n Hoy, manifestaciones en Santiago al cumplirse un año de su detención

Una acción en el caso Pinochet, sólo cuando termine el juicio: Londres

n Apela lord Lamont a los amplios poderes de Jack Straw para que deje en libertad al ex dictador

n Pide Amnistía Internacional que los motivos humanitarios no sean una cobertura de impunidad

Reuters, Afp, Dpa y Ap, Londres, 15 de octubre n El gobierno de Gran Bretaña reafirmó hoy que no tomará ninguna medida en relación al caso de Augusto Pinochet hasta que terminen los procedimientos judiciales en su contra, en tácita respuesta a la petición chilena de alegar "razones humanitarias" para su liberación.

El ministro británico del Interior, Jack Straw, no puede tomar ninguna acción hasta que el proceso termine. "Su papel no entra en juego hasta que las apelaciones hayan terminado", aclaró una vocera del despacho al ser consultada sobre el pedido del canciller chileno, Juan Gabriel Valdés, de considerar el deterioro de su salud.

"No puedo hacer comentarios sobre documentos que no he visto aún", declaró a su vez el propio Straw a la radio BBC desde Finlandia, donde asiste a una reunión de ministros de la Unión Europea sobre justicia, al preguntársele sobre la citada petición chilena.

No obstante, puntualizó que Gran Bretaña considerará cualquier petición de Chile en torno al ex dictador sudamericano conforme a la ley y en la misma forma en que examina declaraciones en cualquier caso de extradición, en clara alusión al más reciente fallo del juez Ronald Bartle, adverso al ex militar.

El ex ministro de Finanzas del anterior gobierno conservador, lord Lamont, un férreo defensor de Pinochet, afirmó que "lo que estamos viendo es un legalismo falso y el desorden de la ley", y asimismo apeló a los amplios poderes discrecionales que tiene Straw, al apuntar que los podría usar ahora mismo si quisiera.

Amnistía Internacional (AI), sección española, hizo un llamado por conducto de su vocero, Andrés Krakenberger, al ministro Jack Straw a que "aplique el derecho internacional, pero pedimos que los motivos humanitarios no sean una cobertura de impunidad", pues en caso contrario "sería el primer precedente gravísimo".

También instó al gobierno español a que colabore "activamente" con la justicia y se oponga con "todos los medios a su alcance" a un eventual regreso del ex militar a Chile por "razones humanitarias", ya que eso sólo garantizaría la impunidad ante un proceso judicial en curso, que instruye el juez español Baltasar Garzón.

Al presentar un informe especial sobre el caso Pinochet, Krakenberger pidió por igual a Chile y Argentina "colaborar" con la justicia en lugar de utilizar "todo tipo de medidas legales y de presión política" para evitar que los presuntos responsables de crímenes contra la humanidad comparezcan ante los tribunales.

En tanto que en España organizaciones humanitarias calificaban como "tomadura de pelo" anteponer "razones humanitarias" en favor del ex dictador, el portavoz del gobernante Partido Popular, José María Robles Fraga, prefirió no comentar la petición chilena, pero dijo que el gobierno británico debería considerar si la justicia chilena lo puede procesar.

Uno de los abogados de la acusación en Madrid, Manuel Olle, calificó como "una artimaña más política y no jurídica" la petición de Chile, al considerar que sólo busca la impunidad, y estimó que hay una contradicción entre los intereses de Pinochet y los del gobierno.

Y si AI dijo que las razones humanitarias sólo se esgrimen cuando ya se dictó una condena, Olle aseveró que el argumento humanitario no es motivo valedero para sustraerse a la acción de la justicia, pues en el ordenamiento jurídico está previsto dar tratamiento adecuado a aquellos que lo necesitan en hospitales penitenciarios.

Mientras en Santiago se espera que este sábado se realicen manifestaciones en favor y en contra de Pinochet, cuando se cumpla el primer año de su arresto en Londres, el canciller Juan Gabriel Valdés negó versiones sobre discrepancias en el gobierno a raíz del envío de la carta a Londres que alega razones humanitarias.

Al tiempo que la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos recordó la falta de humanidad de Pinochet bajo su dictadura, jóvenes que apoyan la candidatura presidencial de Ricardo Lagos prendieron una veladora frente a la comandancia del ejército para celebrar el primer año sin Pinochet en Chile.

En medio de un gobierno que está tomando severas medidas de seguridad para este sábado, sectores de derecha insistieron en que si su caudillo muere en Londres resultará afectada la transición democrática en Chile, mientras que en contraposición las fuerzas de izquierda sostienen que no habrá nada de eso.

Por su parte, unos 2 mil militares en retiro se reunieron en un teatro de Santiago para crear una agrupación gremial denominada Chile mi Patria, como una forma de reacción ante el caso Pinochet y el "fracaso" del gobierno en sus gestiones a su favor, además de que afirmaron que Chile es hoy "un país acosado" y "violentado" por España e Inglaterra.

A su vez, la organización ultraderechista Patria y Libertad negó tener responsabilidad en los recientes atentados en Chile contra objetivos españoles.

Por último, los diputados oficialistas Antonio Leal y Guillermo Ceroni pidieron al presidente de la Corte Suprema, Roberto Dávila, la extradición de Pinochet, como un recurso para salvarlo de la justicia.