Ť La prueba de Harris fue negativa: el abogado


El Viudo Negro rechaza haber matado a la que fue su prometida

Al rendir su declaración preparatoria, Arturo Garza Hoth, El Viudo Negro, negó haber asesinado a su prometida, Ana Gloria Gomezpalacio Escudero, en mayo de 1997, para cobrar un seguro de vida por 40 mil dólares.

En tanto, el fiscal de procesos en la zona oriente, José Guadalupe Jiménez Núñez, confirmó que la procuraduría capitalina investiga a la juez 21 penal, Carlota Guadalupe Mosco Vilchis, ya que presume que es probable responsable de delitos contra la administración de justicia, por haber negado en dos ocasiones librar orden de aprehensión contra Garza Hoth.

Tras la rejilla de prácticas del juzgado 61 penal, con sede en el Reclusorio Oriente, El Viudo Negro ųsobre quien pesa la sospecha de estar implicado en los decesos de su esposa Soledad Valdez, en 1991, y de otra mujer, Marcela Muñoz Palacios, el año siguienteų insistió en la versión del asalto en el caso de Ana Gloria, por el cual se le inició proceso bajo el cargo de homicidio calificado, con las agravantes de ventaja, traición y alevosía.

Una vez que le fue leída su declaración ministerial, Garza Holth se negó a responder las preguntas que formuló el Ministerio Público, y al ser cuestionado por su abogado, Eduardo Franco, reiteró que fueron varios sujetos quienes al asaltarlos frente al domicilio de la calle San Fernando 251, en la colonia Toriello Guerra, mientras se encontraban dentro de su vehículo.

Uno de los agresores, abundó, disparó contra su prometida y luego contra él, pero erró el tiro, lo cual aprovechó Garza Hoth para acelerar y dirigirse a un hospital.

El defensor no ofreció pruebas de descargo a la juez para reforzar la declaración ministerial, y destacó el hecho de que la prueba de Harris, para detectar residuos de pólvora en las manos de El Viudo Negro haya resultado negativa, lo que fue refutado posteriormente por el fiscal, Jiménez Núñez.

Este último explicó al concluir la diligencia: "Esta prueba no es definitiva para consignar a una persona por un delito relacionado con disparo de arma de fuego".

Los mismos exámenes que se le practicaron, añadió, establecen que dicha prueba puede borrarse con el simple hecho de lavarse las manos con shampoo o tallárselas con un trapo. "Hay muchas sustancias que borran las huellas de la pólvora dejada por el disparo", además, no se mantuvo ninguna estrecha vigilancia para determinar si se lavó o no las manos, indicó.

Sobre el fallecimientos de las otras dos mujeres, explicó que, en el caso de la esposa, "no se llegó a una investigación concreta por falta de interés" de la familia. En el caso de Marcela Muñoz Palacios, la juez negó la orden de aprehensión y se tendría que "buscar alguna manera de agregar algún otro elemento para nuevamente tratar de conseguir otra orden".

El abogado José Luis Nassar Daw, coadyuvante de la fiscalía por parte de Gomezpalacio Escudero, afirmó que pedirán la pena máxima de 50 años de cárcel para el procesado. (Angel Bolaños Sánchez.)