* El presidente Zedillo y el gobernador de Coahuila encabezan la inauguración


Museo del Desierto, un espacio que recreará la historia y los ecosistemas del clima árido

* Se trata de un proyecto para fomentar el respeto por ese hábitat, dijo su directora

* El recinto ofrecerá a los visitantes aspectos interactivos y exhibirá algunas especies vivas

Aspecto del museo que incorpora adelantos de la tecnolog’a para su funcionamiento Antonio Pérez Cardona, corresponsal, Saltillo, Coah., 24 de noviembre * Concebido hace cinco años y realizado con la participación de los gobiernos federal y estatal, empresas privadas, instituciones nacionales e internacionales, así como muchos ciudadanos particulares, este jueves se inaugura aquí el Museo del Desierto, un espacio en el que se recrearán la historia, las formas de vida y los ecosistemas de las zonas áridas y semiáridas del norte del país y de otras regiones semejantes del mundo.

El conjunto museográfico -de 3.2 hectáreas y en el que se invirtieron 120 millones de pesos- se asienta sobre una pequeña loma natural que emerge en el parque ecológico Las Maravillas, integrante a su vez de otro complejo urbano más amplio: el Centro Metropolitano (MET), a tan sólo cinco kilómetros al este del centro de la ciudad, en un predio que hasta hace algunos años tenía una plusvalía muy reducida. De hecho, está rodeado de colonias populares.

El edificio principal del recinto que hoy fue abierto y mostrado a la prensa, consta de cuatro pabellones cuyo recorrido se efectúa en aproximadamente hora y media. Es, en gran parte, interactivo y tiene todo el apoyo de los recursos audiovisuales modernos. Además, en algunas de sus áreas se exhiben especies vivas -de la flora y la fauna del desierto- para las cuales se creó su hábitat natural.

 

Exhibición por pabellones

 

El desierto viviente es como se denomina al Pabellón I y presenta las diferentes eras geológicas en el transcurso de la formación de la Tierra, así como el surgimiento, la evolución, los rasgos y las características del desierto.

En esta parte destaca el área donde se exhiben los esqueletos de tres dinosaurios: el tiranosaurio Rex, el Quetzalcoatlus (volador) y un hadrosaurio. Los dos primeros son artificiales y el tercero está reconstruido con base en los restos fósiles encontrados en la zona paleontológica ubicada 45 kilómetros al poniente de Saltillo, a un lado de la carretera a Torreón.

En el Pabellón II, El hombre y el desierto, se trata el tema de los grupos nómadas que habitaron en la región hace 12 mil años; la época de la Conquista, la colonización del noreste de México, las formas de vida de las tribus, los usos de la tierra y los oficios, así como los utensilios empleados en ese tiempo.

Asimismo, reproducciones de pinturas rupestres originales encontradas en los municipios de General Cepeda y Zaragoza, son parte preponderante del ornamento en el Museo del Desierto.

La fauna de la región se muestra en el Pabellón III, Mamíferos del desierto, así como las relaciones de interdependencia entre las especies. Ahí se recrean madrigueras naturales de animales como el armadillo, la rata canguro y la víbora de cascabel, entre otros, y las cuevas de los murciélagos.

El Pabellón IV, denominado Ecosistemas del desierto chihuahuense -que abarca Coahuila, Chihuahua, Zacatecas y Tamaulipas- está destinado a la flora. Casi mil especies, principalmente cactáceas, se exhiben allí.

De los especímenes vivos en el museo, destacan dos colonias: una de hormigas ''arrieras" y otra de ''perritos de la pradera", protegidas con cristales por medio de los cuales pueden ser observadas por los visitantes.

El presidente Ernesto Zedillo y el gobernador Rogelio Montemayor Seguy inaugurarán este jueves el museo, que estará a cargo de la fundación Amigos del Desierto de Coahuila, AC. Y dentro de dos días estará abierto al público, de martes a domingo, de 10:00 a 18:00 horas. El acceso tendrá un costo de 20 pesos para adultos y 15 pesos los niños, personas de la tercera edad y discapacitados.

 

La riqueza de la vida

 

''Se trata de un proyecto cuya misión es fomentar la valoración y el respeto hacia el desierto, al mostrar la riqueza de vida, historia y cultura que en él se han gestado", definió la directora de la naciente institución, Magdalena Sofía Cárdenas García.

Refirió que la conceptualización del museo comenzó hace más de cinco años, ''al conocerse los primeros hallazgos paleontológicos en nuestra entidad" y su realización ''significó el esfuerzo y dedicación de un importante grupo de especialistas en las áreas de paleontología, geología, historia, biología, arqueología, antropología y museografía", así como la participación decidida de ciudadanos, empresas privadas e instituciones de educación superior.

Entre los donantes están Daimler-Chrysler de México, Industrias Peñoles, Altos Hornos de México, Grupo Domo, Grupo Vitro, Teksid-Quimmco, Cementos Apasco, Embotelladora El Carmen, Universidad Autónoma de Coahuila, Monolite, Grupo Industrial Saltillo, Cemex, Grupo Libra, y ''aproximadamente mil ciudadanos coahuilenses".

Asimismo hubo personas, empresas o instituciones que aparte de donaciones económicas o en especie, entregaron al museo sus propios objetos de colección, como Grupo Minar, Micare, Industrial Minera México, Química del Rey, Ferronales, Profepa, familias Morales Arzuaga, Arzuaga Osuna y Gutiérrez Arzuaga, entre otras.

La firma Museotec se encargó de la realización del anteproyecto arquitectónico conceptual del Museo del Desierto, en tanto que el despacho Margen Rojo asumió el proyecto ejecutivo museográfico, indicó Cárdenas García, quien destacó también la colaboración especial brindada por instituciones nacionales e internacionales como British Broadcast Company, el Instituto Nacional de Antropología e Historia, el Natural History Exhibit Hall, la NHK Televisión Japonesa, el Instituto de Tecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México, MVS Multivisión y el Denver Museum of Natural History.