Ť Autor de la novela histórica titulada El seductor de la patria


Explicar la circunstancia de Santa Anna resulta un poco reivindicatorio: Enrique Serna

Ť Aborda ridiculeces, traiciones y corruptelas en las que incurrió el personaje

Ť ''Es el inventor de la nacionalidad mexicana, que arrastra un ingrediente de autodesprecio''

Arturo García Hernández Ť No es un héroe. Su nombre ųsinónimo de traiciónų nunca figurará con letras de oro en la Cámara de Diputados. Es el ''vendepatrias" que cedió a Estados Unidos la mitad del territorio nacional. Torpe como militar. Desleal como político. Sin embargo, pocos como él han dejado huella tan profunda en la historia de México: Antonio López de Santa Anna. ƑPor qué un personaje tan ''evidentemente oportunista y corrupto" fascinó tanto a la sociedad de su tiempo? Responder a esa pregunta llevó a Enrique Serna a escribir su libro más reciente, una novela histórica: El seductor de la patria.

ųƑPor qué te pareció interesante la vida de Santana, como tema para una novela?

serna-enrique-2-jpg ųSentí que sólo la ficción podía responder a los enigmas sobre la personalidad y la vida de Santa Anna, que los historiadores no han podido resolver, empezando por el más importante de todos: Ƒpor qué un personaje tan evidentemente oportunista y corrupto llegó a ejercer una fascinación tan grande sobre la sociedad mexicana, al grado de que muchos lo consideraban encarnación de la patria?

Radiografía de una conciencia

ųƑDe qué manera te vales de la ficción para dar a conocer una verdad histórica?

ųEl novelista tiene una ventaja sobre el historiador: puede entrar en los pensamientos del personaje. En ese sentido, creo que mi novela es la radiografía de la conciencia de Santa Anna. Al valerme de este recurso, pude llevar las conjeturas a un nivel tal vez más profundo, sicológicamente hablando. Creo que esto ayuda a conocer mejor al personaje.

''La idea surgió cuando leí la autobiografía Santa Anna, historia militar y política, un libro lleno de lagunas y de falsedades que Santa Anna escribió en el exilio, cuando ya estaba bastante afectado de sus facultades mentales. Se me ocurrió que valdría la pena una autobiografía apócrifa en la que él se defendiera cínicamente ante la posteridad. Un poco a la manera de las memorias de Gonzalo N. Santos. Pero como Santa Anna jamás hubiera desnudado su alma en público, pensé que su confesión podría ser en privado, por medio de una serie de cartas a su hijo Manuel, que vivía en La Habana, cuando él regresó de su último exilio. Por eso elegí una forma epistolar para contar la historia.

ųDe ese conjunto de cartas, Ƒalgunas son reales, existen?

ųMuy pocas, en realidad. Los documentos históricos difícilmente embonan a la perfección en un rompecabezas literario. Muchas de las cartas son ficticias, pero expresan la opinión que tuvieron los personajes de la vida real.

ųDespués de escribir la novela, Ƒcambió la idea que tenías de Santa Anna?

ųSí, mucho. En el curso del trabajo fui llenado lagunas e iluminando zonas oscuras sobre su carácter. Eso me llevó a tener un mejor conocimiento del personaje.

ųƑDirías que una mayor comprensión de él o hasta justificación?

ųMi novela no es una apología de Santa Anna, porque en esta novela están todas las ridiculeces, las traiciones y las corruptelas que cometió. Lo que pasa es que es un personaje tan satanizado, que el simple hecho de explicar y dramatizar las circunstancias de su actuación política y militar ya resulta un poco reivindicatorio; demuestra que la responsabilidad por los desastres acaecidos en la primera mitad del siglo XIX no es exclusiva de él, es una responsabilidad compartida con la sociedad de su tiempo. Me refiero a quienes podían tener participación política, es decir, el alto clero, la burocracia, los cuadros superiores del Ejército, que eran los que lo llamaban una y otra vez para que asumiera la Presidencia.

ųƑEra un mitómano, un mentiroso o un hombre con una idea distorsionada de la realidad?

ųTuvo siempre una idea muy exacta de la realidad en los tiempos en que le funcionó el olfato político. Siempre supo colocarse en el bando de los ganadores, tenía un gran pragmatismo para las maquinaciones políticas. Pero en la vejez fue perdiendo el sentido de la realidad y por eso se convirtió en un personaje tan patético. Por ejemplo, en la época en que le ofreció su apoyo a Maximiliano y luego a Benito Juárez, y fue desdeñado por ambos.

''El seductor de la patria" es una frase acuñada por el historiador Enrique Krauze y cedida a Serna para usarla como título de su novela, atrás de la cual hay cuatro años de trabajo, entre investigación y redacción. La mayor dificultad que encontró el autor a la hora de escribirla fue seleccionar y discriminar la enorme cantidad de datos que tenía sobre el personaje: ''La novela histórica es un género que te obliga a ser didáctico, pero al mismo tiempo te obliga a no parecerlo. Tuve que sacrificar mucha información para que el personaje siguiera estando vivo ante los ojos del lector". Así, aparece un hombre admirador de Napoleón Bonaparte, valiente como soldado, torpe como estratega militar, envidioso, simpático y encantador; sabía conmover, tenía ''el don de las lágrimas".

Inventor de la nacionalidad mexicana

ųAhora suele hacerse una analogía entre Carlos Salinas de Gortari y Antonio López de Santa Anna, Ƒexiste un punto de comparación?

ųLa analogía funciona en relación con la actitud de la sociedad mexicana hacia ellos. Santa Anna a lo largo de su vida política fue objeto de veneración pero también de varios linchamientos. El más conocido es el del desentierro de su pierna para ser pateada por las calles. A mediados del sexenio de Salinas, la sociedad ųes decir, ciertos sectores de la clase mediaų estaba muy ilusionada porque creía que en realidad nos conducía al Primer Mundo. El posterior linchamiento de Salinas, por las mismas personas que habían creído en él, se parece a lo que ocurrió con Santa Anna: no querer aceptar la parte de responsabilidad que les corresponde.

Pero la forma de hacer política de Santana y varios de sus contemporáneos ųseñala Enrique Sernaų sigue marcando nuestra vida política: ''En este momento los candidatos a la Presidencia se están peleando a dentelladas por seducir a la patria. Y los medios que usan son populistas, idénticos a los de la época de Santa Anna. El, por ejemplo, frecuentaba los palenques en parte porque le gustaba el juego, pero también para darse sus baños de pueblo. Era el momento en que cualquiera podía llegar a beber con él un jarro de pulque. Era el momento en que se daba a querer.

ųƑComo quien en la actualidad va con Adal Ramones?

ųExactamente. Es lo mismo que hacen en los programas cómicos: llegan a picarse el ombligo con el conductor del programa, a echar unos cuantos albures, para que las personas los sienta muy cercanos. Desafortunadamente el truco sigue funcionando.

ųSi haces una novela sobre Santa Anna quiere decir que consideras de importancia que se le conozca, Ƒpor qué?

ųPorque, nos guste o no, es el inventor de la nacionalidad mexicana, que arrastra desde su nacimiento un ingrediente de autodesprecio que tenemos que eliminar de nuestra historia. ƑCómo nació ese ingrediente? Nace cuando un gobernante logra erigirse en símbolo nacional y las personas lo creen así: entonces sus defectos y sus debilidades pasan a formar parte de la idiosincrasia popular. Esto puede generar la cultura del autodesprecio.

(El seductor de la patria, publicado por Planeta, se presentará hoy a las 19 horas en el Museo del Carmen. Con tal motivo se efectuará un debate entre Agustín de Iturbide ųencarnado por Rafael Velascoų, Benito Juárez ųPedro Pablo Martínezų y el propio Antonio López de Santa Anna, quien por boca de Serna dice: ''Van a tratar de hacerme un juicio político, pero yo, que tengo un dominio de la retórica superior al suyo, voy a tratar de aplastarlos y hacerles ver que en realidad fui un hombre de gran valía".)