* Paraguay


Primer hallazgo de una hija de desaparecidos

Afp, Asunción, 15 de diciembre * Martín Almada, el abogado que sacó a la luz los archivos del Plan Cóndor, reveló este miércoles el primer hallazgo de una niña desaparecida en Paraguay en 1975, que sería la hija de un desaparecido gremialista uruguayo sin identificar y de una dirigente estudiantil paraguaya asesinada.

Angela Rosa Meza, nombre ficticio de una joven que hoy tiene 24 años, nació el 31 de diciembre de 1974 en el último día del cautiverio de su madre, María Rosa Aguirre, que murió por falta de asistencia, luego de meses de torturas y vejámenes tras ser devuelta a su país por las autoridades uruguayas, dijo a Afp el reconocido activista de los derechos humanos.

Almada confirmó que mantuvo con la joven "un año de contactos secretos", después de enterarse de su origen por su padre adoptivo, quien la inscribió como propia. Almada, que reveló los archivos de la coordinación represiva de las dictaduras del Cono Sur en los años 70, había publicado en 1979 la primera versión de dicho alumbramiento y en 1993 lanzó un pedido de búsqueda internacional.

"Se trata del primer hallazgo de una niña desaparecida en Paraguay", destacó Almada, que esta semana comenzará con Angela la búsqueda de la familia Aguirre que residiría en Yuty, departamento de Caazapá, a 200 kilómetros de Asunción, mientras espera datos de Uruguay sobre el nombre de su verdadero padre, que habría sido militante gremial.

En Montevideo, grupos y personalidades de defensa de los derechos humanos consultados por Afp dijeron estar al tanto del caso, pero que carecían de datos suficientes como para identificar al padre.

"Busqué luego en los Archivos del Terror", que el propio Aldama descubrió en diciembre de 1992, pero "no encontré nada, por lo que era una desaparecida" de 20 años que murió tras dar a luz y cuya recién nacida ųque se llamó María de los Angelesų fue abandonada frente a una casa de cuna, en la que las monjas a cargo la dieron a un comisario que desconocía su origen.

El policía averiguó parcialmente la forma en que llegó a sus manos la bebé, pero fue recién en 1993 cuando Almada lanza el pedido internacional de búsqueda, que el comisario y su esposa ųmuerta hace seis mesesų conocen la historia completa y el nombre de la madre.

Recién cinco años más tarde, el ex comisario da cuenta a quién había bautizado como Angela de su verdadero origen y ella, que hoy es una sindicalista de 24 años, llamó a Almada para empezar la larga serie de contactos que fructificaron en el fin de semana último en el encuentro con su "padre adoptivo" al que quiere proteger por afecto y agradecimiento.