Ť GE orienta a las 500 mayores del mundo: académicos

Con asesorías, trasnacionales controlan empresas mexicanas

Ť El atractivo en el país es la explotación de mano de obra barata

Mayela Delgadillo Ť Mediante sus divisiones de servicio de capital, asesoría e información, las trasnacionales han logrado el mejor de los sueños: obtener el control de las empresas sin poseer la propiedad directa. El ejemplo incuestionable es General Electric (GE), multinacional que además de tener alianzas con los grupos industriales más importantes del país como ICA, Vitro, Carso, Mabe y Grupo Financiero Serfin, vende su ''opinión, sugerencias y estrategias'' a más de 30 mil empresas en México y el mundo.

Debido al alto costo que tienen sus servicios, la división de General Electric Servicios de Capital (GESC) asesora sobre todo a aquellas corporaciones que quedan dentro de la lista de las 500 mayores empresas en el mundo, con lo cual garantiza su incidencia en las decisiones de la política industrial y de la económica, en lo general. Sin embargo, también tiene espacio para extender su poder hegemónico entre las pequeñas y medianas empresas.

Mientras en 1993 el área de servicios para GE alcanzaba 36 por ciento, para 1997 esta división abarcaba ya 41 por ciento, con lo cual prácticamente tiene la misma importancia que el segmento de la alta tecnología, que representa 44 por ciento, y el 15 por ciento restante lo abarcan los negocios básicos de la corporación, según la investigación General Electric: cosas buenas para la vida... y también para la muerte, editada por la Universidad Obrera de México en septiembre de este año.

GE asesora empresas de financiamiento, alquiler de aviones, aseguradoras, ferrocarriles, hipotecas, tarjetas de crédito y comercialización en pequeño, y entre su cartera de clientes se encuentran Kodak, Chrysler, Banco Bilbao Vizcaya, Banca Serfín, Motorola, y Colgate Palmolive.

Como consecuencia, los ingresos totales provenientes de tales operaciones a 1997 ascendieron a 39.9 mil millones de dólares, 23 por ciento más altos que los obtenidos en 1995. En 1994 los activos de este ramo ascendían a un total de 155 mil millones de dólares, dos años más tarde los activos eran de 58.5 mil millones. En cuanto a las ganancias de esta división pasaron de 1.5 mil millones de dólares en 1992 (representaba 32 por ciento de las ganancias totales) a 3.3 mil millones para el 97 (alcanzando 40 por ciento).

Para 1992 la revista Fortune hablaba de que GE tenía 42 por ciento de sus empresas en el sector servicios, pero sus actividades distan mucho de las llamadas terciarias tradicionales o clásicas. A lo largo de su historia la trasnacional ha buscado la automatización progresiva de los procesos para reducir el trabajo productivo inmediato, pero también desaparece el trabajo improductivo de cohesión mercantil, lo cual según la publicación ha logrado con éxito.

Su servicio financiero ''muy particular'' de dirección de empresas y financiamientos especializados, para 1994 permitió que 40 por ciento de sus ganancias procedieran de este concepto, apunta el texto elaborado por Gloria Benavides, Marianela Cantarell, Leticia Contreras y Marco Tello Chávez.

Interés particular

El interés de GE en México se enfoca principalmente en el aprovechamiento y explotación de la mano de obra barata, pero también porque geográficamente sirve de plataforma para exportar. Dos atractivos más lo han constituido los planes de reprivatización de los sectores energéticos y comunicaciones.

En los últimos años GE ha afianzado su posición de empresa mundial número uno por sus activos de capital, número de trabajadores, ingresos y beneficios.

Durante la crisis mexicana de los 90, a pesar de los vaivenes del mercado, las subsidiarias de la compañía incrementaron sus ventas, ampliaron los giros de las actividades en que participaban al tiempo que incrementaban su especialización y desechaban los negocios menos rentables.

La ausencia de empresas locales capaces de competir con las trasnacionales en las áreas en las que participa le ha permitido consolidar una influencia decisiva en la estructura industrial, ya que mediante sus servicios de ''asesoría'' define criterios de eficacia, diseño y calidad determinados por su tecnología. De ahí que el estudio afirme que ''GE está dentro del grupo de empresas líderes que orientan la política económica en México''.