entrevistas por separado, pero con igual cuestionario, Higinio Muñoz, miembro del Consejo General de Huelga (CGH); Agustín Rodríguez, líder del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM); Carlos Garza, profesor de la Escuela Nacional de Trabajo Social, e Ismael Herrera, maestro emérito y premio Nacional de Ciencias, expresan sus puntos de vista sobre los tres meses de paro.
Higinio Muñoz afirma que después de 100 días de huelga "sí hay necesidad de revisar las condiciones en que estalló. Creo que el movimiento debe ser capaz de evaluar críticamente las condiciones en que se encuentra y cuando corresponda, replantearse también su estrategia de lucha". Enseguida, lanza un mensaje a las autoridades: "Que sepan que, pese a las diferencias, estaremos unidos en torno a las demandas y nos mantendremos hasta el final".
No obstante, para el director de Matemáticas Aplicadas y Sistemas, Ismael Herrera, a estas alturas del conflicto "lo más natural sería recurrir a la acción legal", situación en la que los universitarios mantienen discrepancias, aunque "hay muchos que cada vez se están convenciendo de esto". Herrera aclara que entre los universitarios "no ha habido consenso" en este punto pero conforme "el tiempo pase habrá más".
Agustín Rodríguez parte del pasado y dice que si el Reglamento General de Pagos se hubiera sometido a referéndum, en éste se habría indicado si tenía o no razón de ser. Pero frente al actual panorama, señala, "es indispensable" que el rector encabece la negociación para buscar una salida.
Por su parte, Carlos Garza considera que el mejor indicador de que rectoría le ha apostado a la razón "es que nunca previó una huelga de esta manera, y me desespera porque definitivamente no es un problema en el que sólo la razón esté en juego".
--ƑQué enseñanzas han dejado estos 100 días de huelga?
Higinio Muñoz: La primera es la de que podemos luchar y enfrentar decisiones de la autoridad que parecían ya un hecho. Finalmente aquí estamos, no nos han podido doblar, y es una prueba de que se puede resistir frente al gobierno, porque en el fondo luchamos contra un proyecto que no es del rector, sino del Estado.
Ismael Herrera: Nos ha enseñado que los costos de violar la legislación universitaria son muy altos; mantener inactiva a la universidad, cualesquiera que sean los motivos de la inconformidad, es una acción claramente ilegal. Debemos reconocer que hemos sido propensos a dar importancia a la defensa de la legalidad y a dejarla de lado en aras de ser "progresistas".
Carlos Garza: La principal enseñanza es darse cuenta de las dimensiones de la crisis por la que atraviesan el país y la sociedad; de que aquéllo de lo que han hablado muchos académicos sobre la ruptura social y la instalación de la dinámica de la violencia para dirimir diferencias es una realidad ante nuestros ojos.
Agustín Rodríguez: El conflicto nos ha enseñado que la única fórmula de atender y resolver problemas es por vía del diálogo.
--ƑLa universidad se ha fortalecido o debilitado en esta huelga?
Higinio Muñoz: La UNAM estaba perdiendo su carácter de institución pública, su autonomía, y por ello se estaba debilitando al aplicar políticas ordenadas por organismos internacionales y factores extrauniversitarios. Este movimiento rescata y preserva a la institución en su carácter público, autónomo y racional. Por ello, la universidad no se debilita, sino se fortalece; luchamos por abrir canales de discusión entre la comunidad y recuperar lo mejor que ha significado la UNAM para que pueda cumplir con las funciones esenciales para las que fue creada.
Ismael Herrera: En realidad, la UNAM ha recibido una puñalada que amenaza su existencia misma. Le han producido un daño muy grave. Esta ha sido una lucha política por encima de la universidad, pues su función no es sustituir a los partidos políticos. A la universidad se le debe respetar.
Carlos Garza: La universidad se ha debilitado muchísimo, pero no tengo la menor duda de que si los universitarios encontramos de manera creativa una forma de superar la crisis, la UNAM saldrá fortalecida.
Agustín Rodríguez: Este movimiento ha fortalecido a la universidad al poner en el centro de la discusión lo que representa el proyecto de universidad pública del gobierno federal. En su más pura concepción, ese modelo queda al desnudo.
--En su opinión Ƒqué tanto ha demostrado esta huelga el que los órganos de gobierno de la universidad están rebasados?
Higinio Muñoz: Esta lucha demuestra la urgencia de transformar de raíz estos órganos de gobierno si queremos evitarle a la universidad nuevos conflictos. Urge que la propia comunidad se dé un marco normativo diferente en el que cambie la relación de poder y se establezcan mecanismos muy claros para que la propia comunidad tome las decisiones; además, es necesaria una profunda reforma académica.
Por otra parte, en esta lucha se reflejan una serie de problemas no de la universidad, sino del país entero, en donde el esquema neoliberal ha arrojado un mayor índice de marginación social. La lucha ha dejado escapar todo este sentimiento de rechazo a lo que está ocurriendo en el país y hay un descontento social que encontró una válvula de escape en este movimiento.
Ismael Herrera: Careciendo los universitarios de medios para hacer respetar nuestra legislación, nos encontramos inermes frente a estos paros ilegales. Los protagonistas de un paro estudiantil no están sujetos a ninguna normatividad, los universitarios sólo podemos encomendarnos a la buena voluntad de los líderes estudiantiles, lo cual es muy grave.
Carlos Garza: Creo que los órganos de gobierno son revisables y perfectibles, y que es factible que en esa revisión pudiera surgir la necesidad de ampliar algunos espacios de gobierno que hoy no existen; sin embargo, hay algunos mecanismos a los que no se les ha hado suficiente tiempo para que demuestren su valor.
Agustín Rodríguez: Esta huelga ha demostrado que los órganos de gobierno están directamente supeditados a los lineamientos de rectoría, por lo tanto deben revisarse profundamente, pues fueron diseñados hace más de 50 años y no corresponden al reclamo de una participación más plural y democrática.
--ƑQué instancias deberían crearse para darle mejor solución a los problemas que enfrenta la UNAM, y de esa forma evitar conflictos como el que hoy vive?
Higino Muñoz: Hace falta dar un nuevo marco legal y derogar la Ley Orgánica; por ello planteamos el congreso universitario democrático y resolutivo como un espacio necesario y obligado para cambiar las reglas referentes al ejercicio del gobierno de la universidad.
Ismael Herrera: La instancia más urgente es la creación de medios para evitar que se produzcan este tipo de paros ilegales. La legislación universitaria debe respetarse.
Carlos Garza: En términos de vida académica habría que volver a fortalecer el espacio universitario como aquél en donde es factible confrontar los diferentes puntos de vista y de conocimiento.
Agustín Rodríguez: Establecer el referéndum ayudaría a evitar conflictos y a diseñar las líneas para conducir la universidad. Implantar esta figura es fundamental, pues no se ha utilizado, y tampoco se ha propiciado la participación de la comunidad.
Ť Recuento de voces de los diferentes actores
Los protagonistas del paro en la universidad, entrampados
Karina Avilés/I Ť Al cumplirse hoy 100 días de huelga en la UNAM, las partes en conflicto están entrampadas y no parece vislumbrarse una solución pronta a la situación que vive la principal institución educativa del país.
A continuación se presentan voces y declaraciones de los diferentes actores del paro a lo largo de estos tres meses.
19 de abril.- 27 de 36 planteles de la UNAM se declaran en paro en rechazo al plan Barnés, y en especial contra el alza de cuotas. El rector Francisco Barnés advierte que la institución no cederá ante "amenazas ni presiones de ninguna especie".
20 de abril.- Cerca de 223 mil 495 alumnos no tienen clases durante el primer día de paro. Alumnos de las facultades de Derecho y Odontología se adhieren a la huelga, con lo cual ya suman 28 planteles en esta situación.
21 de abril.- El rector Barnés afirma que "la institución no puede regresar al Reglamento General de Pagos (RGP) anterior porque es ridícula la cuota de 20 centavos para licenciatura y de 15 centavos para el bachillerato". Estudiantes realizan una marcha del Casco de Santo Tomás al Zócalo. Al término de la misma muere atropellada una alumna. El entonces secretario de Gobernación, Francisco Labastida, advierte que los grupos de inteligencia del gobierno federal detectaron que el Partido de la Revolución Democrática está inmiscuido en el conflicto.
24 de abril.- El Consejo General de Huelga (CGH) exige a Labastida Ochoa "sacar las manos" de la UNAM. Los huelguistas realizan una toma simbólica de la rectoría y la dedican a la memoria de Martha Alejandra Trigueros, la estudiante que murió atropellada.
25 de abril.- El jefe de Gobierno capitalino, Cuauhtémoc Cárdenas, rechaza que funcionarios de su gobierno intervengan en el conflicto. El STUNAM anuncia que acordó brindar su apoyo a los huelguistas y rechazar las actividades extramuros.
26 de abril.- El CGH acuerda no dar ni un paso atrás en su pliego petitorio de cinco puntos. La rectoría informa que solicitará a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) su intervención para "proteger" a los estudiantes que realicen sus trámites para nivel licenciatura.
27 de abril.- El rector Barnés de Castro señala que "más vale iniciar (el diálogo) pronto, sin condiciones previas de ninguna de las partes".
28 de abril.- La Facultad de Derecho inicia clases extramuros.
3 de mayo.- El secretario general de la UNAM, Xavier Cortés Rocha, expresa su confianza en que no será necesario prolongar el calendario escolar.
4 de mayo.- El ex presidente Luis Echeverría advierte que el conflicto en la UNAM tiene características similares a las del movimiento estudiantil de 1968.
6 de mayo.- El rector Barnés dice contar con "la paciencia necesaria" para encontrar una vía adecuada de solución. Centenares de profesores de la Asamblea Universitaria Académica (AUA) rechazan las clases extramuros.
9 de mayo.- El CGH anuncia que está preparado para una huelga larga. Reitera su exigencia de un diálogo público, directo, abierto y resolutivo.
11 de mayo.- El rector Francisco Barnés anuncia la creación de la Comisión de Encuentro (CE) sin carácter resolutivo, e integrada por 10 directores e investigadores de la UNAM.
14 de mayo.- La CE invita al CGH a sostener una reunión el 18 de mayo.
16 de mayo.- El estudiante Israel Flores es secuestrado. Este caso se suma a las denuncias públicas que formulara por el mismo delito el alumno Juan Carlos Zárate.
17 de mayo.- Si el rector no satisface las demandas del movimiento, a partir del jueves 20 se impulsará su desconocimiento como interlocutor, advierte el CGH.
20 de mayo.- Francisco Barnés otorga facultades resolutivas a la CE.
21 de mayo.- Cuauhtémoc Cárdenas expresa que si la UNAM lo solicita, su administración podría asignar recursos a la institución. Barnés expresa que de darse el reconocimiento de los paristas a la capacidad resolutiva de su grupo, "el próximo lunes podría estar resuelto el conflicto".
24 de mayo.- La CE afirma que continuarán las actividades extramuros, razón por la cual el CGH rechaza una nueva invitación de esa instancia.
27 de mayo.- El CGH da a conocer pruebas de "espionaje político-policiaco" en la UNAM.
30 de mayo.- Autoridades afirman que casi 50 por ciento de los estudiantes de las escuelas y facultades a nivel licenciatura toman clases extramuros.
2 de junio.- Se da el primer contacto entre paristas y la CE en el auditorio Che Ghevara. El CGH entrega a la CE un documento con su agenda y formato de diálogo, que es rechazado por los representantes del rector, al señalar que es "inaceptable".
3 de junio.- El rector Barnés anuncia que ya envió al Consejo Universitario (CU) una propuesta de modificación al RGP en la que se establece que "las cuotas semestrales tendrán carácter de aportaciones voluntarias".
4 de junio.- El CGH considera que la propuesta de Barnés sobre las cuotas voluntarias "es una provocación para tratar de dividir al movimiento", y no representa una solución al conflicto.
7 de junio.- El CU aprueba el nuevo RGP.
10 de junio.- El Consejo General de Huelga realiza una marcha que parte de cuatro distintos puntos de la ciudad y confluye en el Zócalo capitalino y reitera: "Ni un paso atrás: la huelga no se levantará hasta la solución de los seis puntos del pliego petitorio".
13 de junio.- El rector Barnés afirma que el "único foro resolutivo" de la UNAM es el CU, cuyos acuerdos adoptados el 7 de junio son "generosos" y satisfactorios para resolver la huelga.
14 de junio.- Profesores eméritos de la UNAM señalan que con los últimos acuerdos del CU, las autoridades han dado respuesta a las demandas del movimiento estudiantil.
17 de junio.- El rector Barnés de Castro afirma que en el movimiento de estudiantes existen "algunos grupos" que han recurrido a "medidas extremas" que violentan no sólo el orden universitario, sino el de la sociedad, y comunica a la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados su disposición a sostener un acercamiento directo y público con el CGH en las instalaciones del órgano legislativo.
18 de junio.- Más de 120 investigadores de la UNAM rechazan el uso de la fuerza pública.
19 de junio.- El CGH acepta la propuesta de la Comisión de Ciencia y Tecnología para que en uno de sus recintos se lleve a cabo un primer encuentro con las autoridades universitarias.