Ť Jorge Rodríguez y Rodríguez rindió su último informe de labores
En el TSJDF no hay jueces de consigna ni intereses partidistas
Ť Inusitada presencia de funcionarios federales y locales Ť Pensiones alimenticias, el logro mayor
Ricardo Olayo Ť El presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF), Jorge Rodríguez y Rodríguez, rindió ayer su último informe de labores con la presencia, como nunca antes, de funcionarios federales y locales de primer nivel. En la ceremonia, el magistrado dijo que no hay jueces de consigna y que la aplicación de la ley de cada juzgador no responde a intereses de partido.
En unos días el funcionario judicial será sustituido de su cargo luego de cuatro años y medio de gestión, durante los cuales se reportó un incremento salarial generalizado, que en el caso del personal más modesto significó más de 300 por ciento.
En ese lapso aumentó la planta de trabajadores, la adquisición de edificios --con la ayuda de los gobierno local y federal-- y se hizo realidad la utilización de computadoras en los juzgados, todo ello con el objetivo de dignificar la labor de éste que, dijo, es un órgano de gobierno, pero debería conformarse como el Poder Judicial del Distrito Federal.
Para referirse a las sombras de duda por la existencia de jueces de consigna y de las supuestas presiones de la Procuraduría General de Justicia capitalina para orientar resoluciones, ambos temas que fueron ventilados hace poco en reuniones ex profeso citadas en pleno por los magistrados inconformes, Rodríguez y Rodríguez tuvo que salir del guión del mensaje preparado para establecer que se tiene que mantener la honradez "para que nadie nos critique", y pidió que "nadie contribuya a burlar el turno", mediante el cual se van asignando los casos a cada juez.
Se han eliminado las quejas en este renglón, agregó, "sin dejar de reconocer que como actividad humana no es invulnerable, por lo que exhortamos al personal a actuar con la misma honradez que ha observado y la ley reclama", destacó el magistrado presidente.
Lo escuchaba el procurador de Justicia del DF, Samuel del Villar, en el presídium, y entre la audiencia la juez Claudia Campuzano, quienes fueron protagonistas de uno de los episodios de las diferencias entre autoridades, litigio que, por el caso de El Chucky, finalmente fue ganado por la juzgadora al recibir la razón legal de parte de la justicia federal.
Estaba presente el juez del caso Ruta 100, el 16 penal, Enrique Gallegos Garcilazo, y otros personajes de la gestión pasada en la ex regencia, como el procurador de Justicia del DF, Lorenzo Thomas, y el secretario de Seguridad Pública, David Garay.
El presidente del TSJDF ofreció asimismo reconocimiento "por su rectitud" al actual secretario de Turismo, Oscar Espinosa, hoy envuelto en un escándalo por la pensión prematura que recibe de Nafinsa. Destacó también el apoyo del presidente de la República, Ernesto Zedillo, y del ex jefe de Gobierno del DF, Cuauhtémoc Cárdenas, en un acto que se alargó por mas de dos horas.
Regresará a la sala civil
En su discurso, Rodríguez y Rodríguez explicó que alrededor de 30 mil familias recibieron pensiones alimenticias gracias a que se enviaron requerimientos a aquellos padres que no se hacían cargo de sus deberes. Ese logro, estableció, es uno de los más importantes para servir como verdaderos impartidores de justicia.
El titular del Tribunal anunció que al final de su periodo regresará a la quinta Sala Civil, en la que ha trabajado por más de 20 años, para cumplir con su promesa de no escalar posiciones.
Dijo que no está a la baja, porque sólo cae aquel que resbala y a él esto no le ha ocurrido. En diferentes intervenciones, Rodríguez y Rodríguez fue reconocido con aplausos por sus compañeros y su despedida fue acompañada con Las Golondrinas.
Hasta las oficinas del TSJDF llegaron ayer al mediodía el procurador general de la República, Jorge Madrazo, el subsecretario de Gobernación, Jesús Murillo Karam, el presidente del Tribunal Supremo de Justicia Militar, Guillermo Martínez, y el consejero jurídico del Presidente de la República, Germán Fernández.
Del ámbito local, la jefa de Gobierno del DF, Rosario Robles, llegó prácticamente al final de la ceremonia, luego de anunciarse que no podría estar presente desde el principio por motivos de trabajo. Para todos ellos y muchos otros, el presidente del Tribunal tuvo palabras de reconocimiento.
La crítica velada la lanzó a la labor de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), pues dijo que habían dado cumplimiento a sus recomendaciones, aunque no siempre se estuvo de acuerdo con los puntos de vista del organismo. En el acto estuvieron presentes funcionarios del ombudsman, y más tarde la CDHDF emitió un comunicado en el que destaca las diferentes acciones logradas durante la presidencia Rodríguez y Rodríguez.
El magistrado informó que se hicieron en promedio 10 visitas a juzgados durante los días hábiles y que los expedientes están al día en un alto porcentaje, como nunca antes, y dijo que está próxima la creación de la sala número 19, un importante crecimiento a diferencia de las 15 que había a su llegada.
Este aumento, explicó, se debe a la demanda de ciudadanos y de las condiciones para entablar juicios o por la inseguridad; ojalá que en el futuro ya no se incrementen estas causas, dijo.