* Erróneos programas académicos, una causa: representante de la UDUAL
Nunca ejercerán 70% de egresados en Latinoamérica
* Las universidades privadas agravan el problema; atienden demanda en carreras saturadas, dice
Claudia Herrera Beltrán, enviada, Veracruz, Ver., 29 de octubre * Setenta por ciento de los egresados de universidades de América Latina nunca van a conseguir un puesto de trabajo en el área que estudiaron, debido a la falta de empleo y a que se formaron con programas de estudio divorciados de las necesidades de sus países, afirmó ayer la representante de la Unión de Universidades de América Latina (UDUAL), Magdalena Sosa.
Luego de participar en el cierre de la reunión sobre el movimiento académico en América del Norte, señaló que estas cifras del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) son alarmantes, porque significan que Latinoamérica debe hacer una revisión de la relevancia de sus programas académicos para orientarlos hacia áreas estratégicas, las cuales vayan enfocadas al desarrollo social y económico de la región.
Al exponer los problemas que enfrentan las universidades de América Latina, la representante de la UDUAL indicó en entrevista que no son bien vistas por los propios latinoamericanos, que prefieren hacer sus estudios de posgrado en Estados Unidos o Europa, siendo que en la región hay instituciones de educación superior con calidad en algunas áreas del conocimiento.
"A pesar de que el sueño bolivariano es muy viejo, entre los latinoamericanos es relativamente nuevo el intercambio académico", explicó la también coordinadora de asesores de la UDUAL, y refirió que los cuadros de docentes y de investigadores en América Latina se han ido a capacitar a otros países menos a los de sus vecinos.
Aunque en Latinoamérica hay 450 universidades que pueden ser muy buenas, medianas o malas, existen algunas que se destacan por tener disciplinas muy desarrolladas, las cuales resultan atractivas para los estudiantes. Magdalena Sosa mencionó el caso de Brasil, que cuenta con excelentes programas de estudio en ingenierías, así como Argentina y México, en Ciencias Sociales, y Costa Rica, en Ciencias Exactas, Tecnología y Medio Ambiente.
Sobre las pocas expectativas de empleo de los egresados, dijo que las universidades pueden atender este problema, elaborando un catálogo de necesidades para que se desarrollen posgrados justamente en las áreas científicas y tecnológicas adecuadas.
Muestra de esta falta de planeación, explicó Sosa, es que en la región hay pocos programas de posgrado en pesquerías, siendo que hay muchos kilómetros de litorales, y lo mismo sucede con las carreras relacionadas con la agricultura y el medio ambiente.
En contraste, indicó que el mayor porcentaje de los posgrados son de administración, "cuando no somos países ricos y no requerimos de tantos administradores como estamos formando.
"Necesitaríamos más ingenieros en alimentos, ingenieros civiles, profesionales que ayuden a construir caminos, producir alimentos, hacer criaderos de peces, cuidar bosques y reproducir ganado", aseguró Sosa.
Dijo que este problema no se debe sólo a la falta de planeación, sino a que se trata de naciones pobres, cuyas instituciones educativas tienen más facilidades de abrir "carreras baratas", como del área de Ciencias Sociales y Administración, que para funcionar no necesitan mas que de aulas y de una inversión mínima.
Además, añadió la representante, las instituciones de educación superior privadas han fomentado esta situación, porque con su crecimiento "explosivo" en los últimos 30 años, al pasar de 50 a 300 planteles, se han dedicado sobre todo a atender la demanda de ingreso a carreras saturadas en universidades públicas.
El otro factor que, indicó, influye para que los egresados no encuentren un empleo relacionado con su carrera, es que a veces carecen de herramientas elementales para trabajar, las cuales no adquieren en la universidad.
"Necesitamos estudiantes que tengan la capacidad de resolver problemas inmediatos, que puedan expresarse por escrito, que puedan resumir, que tengan capacidad de síntesis, que sepan escuchar y resolver problemas de oficina", agregó Sosa.
En riesgo, el prestigio de la UNAM
pero saldrá adelante
La huelga en la UNAM va a tener repercusiones en su prestigio internacional, pero no será motivo para que deje de atraer estudiantes latinoamericanos, opinó la especialista en educación superior, al señalar que una institución como esa no pierde su lugar por un conflicto estudiantil.
Magdalena Sosa consideró que pretender cerrar de manera definitva la máxima casa de estudios "sería una miopía política", porque esa institución representa un hito en la historia educativa de América Latina por muchas razones, entre otras, porque es la universidad más antigua del continente, la que cuenta con el mayor número de estudiantes y con una prestigiada labor de investigación, además de que recibe el mayor número de alumnos latinoamericanos.