* Estancados, los fondos para educación y salud durante la última década
Contrario a la tendencia mundial, más gasto militar en México: BM
* Ese incremento es un peso para la economía y puede impedir el crecimiento, advierte el organismo
Roberto González Amador * En un sentido inverso a la tendencia mundial, el gobierno mexicano duplicó en una década el gasto público destinado a mantener el aparato militar, al tiempo que incrementó en 35 mil el número de efectivos de las fuerzas armadas, pero mantuvo prácticamente estancado el presupuesto para educación y salud, revelaron reportes del Banco Mundial.
"Aunque la defensa nacional es una importante función de los gobiernos y la seguridad frente a las amenazas externas contribuye al desarrollo económico, el aumento en los gastos de defensa es un peso para la economía y éstos pueden impedir el crecimiento", señaló el organismo.
En el documento Indicadores del desarrollo mundial 1999, la institución da cuenta de que en una década el gobierno mexicano duplicó el gasto público destinado a defensa, en un renglón en el que no se incluye el presupuesto asignado a las entidades encargadas del orden y la seguridad pública.
El informe detalla la variación en los gastos en defensa y comercio de armas país por país durante una década. Para todos los casos cita la información correspondiente a 1985 y 1995, con el fin de homologar las cifras y poder efectuar comparativos nación por nación.
Para el caso específico de México indica que el gasto militar aumentó en diez años de 2.6 a 5.1 por ciento del presupuesto total ejercido por el gobierno federal. En términos del producto interno bruto (PIB), el presupuesto para defensa --en el mismo periodo-- se incrementó de 0.7 a 1.0 por ciento.
Mientras, el número de efectivos de las fuerzas armadas de México se incrementó de 140 mil miembros en 1985 a 175 mil en 1995, un año después de la aparición pública de un grupo insurgente en el estado de Chiapas.
De acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el presupuesto conjunto de las secretarías de Defensa y Marina para este año es de 23 mil 200.5 millones de pesos (unos dos mil 500 millones de dólares). Este gasto no incluye el de otras áreas encargadas de seguridad nacional.
Según el reporte del Banco Mundial, el número de efectivos enrolados en las fuerzas armadas representan 0.5 por ciento de la fuerza de trabajo total del país.
Mientras el gobierno mexicano ha duplicado el gasto público para sostener el aparato militar, el propio Banco Mundial en el Informe sobre el desarrollo mundial 1999/2000 indica que el presupuesto gubernamental a la educación se ha mantenido prácticamente estancado: en 1980 se destinaron, a este rubro, recursos por el equivalente a 4.7 por ciento del PIB, mientras que en 1996 fue canalizado un monto similar a 4.9 por ciento del producto interno bruto.
En este caso, la variación fue significativamente menor a la reportada a nivel mundial: en 1980 el gasto educativo en el planeta representó 4 por ciento del PIB mundial, mientras que en 1996 se incrementó a 4.8 por ciento.
Por lo que toca al gasto público en salud, fue de 2.8 por ciento del PIB, para el caso de México.
A nivel mundial, el gasto gubernamental en salud equivale al 2.5 por ciento del producto interno bruto de todo el planeta, de acuerdo con el organismo.
La información del Banco Mundial revela que el incremento en el gasto militar de México como proporción tanto del PIB como del presupuesto federal marca una tendencia contraria a la observada a nivel internacional durante la última década.
En 1985, el gasto militar de todos los países fue equivalente a 5.2 por ciento del PIB mundial, mientras que 10 años después disminuyó a 2.8 por ciento del producto interno bruto de todo el planeta, señala el organismo.
Mientras, el gasto militar como porcentaje del presupuesto público de los gobiernos disminuyó de un promedio mundial de 18.1 por ciento en 1985 a 9.9 por ciento en 1995.
En términos latinoamericanos, en Argentina el gasto militar disminuyó --en el periodo referido-- de 3.8 a 1.7 por ciento del PIB; en Brasil creció de 0.8 a 1.7 por ciento; en Chile decreció de 4.0 a 3.8 por ciento, y en Colombia aumentó de 1.6 a 2.6 por ciento del producto interno bruto, según el Banco Mundial.