* Aumenta el escándalo del lavado a cárteles mexicanos
Rechaza Menem que Argentina esté convertido en paraíso fiscal
* La Alianza opositora podría investigar al Banco Central
* EU pretende reclamar el dinero, más allá de su origen: analistas
Stella Calloni, corresponsal, I/ Buenos Aires, 5 de diciembre * El escándalo del lavado de dinero proveniente del narcotráfico en Argentina envuelve además a otros países, como Estados Unidos y México, mientras se especula que el paraíso fiscal de las Islas Caimán podría revelar secretos y hundir a más de un funcionario del saliente gobierno de Carlos Menem.
La denuncia del titular del equipo de transición en temas de control de drogas de la Alianza (coalición de la socialdemócrata Unión Cívica Radical y el centroizquierdista Frepaso, que tomará el poder el próximo viernes), el radical Gastón Ortiz Maldonado, sobre el lavado de unos mil 300 millones de dólares, llevaron al gobierno de Menem a negar la víspera que Argentina sea un paraíso fiscal.
"Las cifras que se manejan muestran que se está ante la punta del iceberg que va a demostrar que Argentina es un punto mucho más importante del lavado de dinero que lo que se supone", sostiene en cambio Ortiz Maldonado.
La polémica en torno al dinero del narcotráfico surge de las investigaciones que realiza el juez federal Rodolfo Canicoba Corral, con relación a fondos presuntamente del mexicano cártel de Juárez, lavados por una empresa financiera local allanada la semana pasada.
Algunos analistas, citando fuentes judiciales de Mar del Plata, donde está abierta una causa que involucraría a funcionarios mexicanos, han advertido que aquí se esconde una pelea por el dinero, ya que Estados Unidos se presentaría en esta misma causa para reclamar la restitución de las sumas proveniente del lavado. "Más allá del origen de esa plata, acá están tratando de mexicanear a los mexicanos, en una lucha que paradójicamente tiene por escenario los tribunales marplatenses", dijo la fuente. En el lenguaje local del delito, mexicanear es robar a los ladrones, o apropiarse de mercaderías de otros, y eso es lo que estaría tratando de hacer Estados Unidos aquí.
Aunque se mencionó el nombre de un empresario mexicano, Francisco Mora Guerrero, como dueño de una finca y maquinarias agrícolas en Mar del Plata, al parecer éste no figura en los papeles de las propiedades, una de ellas objeto de una batalla judicial por su posesión.
Por otra parte, continúa la versión sobre millonarias inversiones de dinero de Amado Carrillo en negocios inmobiliarios en esta capital, pero poco se habla de lo que puede vincularlo a otras provincias como Mendoza, donde se ubica el eje de otra movida de dinero que tiene en su centro al ahora prófugo banquero Raúl Moneta, considerado también un testaferro de Menem.
En este escándalo por la operación adjudicada al cártel de Juárez, la Alianza advirtió que también podría pedir que se investigue al presidente del Banco Central, Pedro Pou, por su presunta falta de colaboración para detectar operaciones sospechosas. En este sentido, Ortiz Maldonado destacó que el Banco Central nunca presentó un informe sobre los casos sospechosos.
Previamente, diputados de la Alianza buscaban demandar a Pou porque las fallas en los controles del Banco Central habrían llevado a las caídas fraudulentas de varios bancos.
Curiosamente, cuando todo esto sucedía aquí, el ministro del Interior, Carlos Corach, era quien elevaba la voz en reuniones internacionales para la formación de organismos contra "el narcotráfico y el terrorismo", convirtiéndose en "el hombre" de Washington para presionar al ingreso de otros países de América Latina a esos mecanismos que se intenta crear a espaldas de los Congresos.
Cuando falta menos de una semana para la asunción a la presidencia de Fernando de la Rúa, repentinamente todos los juzgados están activados y Menem sigue firmando decretos, entre ellos uno que trataría de amparar a Pou, poniéndo a salvo de cualquier revisión judicial las "decisiones de la autoridad monetaria".
Pero hasta en documentos de la Secretaría de Prevención y Lucha contra el Narcotráfico se advierte que no existe un mecanismo adecuado de control del lavado de dinero, en un país donde se mueven 200 mil millones de dólares al año.
Investigación muestra negligencia
Una investigación del matutino Clarín reveló que en1998 la Policía Federal informó sobre unos 5 mil millones que llegarían desde Paraguay para ser lavados, pero nada se hizo al respecto. En 1993 el Departamento de Estado estadunidense sostuvo en un informe que los cárteles de Cali y Medellín realizaban operaciones financieras directas o indirectas en Argentina.
Según Clarín, un agente de Inteligencia estadunidense dijo que "así como Amado Carrillo decidió lavar plata sucia en Argentina, creemos que hay otros casos y esto nos preocupa". En 1999 la CIA también habría advertido que Argentina es un país "preocupante".
Precisamente la dolarización argentina que impulsaba contra viento y marea Pedro Pou agravaría la situación, " si no se aprueba la ley contra el lavado".
Siempre según Clarín, existe "una fuerte molestia" en los medios de inteligencia de Estados Unidos por la forma en que manejó el director de Interpol de México, Juan Miguel Ponce Edmonson, el tema, adelantando información "cuando el caso aún no está cerrado. Comprometen un trabajo que ha implicado muchos esfuerzos y ahora hay sospechosos que se van a dar por avisados y se fugarán".
Incluso se estima que si todo esto se hizo para presionar a Argentina para firmar la ley anti-lavado, "lo hicieron en detrimento de la investigación que estaba en marcha". Según la acusación mexicana, los 25 millones de dólares lavados por el cártel de Juárez en Argentina habrían sido enviados aquí mediante el Citibank de Nueva York.
Por lo pronto, esta complicada trama de corrupción que se destapa a pocos días de la salida de Menem da una idea de la magnitud del problema de corrupción que heredará el gobierno de Fernando de la Rúa.