Ť Inauguran en Washington la reunión del Grupo de Contacto de Alto Nivel
Confianza mutua en la lucha antidrogas: Green y McCaffrey
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 9 de noviembre Ť La cooperación en torno a un enfoque "integral" de la lucha bilateral contra las drogas ha dejado "un legado" de confianza, y bases para fortalecer el esfuerzo contra el enemigo común que enfrentan México y Estados Unidos, consideraron la canciller Rosario Green y el zar antinarcóticos de la Casa Blanca, Barry McCaffrey, al inaugurar la octava reunión del llamado Grupo de Contacto de Alto Nivel (GCAN).
Green reafirmó la disposición mexicana "para continuar cooperando con el gobierno de Estados Unidos, a fin de fortalecer nuestro combate contra el enemigo común: las organizaciones criminales que en ambos países se dedican a lucrar ilícitamente, a corromper instituciones, y a sembrar violencia y destrucción". En este contexto, señaló la aportación del GCAN para fortalecer este esfuerzo "sobre bases de corresponsabilidad e integridad, así como de respeto a la soberanía y la jurisdicción de cada país".
Afirmó que el GCAN ha permitido mantener la comunicación "aun en aquellos momentos críticos en los cuales se ha puesto a prueba nuestra capacidad de interlocucion y nuestro compromiso para seguir luchando juntos contra este flagelo", algo diferente a lo que ocurría antes en la relación.
"El GCAN aporta una herencia insoslayable: nuestro diálogo y nuestra interacción nos han habituado a corresponsabilizarnos frente al problema del narcotráfi- co. Hoy contamos, por primera vez, con un enfoque integral, a través del cual todos los aspectos del fenómeno reciben una atención adecuada, permitiéndonos dejar atrás el falso dilema de si debemos dar prioridad al combate de la oferta o al de la demanda de las drogas ilícitas", afirmó Green.
La canciller mexicana presentó dos propuestas generales: la promoción del Mecanismo de Evaluación Multilateral aprobado por los países del mundo para evaluar mutuamente su desempeño contra la droga, y la adopción de una Agenda 2000 entre ambos países, que finque compromisos y consolide los logros del GCAN, así como institucionalizarlo.
McCaffrey destacó por su parte la evolución de una interacción de alto nivel entre ambos gobiernos, que ha resultado en la posibilidad de abordar "asuntos concretos" de forma conjunta, crear una estrategia común y establecer mecanismos concretos para llevarla a cabo. Indicó que hay cambios recientes en los patrones de consumo en ambos países, particularmente en la zona fronteriza, la cual tendrá prioridad en los programas comunes.
Para Janet Reno, el reto clave para los asuntos policiacos es el futuro inmediato, en donde el crimen borra fronteras al intensificarse el uso del espacio cibernético. Por lo tanto, señaló que ambos países deberían trabajar de una forma conjunta más intensa. "México y Estados Unidos deberían sentar un ejemplo al establecer procedimientos claros de extradición... los cuales eliminarán la confusión y el conflicto", señaló Reno. También habló de nuevos desafíos, como el del carácter de las órdenes de cateo para información cibernética, así como toda una serie de nuevos problemas que representa la nueva tecnología en manos de criminales en ambos lados de la frontera.
Con estas palabras algo ambiguas, se inició la sesión plenaria del GCAN, después de sesiones de diversos grupos de trabajo en la primera mitad del día. Las delegaciones emitirán un comunicado conjunto mañana.
La delegación mexicana al GCAN encabezada por Green incluye al titular de la PGR, Jorge Madrazo; al subsecretario de Relaciones Exteriores Juan Rebolledo; el embajador Jesús Reyes Heroles; el zar antidrogas de México, Mariano Herrán; el subprocurador Eduardo Ibarrola, entre otros. La delegación estadunidense está encabezada por McCaffrey, e incluye a la procuradora general Janet Reno; el secretario asistente de Estado, Randy Beers; el embajador estadunidense en México, Jeffrey Davidow, y el ex general Wesley Clark, quien ahora trabaja para el Departamento de Salud, entre otros.