Critica cartón publicado ayer en primera plana

Señora directora: Le ruego insertar en El Correo Ilustrado mi profunda indignación por la caricatura titulada "Ex voto por el voto".

ƑEl México que La Jornada y El Fisgón quieren construir se basa en hacer burla de una imagen religiosa tan profundamente respetada por la mayoría del pueblo? ƑEsa es la educación que pretenden hacer con el público lector: que falte al respeto a valores religiosos tan importantes? ƑSu concepto de libertad de expresión permite hacer mofa de signos sagrados, sin ninguna cortapisa? ƑQuieren acabar con todo valor y punto de referencia, para que prevalezca sólo lo que a cada quien le venga en gana?

Tan reprobable es usar un estandarte para hacer propaganda política a favor de un partido, como hacerla en contra del mismo ofendiendo una imagen tan venerada. Con esto le hacen muy mal servicio al partido de la preferencia del cartonista y del periódico.

Con esta nota de protesta temo desatar su furia, pero muchísimos mexicanos sí tenemos una madre por la que estamos dispuestos a dar la cara.

Atentamente

Felipe Arizmendi Esquivel

Obispo de Tapachula

[email protected]


Respuesta del caricaturista

Señora directora: El México que La Jornada y yo queremos construir se basa en defender símbolos venerados, a los derechos humanos y a la justicia social, del desprecio y la burla de muchísimos políticos.

Nosotros no le faltamos el respeto a valores religioso; subrayamos la falta de respeto a estos valores cuando ésta es tan evidente como en el caso de Vicente Fox al usar el estandarte guadalupano, o el de Francisco Labastida cuando afirmó que los "católicos estamos profundamente indignados" por las declaraciones del ex abad Schulenburg (en este caso, Labastida usó el estandarte verbal de la Virgen de Guadalupe sin que Gobernación lo reconviniese).

Nuestro concepto de libertad de expresión no hace mofa de signos sagrados, sino del afán de creyentes de tiempo completo que al pretender el uso político de esos símbolos, ejercen contra ellos una burla terminal. Quienes quieren acabar con todo valor ųcivil y religiosoų son quienes empobrecen a la Nación (ver el caso del Fobaproa y el IPAB) y quienes para mantenerse manipulan, o quieren manipular, símbolos venerados.

La nota de protesta del obispo de Tapachula no desata nuestra "furia", sino nuestro asombro; basta ver mi caricatura para advertir que se trata de una crítica a la suplantación de la imagen por la política.

Si el obispo Arizmendi no quiere que se le "falte el respeto a valores religiosos tan importantes" debe dirigir su indignación contra quienes han usado políticamente la imagen de la Guadalupana y no contra quienes criticamos esa práctica política.

Atentamente

Rafael Barajas (El Fisgón)