* La tropa protege la ciudad con sacos de arena
Temen en Villahermosa que abran compuertas de la presa Malpaso
* El gobernador pide a la población mantener la solidaridad
René Alberto López, corresponsal, Villahermosa, Tab., 17 de octubre * La tregua de más de dos días que ha dado el temporal, fue aprovechada por el Ejército Mexicano para proteger la ciudad con costales rellenos de arena.
Y es que todo indica que el enemigo número uno (las lluvias) continuará azotando la geografía tabasqueña, ya que la Comisión Nacional del Agua (CNA) anunció que un frente frío que trae una masa de aire polar provocará este lunes un norte con lluvias intensas.
Cientos de militares trabajan intensamente para reforzar los bordes de los ríos y avenidas con miles de costales terreros, mientras las familias ponen a salvo las pertenencias que mantenían en lugares altos de sus viviendas anegadas.
Sin embargo, algunas familias comentaban en los albergues: "mejor nos esperamos a que termine definitivamente el temporal para regresar a nuestras casas, pues las autoridades siguen alertando sobre más lluvias".
Esta noche el gobernador Víctor Manuel Barceló emitió un mensaje en cadena de radio a la población, reiteró la alerta, llamó a los habitantes a "seguir conduciéndonos todos juntos con la misma conducta solidaria", y señaló que "no nos arredran los retos de la naturaleza, y demostraremos que todos juntos somos capaces de enfrentarlos y vencerlos".
Resaltó cómo autoridades y grupos civiles, así como soldados y marinos, han sabido enfrentar la contingencia. Llamó a mantener el ritmo de trabajo, y dijo que "no hay un solo problema que no estén atendiendo las autoridades estatales".
Hoy arribó a esta región el secretario de Salud, Juan Ramón de la Fuente, quien encabezó un acto en uno de los albergues de Bosque de Saloya y ahí dijo que es alto el riego de epidemias en las zonas afectadas en los 162 municipios de Tabasco, Puebla, Hidalgo y Oaxaca.
Acerca de Tabasco, refirió que aún no hay epidemias en los sitios anegados. Pero a partir de la próxima semana se fumigarán 90 mil hectáreas, con la ayuda de avionetas y personal de tierra, para evitar brotes de dengue y paludismo.
Informó que llegarán 50 toneladas de medicamentos par abastecer a los centros de salud, dotación que se suma a las 59 toneladas que ya fueron enviadas.
En tanto, se supo que después de la visita del presidente Ernesto Zedillo arribaron a esta entidad 7 mil 632 soldados. Quizá por eso es que desde hace dos días por doquier se observa a grupos de militares y convoyes de la Armada y del Ejército Mexicano por todos los puntos de la ciudad.
A pesar de que por medio de la radio se llama a "no hacer caso de rumores", cada vez crece más la versión de que en las próximas horas serán abiertas las compuertas de la presa Malpaso, en Chiapas.
En el centro de Villahermosa algunas personas se preguntan por qué los soldados están reforzando con más sacos de arena el malecón en la parte de la colonia Las Gaviotas, y muchos lugares que no se inundaron. "Si supuestamente ya pasó lo peor de las lluvias, ahora vemos que Villahermosa prácticamente está militarizada", se dice por todos lados.
En este mar de especulaciones se supo que Pemex sacó de esta capital, desde hace dos días, al personal extranjero.
Las huellas de las inundaciones comienzan a salir a flote. En la Central de Abasto de Villahermosa, en medio de olores fétidos, se observó en un extenso local miles de tomates, cebollas y papas podridas; las mercancías flotan sobre las aguas negras.
En la colonia El Espejo, se observan aguas empantanadas con cadáveres de animales, y el olor a "muerto" es insoportable. A lo que se suma la proliferación de moscas y mosquitos.
"Seguramente ahora vienen las enfermedades en los niños", decía con preocupación Juan Herrera, quien observaba cómo negreaban los mosquitos en las aguas encharcadas.
Disminuye la alarma
También hay un poco de alivio. Aparte de que el nivel de los ríos bajó, en las estaciones de radio locales han cesado las noticias sobre el temporal, que durante dos semanas cubrieron con intensidad las eventualidades de las inundaciones.
Asimismo, varias avenidas comenzaron a ser reabiertas a la circulación, como la que conduce al reclusorio por el lado de la Universidad, y el tráfico es más fluido en las carreteras hacia Escárcega, Campeche, y la que va al municipio Cárdenas y al centro del país.
"Ojalá y las lluvias ya dejen de madrearnos, porque este mes sólo hemos trabajado en medio Villahermosa", dijo el taxista Alejandro Hernández, quien de inmediato escuchó por el radio de su vehículo el pronóstico de más lluvias. "No la chinguen", exclamó con pesar.