* Informe Estado mundial de la infancia 2000
Unicef: los 90, un decenio de hostilidad contra mujeres y niños
* Violencia y pobreza, trabas al desarrollo de la humanidad
Cuando falta un año para que se cumpla el plazo que 71 países en el mundo se fijaron durante la Cumbre Mundial a Favor de la Infancia para cumplir 27 objetivos en pro de los niños ųentre ellos la reducción en las tasas de mortalidad, desnutrición y analfabetismoų, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) considera que, a pesar de los logros obtenidos, "este ha sido un decenio de hostilidades no declaradas contra las mujeres, los adolescentes y los niños".
A través del informe Estado mundial de la infancia 2000, que será presentado este día en Alemania, el organismo mundial identifica en la pobreza, el sida, los conflictos armados y la violencia, así como la discriminación por razones de género, los cinco principales obstáculos para el desarrollo de la humanidad en general, pero en particular de los niños, y también de la población femenina porque, argumenta, "cuando los derechos de la mujer están amenazados, también lo están los derechos del niño".
Unicef reconoce que si bien actualmente existen miles de niños nacidos de madres saludables, bien alimentados, inmunizados y que acuden a la escuela, "no todos han disfrutado los frutos del progreso", y como prueba de ello afirma que 600 millones de infantes viven en la pobreza.
"Cada día que los países dejan de satisfacer sus obligaciones morales y políticas para dar vigencia a los derechos del niño, hay 30 mil 500 menores de cinco años que pierden la vida por causas susceptibles de previsión", asienta. Además, alrededor de 300 millones niños de entre cinco y 14 años trabajan en los países en desarrollo, la quinta parte de ellos en condiciones peligrosas.
Aunado a ello, niños y mujeres constituyen el principal blanco de los conflictos armados y la violencia, como lo demuestra el hecho de que en la última década 2 millones de infantes fueron asesinados y 6 millones más sufrieron lesiones o quedaron discapacitados por dichos motivos.
En torno a la propagación del sida, Unicef asevera que diariamente 8 mil 500 niños y jóvenes contraen el VIH, y que "por cada mes que se aplaza una campaña para frenar la pandemia, se contagian 250 mil".
El año pasado el virus ocasionó la muerte de 900 mil mujeres, lo que representa el triple de las víctimas que cobró la guerra en Bosnia, y Africa, más que ninguna otra región del planeta, demuestra los estragos de la enfermedad: ahí murieron 2 millones de personas durante 1998, diez veces más de los muertos provocados por los conflictos que azotaron el continente.
La investigación de Unicef dedica especial atención a los problemas de discriminación por género, "tan arraigada en las normas sociales que pasa inadvertida", al alertar que "desde el momento en que la niña es concebida, sus derechos están en peligro", y sostiene que de no existir tal problema, hoy estarían vivas 60 millones de "mujeres desaparecidas".
Refiere que el problema se agudiza en Asia Oriental. Así, cita que el feticidio se ha convertido en una constante en 29 de los 32 estados de la India, porque las embarazadas pobres recurren a itinerantes médicos, supuestos especialistas en sonograma, "preocupadas por el futuro costo de la dote de una hija", y con ello la relación natural de nacimientos que existía de cien niños por cada 103 niñas se ha modificado, porque ahora sólo nacen 60 niñas por cada centenar de varones.
Aún así, anualmente nacen millones de niñas asiáticas en la pobreza que posteriormente son prostituidas o trabajan en fábricas en condiciones de semiesclavitud, obligadas por sus propios padres para saldar sus deudas.
El informe hace hincapié en la responsabilidad que las autoridades de cada país tienen para brindar "sólida base de servicios sociales" a toda la población, y enfrentar de esta manera los problemas que atentan contra la vida y seguridad de los pequeños.
Agrega que para alcanzar un progreso sostenido y estable resulta fundamental el acceso a los servicios básicos de salud, educación, planificación familiar, abastecimiento de agua y saneamiento. Con 80 mil millones de dólares "el mundo podría garantizar el acceso a los servicios básicos para todos", manifiesta.
Y en tal sentido denuncia que de 27 países en desarrollo que fueron estudiados, sólo cinco ųBelice, Burkina Faso, Namibia, Níger y Ugandaų cumplen con la Iniciativa 20/20, referida a que 20 por ciento de su presupuesto es destinado a los servicios básicos.
Pero al mismo tiempo, el fondo mundial destaca que en pro del bienestar de los niños se requiere contar con la voluntad política y un compromiso inquebrantable en todos los planos de la acción social, que sobrepasen sectores y estructuras gubernamentales, así como relaciones de poder tradicionales.
Por tal motivo, Unicef hace un llamado a gobiernos, sociedad civil, iniciativa privada, familias, niños y adolescentes en general a unirse en "una nueva coalición internacional a favor de la infancia", para que reafirmen su compromiso de conquistar plenamente las metas de la cumbre "antes de fines del primer decenio del próximo milenio".
Con este nuevo exhorto, los objetivos que decenas de gobiernos del mundo se comprometieron a alcanzar para el año 2000 se prorrogan para ser cumplidos durante la primera década del próximo siglo, la cual ya ha sido declarada por la Organización de Naciones Unidas como Decenio internacional por una cultura de paz y no violencia para los niños del mundo.
Unicef confía en que la conformación de una alianza internacional a favor de los niños contribuirá a "romper" en el lapso de una sola generación las pautas de la pobreza, discriminación, violencia y enfermedad que persisten y se han transmitido periódicamente entre la población.
Para ello, establece que "las pautas de pobreza pueden ser eliminadas cuando los pobres tengan los medios y la oportunidad de disfrutar de buena salud, estar suficientemente nutridos y disponer de educación y aptitudes suficientes, a fin de participar plenamente en las decisiones que afectan sus vidas". (Susana González G.)