Ť El gobierno sólo quiere acabar con la gente indígena, dice una delegada


Rencuentro con zapatistas en la selva de concreto

Ť Devuelven visita a estudiantes y maestros de la ENAH * Expresan su rechazo al Ejército

Hermann Bellinghausen Ť Procedentes de Amador Hernández y San José la Nueva Esperanza, desde ayer se encuentran en esta ciudad cinco delegados, bases de apoyo del EZLN. Tzeltales y tojolabales que en las semanas recientes fueron agredidos por el Ejército en sus propias comunidades. En San José, dos campesinos resultaron heridos de bala.

zapatistas-cuicuilco-1-jpg Luisa, elocuente y joven como el público que la escuchaba ayer en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), expresó: "No queremos los ejércitos en la comunidad. Hemos estado pacíficamente diciéndoles que se vayan, que no los queremos allí. Llegan a destruir la vida de los indígenas, no sólo en Amador Hernández, sino en todas las comunidades. Hemos estado diciéndoles que se retiren. Y vamos a seguir".

Siguiéndole el hilo, Verónica dijo a su vez: "Desgraciadamente no nos oyen. Les hemos dicho nuestra palabra de lo que queremos muchas veces. El dinero que reciben es para matar, les decimos, y no entienden. Los generales que están allí no se dejan ver, no quieren que les digamos nuestra palabra".

Ellas son dos de los cientos de mujeres que en Amador y San José han encarado a los soldados, les han pedido con palabras que se retiren y han resistido las agresiones con palos, piedras y manos. Literalmente, en la puerta de sus casas.

"No queremos que nos vienen a violar ųprosiguió Verónicaų, mejor morir luchando que morir violadas. Mejor por nuestro país, por el derecho". Y acusó: "Estos seis años que está Zedillo en la República no ha hecho nada".

Antes recorrieron el sitio arqueológico de Cuicuilco, que ya hasta centro comercial tiene a sus pies. Un estudiante de la ENAH, al parecer en broma, comentó que llevaron a las visitas a las ruinas "para pasarles unas pocas de buenas vibras", lo cual no estaría nada mal a unos cuantos pasos del Periférico.

Del lodo al asfalto

La delegación zapatista estuvo ayer en la ENAH, devolviendo así la visita que hace un mes hicieran estudiantes y maestros de esa institución a La Realidad y Amador Hernández.

Sobre todo el encuentro en Amador Hernández, que se dio en condiciones dramáticas e inesperadas. Los jóvenes llegaron a dicha comunidad en la selva dos días después de que el Ejército había invadido tierras ejidales y cerrado el paso por el camino real, que es el principal acceso a esa remota localidad.

De aquel encuentro en el lodo, y éste en el asfalto, las bases de apoyo del EZLN y la comunidad de la ENAH han sacado algunas conclusiones juntos.

Gabriel (y su hijito Pedro), Marín, Luisa y Verónica recorrieron una exposición fotográfica de los acontecimientos en Amador Hernández, montada por los estudiantes en un vestíbulo de la ENAH.

Vieron en foto lo que acaban de dejar atrás en sus casas: la valla de policías militares, la cerca de serpentina cortante, los helicópteros vaciando en una milpa su panza, las manifestaciones diarias en el río ante el bloqueo militar.

Decenas de jóvenes reunidos en el auditorio Román Piña Chan compartieron con esos indígenas zapatistas el bautizo de los gases. Ahora les tocan sones, les pasan diapositivas con León Grecco de fondo y los escuchan.

Marín habló, con naturalidad un tanto dura, de la muerta: "Morir, sí, todos no vamos a morir. Eso lo sabemos. De diarrea puede ser, de hambre, de una bala del Ejército Mexicano. Pero si vamos a vivir una hora o un día más, una semana o un año, hay que vivir luchando. Y así es desde el primer día que empezamos nuestra lucha".

Luisa concluyó escueta: "El gobierno sólo quiere acabar con la gente indígena".


Ť Miles exigen frenar la situación de guerra en la zona


Prozapatistas marchan y bloquean carreteras en 6 regiones de Chiapas

Ť Piden cumplir los acuerdos de San Andrés y que Albores renuncie

Angeles Mariscal y Elio Henríquez corresponsales, Tuxtla Gutiérrez, 13 de septiembre Ť Miles de simpatizantes zapatistas efectuaron marchas en al menos seis regiones de Chiapas, en donde bloquearon algunas de las principales carreteras, entre ellas la Panamericana, en demanda del cumplimiento de los acuerdos de San Andrés y en rechazo a la última propuesta del gobierno federal de reiniciar el diálogo.

"Consideramos que la reciente propuesta del secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco Altamirano, no representa salida seria a las demandas, porque --entre otras razones-- no incluye la desmilitarización de las comunidades y regiones donde tiene presencia el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Alentar dicha militarización es hacer la guerra, no cultivar la paz", afirmaron las coordinadoras regionales de la consulta zapatista del 21 de marzo pasado, las cuales convocaron a las movilizaciones de hoy.

Organizaciones campesinas, magisteriales y sociales se movilizaron en los municipios de Cintalapa, Tonalá, Arriaga, Venustiano Carranza, Tila y San Cristóbal de las Casas, en donde Juana María, integrante de la comisión de prensa de la coordinadora regional de los Altos para la consulta zapatista, dijo que los bloqueos se hicieron "porque es imposible seguir con esta situación de guerra que lleva a cabo el gobierno contra las comunidades indígenas".

Reiteró: "es necesario que se dé real cumplimiento a los acuerdos de San Andrés y a las cinco condiciones mínimas del EZLN, como libertad a los presos políticos y retorno de los desplazados en condiciones mínimas de seguridad, nombramiento de una comisión gubernamental seria y con capacidad resolutiva de diálogo y disolución de guardias blancas y grupos paramilitares", entre otras.

De igual forma, el propósito de la protesta es la destitución y juicio político y legal contra el gobernador interino Roberto Albores Guillén, "dado su peligroso y desatinado ejercicio en el poder", por "confrontar a los chiapanecos, por utilizar recursos del pueblo para apoyar la campaña del precandidato del PRI a la presidencia, Francisco Labastida Ochoa, y por carecer de capacidad para gobernar este estado".

En San Cristóbal, unos 800 simpatizantes del EZLN --la mayoría indígenas-- de varios municipios de los Altos, Selva y Frontera se concentraron en San Felipe Ecatepec --a dos kilómetros de esta ciudad-- a las 10 horas, y luego de marchar más de dos kilómetros por la Carretera Panamericana, en el tramo que une a esta ciudad con Tuxtla Gutiérrez cerraron el paso a los vehículos. Sólo a un automóvil que transportaba a un enfermo grave se le abrió paso.

A las 15 horas, los manifestantes emprendieron el regreso a esta ciudad, en donde realizaron un mitin para dar por finalizada la jornada de este día. "Estamos aquí para demostrar la fuerza de la sociedad civil porque es necesario que ésta levante su voz para decir ya basta", manifestó uno de los indígenas que tomaron la palabra.

Cuando los manifestantes tenían una hora de haber empezado el bloqueo hubo un momento de tensión por la presencia de varios funcionarios estatales y de un camión y una camioneta con policías de seguridad pública estatal, quienes se mantuvieron a unos 200 metros de la concentración.

Según las coordinadoras regionales zapatistas en los Altos, Costa-Soconusco, Marqués de Comillas, Centro, Norte, Selva Fronteriza, entre otras, los bloqueos se dieron en los tramos carreteros de San Cristóbal-Tuxtla Gutiérrez, Comitán-Tuxtla Gutiérrez, Yajalón-Tila, mientras que entre Cintalapa-Arriaga-Tapanatepec y en Tonalá los simpatizantes zapatistas sólo repartieron volantes informativos y marcharon.

La coordinadora de los Altos informó que la movilización formó parte de las siete tareas que se comprometieron a realizar con el EZLN durante el segundo encuentro con la sociedad civil efectuado del siete al 10 de mayo pasado en La Realidad.