Ť Asiste al homenaje que se rinde al escritor en la Feria del Libro de Monterrey
Borges amaba la libertad y quería un mundo basado en la razón: Kodama
Ť Cuando culmine el centenario del natalicio, publicaré mi obra literaria, afirma
Ť Es único en la vida, es mi pasión y a trece años de su muerte sigo con él, dice su viuda
José Garza, especial para La Jornada, Monterrey, NL, 11 de octubre Ť Cerró los ojos, los abrió. Entonces comenzó a hablar de El Aleph. ƑCómo transmitir a los otros el infinito Aleph que su consecuente memoria apenas abarca? Algunos señalan un pájaro que de algún modo es todos los pájaros.
María Kodama (Uruguay, 1945) habla emocionada de todo un universo cuyo centro está en todas partes y la circunferencia en ninguna: Jorge Luis Borges, el escritor argentino (1899-1986), al que se le negó el Nobel y que en castellano y en inglés construyó una obra amplia e imaginativa de poesía, cuentos y ensayos. ''Es el autor completo, la perfección", dijo Octavio Paz.
Ya son trece años de la muerte de Borges. ''Y sigo con él", dice una María Kodama de ojos tristes.
Acaba de cruzar el Atlántico para asistir ųanocheų al homenaje que la Cátedra Alfonso Reyes del Tecnológico de Monterrey le rinde a Borges, dentro de la programación de la Feria del Libro.
Estar con los que perdían
Kodama festeja el rumbo de la conmemoración que este año celebra el centenario del natalicio del escritor argentino y por la exposición itinerante que la Fundación Internacional Jorge Luis Borges, que ella preside, organizó para la ocasión. La muestra incluye diversos dibujos del autor del El Aleph y será presentada en breve en el Museo Rufino Tamayo. Está satisfecha, además, porque próximamente serán publicados algunos textos inéditos del escritor argentino, particularmente las colaboraciones periodísticas en la revista Sur.
La memoria de Borges está más viva que nunca. Esa ha sido la labor de Kodama: amar a Borges, dejando incluso para después una carrera literaria personal. Kodama en conversación con La Jornada.
ųCon esta conmemoración se demuestra que su obra resistió los embates críticos hacia su actitud apolítica o conservadora. ƑCómo llega Borges a su centenario?
ųLlega magníficamente. No sé si las suyas eran posiciones conservadoras, pero fue cambiando a lo largo del tiempo. Hay quien trata de encasillarlo. Se hizo conservador porque consideró que ese era el único partido sin posibilidad de ganar: a él le gustaba estar con los que perdían. Decía que era un viejo anarquista, entendiendo por anarquismo no una concepción moderna sino la de principios de siglo.
ųƑBorges reconoció en algún momento que se había equivocado al dar muestras de solidaridad con el gobierno golpista de Pinochet, por ejemplo?
ųBorges no apoyó nada. Lo único que le reprochan es que fue a Chile porque la Universidad Católica le otorgó el doctorado honoris causa y la autoridad lo recibió, como cuando un gran escritor va a otro país. Borges amaba la libertad; él era pacifista y quería un mundo que entendiera las cosas por la razón, no por la violencia ni por medio de un sistema de secuestro. Borges no toleraba eso.
Convertirse en el mito escandinavo
ųƑLa crítica hacia su actitud apolítica o conservadora explican que no le hayan otorgado el Nobel?
ųSí, puede ser. Pero eso le divertía muchísimo. Decía que gracias a eso él era más importante que el poseedor del Nobel porque se había convertido en el mito escandinavo.
ųPor fortuna las especulaciones y los mitos no demeritan la obra de Borges.
ųšComo debe ser!
ųLo cual no ocurre con Alfonso Reyes, un autor más proclamado que leído, pero que siempre mereció el constante elogio de Borges, quien lo llamó ''el primer hombre de letras de nuestra América".
ųBorges lo admiró muchísimo y mantuvieron una profunda amistad.
ųƑQué sentimientos tuvo Borges con México?
ųAdmiró a Paz y Arreola. Recuerdo un encuentro en Buenos Aires con Arreola y Juan Rulfo. Fue lindísimo. A Borges le gustaba mucho López Velarde y siempre sintió un gran afecto por México.
La leyenda cuenta, y Kodama lo confirma, que Borges le dictaba sus cuentos y poemas. ''Eso comenzó en los años sesenta ųdiceų. Así que soy testigo de gran parte de su obra". Borges trabajaba de manera singular, sobre todo en la prosa: ''ƑQué le parece esta oración?, Ƒle gusta así o de esta otra forma?: escribámosla y luego decidimos'', decía el escritor a su mujer.
María Kodama le indicaba una palabra, un adjetivo. Borges la escuchaba, pero dejaba pasar los días para de pronto decirle: ''Volvamos a leer el texto; estuve pensando, dudo, pero prefiero la oración con la que iniciamos".
ųƑCuál fue su primer encuentro con la obra de Borges?
ųOcurrió cuando tenía cinco años ųrecuerda. Una señora que me enseñaba inglés, mediante la lectura y la explicación en ese idioma de algunos libros que ella leía, me mostró los poemas ingleses que Borges dedicó a una mujer de la que estaba perdidamente enamorado, años antes de que mis padres soñaran con conocerse. Esa señora me leyó también César y Cleopatra, de Bernard Shaw. No sé si me enseñó inglés, pero sí aprendí otras cosas, como por ejemplo el hecho de que Borges intentaba con su amada lo mismo que César con Cleopatra, pero por un camino contrario. Desde mi mentalidad de niña me pregunté con cuál de las dos personalidades podría jugar y tener una aproximación de amistad. Pensé oscuramente que no sería con alguien como César, pero sí como Borges.
ųƑCuándo y cómo ocurrió su relación con Borges?
ųA mis 12 años. Con el ánimo de estudiar literatura, un amigo de mi padre me invitó a una conferencia de Borges. Después, por causalidad como él diría, lo encontré de nuevo y me propuso, a mis 16 años, estudiar. Acepté y desde entonces sigo con él... špara siempre!, en una relación maravillosa y compleja que cambia y tiene matices.
ųƑCómo era Jorge Luis Borges en el terreno sentimental?
ųFue un ser con una ternura especialísima, una delicadeza, pero al mismo tiempo con una seducción increíble. Borges era algo así como el gran seductor.
ųƑCree en la predestinación?
ųBorges decía, divertido, que mi padre me había educado para él. Y claro, a mi padre le gustaba mucho la pintura y me llevaba desde niña a museos y galerías. Nunca fui tratada como niña, sino como adulto. Juntos lográbamos un palimpsesto, porque yo le decía que tal cosa eran como los cuadros de Canaletto y él me recitaba las Elegías romanas de Goethe en su viaje por Italia.
ųƑEn algún momento se ha sentido absorbida por Borges?
ųNo. Después del centenario empezaré a publicar mis trabajos. No lo hice en vida de Borges, aunque él así lo deseaba, pues quería prologarla. Publicaba mis cuentos en diarios y revistas y nunca me he considerado frustrada o en segundo lugar. Elegí: Borges es mi pasión; es con lo que está entretejida la mitad de mi alma. Pero escribía y sigo escribiendo.
Ulrica es Kodama
La leyenda también cuenta, y la misma Kodama lo corrobora, que en la lápida de la tumba de Borges, en Ginebra, está grabada una dedicatoria: ''De Ulrica a Javier Otálora". Se trata de los nombres que se daban secretamente los amantes, y que corresponden a un cuento, Ulrica, que Borges escribió en su vejez y en el que puede adivinarse la figura de su gran amor.
ųƑUlrica es María Kodama?
ųSí. Aunque digan que no: qué se va a hacer. En la historia de Ulrica, Borges se refiere a mí.
ųFinalmente, su matrimonio con Borges no duró sólo unos meses.
ųClaro, el matrimonio era una cosa secreta entre él y yo para darle gusto. El que nos hayamos casado por algo que decidimos así, muchísimos años antes, no quiere decir que el matrimonio no haya durado mucho tiempo. šNo seamos infantiles! Una pareja no necesita un papel para decir que es un matrimonio. Nuestra relación fue muy especial; ambos decidimos ser pareja, porque yo no creo en el matrimonio. Como Borges sabía eso desde que me conoció, porque le había contado lo traumático que fue para mí el divorcio de mis padres, cuando me propuso matrimonio ųel cual se efectuó en 1986ų le dije que no; y él me dijo: ''Usted sabe que yo la amo, como usted me ama, toda mi vida con usted". Trece años después sigo con él. Es mi amor. Es único en la vida.