n Miles de brasileños demandaron el fin de los acuerdos con el FMI
Anuncia Cardoso aumentos de impuestos y recortes
Reuters, Afp y Dpa, Brasilia, 7 de octubre n El gobierno del presidente Fernando Henrique Cardoso anunció este jueves una combinación de aumentos de impuestos y recortes presupuestarios por el equivalente a mil 230 millones de dólares para el próximo año, al tiempo que miles de personas convocadas por el Movimiento de Campesinos sin Tierra (MST) se concentraron frente a la sede del Banco Central de Brasil para exigir el fin de los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Las medias anunciadas por el ministro de Hacienda, Pedro Malán, pretenden equilibrar el desajuste en las cuentas públicas producido por una decisión judical que consideró inconstitucional el proyecto gubernamental de cobrar un impuesto de asistencia social a funcionarios públicos jubilados.
Malán no dio detalles sobre los recortes de 615 millones dólares, pero garantizó que los programas sociales no resultarán afectados, mientras precisó modificaciones en dos impuestos sociales corporativos --que no tienen gran impacto en la sociedad-- por valor de otros 615 millones de dólares.
No obstante, el ministro sostuvo que las medidas son provisionales y serán levantadas cuando el gobierno consiga convertir en ley su proyecto original de aumentar las contribuciones de los burócratas jubilados.
Estos ingresos son considerados cruciales para cumplir con las severas metas fiscales pactadas con el FMI a cambio de un paquete crediticio por un total de 41 mil 500 millones de dólares.
En este contexto, miles de personas se unieron a los mil 100 participantes de la Marcha del Pueblo Brasileño que llegaron hoy a esta capital tras recorrer a pie mil 600 kilómetros para protestar contra la política económica y los acuerdos con el FMI.
En un único incidente de tensión, los organizadores trataron que "los caminantes" rodearan el Banco Central de Brasil en un "abrazo simbólico", pero algunos manifestantes rompieron el cordón policial para intentar entrar al edificio, pero fueron llamados al orden por sus propios compañeros.
El estadunidense de origen cubano Lorenzo Pérez, representante del FMI, se lamentó de que ningún representante de la marcha le hubiera entregado algún documento con sus propuestas, y de sentirse "como un médico al que acusan de enfermar a las personas".
"Nuestro objetivo es paralizar a Brasil mientras no haya un proyecto que atienda las demandas de la sociedad brasileña", dijo Joao Pedro Stédile, coordinador nacional del MST, quien también llamó en su discurso a ocupar las haciendas ociosas.
Vestidos de verde y con una gorra blanca, los mil 100 caminantes que partieron de Río de Janeiro el 26 de julio, y los más de 7 mil sindicalistas que se les sumaron en la ciudad, llegaron hasta la Plaza del Compromiso, que recuerda la memoria del indígena pataxó Galdino Jesús dos Santos, quemado vivo mientras dormía, en 1997, por jóvenes derechistas de la zona.
Allí, antes de dirigirse a la sede del Banco Central, celebraron una misa precedida de danzas indígenas, cánticos y actos en memoria de los muertos en la lucha agraria.
En Sao Paulo, entre tanto, unos 50 mil trabajadores metalúrgicos paralizaron sus actividades en protesta contra los despidos en el sector, mientras al menos 19 heridos dejaron hasta ahora las protestas que comenzaron anoche por propietarios de camionetas que funcionan irregularmente como un medio de transporte alternativo en esta ciudad industrial, donde la tasa de desempleo supera el 19 por ciento.