La Jornada martes 28 de septiembre de 1999
Krauze a Garrido: la mayoría sospechosa
Estimada señora directora: Me alegra que Luis Javier Garrido "no argumente ni esté en contra" de que la democracia tenga algo que ver con las mayorías (aunque él las entrecomilla cuando le parecen sospechosas). Para probar quién tiene en la UNAM la mayoría verdadera y quién la sospechosa, lo invito a sumarse a la iniciativa de una votación libre y limpia de todos los universitarios para responder a una sola pregunta: "ƑDebe levantarse la huelga o debe seguir?" Quienes resulten pertenecer a la minoría tendrían el derecho a discutir ųno a imponerų sus demandas, en un marco de respeto y tolerancia.
Enrique Krauze
Piden reconsiderar la terna para elegir al director de un instituto de la UNAM
Señora directora: Solicitamos la publicación de la siguiente carta dirigida al
Doctor Francisco Barnés de Castro, rector de la UNAM
Los abajo firmantes, representantes de cuerpos académicos colegiados (colegios y claustros de personal académico de institutos y centros de investigación, facultades y escuelas) adscritos a la Federación de Colegios de Personal Académico de la UNAM, protestamos enérgicamente por el veto y la selección parcial que el doctor Francisco Bolívar Zapata, coordinador de la Investigación Científica, realizó a los candidatos que a él formalmente le propuso el Claustro del Personal Académico del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología, Sección CU (CPA-CU), adscrito a nuestra federación.
Solicitamos a usted de la manera más atenta y respetuosa que, en beneficio de los principios y del espíritu universitarios elementales, tenga a bien reconsiderar la integración de la terna para la elección del futuro director del ICML, de acuerdo con la petición del CPA-CU hecha a la H. Junta de Gobierno de la UNAM, publicada en carta abierta en la página 16 del diario La Jornada (23 de septiembre de 1999).
Nuestra federación estará pendiente y reconocerá con atención la respuesta que se sirva otorgar a nuestra petición.
Mesa directiva del CPA-CU: Artemio Gallegos, presidente; Carlos M. Illescas, secretario; Sergio Licea, vocal, y 24 firmas más
Antonio Peña impugna aseveraciones en su contra
Señora directora: He leído en su prestigioso diario un desplegado firmado por la mesa directiva del Claustro del Personal Académico, Sección Ciudad Universitaria, del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM, al cual tuve el honor de dirigir durante cuatro años. Las aseveraciones ahí vertidas afectan a mi persona, por lo que creo necesario pedirle con toda atención se sirva publicar algunas aclaraciones al respecto.
En efecto, el texto del Estatuto General de la UNAM es el que este grupo menciona. Sin embargo, debe cumplirse si existe la "igualdad de circunstancias" a que hacen referencia. La designación de la autoridad de un instituto, en especial el de éste, en que un grupo de 30 personas trata de arrogarse la capacidad para definir su futuro, es un asunto sumamente delicado, en el que deben tomarse en cuenta numerosos factores, pero empezando por las condiciones necesarias para promover su desarrollo académico.
Me abruma y casi ofende a mi modestia el poder casi mágico que estas personas me atribuyen para convencer a la mayoría del personal académico del instituto, al coordinador de la Investigación Científica, al rector, y a la misma Junta de Gobierno de la UNAM sobre tan delicado asunto. No entiendo a qué se refieren cuando afirman que esta injerencia, además, fue "ostentada públicamente". Señalan también que se trata de continuar una administración aberrante; ante tal aseveración, creo conveniente que leyeran el último informe de labores del instituto, en el que se muestran los avances logrados en los últimos cuatro años, y que revelan en primer lugar la capacidad del personal del instituto para progresar ante condiciones más favorables para la realización de su trabajo, que desafortunadamente no parecen haberse dado en administraciones anteriores.
Hablan de "sensibilidad política", lo cual pone en evidencia su forma de pensar. La designación del director de un instituto, sea de la UNAM o de otra parte, no debe de ninguna forma basarse en la sensibilidad política de grupos que pretendan manejar una institución académica precisamente bajo esos principios, haciendo a un lado los académicos.
Esta agrupación, autora del desplegado de referencia, trata de adjudicar al coordinador de la Investigación Científica una intención de división del instituto. Es muy fácil mostrar a sus amables lectores que ellos precisamente la han venido propiciando ya durante varios años. Olvidan también que en el instituto hay otras tres organizaciones semejantes, pero se empeñan en imponer autoridades y formas de administración académica, alrededor de sus posiciones políticas, que no académicas. Puedo afirmar, y lo hago con orgullo, que durante mi gestión no se favoreció a nadie por razones políticas. En especial la distribución de los (escasos) recursos se hizo sobre la base de las necesidades de todos, con la mayor equidad posible. De hecho, en equipamiento de cómputo, en forma personal, el doctor Gallegos fue de los más favorecidos, no obstante su ya larga permanencia en un bajo nivel académico dentro de la UNAM. No menos puede decirse del doctor Licea, también miembro de la mesa directiva del "Claustro".
Finalmente, creo que equivocadas frondas de "democratización", que yo me he permitido llamar de "mediocratización", de las universidades trastornan a una proporción de su personal, en contra de los principios académicos, bajo una fantasía consistente en creer que se debe atender a peticiones a veces firmadas y a veces no, con recolecciones de firmas en muchas ocasiones arrancadas de manera forzada a los académicos. Son precisamente estas acciones y actitudes las que dividen a las comunidades y las distraen de sus verdaderas obligaciones. Una universidad, lo he dicho y debo repetirlo, no es un municipio; es una institución en la que por encima de cualquier posición deben prevalecer los principios académicos. Esto es lo que, a través del tiempo, ha entorpecido trabajo, desarrollo y avance académico de la UNAM.
Atentamente,
Dr. Antonio Peña, investigador emérito, Instituto de Fisiología Celular, UNAM
Responde a carta de la vocera de Fox
Señora directora: En su carta publicada ayer, Marta Sahagún, del Comité de Campaña de Vicente Fox, describe mi reportaje como tendencioso, sin decir nunca dónde encuentra el dolo o las falsedades.
La señora Sahagún, quien formó parte del gabinete del ex gobernador Fox, se apaña del título del texto publicado en Masiosare ("Gobierno de ocurrencias") para evadir cualquier referencia a los datos y juicios ųproporcionados por políticos y académicos guanajuatensesų que sustentan la información del reportaje.
En lugar de tratar estos temas, prefirió enumerar los cinco "grandes retos" que se planteó el gobierno foxista y de paso decirnos que "están en el escrutinio cotidiano de Guanajuato".
Sin embargo, frente al escrutinio, la vocera de Fox opta el regaño que debería reservar a sus amaunenses y por la descalificación sin argumentos.
El tono de su carta me obliga a preguntarme: Ƒno es posible analizar las obras públicas de Fox?, Ƒdebemos resignarnos a la condena foxista, simplemente por no comprar lo que nos venden con la mercadotecnia política?
Alberto Aguirre M., reportero de Masiosare
Precisa que el CETIS no pertenece al IPN
Señora directora: Por este conducto me dirijo a usted con motivo de la nota titulada "Mueren tres policías al enfrentarse con asaltantes; tres más heridos", que firmada por el señor Humberto Ortiz Moreno se publicó el pasado sábado 25 de los corrientes en el prestigiado diario que usted dirige, a fin de hacer los siguientes comentarios y precisiones:
La nota en cuestión señala que "Otro agente policiaco fue golpeado por estudiantes del CETIS 42 del Instituto Politécnico Nacional, quienes intentaban secuestrar un autobús. Francisco Sandoval persiguió a los jóvenes, pero tropezó y los agresores aprovecharon para patearlo".
Al respecto, cabe señalar que el Instituto Politécnico Nacional cuenta solamente con 15 Centros de Estudios Científicos y Tecnológicos (Cecyt), identificados en numeración progresiva del 1 al 15, y que los denominados CETIS pertenecen a otra institución del subsistema nacional de educación media superior.
Con el único interés de aclarar que en tales hechos nada tuvo que ver la comunidad estudiantil de IPN y evitar confusiones entre su amplio número de lectores, agradezco la atención que se sirva dar a la presente.
Sin otro particular, aprovecho para enviarle un cordial saludo.
Atentamente,
Hugo E. Huitrón Vera, jefe de la División de Comunicación Social
Corrige datos de una nota sobre control natal
Señora directora: Por un error de redacción en la nota publicada ayer en la página 19 de este diario referente a la alta demanda de métodos anticonceptivos, se señala que en 1997 la demanda de métodos anticonceptivos por parte de mujeres que no deseaban espaciar o limitar su descendencia fue de 12.1 por ciento, cuando en realidad debería decir que ese porcentaje sí deseaba espaciar o limitar su descendencia, pero no tuvieron acceso a métodos de control natal.
Gracias,
Olga Valenzuela