n Clara Jusidman: desintegración social y de instituciones, las causas
Crece el número de capitalinos que vive problemas emocionales
n Estrés, soledad, baja autoestima y violencia, entre otros padecimientos, señala la funcionaria
Jorge Fuentes n El Distrito Federal se encuentra entre las grandes urbes con una creciente población que padece problemas psicoemocionales, como estrés, soledad, baja autoestima y violencia, causados por la desintegración de las instituciones y redes sociales de protección al individuo, advirtió la secretaria de Desarrollo Social, Clara Jusidman.
Agregó que es la población juvenil quien sufre en mayor proporción estos problemas, por lo que cada tres días un joven intenta suicidarse, según registran los Centros de Atención de Crisis.
Al inaugurar lo que serán las instalaciones del primer Centro de Acompañamiento, para personas que sufren psicosis, instalado en la delegación Tlalpan, dijo que es difícil estimar cuanta población tiene una afectación psicoemocional, ya que es un asunto que todavía no asume el individuo dentro de su problemática social.
Indicó que la marginación, falta de empleo y escasos ingresos en que viven cientos de familias agravan este tipo de padecimientos, que en los últimos 25 años se agudizaron en la población capitalina
"De no revertirse la calidad de vida de los ciudadanos, el estrés, depresión y soledad se agudizarán, y serán los jóvenes y las mujeres quienes en mayor grado sufrirán esta transformación, característica de las grandes ciudades", señaló.
Clara Jusidman refirió que los principales síntomas del deterioro de las redes sociales y la desintegración de las instituciones básicas de la sociedad son las adicciones, la violencia intrafamiliar y social, así como el abandono y marginación de adultos mayores y discapacitados.
Sobre el problema de la psicosis en la ciudad de México, reconoció que no existen actualmente políticas enfocadas para su atención, "pues no era prioritaria"; sin embargo, representa un problema creciente que requiere de un especial cuidado.
"El problema es que ha sido un asunto que el propio individuo no asume, a pesar de que lo viven de manera personal, familiar y en la propia comunidad. Les cuesta trabajo pensar en ello", aclaró.
Comentó que no es extraño que un menor esté acostumbrado a vivir en la violencia familiar y social, junto a personas adictas a las drogas o en condiciones de marginalidad; es decir, inmerso en todas las condiciones que favorecen los problemas psicoemocionales.
"Pero también falló el proyecto del país hacia el siglo XXI, donde la gente esperaba una esperanza de mejorar sus condiciones de vida, lo que no sucedió, y la idea de construir un país mejor sólo generó frustración, depresión, soledad y una sensación de miseria generalizada".
La secretaria de Desarrollo Social aseguró que el trabajo ahora consiste en incrementar las "fortalezas" personales, familiares y de la propia comunidad para enfrentar esta problemática, que de continuar su paso como en los últimos 25 años, provocaría una depresión generalizada en los sectores más vulnerables.
Jusidman señaló que uno de los grandes retos para la actual administración ha sido crear una política social acorde a esta ciudad compleja, heterogénea y profundamente desigual, ya que las políticas anteriores eran sólo de asistencia a grupos de alta vulnerabilidad, descuidando la prevención y diversidad de problemas.
Por ello, dentro del programa de Salud Comunitaria, dijo, actualmente se capacita a 60 facilitadores de salud mental, quienes incidirán en la relación de los habitantes con los enfermos mentales.
Al respecto, Raúl Forcada, director del Hospital de Servicio FM3 Sainte Anne de París, Francia, señaló que los tratamientos a personas con psicosis sólo buscaban excluirlos de la sociedad, viviendo en condiciones precarias, sin casa y sin sostén económico.
Las instalaciones de la Casa de Acompañamiento funcionarán a partir de enero con especialistas de Francia y del Centro Monte Albán, con atención prioritaria a las personas marginadas. "Aunque no es asunto exclusivo de la clase más desprotegida, sí es el sector que menos atención recibe", indicó.
Raúl Forcada dijo que el sistema de acompañamiento, de innovación en el Distrito Federal, permite ayudar al paciente al ser acompañado por un especialista a reinsertarse en su comunidad, con excelentes resultados en países como Francia.
Por último, informó que la casa estará coordinada por el Centro Monte Albán, en colaboración con el hospital Sainte Anne de París y el Programa de Salud de la delegación Tlalpan.