Ť Fueron sepultados los restos de Timerman
Hospitalizan a Fernando de la Rúa por un problema pulmonar
Stella Calloni, corresponsal, Buenos Aires, 12 de noviembre Ť Imprevistamente el presidente electo, Fernando de la Rúa, debió ser internado hoy por un problema pulmonar, pero su estado no reviste ninguna gravedad, de acuerdo con el reporte de los médicos que lo atienden.
A De la Rúa, que pocas horas antes había declarado huésped ilustre al secretario general de la Organización de Estados Americanos, el colombiano César Gaviria, quien se encuentra en Argentina, se le detectó un neumotorax expontáneo del pulmón derecho, que fue drenado y permanecerá unos días hospitalizado para obser- vación hasta su total recuperación.
La inquietud por el episodio obligó a la dirigencia política a pronunciar declaraciones tranquilizadoras a la nación.
"Esto mal interpretado puede generar intranquilidad, por eso aprovecho para decirle a la opinión pública que todo está bien", dijo el vicepresidente electo, Carlos Alvarez, sucesor natural ante cualquier impedimento del presidente.
El hecho se produjo en un momento muy tenso de la vida política argentina y a menos de un mes de la asunción presidencial que será el 10 de diciembre, y cuando se llevan adelante una serie de reuniones para tratar de realizar una transición ordenada, en el marco de la fuerte crisis económico-social que heredará De la Rúa al culminar el mandato de Carlos Saúl Menem.
Los datos logrados por las comisiones que actúan en distintas áreas y los hechos de la realidad están demostrando que hay muchos rojos en la administración menemista, que la corrupción --que aparece en todos los niveles-- dejará huellas muy profundas y que las cuentas no cierran, mientras se prevé una vertiginosa alza del déficit fiscal, que podría llegar rápidamente a los 10 mil millones de dólares al comenzar el nuevo siglo, lo que contradice el triunfal discurso del gobierno actual.
Este día, Chacho Alvarez informó que poco después de la asunción de De la Rúa enviará a la justicia las investigaciones que realizó sobre varios funcionarios de la administración Menem.
Mientras tanto, los gobernadores provinciales más importantes del país señalaron que ninguno de esos estados está en condiciones de soportar un ajuste, pero a sabiendas de la situación varios de ellos admiten que cualquier recorte de fondos que los afecte deberá producirse en un acto de solidaridad entre la nación y las provincias.
Los dirigentes de la Alianza, por otro lado, dejaron abierta la posibilidad de impugnar el nombramiento del ex ministro de Justicia Rodolfo Barra como auditor general de la nación, designado por Menem.
Alvarez admitió que pudiera plantearse una acción judicial contra Barra por presunta incompatibilidad a causa de su participación en el proceso de privatizaciones de la administración menemista, muchas de ellas muy oscuras.
En tanto, miles de ciudadanos se han organizado para solicitar que el ex coronel Aldo Rico --que intentó dos golpes de Estado contra Raúl Alfonsín-- no sea nombrado en Seguridad de la provincia de Buenos Aires, y menos todavía tras de las acusaciones de la Dirección de Impuesto que puso en evidencia la enorme corrupción y evasión impositiva en el entorno del ex militar carapintada, donde incluso figura su esposa Noemí Crocco.
Los mismo sucede con el caso del ex general represor Domingo Antonio Bussi, cuya extradición fue pedida por el magistrado español Baltasar Garzón, junto con otros 97 militares por casos de genocidio, terrorismo de Estado y torturas, entre otros, y a quien nadie está dispuesto a aceptar como diputado.
Por otra parte, dirigentes políticos y periodísticos asistieron al sepelio de Jacobo Timerman, ex director del diario La Opinión. Timerman, quien murió ayer de un infarto, fue una de las víctimas de la pasada dictadura militar.
Secuestrado a principios de los años 77 y torturado por uno de los mayores responsables de violaciones contra los derechos humanos en ese entonces, el general Ramón Camps, fue mantenido en distintos campos de concentración, y en 1979 la dictadura le expropió todos sus bienes.
Desde esos años llevó adelante una campaña de denuncias contra los dictadores, que nunca terminó. Polémico e incansable, describió su propia tragedia y las que vio a su alrededor en el libro Preso sin nombre, celda sin número, en el que narró los mecanismos perversos de la dictadura.
Mientras, la periodista Olga Wornat, autora de un libro crítico, Menem, la vida privada, sobre los 10 años de gobierno del presidente justicialista, denunció este viernes que fue amenazada de muerte por dos desconocidos que abordaron el taxi en que viajaba anoche.