Ť Reunión con embajadores y cónsules mexicanos
Aún persisten "desigualdades lacerantes" en el país: Jarque
Ť Defiende el incremento de 10 por ciento al salario mínimo
El secretario de Desarrollo Social, Carlos Jarque Uribe, reconoció ayer ante el cuerpo diplomático de México que pese a los avances en materia1 social en estos cinco años de la administración de Ernesto Zedillo, "persisten las desigualdades lacerantes" en el país. Y ejemplificó: en los 500 municipios más pobres del territorio nacional, el analfabetismo es de 40 por ciento; la escolaridad es del tercer año de primaria en promedio; 65 por ciento de la población ocupada percibe ingresos inferiores al mínimo y 53 por ciento de las viviendas no disponen de energía eléctrica.
Al participar en la 11 Reunión de Embajadores y Cónsules de México, el titular de la Sedeso admitió que todavía hay un reto muy importante para el gobierno federal: quedan 26 millones de mexicanos en situación de pobreza extrema. Pese a esto, el funcionario defendió que sólo se haya incrementado 10 por ciento a los mínimos a unos 2 millones de trabajadores que percibirían este salario.
"Lo importante es que se tenga una situación de finanzas públicas sanas, para que los resultados de la política social sean perdurables. No queremos tener presupuestos en gasto social que tengan que ser financiados a través de la inflación, porque esto nos revierte los avances y de hecho echa para atrás logros de muchos años".
Por otra parte, Jarque Uribe se comprometió a vigilar la operación de los programas de combate a la pobreza para evitar que sus recursos sean utilizados en beneficio de los partidos políticos, y destacó que se sancionará económica y penalmente a quien cometa este delito electoral.
El secretario pormenorizó así los resultados de la política social en el periodo 1995-1999, para combatir las causas y efectos de la pobreza en el país.
Dijo que a diferencia de hace un siglo, cuando los mexicanos eran apenas 14 millones, 75 por ciento de ellos vivía en localidades rurales marginadas, el 80 por ciento era analfabeta y la esperanza de vida no rebasaba los 40 años; en la actualidad, la población suma 100 millones, México es un país eminentemente urbano, "sólo" 10 por ciento ųes decir 10 millones de mexicanos no saben leer ni escribirų mientras que la esperanza de vida es de 75 años.
Agregó que al iniciar el siglo XX, 2 mil personas eran propietarias de 90 por ciento del territorio nacional, mientras que en el último año de la administración de Ernesto Zedillo 3.5 millones de mexicanos tienen posesión de 100 millones de hectáreas. Entonces, sostuvo, 5 millones de personas formaban la población económicamente activa (PEA), pero en la actualidad son 40 millones quienes conforman este sector, y "la economía mexicana está considerada entre las 15 más grandes del mundo".
Pero el secretario destacó que no obstante estos avances, aún "persisten las desigualdades lacerantes" en todo el territorio nacional, donde existen 100 municipios de mayor desarrollo, donde prácticamente toda la población está alfabetizada y con la secundaria concluida, los habitantes con empleo tienen ingresos superiores al salario mínimo y todas las familias cuentan con electricidad.
Según el funcionario, un porcentaje muy reducido es el que está percibiendo salarios mínimos en todo el país. Agregó que la dependencia a su cargo seguirá trabajando en programas focalizados en donde se actúe directamente con la población más marginada, pues gracias a ellos se logra incrementar el ingreso de las familias. Por ejemplo, dijo que el Progresa atiende a 2.6 millones de hogares y que éste permite incrementar el nivel de ingreso 34 por ciento, con lo que se puede disminuir la pobreza extrema. (Georgina Saldierna y José Juan de Avila)