Ť Se busca evitar capitalización de intereses: SCT


Se elevó el costo del rescate carretero en $29 mil millones

Ť Ruis Sacristán: el plazo para cubrir adeudos bajó a 33 años

Víctor Cardoso y Ciro Pérez Ť El secretario de Comunicaciones y Transportes, Carlos Ruiz Sacristán, anunció que si bien el precio del rescate de 23 autopistas concesionadas se elevó en 29 mil millones de pesos, al pasar de 58 mil millones de pesos a 87 mil millones, la parte que deberá pagar el gobierno Federal por la vía fiscal se redujo en mil 800 millones de pesos y el plazo de 42 años, ahora será de 33.

Durante su comparecencia ante la Comisión de Comunicaciones y Transportes de la Cámara de Diputados, como parte del análisis del quinto Informe de Gobierno, el funcionario señaló que en el último año el incremento en los ingresos de las autopistas recatadas en agosto de 1997 fue de 12 por ciento. Ese aumento derivó de una elevación en el trafico, que actualmente es de 100 mil vehículos diarios, y que fue propiciado por una reducción en las tarifas de peaje. Eso, afirmó, se traduce ya en una reducción del costo fiscal.

Ahora, dijo, junto con la Secretaria de Hacienda, se busca una solución financiera que permita atender el costo fiscal del rescate carretero evitando la capitalización de intereses y que con el tiempo pueda, incluso, reducirse aún más el plazo fijado para el pago de esa operación.

En una comparecencia en la que el funcionario resaltó los logros y resultados, y sobre la base de que lo hecho en los últimos cinco años fue mejor que no haber aplicado el cambio estructural para abrir los servicios a la participación del capital privado, Ruiz Sacristán pasó por alto muchos de los cuestionamientos hechos por los legisladores, en particular el de la diputada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) María Victoria Peñaloza Izazaga, que formuló 76 preguntas al funcionario en los diez minutos que duraba cada participación.

Al no obtener respuesta, la legisladora hizo uso de su derecho de réplica para soltarle aún más preguntas y asentar que ''los asuntos de la nación no se pueden ver con esa superficialidad''.

También, el diputado del Partido Acción Nacional (PAN) Benjamín Gallegos Soto hizo lo suyo y consideró como ''desalentadores'' los resultados de la desincorporación de empresas paraestatales. Afirmó que las más serias deficiencias en materia de infraestructura que enfrenta el país están, precisamente, en el sector comunicaciones y transportes.

Luego del discurso introductorio leído por Ruiz Sacristán, los seis legisladores que tomaron la palabra --cuatro de ellos hicieron uso de su derecho de réplica-- enfocaron sus cuestionamientos sobre cuatro puntos fundamentales: las carreteras del país y en particular el rescate de las 23 autopistas que habían sido concesionadas a la iniciativa privada; la apertura a la competencia en telecomunicaciones, pero sobre todo el dominio de Teléfonos de México (Telmex) y las tarifas de los servicios en el mercado nacional; el futuro del tráfico de pasajeros por ferrocarril luego de la privatización de ese medio de transporte y el despido de trabajadores, así como la desarticulación de la marina mercante nacional y el desabanderamiento de embarcaciones.

Fue el priísta Fortunato Guzmán, quien, al parecer, estaba en la misma ''frecuencia'' de Ruiz Sacristán. ''Sabemos que los beneficios que se pretenden obtener de este cambio estructural (la transformación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes de una entidad ejecutiva y operativa a una dependencia normativa y supervisora) podrían sintetizarse en lo siguiente: lograr servicios en comunicaciones y transportes competitivos, seguros, modernos y eficientes; ofrecer más y mejores opciones de servicios mediante una adecuada competencia entre los distintos concesionarios; eliminar los subsidios del Estado y destinar dichos recursos a programas de mayor prioridad social; generar empleos productivos, permanentes y bien remunerados''.

En una de sus respuestas al asunto de las telecomunicaciones, el funcionario señaló que ''es un asunto muy complejo y muy importante que no puede ser analizado teniendo la opinión de una sola empresa o de dos o tres personas'' y que incluso sobre la realidad de las tarifas en el mercado mexicano la OECD (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), ''en algún estudio que hizo, donde tiene problemas metodológicos gravísimos, no graves, gravísimos, se equivocó'', porque en México las tarifas de interconexión, por ejemplo, son las más bajas del mundo, a pesar de que México tiene costos de capital más elevados que muchos países miembros de esa organización.

En materia de marina mercante, Ruiz Sacristán dijo que en breve se enviará a la Cámara de Diputados una propuesta para modificar la Ley de Navegación, en la que se incluirán apoyos a la actividad marítima, pero sin cerrarse a la competencia en el tráfico de altura y preservar el cabotaje para operadores nacionales, salvo cuando no se cuente con una embarcación adecuada.