Ť Doce arrestos y tres lesionados en Pamplona
Atacan presuntos simpatizantes de ETA una patrulla policial
Ť Es el incidente más serio luego del rompimiento de la tregua
Afp y Reuters, Madrid, 9 de enero Ť Doce personas fueron arrestadas y otras tres resultaron heridas este domingo en la ciudad de Pamplona, provincia de Navarra, cuando jóvenes encapuchados, presuntos simpatizantes de la organización armada vasca ETA, atacaron una patrulla policial con bombas incendiarias para después enfrascarse en una batalla campal con los uniformados.
Se trata del más serio incidente de violencia callejera por parte de simpatizantes de ETA desde que el grupo rompió una tregua unilateral de sus acciones armadas, que mantuvo durante 14 meses y que dio por concluida el pasado 3 de diciembre.
Más de 100 jóvenes encapuchados que marchaban por las calles de Guernica coreando consignas en favor de ETA lanzaron bombas incendiarias contra un auto de policía, poco después de la medianoche. La patrulla acudió al llamado de auxilio de un ciudadano cuyo automóvil fue de pronto rodeado por los jóvenes.
Los disturbios se extendieron hacia otras partes de la ciudad, donde grupos de jóvenes atacaron con piedras y bombas a uniformados, hiriendo a dos de ellos. En la localidad vasca de Guernica, supuestos simpatizantes de ETA prendieron fuego a una sucursal bancaria.
En momentos en que aún mantenía la tregua, ETA llegó a pedir a sus simpatizantes suspender los actos de vandalismo y violencia callejera. El grupo, sin embargo, suspendió la tregua y acusó al gobierno español de haber empleado un doble lenguaje e impedir que el proceso de paz avanzara mientras duró el cese del fuego.
En tanto, el presidente del gobierno español, José María Aznar, comenzó este domingo su precampaña para las elecciones legislativas de marzo próximo en los enclaves españoles de Ceuta y Melilla, en el norte de Africa.
El mandatario explicó que hacía esta visita en calidad de líder del conservador Partido Popular, y no como jefe del gobierno español, lo que fue interpretado por la prensa como un intento de no violentar al gobierno de Marruecos, que proclama su soberanía sobre Ceuta y Melilla, bajo control de España desde 1496 y 1580, respectivamente.
Legisladores opositores criticaron la discreción de Aznar al afirmar que su actitud era de total sumisión hacia Marruecos. Alfonso Perales, del Partido Socialista Obrero Español, comentó que la visita de Aznar es "la mayor indignidad política que se ha hecho en este país", mientras que legisladores independientes fustigaron el hecho de que Aznar "haya tenido que camuflarse porque no le pidió permiso a Mohamed VI (rey de Marruecos)", para visitar los enclaves españoles.