* Acuerdo durante su octavo congreso


Emplaza la sección 9 del SNTE a Blanca Luna para que retorne

* De no regresar, los profesores pedirán la renuncia de la líder

Claudia Herrera Beltrán * Profesores reunidos en el octavo congreso de la sección nueve del SNTE emplazaron a su secretaria general, Blanca Luna, a que en cinco días regrese al local sindical y reconozca las instancias del "movimiento democrático", porque de lo contrario anunciaron que le pedirán su renuncia y si no lo hace, advirtieron que iniciarán el proceso de su destitución.

Apenas hace unos meses lucharon por el reconocimiento de su comité ejecutivo y hasta enfrentaron el encarcelamiento; sin embargo, los maestros de la novena ahora buscan desconocer a su dirigente, aunque en la reunión de ayer, las posiciones conciliadoras comenzaron a ganar terreno ante la crisis que podría provocar el desconocimiento de la lideresa sindical.

Sin la presencia de Luna Becerril y con una mediana participación en el mencionado congreso, los profesores también determinaron que quienes militen en Fracciones Democráticas ųexpresión que vinculan con el sector institucionalų tendrán que retirarse de las instancias representativas, porque son "colaboracionistas de los charros".

A cuatro días de que Luna Becerril abandonó el local sindical, por considerar que estaba en riesgo su integridad física, y de que denunció corrupción y nepotismo de algunos miembros de los sectores que se dicen "democráticos", los maestros le hicieron un "enérgico llamado" a que regrese de su "autoexilio" y que respete las instancias internas de dirección, lo que implica que se deslinde de cualquier nexo con la corriente institucional.

 

Dominio del sector ultra

 

Con ello, el conflicto en la sección nueve, en la cual aglutina a más de 58 mil profesores de preprimaria y primaria del Distrito Federal, tiene visos de una salida, en la que pesa más la postura conocida como ultra, que pugna por la destitución de la profesora, pero que reconoce las dificultades legales para alcanzar este objetivo.

Aunque el acto se realizó para discutir varios temas, el central fue el de la destitución de Luna Becerril, quien se encuentra "bajo sospecha" de tener nexos con Fracciones Democráticas, de ser considerada "colaboradora" del sector institucional y es señalada por no acatar los mandatos de las llamadas "instancias democráticas".

Ante la propuesta de expulsar a simpatizantes de Fracciones Democráticas, un grupo de profesores defendió el derecho a la libre militancia y, en voz de la profesora Nora Contreras, criticó que un "movimiento democrático" recurra a prácticas de exclusión.

Lo mismo señaló la profesora Esther Tapia, quien explicó que quienes integran el comité ejecutivo llegaron a ese puestos porque fueron elegidos por los maestros y "no por el dedazo de algún grupo".

Asimismo, consideró que las posiciones excluyentes violentan los principios del movimiento democrático. Y se preguntó por qué cuando los profesores acusados de pertenecer a Fracciones Democráticas apoyan al Partido de la Revolución Democrática entonces sí se les considera del movimiento democrático.

Sin embargo, los grupos que han predominado en los últimos 10 años en la novena se valieron de la "aplanadora". Juan Calvo, de la Red de Maestros Democráticos, se pronunció por exigir el regreso de Luna Becerril al local sindical (pues ahora labora temporalmente en la Universidad Obrera de México) y por que se comprometa a expresar su "respeto a la voluntad de las bases".

En el mismo sentido, Pedro Hernández, del Colectivo Magisterial Independiente (expresión hegemónica), se pronunció y fue lo que terminó por aceptarse. En el caso de Fracciones Democráticas se determinó que no tienen cabida en la novena, pues hace años así lo determinó la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.

Mientras tanto, maestros entrevistados sobre este conflicto, y que están al margen de la actividad sindical, criticaron que después de 10 años de la llegada de "los democráticos", éstos no hayan superado sus conflictos internos y se quejaron de que existen muchas corrientes que se preocupan más por el poder que por ayudar a los profesores.

Silvia Rodríguez, profesora de la primaria Miguel Serrano y quien cuenta con 25 años de experiencia, indicó que además de los obstáculos que pone la SEP y el SNTE a la novena por tratarse de una sección crítica del gobierno, existen problemas internos entre los dirigentes.

Comentó que en su escuela ningún representante sindical les ha preguntado a los profesores si están a favor o no de destituir a Luna Becerril; sin embargo, se pronunció porque antes de "pelearse por puestos políticos, los líderes piensen más en nosotros que somos las bases y que por desgracia siempre somos los más desprotegidos".

Beatriz García, con 28 años en el magisterio, dijo que desde hace mucho tiempo no acude a hacer trámites al local sindical, debido a que hay mucha desorganización, "el edificio está descuidado" y ve muy debilitados a los dirigentes sindicales.

Explicó que desde que estudió la carrera magisterial sabía que su salario iba a ser bajo, y aun así decidió aceptarlo, pero cuando se percató de que ni institucionales ni democráticos representaban bien sus intereses, se desilusionó porque se dio cuenta que "nunca van a conseguir un mejor sueldo para los maestros".