Ť El monto, 72 mil dólares


Compensación en EU a 9 indocumentados mexicanos despedidos

Notimex, Washington, 9 de enero Ť Luego de un reciente fallo favorable a nueve trabajadores indocumentados mexicanos, el gobierno estadunidense intenta cambiar la arraigada percepción de que las autoridades laborales de este país son enemigos.

La Comisión de Igualdad en el Empleo (EEOC, por sus siglas en inglés) logró la semana pasada que un hotel de Minnesota pagará una compensación de 72 mil dólares a nueve indocumentados mexicanos despedidos por querer formar un sindicato.

El acuerdo alcanzado el martes anterior en una corte de Minneapolis fue el primer resultado de la demanda contra el hotel Holiday Inn Express and Suites, acusado por la EEOC de discriminación y despido injustificado. Gracias a una reforma en sus guías de actuación, el año pasado la EEOC amplió su autoridad para pelear en cortes por los derechos de indocumentados.

Con la reforma, en vigor desde octubre pasado, las autoridades laborales de Estados Unidos atacaron por primera vez una situación que ha persistido por décadas, pese a avances logrados por el activismo de líderes como César Chávez. Los trabajadores Rosa Albino, Evertina Albino, Reyna Albino, Norma del Toro, Wulfrano Albino, Bruna Alvarez, Estela Albino, Amado Flores y Francila Albino se desempeñaban como afanadores en el hotel junto con otras doce personas, pero sin contrato alguno.

La presidenta de la EEOC, Ida L. Castro, reconoció que, dada su condición legal, "estos trabajadores son especialmente vulnerables: es imperativo que los patrones entiendan que no se tolerará que los discriminen".

Cuando el hotel supo de los esfuerzos de esos empleados por incorporarse al Sindicato de Trabajadores de Hoteles y Restaurantes, fueron denunciados al Servicio de Inmigración y Naturalización (SIN), cuyos agentes los arrestaron en su trabajo el 13 de octubre de 1999. Aunque el argumento para la denuncia fue el temor a que el hotel fuera sancionado por emplearlos, la EEOC determinó que el despido fue una represalia por sus gestiones para tener un contrato.

"Es obvio que el hotel actuó así por oponerse a que estos empleados tuvieran derecho a las mismas condiciones que el resto", dijo Martín Goff, vicepresidente del local 17 del Sindicato de Trabajadores de Hoteles y Restaurantes en Minneappolis.