Ť Admite el candidato Ricardo Lagos que hubo "voto de castigo"
Sorprende al oficialismo chileno el resultado de Lavín
Enrique Gutiérrez, y agencias, Santiago, 13 de diciembre Ť El candidato oficialista a la presidencia de Chile, el socialista Ricardo Lagos, reconoció este lunes un voto de castigo para la coalición gobernante, cuyos dirigentes se declararon sorprendidos por la alta votación que logró la derecha en las elecciones del domingo.
El virtual empate entre los candidatos Lagos y Joaquín Lavín, separados por sólo 0.44 por ciento a favor del primero, sorprendió no sólo a la Concertación Democrática, sino al propio electorado y a la prensa local. "Estamos sorprendidos por la altísima votación de la derecha", admitió Jaime Estévez, uno de los jefes de la campaña electoral del aspirante oficialista.
Lavín obtuvo la votación más elevada para la derecha chilena desde la década de los años 30 y superó el histórico 33 por ciento que logró el ex dictador Augusto Pinochet en 1988, cuando se votó un plebiscito que marcó el ocaso de su régimen.
Para Estévez, la gente "se sacó la rabia" y la insatisfacción con el respaldo a la derecha en las urnas, pero aseguró que en la segunda oportunidad podría volcarse al candidato concertacionista.
Tras escrutarse 99.3 por ciento de los votos, Lagos se mantiene a la cabeza con 47.96 por ciento de los sufragios, en tanto que Lavín logró 47.52, ambos muy por arriba de los restantes cuatro candidatos de los comicios.
Lagos reconoció que "hay un voto de concertación desencantado" y de insatisfacción, pero se manifestó dispuesto a recuperar ese voto en la segunda ronda electoral que se celebrará el 16 de enero.
Consideró que el peso de la crisis, que dejó sin trabajo a unos 600 mil chilenos, se sintió en la votación y favoreció a Lavín, que desplegó una oferta populista durante su exitosa campaña.
El candidato oficialista, al igual que su rival, retomó la campaña de inmediato con actividades en una villa marginal en el sur de Santiago y anunció que habrá ajustes en el proceso proselitista, sin entrar en precisiones, en tanto que Lavín viajó a la ciudad de Iquiques, en el norte del país.
"Hay que trabajar intensamente por los votos que faltan. Si no hubo suficiente claridad en el mensaje, ahora me propongo trabajar intensamente por ello", dijo Lagos tras recordar que está a sólo dos puntos del triunfo, y "no es posible pensar que no lo alcanzaremos".
"Hoy damos comienzo a una nueva etapa de esta campaña, la final", dijo a su vez Francisco de la Maza, vocero de Lavín, un economista de 46 años y aspirante por el partido Unión por Chile.
En tanto, la candidata comunista, Gladis Marín, que alcanzó un tercer lugar con 3.19 por ciento de la votación, reiteró sus acusaciones al oficialismo de pavimentar el camino para el retorno la derecha, e insistió en que no tiene el ánimo de negociar con la concertación y otorgarle su apoyo, a menos que ésta vire hacia la izquierda.
Los 223 mil votos que logró el Partido Comunista representan menos de la mitad de lo que sus dirigentes esperaban, pero sería más que suficiente para asegurar la victoria de Lagos en la segunda vuelta.
El presidente Eduardo Frei llamó a los chilenos a meditar con tranquilidad y acudir masivamente a las urnas el 16 de enero. "Tenemos razones para mirar el futuro con optimismo, dijo el mandatario en referencia a los signos de reactivación que muestra la economía luego de la recesión de los últimos meses, que es considerada causante del voto de castigo.
Estados Unidos se congratuló por la manera "ejemplar" en la que se desarrolló la primera vuelta de la elección presidencial en Chile y expresó su voluntad de trabajar con el gobierno que saldrá la urnas el 16 de enero. "Los comicios de la víspera constituyen un testimonio del compromiso de Chile con los principios democráticos", declaró el portavoz adjunto del Departamento de Estado, James Foley.
En otro asunto, el Tribunal Supremo español decidió que los abogados de Augusto Pinochet no pueden tener acceso a pruebas contra el ex dictador, a menos que vaya a ese país, donde enfrenta acusaciones por violación a los derechos humanos durante su régimen militar.
En tanto, un auto judicial dictaminó que el militar chileno no está obligado a presentarse ante la justicia española en el contexto del procedimiento abierto en 1996 en su contra, mientras no se ponga a disposición del juez Baltasar Garzón y decida permanecer en una situación de ausencia voluntaria.