n La semana política en Estados Unidos

n "El bipartidismo es una trampa, no habla por los olvidados"

n "Los impuestos deben cargarse a la élite global trasnacional"

n El declarante no es un ideólogo revolucionario, Ƒquién es?

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 30 de octubre n "Hoy, el candor nos obliga a admitir que nuestro elogiado sistema bipartidista es una trampa y una ilusión, un fraude sobre el país", declaró esta semana uno de los principales candidatos a la presidencia de Estados Unidos. "Nuestros dos partido se han convertido nada más que en dos alas de una misma ave de presa. Ninguno de los partidos habla a nombre de los estadunidenses olvidados cuyos empleos fueron trasladados al exterior para financiar el mercado en auge de los noventa que los demás disfrutan.

"Por el TLC y el GATT, la base industrial de America se ha vaciado. Nuestros trabajadores manufactureros se han quedado apoyando a familias con un solo salario y han sido obligados a competir con la mano de obra de los talleres de sudor, y nuestro país ha quedado dependiente de las importaciones para las necesidades vitales de su vida nacional. Tenemos que cortar estos déficits cancerosos y lograr que Estados Unidos se convierta de nuevo en una nación autosuficiente.

"Esta tierra es nuestra tierra. Nos pertenece a todos, tanto a los inmigrantes como a los nacidos aquí. Sería una ingratitud imperdonable si nosotros, los hijos de pioneros y patriotas de cada color, creencia y continente, perdemos esta ultima gran esperanza del mundo porque no pudimos aprender a vivir uno con el otro o aprender como querernos entre sí".

ƑPalabras revolucionarias? ?Será posible que diez años después de la caída del Muro de Berlín, la izquierda está logrando ocupar el centro del escenario de la política electoral estadunidense? ƑQuién es este atrevido?

"Nosotros los americanos somos un pueblo bueno y generoso", continuó el candidato presidencial conocido a nivel nacional ante más de 20 cámaras de televisión y un público de simpatizantes entusiasmados que interrumpieron con aplausos más de 30 veces durante el discurso de 15 minutos. "Nuestra tradición de ser los primeros en llegar a los sitios de las catástrofes naturales en cualquier parte del mundo, ofreciendo alimento y vivienda para las víctimas, tiene raíces profundas en nuestros corazones, esa gran tradición se mantendrá. Pero los rescates de dictadores por el FMI cesarán.

"En torno a al sistema tributario, este es un insulto a un pueblo libre; el producto de una serie interminable de acuerdos corruptos entre legisladores y cabilderos. Arranquemos a esta mala hierba desde su raíz, reducir los impuestos a los niveles más bajos de la historia, eliminar los impuestos sobre los ahorradores y los pequeños empresarios, y trasladar la carga adonde pertenece, sobre las espaldas de esa élite global transnacional que no tiene lealtad a ningún país".

El aparente "radical" no es otro que Pat Buchanan, y con este discurso fue con el que rompió con el Partido Republicano y declaró su intención de buscar la candidatura presidencial del Partido de Reforma (fundado por Ross Perot y cuyo político más reconocido hoy día es el gobernador de Minnesotta, Jesse Ventura). El ex redactor de discursos de Richard Nixon y luego asesor de Ronald Reagan señaló esta semana que estos temas podrán ser presentados más efectivamente ante el electorado fuera de los dos principales partidos políticos de este país.

Que no quede duda: Buchanan se encuentra a la extrema derecha de la política en Estados Unidos. Es el hombre que generó gran parte de la retórica de la guerra fría durante los últimos 30 años, que favorece un creciente fortalecimiento de aparato militar estadunidense, es enemigo a fondo de los derechos reproductivos de la mujer (y, ni hablar, del aborto), de los homosexuales y de todo que sea considerado como tema o personal "liberal". Más recientemente, escribió un libro argumentando que Estados Unidos cometió un error al entrar a la Segunda Guerra Mundial ya que Adolfo Hitler no representaba una amenaza a los intereses fundamentales de Estados Unidos en el mundo.

Pero, en la gran tradición de los líderes populistas, Buchanan ha incorporado gran parte de lo que a primera vista se considera una retórica de la izquierda. Es el único candidato presidencial que se atreve a hablar explícitamente sobre los trabajadores y los pobres (los otros, como en México, se limitan a hablar sobre "ciudadanos"). Su mensaje, como se manifiesta en las selecciones antes citadas, resulta atractivo para miles de trabajadores, entre ellos los que trabajan en transporte o los siderúrgicos, por lo que Buchanan se beneficia con el apoyo de líderes de secciones sindicales en varios estados (mientras que la cúpula sindical ha apoyado la campaña del demócrata Al Gore).

Buchanan no ganará la presidencia. Sin embargo, la presencia de una figura política nacional que en dos ocasiones anteriores fue precandidato presidencial de los republicanos, tendrá un impacto. Cabe recordar que su presencia durante la última contienda electoral para la Casa Blanca obligó al entonces candidato republicano Bob Dole a apoyar posiciones que no eran suyas; entre ellas la promoción de la propuesta 187 antinmigrante y la construcción de muros en la frontera con México.

Por lo tanto, su jugada con el Partido de Reforma permitirá que su presencia en esta competencia se extienda por lo menos hasta el verano del año 2000 (cuando el partido celebra su convención para nombrar a su candidato) y posiblemente hasta el mismo día de las elecciones en noviembre del 2000.

Esta es una de las razones por las que Buchanan decide cambiar partidos, ya que considera que los enormes recursos del candidato republicano George W. Bush y el calendario de elecciones primarias casi garantiza que el gobernador de Texas será el candidato nacional del Partido Republicano. Además, si los rumores resultan ser ciertos, Buchanan podría contar con el apoyo de Perot, y esto implica que los recursos del multimillonario texano podrían abrir un amplio campo en el escenario político nacional para Buchanan (ya que aquí, el dinero es la clave para todo esfuerzo político real).

Así, el mensaje de Buchanan podría influir a lo largo de esta temporada política, con implicaciones potencialmente serias tanto para los republicanos como para los demócratas. Aguas.