Ť Desactivan una bomba en la zona sur de Bogotá
Máxima alerta en Colombia ante el fin de la tregua de las FARC
Ť Extrema vigilancia en carreteras del país para evitar secuestros
Ť Enfrentan grupos rebeldes una guerra territorial, dice la prensa
Afp, Ap y Dpa, Santafé de Bogotá, 9 de enero Ť Los militares colombianos estaban hoy en estado de máxima alerta, un día antes de que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) pongan fin a la tregua unilateral decretada hace 20 días, al tiempo que la prensa local aseguró que ese grupo guerrillero y el también insurgente Ejército de Liberación Nacional (ELN) estarían enfrentados en una guerra territorial.
En tanto, expertos antiexplosivos desactivaron una bomba de regular poder que presuntos miembros del ELN habrían colocado escondida en una bandera del grupo en un populoso suburbio del sur de la capital, informó la policía.
Por lo pronto, "todas las unidades se encuentran en alistamientos de primer grado ante el final de la tregua de las FARC", informó un portavoz del ejército. Los soldados y policías también realizan operativos en las carreteras para evitar que los rebeldes secuestren a los turistas que regresan a la ciudad tras un largo feriado del fin de semana.
La Cuarta Brigada Militar informó incluso que las FARC pretendían instalar un retén de "pesca milagrosa" (secuestros indiscriminados) en cercanías del municipo de San Luis, en el departamento de Antioquia, pero la situación "ya fue neutralizada".
Las autoridades informaron además que un policía que permaneció secuestrado por las FARC durante cinco meses logró escapar y huir por la selva de la Serranía de Perijá, en la frontera con Venezuela. Las FARC mantienen secuestrados a unos 320 soldados y policías que pretenden canjear por rebeldes en prisión.
El Espectador, por su parte, publicó hoy que la inteligencia militar interceptó una radiocomunicación en la que las FARC piden a sus frentes que dispongan de "30 de sus mejores hombres para el combate". Los rebeldes también estarían trasladando sustancias químicas desde el centro hacia oriente, sur y norte del país, según el matutino.
Los comandantes de las fuerzas militares, general Fernando Tapias, y del ejército, general Jorge Mora, han insistido en que las FARC "no han observado ninguna tregua durante la Navidad y el Año Nuevo, porque continuaron atacando". En cambio, el jefe de la policía, general Rosso Serrano, dijo que el grupo respetó la tregua, aunque agregó que podría desatar una ola de ataques dinamiteros después del martes.
Dirigentes civiles, por su parte, manifestaron su temor de que los paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia desaten una "contraofensiva".
Las FARC, el grupo insurgente más numeroso y antiguo del país, que debe reiniciar el jueves las negociaciones de paz con el gobierno del presidente Andrés Pastrana, han advertido que pactar una tregua indefinida sólo será posible cuando estén avanzadas las negociaciones y haya acuerdos sobre los principales aspectos de la agenda.
En este contexto, la prensa bogotana aseguró que algunos frentes de las FARC y el ELN habrían comenzado una "pugna" por el control de varias zonas de los departamentos de Arauca, Antioquia, Magdalena y Cesár.
Según el diario El Tiempo, este enfrentamiento quedó en evidencia recientemente, cuando el ELN divulgó una carta en la que pedía al secretariado de las FARC "una explicación pública" por la muerte de cinco de sus miembros a manos de presuntos integrantes de ese movimiento, en un hecho que calificó de "grave".
No obstante, el grupo aclaró que no consideró que el incidente respondiera a una política de las FARC contra el ELN, sino a deficiencias de algunos mandos de esa organización, que las llevan a "valoraciones desacertadas".
"Estos hechos, como otros que no vamos a mencionar, no son el fruto de fortuitas circunstancias, sino de la actitud prepotente de algunos miembros de las FARC", añadió el texto del ELN.
De acuerdo con el diario, los cinco miembros del ELN fueron asesinados por elementos de las FARC que los habían citado para buscar un acuerdo sobre los límites de operación de cada bando en Antioquia. Para el analista Carlos Franco estos enfrentamientos "demuestran que las FARC son un grupo hegemónico que dentro de su plan de expansión está chocando con otros grupos subversivos".
Sin embargo, El Tiempo señaló que no en todas las regiones se presentan divergencias, y destacó que en el puerto petrolero de Barrancabermeja el ELN y las FARC actúan unidos.