La Jornada miércoles 29 de septiembre de 1999
Misiva de Villoro y López Austin a Marcos
Estimada Carmen: Te pedimos muy atentamente que
publiques la siguiente carta, dirigida al:
Subcomandante Marcos:
En tu ''Carta tres. Dos acosos, dos rebeldías'', publicada en La Jornada el día 25 de septiembre de 1999, tocas el tema de la propuesta que ocho profesores universitarios hicimos el 28 de julio de 1999. Debemos puntualizar:
1. Hablas de quienes fuimos asesores del EZLN en los Diálogos de San Andrés, como si nuestra defensa de los derechos indígenas y la búsqueda de una solución negociada en el conflicto de la UNAM fuesen incompatibles. En efecto, preguntas cómo fuimos capaces de no mencionar a los estudiantes, en nuestra presentación en el CGH, que el gobierno no cumplió los Acuerdos de San Andrés, y agregas que ni la rectoría ni el gobierno cumplirán ahora con los acuerdos a que eventualmente se llegue en el conflicto universitario. No hay incongruencia en nuestras acciones. Es nuestra convicción pasada y presente que tanto en Chiapas como en la UNAM la única solución honorable es la de la no violencia, la negociación digna y el cumplimiento cabal de los compromisos contraídos. En ambos conflictos seguiremos luchando por estos términos. Continuaremos exigiendo el cumplimiento, por parte del gobierno, de los Acuerdos de San Andrés y en la universidad seguiremos invitando a un dialogo aún posible entre ambas partes que llegue a acuerdos para solucionar el conflicto.
2. Después de mencionar que dos de los ocho han dado clases y publicado libros de ética, preguntas di es ético sostener la propuesta con el discurso del presidente Zedillo. ƑA qué viene el enlace entre estas actividades académicas y las muy particulares interpretaciones y usos que se hicieron de nuestra propuesta? El discurso a que de refieres --contenga o no una amenaza-- es muy posterior a nuestro documento y pudo derivar de una interpretación que expresamente rechazamos. En una declaración anterior al discurso presidencial señalado advertimos que nuestra propuesta no debía ser considerada inflexible ni tomada como ultimátum.
3. En tu carta haces alusión a un emérito que ha dado clases de ética y escrito algunos libros sobre el tema. Llamémoslo por su nombre y dimensiones: Adolfo Sánchez Vázquez, distinguido profesor de filosofía, internacionalmente reconocido, y con una larga vida de absoluta rectitud e inquebrantable espíritu de lucha por las causas justas.
Hemos recibido muchas respuestas a nuestro documento, tanto de adhesión como de impugnación. Entre los impugnadores hubo quienes optaron por el juicio crítico, inteligente y pertinente, y quienes pretendieron la descalificación con el denuesto personal o familiar. No podemos responder a los primeros debido a que por ahora nuestro tiempo y nuestros esfuerzos deben concentrarse en la búsqueda de la solución pacífica y digna del conflicto universitario. No nos interesa responder a los segundos. En el caso de tu carta, los dos suscritos consideramos imperioso contestar de inmediato, pues la falta de claridad meridiana en los juicios pone en riesgo otros valores. Dados los vínculos existentes en una causa común, nuestro silencio afectaría --en mayor o menor medida-- la lucha que hemos asumido como decisión existencial: la defensa de los derechos de los pueblos indios.
Alfredo López Austin y Luis Villoro
De Luis Javier Garrido a Enrique Krauze
Querida Carmen: Que no se equivoque Enrique Krauze. Las supuestas ''mayorías'' en un régimen autoritario como el mexicano son espurias. ƑO puede ser acaso expresión de ''las mayorías'' un gobierno que se instauró tras un crimen político y se impuso, como se ha documentado, con las manipulaciones electorales y los dineros del narcotráfico?
Es obvio que en la UNAM, empezando por el CGH, todo el mundo quiere que termine la huelga, pero el problema es cómo va a concluir: a) aceptando las autoridades que sea a través del diálogo, como piden los estudiantes; b) por medio de la fuerza, como quiere el rector Barnés, o c) como pretende el gobierno de Zedillo, levantando los estudiantes, de manera unilateral la huelga y aceptando que su lucha no condujo a democratizar a la institución. La verdadera cuestión no es la que plantea Krauze, sino otra muy distinta: Ƒpuede una minoría seguir disponiendo impunemente de la UNAM y destruyendo su proyecto histórico, o debe ser la comunidad la que decida democráticamente el futuro de la universidad? Lo invito, por eso, a sumarse a la demanda de que un Congreso resolutivo, electo de manera democrática, y representativo de todos los universitarios, como el de 1990, sea el que decida sobre las medidas que de manera autoritaria buscó imponer el rector Barnés: eso sí sería un gesto que avalaría su disposición democrática.
Y una cuestión más sobre la que podría reflexionar: Ƒpueden no sólo los universitarios sino los mexicanos formarse un criterio de lo que acontece en la UNAM o en el país cuando los medios masivos, encabezados por Televisa, donde Enrique colabora, y Televisión Azteca desinforman todos los días? ƑQué está en descomposición, el movimiento de los jóvenes o el régimen? Resulta preocupante que muchos escritores crean que los estudiantes deben levantar la huelga y dejar de luchar por el respeto a la Constitución sólo porque no pueden ver más argumentos que los del gobierno.
ƑNo sería mejor exigirle a las autoridades, que son quienes tienen en realidad secuestrada a la universidad, que no prolonguen ya la huelga y le den una resolución al conflicto?
Luis Javier Garrido
Precisión de Willie Colón
Señora directora: En relación con la nota aparecida ayer en la página 34 de la sección Cultura del periódico que usted tan dignamente dirige, me gustaría hacer la siguiente aclaración:
La nota afirma: ''que cada mexicano paga mil 300 dólares por el servicio de la deuda contraída''. Sin embargo, de acuerdo con los datos oficiales proporcionados por la coalición Jubileo 2000, es el país el que asume anualmente este costo por cada dólar recibido.
Willie Colón
Piden al CU y al CGH concretar propuestas
Señora directora: Solicitamos publicar la siguiente carta dirigida al Consejo Universitario, al Consejo General de Huelga y a la comunidad universitaria.
Este 29 de septiembre se realizará la primera reunión entre el Consejo Universitario (Comisión de Contacto) y el Consejo General de Huelga. A ningún universitario puede pasarnos desapercibida su importancia para encontrar una solución negociada a la huelga estudiantil, después de cinco meses en los que ha estado ausente la negociación.
La trascendencia de este encuentro será decisiva para el futuro de nuestra máxima casa de estudios. La defensa de la universidad pública y la transformación democrática de la UNAM son principios comunes, básicos, sobre los que el acuerdo entre los universitarios puede alcanzarse.
Demandamos a esta Comisión del CU y a la del CGH hagan su máximo esfuerzo para trascender su carácter de contacto y a partir de los consensos que forjen puedan transformarse en comisiones resolutivas que abran el camino para el levantamiento de la huelga, lo que a su vez permitirá la participación de toda la comunidad en un movimiento universitario de reforma.
Demandamos que el Consejo Universitario dé su máximo apoyo a su comisión con la mayor flexibilidad para la negociación y se declare en sesión permanente hasta la superación del conflicto y al CGH que también se declare en sesión permanente, busque la mayor flexibilidad para la negociación y convoque a todos los estudiantes a decidir los términos de la misma.
Invitamos a la reunión del martes 5 de octubre en el Instituto de Astronomía para examinar el carácter de los espacios de discusión y decisión para la reforma universitaria.
Por la Asamblea Plural de Profesores e Investigadores: Rosa María González y Josefina Morales
Cuestionan argumentos de Antonio Peña Díaz
Señora directora: La falsedad de cada una de las impugnaciones que hace el doctor Antonio Peña Díaz, investigador emérito del Instituto de Fisiología Celular, quien, extemporáneamente, pretende justificar (en carta al Correo Ilustrado del 28 de septiembre) las acciones que durante su gestión administrativa del ICML cometió en perjuicio de este atribulado instituto y de su personal académico, nos hacen ver la futilidad de responder a dicha carta. A cambio, y en honor a la verdad, solicitamos a usted de la manera más atenta tenga a bien comisionar a uno de los reporteros de La Jornada, para entregarle copia de documentos originales que se tomen como elementos para un reportaje de fondo sobre la desafortunada y aberrante gestión del doctor Peña Díaz como ''director'' del ICML.
Atentamente
Mesa directiva del Claustro del Personal Académico del ICML-Sección CU: Artemio Gallegos, presidente; Carlos M. Illescas, secretario, y Sergio Licea, vocal