Ť No logra concretarse la compra de terrenos

Sin reubicar aún, más de mil desplazados por fallas geológicas

Ť Son afectados de las sierras Norte y Negra de Puebla

La Jornada de Oriente, Puebla, Pue., 5 de diciembre Ť A más de un mes de que 220 familias de cinco municipios fueron desalojadas de sus comunidades y colonias ante el peligro de hundimientos de tierra y derrumbes provocados por fallas geológicas, los más de mil desplazados no han sido reubicados por las autoridades, porque aún no se concreta la compra de terrenos para edificar sus nuevos hogares. Los afectados son originarios de los municipios Zapotitlán Salinas, Ajalpan, Tlacotepec de Porfirio Díaz, Chiconcuautla e Ixtepec, ubicados en las sierras Norte y Negra de Puebla.

En Ajalpan, en la Sierra Negra, durante los últimos días de octubre, más de 76 familias tuvieron que desalojar el primer cuadro de la comunidad Cinco Señores, porque se empezaron a presentar grietas en la superficie del suelo que pusieron en riesgo de colapso edificios públicos, casas y comercios, informó el inspector municipal Eligio Cortés Adán. Precisó que casi 500 personas se refugiaron con amigos o familiares en los barrios Ocotla y Mejada, pues no se habilitaron albergues "por falta de presupuesto".

Expuso que ya hay molestia entre los afectados, porque no ven celeridad en la compra del terreno donde se les reubicará. "Ya vimos unas tierras que están muy cerca de Ocotla, pero el dueño quiere mucho dinero; se quiere aprovechar de la situación y aunque el gobierno estatal nos apoya, él no quiere ceder".

Cortés Adán añadió que la vida en Cinco Señores se ha alterado debido a la evacuación. "Hay quienes ya se piensan ir a trabajar a Tehuacán, porque se empiezan a desesperar"; sin embargo, aclaró que "no hay que decir que todo el pueblo está deshabitado; sólo es el centro, en donde nadie vive y se desalojó a a casi 500 personas"

Otro lugar de la Sierra Negra que registró grietas y hundimientos fue la colonia Miguel Hidalgo, del municipio de Zapotitlán Salinas, y que provocó la salida de 400 personas. En un principio los desplazados buscaron refugio en un albergue habilitado por las autoridades en la junta auxiliar de San Pablo Nelatitlán, pero en los últimos 15 días "los albergues dejaron de funcionar, debido a que las familias que allí se atendían decidieron reubicarse con familiares o amigos en casas abandonadas, fuera de la zona de riesgo", informó el secretario del ayuntamiento, Agustín Espinoza Chavarría.

Todo se hunde

Según el alcalde Guillermo Pacheco Osorio, la Miguel Hidalgo tiene todas las características de un "pueblo fantasma" y reconoció que no existen muchas posibilidades de que "el pueblo se salve, pues todo se está hundiendo". El gobierno estatal, encabezado por Melquiades Morales Flores, inició el pasado sábado el proceso para regularizar un terreno ejidal en la inspectoría de Estanzuela, a fin de reubicar a las 60 familias que fueron evacuadas. El terreno es de tres hectáreas y cuesta 150 mil pesos.

De otra parte, el jefe de operaciones del Sistema Estatal de Protección Civil, Ignacio Macías, dio a conocer que en la población de Obatero, municipio de Tlacotepec de Porfirio Díaz, fueron desalojadas 25 familias ante el peligro de que se despeñe una enorme piedra que se encuentra en la punta de un cerro. Aclaró que los afectados viven con sus familiares y no hubo necesidad de instalar un albergue. El funcionario dijo que investigadores de Cenapred y Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) tr abajan en la zona, y advirtió sobre la necesaria reubicación de los pobladores.

A su vez, en Chiconcuautla (Sierra Norte) el principal problema se ubica en la comunidad de Patzoquitla, en donde el desgajamiento de un cerro provocó la destrucción de un centenar de casas. Otras 140 están en peligro de venirse abajo por las grietas que hay en el cerro, según un informe del área de Riesgos Hidrometeorológicos del Cenapred.

Conrado Nicolás Cázares, policía municipal, indicó que alrededor de 62 familias de Patzoquitla tuvieron que ser evacuadas a mediados de octubre, luego de que las lluvias provocaran el deslave. Pero las cuarteaduras y grietas del cerro alertan sobre el riesgo de más derrumbes en la zona, agregó.

Dijo desconocer el avance para la adquisición de terrenos destinados a la reubicación de las familias afectadas.

En la cabecera municipal de Ixtepec, cerca de 10 familias tuvieron que ser evacuadas por el peligro de fallas geológicas. Juan Manuel Ortiz Robles, presidente de la Asociación Serrana de Productores Agrícolas, informó a este diario que las autoridades municipales planean reubicar a los damnificados en terrenos fuera del primer cuadro.