Ť Compareció en el Senado, durante la glosa al quinto Informe presidencial


Reconoce Jarque deuda social del gobierno con los más desprotegidos

Ť Opositores y priístas le exigieron honestidad, evitar triunfalismos y no trampear las cifras oficiales

Víctor Ballinas y Andrea Becerril Ť Acorralado por los severos cuestionamientos de la oposición e incluso de senadores del PRI, que le exigieron honestidad, dejar el tono triunfalista y no seguir "trampeando" las cifras ni usar a los pobres para que el Revolucionario Institucional conserve el poder, el secretario de Desarrollo Social, Carlos Jarque Uribe, reconoció "inexactitudes" en los datos del anexo presidencial y que "falta mucho por hacer en materia de asignación de recursos presupuestales para combatir la pobreza extrema".

Fueron muchas las preguntas que el titular de la Sedeso eludió durante su comparecencia de tres horas y media en el Senado de la República. Una de ellas, la que le formuló el panista Luis González Pintor en torno a la acusación que el precandidato priísta Francisco Labastida hizo a su contendiente Roberto Madrazo sobre desvío de fondos sociales del gobierno de Tabasco para su campaña electoral.

Pero ante las críticas documentadas con cifras oficiales sobre el desplome del gasto social que le formuló la senadora perredista Rosa Albina Garavito Elías, a Jarque no le quedó más remedio que asumir y aceptar que hay una deuda social del gobierno con los más desprotegidos, "que no es cuestión de montos, sino de equidad".

En su intervención inicial, Jarque reveló incluso que en las zonas marginadas la deserción escolar es 450 por ciento superior al resto del país, como resultado de la temprana incorporación de los niños a las labores productivas y de las niñas a las tareas domésticas y maternales.

jarque-carlos-jpg Con poco más de mes y medio en el cargo, Jarque Uribe pasó problemas para responder las interrogantes de los legisladores, en lo que fue la glosa del quinto Informe en materia social. Una de sus primeras afirmaciones ų"este gobierno destina 60 por ciento del gasto programable al gasto social, la proporción más alta en la historia de México"ų motivó un virtual desmentido de Garavito, que le pidió "dejar a una lado el triunfalismo" y ser honesto.

"Ese triunfalismo lo vimos con el presidente Zedillo... con el vocero de la Secretaría de Hacienda y ahora, para colmo de males, también usted", añadió la legisladora, y comenzó el desglose de lo que calificó de "trampas" para justificar la reducción de subsidios en los recursos destinados al gasto social.

La primera "trampa", detalló la senadora, es "no reconocer que el gasto programable de 1998 es el más bajo de los últimos 20 años; por eso no se vale comparar el gasto social con los recursos asignados al gasto programable.

"La segunda trampa ųcontinuóų es que, a partir del segundo semestre de 97, el gobierno incorporó como parte de ese gasto uno por ciento del PIB, que significan las aportaciones al régimen de seguridad social que antes absorbía la iniciativa privada; con eso se infla el gasto social.

"Si se descuenta eso, ni el gasto per cápita ni el gasto social, como porcentaje del PIB, son del nivel que se nos quiere endilgar. Para 1998, el gasto social como porcentaje del PIB es de 8.32 por ciento, comparado con 8.48 de 1981."

El feroz desmentido a la postura oficial continuó: "En la página 297 del anexo estadístico del quinto Informe está implícita la tasa de crecimiento de la población, calculada por Conapo, que se utilizó para sacar los índices per cápita. šY mire usted la sorpresa! Nos tiene que explicar aquí cómo es que apenas en cuatro años baja la tasa de crecimiento de la población de 2.65 por ciento anual hasta 1.52 por ciento. Ese es un artificio, a menos que de verdad haya aumentado dramáticamente la tasa de mortalidad".

La cuarta "trampa", añadió Garavito, es reclasificar como gasto social diversos rubros que antes aparecían como gasto corriente, y puso como ejemplo el caso de las universidades Chapingo y Antonio Narro, cuyos presupuestos aparecían como gastos en agricultura y ahora se suman al rubro de educación.

En realidad, dijo, la deuda social acumulada es de un billón 295 mil 989 pesos,es decir 132 mil millones de dólares, muy semejante a la deuda externa total, aunque esta última sí se reconoce y se paga.

$8 mil millones al Progresa, $77 mil millones para rescatar Serfin

El también perredista Auldárico Hernández Gerónimo había tocado ese punto, al sostener que "a este gobierno le interesan más los millones de los banqueros que los millones de pobres. Le preocupa rescatar a los banqueros para que sigan destinando sus recursos a las campañas del PRI y a los pobres mantenerlos así, para que puedan seguir comprándoles sus votos".

Hernández Gerónimo hizo notar que al Progresa se dedican 8 mil millones de pesos, cifra que no representa ni la décima parte de lo que el gobierno destinó al rescate de Banca Serfin, que fue de 77 mil millones de pesos.

En su respuesta, el titular de la Sedeso trató de matizar las aseveraciones de la perredista Garavito, pero aceptó que falta mucho por hacer en el combate a la pobreza extrema y que tampoco a él "le checan" los datos sobre la tasa de crecimiento poblacional incluidos en el anexo del quinto Informe.

"Quizá pudiera haber ahí un problema que incluye crecimiento natural y crecimiento social pero, ciertamente, tenemos la obligación de ser realistas, de reconocer los retos sin desconocer los avances. En efecto, la tasa de crecimiento poblacional es la que usted señaló, 1.53 por ciento."

En su réplica, Garavito Elías aprovechó para remarcar: "Qué bueno que coincida conmigo en que evidentemente hay ese triunfalismo en las cifras. Usted no las rebatió". Todavía le sacó una "trampa" más: el hecho de que se haya incluido como parte del gasto social el pago de liquidaciones de los trabajadores de Ferrocarriles Nacionales, por casi 27 mil millones de pesos.

Como si no fuera suficiente, la perredista le dio un consejo, que incluso causó la risa de varios senadores: le dijo que se fuera con la preocupación de "la vergüenza y la tristeza" que significa el informe de la Cepal, el cual indica que hay un aumento de cuatro puntos porcentuales en el número de pobres en México.

ƑY la denuncia contra Madrazo?

El senador priísta Porfirio Camarena Castro también puso en duda las cifras oficiales: "Contra el discurso oficial, informes de organismos internacionales como el Banco Mundial, la ONU y el PNUD revelan que en bienestar social hemos venido cayendo, nos hemos venido deteriorando gradual y en algunos momentos en verdad preocupantemente".

Precisó que los programa de abasto de leche, distribución de básicos y subsidio a la tortilla que coordina la Sedeso cayeron 46 por ciento entre 1996 y 1999. "ƑQué pasa con el subsidio que se otorgaba a la industria harinera y molinera, que era 1.5 veces más que los recursos asignados al Progresa, además de que estamos desprotegiendo, en lugar de proteger, el ingreso de la gente con más bajo poder adquisitivo con el incremento de 40 por ciento al lácteo que distribuye Liconsa".

Jarque también reconoció que hubo un recorte de 500 millones de pesos a los subsidios a la leche de Liconsa, y que para no duplicar beneficiarios de programas asistenciales bajó el número de niños que recibían el lácteo de 4.5 a 4.2 millones.

El otro tema en el que insistieron los senadores fue el uso electoral de los programas sociales, aunque Jarque sostuvo que los funcionarios de la Sedeso están conscientes de que hay sanciones ųincluso de uno a nueve años de prisión, sin beneficio de la libertad provisional, y multas de 200 a 400 días de salario mínimoų contra quienes manejen con fines partidistas o políticos los recursos para los pobres.

En la Sedeso, dijo, no se hará distinción por filiación política; los recursos a la pobreza se destinarán de manera imparcial. En el caso de Guerrero, detalló Jarque, la dependencia envió un comunicado a los beneficiarios del Progresa, recordándoles que los apoyos no están condicionados a la participación en ningún partido ni a votar a favor de algún candidato.

Sin embargo, el panista José Luis Herrero Arandía le recordó que el Progresa se destina, como el propio funcionario había reconocido, a mujeres campesinas e indígenas que no saben leer y sometidas a presiones de los caciques de la región.

El legislador blanquiazul Luis González Pintor también calificó de "triunfalistas" las cifras expuestas tanto por el Presidente como por el funcionario compareciente, "ya que la pobreza sigue incrementándose de manera brutal y el gobierno utiliza a los pobres para preservarse en el poder".

Y lo cuestionó en torno a la denuncia hecha por Labastida, en el sentido de que Roberto Madrazo usó el presupuesto social del gobierno de Tabasco para promocionarse. "ƑSería muy importante saber si ustedes lo están investigando y si ya tienen avances de esa situación".

El panista aludió también al informe del Banco Mundial, pero ninguna de las dos interrogantes fue respondida. Al final, ante los reporteros, Jarque dijo que las cifras utilizadas por el BM "son viejas" y en breve se publicará la Encuesta ingreso-gasto de los hogares 1998, "donde están los datos reales".