Ť El Senado exige recibirla y critica la ''insensibilidad'' de las autoridades


SRE: por problemas de logística no se acepta la ayuda internacional para los damnificados

Ť Recibir apoyo sin evaluación cuidadosa es contraproducente,

arguye Ť Pide esperar a que pase la etapa de emergencia aguda

Georgina Saldierna * El gobierno de México aclaró ayer su posición sobre el apoyo internacional ofrecido para los damnificados por las lluvias: no lo rechaza, pero mientras no haya acceso a las zonas dañadas no es aconsejable acumular artículos que no podrían aprovecharse de inmediato y que incluso podrían echarse a perder.

Aunque hace unos días el presidente Ernesto Zedillo señaló que los mexicanos podían hacer frente a la desgracia por sí solos, la Secretaría de Relaciones Exteriores precisó ayer que no se rechaza la ayuda internacional, pero en esta etapa de emergencia es crucial evaluar cuidadosamente qué tipo de ayuda es la más urgente y cómo hacerla llegar a las zonas dañadas, debido a que el derrumbe de carreteras y la caída de puentes han hecho inaccesibles muchas zonas.

En un comunicado, explicó que una vez superada la fase de emergencia aguda las autoridades determinarán el tipo de ayuda y los canales adecuados para enviarla de manera eficiente, transparente y útil a los poblados damnificados.

Experiencias anteriores han enseñado que, si se recibe de manera desordenada, la ayuda en especie puede obstaculizar las labores de auxilio y reconstrucción y desvirtuar la intención generosa y solidaria de quien la ofrece.

México aceptará oportunamente todo el apoyo que sea prioritario y cuya logística de traslado eficiente a las zonas de desastre esté asegurado, señaló la cancillería.

En cuanto al apoyo monetario, dijo que el gobierno mexicano ha agradecido el ofrecimiento de diversas naciones y ha solicitado que se canalice este dinero a la Cruz Roja Mexicana.

En nombre del gobierno mexicano, agradeció la ayuda de asociaciones civiles y las exhortó a usar las vías que determinen las autoridades federales, estatales y municipales.

Mientras, el representante de la Comunidad Europea en México, Manuel López Blanco, informó que este organismo estudia la posibilidad de enviar ayuda a México. Aclaró que el gobierno mexicano no lo ha solicitado, pero señaló que, con la experiencia del huracán Paulina, ya conocen los procedimientos para hacer llegar la ayuda.

* La prepotencia, para ocultar

corrupción: senador perredista

Andrea Becerril * En medio de fuertes críticas de perredistas y panistas a la actitud ''insensible'' del presidente Ernesto Zedillo ante el desastre provocado por las inundaciones en siete estados, el Senado de la República demandó ayer la aceptación inmediata de la ayuda del exterior a los damnificados.

''Mucho agradeceríamos la solidaridad internacional y apreciaremos la ayuda que se brinde a los afectados'', señala el punto de acuerdo firmado por las fracciones de PRI, PAN y PRD, que se contrapone a la postura del Ejecutivo.

Los priístas firmaron el documento, que incluye donar cinco días de dietas de todos los integrantes de la cámara alta (lo que suma casi un millón de pesos), pero rechazaron los cuestionamientos de PAN y PRD al Ejecutivo.

Desde un principio, el perredista Auldárico Hernández Gerónimo criticó a Zedillo, quien ha actuado ''de manera prepotente e intimidatoria para no reconocer las fallas de las autoridades locales y federales'' y tratar de ocultar la corrupción.

El senador panista Luis Mejía Guzmán señaló: ''No hay razón para actitudes de nacionalismo exacerbado, cerrado'', sin respaldo social, ni para ''el discurso de suficiencia de recursos federales, ya que la salud, la vida y la recuperación de miles y miles de familias están en juego''.

Tanto Auldárico Hernández como Mejía Guzmán pidieron al Presidente de la República reconsiderar su postura y abrirse a la cooperación solidaria de otros gobiernos u organismos multilaterales.

La senadora priísta Guadalupe López Bretón defendió a Zedillo, quien ''ha cumplido y está cumpliendo con amplia solidaridad y eficiencia su función de mandatario''. Incluso ''suspendió su viaje al extranjero para estar cerca de los mexicanos en desgracia, para estar atento de que sus órdenes sean cumplidas''.

El perredista Hernández Gerónimo respondió que, con su negativa a recibir ayuda internacional, Zedillo pretende beneficiar a su candidato a sucederlo, Francisco Labastida Ochoa, y evitar que se constaten la pobreza y la marginación extremas en que viven millones de mexicanos.

En la tribuna del Senado, el legislador tabasqueño insistió en que el Ejecutivo federal, en lugar de enviar la ayuda necesaria, optó por ''la intolerancia, la intransigencia, la insensibilidad y la falta de respeto ante la desesperación de miles de afectados''.

Se refirió al incidente del viernes pasado en Gutiérrez Zamora, Veracruz, donde Ernesto Zedillo calló y amenazó a un profesor jubilado que le pedía información sobre la forma en que evitaría que comerciantes y dirigentes del Partido Revolucionario Institucional especularan con los alimentos, lo que demuestra ''el grado de intolerancia e incapacidad con que se conduce el Ejecutivo''.

El perredista agregó que es también cuestionable que Zedillo condene a quienes lucran políticamente con la desgracia cuando autorizó ''a su candidato, Labastida Ochoa, a destinar un millón de pesos en despensas que llevan su propaganda''.

Hernández Gerónimo sostuvo que los recientes desastres naturales han puesto en evidencia la falta de un programa de prevención y protección civil y el grado de corrupción en los distintos niveles de gobierno. Una prueba de ello, aseguró es la destrucción de hospitales, escuelas y caminos recién construidos.

En Oaxaca, detalló, más de cuatro hospitales, 30 casas de salud y 500 escuelas, resultaron severamente dañadas. Lo más grave, agregó el senador perredista, fue que en su última gira por el estado, el 30 de septiembre, Zedillo inauguró en Juquila un hospital que no resistió el reciente sismo. Los responsables, señaló, tienen nombres y apellidos.

El senador priísta por Oaxaca, Fernando Iturribarría Pérez, tomó la palabra para aclarar que los daños que sufrió el hospital de Juquila ''son menores y pueden ser reparados con un costo mucho menor al que se ha manejado en los medios de comunicación''.

--ƑCómo lograron convencer al PRI de que firmara el punto de acuerdo? --se le preguntó al coordinador del grupo perredista, Héctor Sánchez.

--Es una cuestión de autonomía. Las tres fracciones acordamos que era muy necesaria la ayuda internacional, --respondió.

A su vez, la presidenta de la Gran Comisión y lideresa de la bancada priísta, María de los Angeles Moreno, dijo que Zedillo no rechazó la ayuda del exterior, ya que ésta siempre es bienvenida. ''Creo que de lo que habló fue de la organización indispensable para poder canalizar efectiva y oportunamente la ayuda'', precisó.