* Plan para enfrentar a universitarios, alerta

Sorpresa y preocupación del CGH ante anuncio del rector

* El pinche Monsi se dedica a publicar "mamadas y mentiras"

Roberto Garduño * Afuera del Palacio de San Ildefonso, el anuncio del rector Juan Ramón de la Fuente se tradujo en sorpresa, incredulidad, y preocupación: ''ƑQué quiere ese cabrón?, Ƒpor qué, si nosotros estamos por el diálogo?, šutaš nos van a levantar!''. Los integrantes del CGH que se presentaron a ese sitio y se sentaron en una treintena de sillas sobre la calle, a esperar, con una mesa endeble, a las autoridades para reiniciar el diálogo, se enteraron de voz de un profesor del CCH-Naucalpan --quien escuchaba a través de un walkman la transmisión del mensaje-- que el plebiscito había logrado el consenso de la comunidad universitaria.

Y mientras los huelguistas se repetían entre sí las palabras del rector, Alfredo Velarde, asesor del CGH, alzaba la voz y cuestionaba desde la calle a De la Fuente: ''šUn consenso al que la falta más del 50 por ciento de la participación de la población! šUn consenso organizado por Gobernación!''.

Cuando el rector anunció a los asistentes a San Ildefonso que llegaría hoy a las 10:00 al campus para entregar los resultados del plebiscito del 20 de enero, y la concurrencia le aplaudió y entonó una goya que se escuchó en la calle, los huelguistas respondieron con el ''huelga, huelga, cachún, cachún, ra-ra, huelga. šUniversidadš''.

En esas estaban, cuando Juan de Dios Hernández, uno de los asesores del CGH, se acercó a este reportero para reclamarle por segunda vez --la primera sucedió el sábado anterior en la sesión del pleno del consejo estudiantil-- el texto de un encabezado de ocho columnas de este diario:

--Ustedes dicen que nueve de cada diez universitarios votó en el plebiscito, šeso es criminal! --dijo ese individuo.

--Envía una carta a la dirección --se le sugirió.

--No me las publican.

--Envía una carta, ya te dije, yo no soy el consejo editorial.

--Ustedes sólo publican mentiras, tu dirección miente, tú también...

--Envía la carta y deja de estar molestando.

--En tu periódico, todos tienen mierda en la conciencia.

--Mierda, en la que ya te revolcaste.

Como se acercó, ese asesor que fue cuestionadísimo por los mismos estudiantes del CGH por su defensa de los 73 alumnos consignados al Reclusorio norte, luego se retiró en silencio...

Después, uno de los estudiantes que aguardaba en la mesa colocada frente a la puerta de edificio de San Ildefonso leyó el comunicado del Consejo General de Huelga: ''El CGH quiere que la huelga se levante ya, por eso exige a las autoridades la inmediata reinstalación de la mesa de diálogo para alcanzar la solución de los seis puntos de nuestro pliego petitorio... de negarse a regresar a la mesa de diálogo, las autoridades universitarias estarán evidenciando su intención de levantar la huelga por la fuerza.

''Denunciamos que Zedillo-Labastida-De la Fuente han echado a andar un plan para romper la huelga, basado en el enfrentamiento entre universitarios. Para llevarlo a cabo, cuentan con la complicidad de grupos de universitarios ligados a las cúpulas perredistas y al gobierno del Distrito Federal, que tal como lo denuncia la revista Proceso del 23 de enero han llegado a un acuerdo en ese sentido, ni más ni menos que con la Secretaría de Gobernación''.

Mientras se daba lectura a esas líneas, los asistentes a San Ildefonso salían por una puerta lateral. A espaldas de los huelguistas pasó Rolando Cordera, al que algún estudiante identificó, y empezó el vituperio: ''Corrupto, hijo de Salinas, locutor del salinismo... šFuera, fuera, fuera!''.

Los reporteros, que daban fe de la manifestación en contra de la rectoría, también comenzaron a ser cuestionados por algunas personas a las que no se les ha visto en las asambleas del CGH, pero que ayer aparecieron diciendo: ''pinche prensa vendida, ya dejen de molestar a estos muchachos'', y otra de esas personas comenzó a gritar: ''La pinche Jornada sólo publica a los moderados; ahí tienes al pinche Monsi (Carlos Monsiváis) que sólo se dedica a publicar mamadas y puras pinches mentiras... yo no entiendo cómo ha cambiado tanto''.

Afuera de San Ildefonso se encontraban algunos estudiantes de los llamados moderados de los que se les acusa de pertenecer al PRD, partido que no pasó de largo en las descalificaciones: ''ellos, esos alumnitos desde el principio se metieron y junto con su partido lo desvirtuaron todo, ellos son los culpables, esos moderaditos serán también responsables sin nos echan toda la fuerza del Estado''.

Pero entre los alumnos se dio otro debate, de más altura. Dos alumnos de la Facultad de Ciencias, una de los llamados moderados, de nombre Adela, y otro de los calificados como ultras --''yo no creo en esas clasificaciones'', dijo el último-- de nombre Lev. Y les terció Alfonso Bautista:

Lev. ''Estoy muy preocupado por los llamados fascistoides del rector''.

Alfonso. ''Pero si estamos aquí entre puros fascistas''.

Lev. ''Es un llamado a la represión''.

Adela. ''Pero yo pregunto, qué es mejor: que levantemos o que nos levanten''.

Lev. ''Si hay una convocatoria mayor por levantar, ni hablar''.

Alfonso. ''Si va la gente a las asambleas, debemos estar conscientes šse acabó!''.

Lev. ''El pedo es que mañana va a haber madrazos''.

Adela. ''Pero hay una propuesta, no vamos a levantar con las manos vacías''.

Lev. ''Qué tú quieres que se levante, en estas condiciones''.

Adela. ''No estamos con las manos vacías, pero además eres un solapador''.

Lev. ''Yo estoy con el movimiento''.

Adela. ''ƑQué es el movimiento ya? ƑQué es?''.

Lev. ''Mira en lo que yo soy ultra, en lo que soy maximalista, es que el conflicto se tiene que resolver a través del diálogo''.

Denuncias

Por otra parte, Fernando Guzmán, alumno del CCH-Naucalpan e integrante del comité de huelga de esa escuela que abandonó las instalaciones el pasado 20 de enero, denunció que el plantel ''es presa del saqueo... queremos aclarar que en Naucalpan la huelga ya se levantó, pero las autoridades serán las responsables del saqueo porque no quisieron recibir las instalaciones''.

Mientras, Miguel Angel Pérez, de la ENEP-Aragón, denunció varias acciones para amedrentar a los huelguistas de ese plantel:

''El lunes en la noche aterrizó un helicóptero de la policía estatal dentro de las instalaciones, se bajaron algunos policías, que se dedicaron a tomar fotos del movimiento y después se elevaron. Luego, el martes en la noche, atrás de la escuela, en la colonia Plazas de Aragón, se detuvieron a un lado de la reja de la escuela y se brincaron entre 15 y 20 militares y algunos con metralletas y cámaras de video ingresaron a la escuela. El miércoles, después de nuestra consulta se pararon tres camionetas con personas armadas que bajaron, nos enseñaron las armas y se fueron. Esto nos preocupa un poco''.