* CLASE POLITICA
Miguel Angel Rivera * Ernesto Zedillo dejó constancia de no ejercer el "dedazo" en su estado adoptivo, Baja California. Seis años después, Francisco Labastida Ochoa lo hizo en la tierra de sus ancestros, en Jalisco.
Jalisco tiene el rasgo distintivo de tener un gobernador surgido de la oposición: Alberto Cárdenas Jiménez, del PAN, como lo es también el mandatario de su siguiente escala: Nuevo León, donde el mandatario en turno, Fernando Canales Clariond, es también panista.
Es muy importante para el abanderado del tricolor reconquistar espacios donde domina la oposición y en ese propósito tal vez lo más importante es la selección de los candidatos a otros cargos de representación popular.
Por eso resulta muy importante la promesa de Labastida de que no influirá en la postulación de otros candidatos.
Al llegar a Jalisco el candidato presidencial se encontró con la noticia de que Enrique Ibarra Pedroza, diputado y ex representante del PRI ante el IFE, había anunciado públicamente su intención de buscar el gobierno estatal.
Tanto en la Cámara de Diputados como en el IFE Ibarra Pedroza ha cumplido importantes labores a favor de su partido y por lo mismo resulta legítima su aspiración de convertirse en candidato a gobernador.
Pero lo mismo pueden decir, por sus actividades en los mismos u otros frentes, otros precandidatos dispuestos a disputar la supremacía al PAN.
En la relación aparecen el actual presidente estatal del partido, Francisco Morales Aceves, el ex diputado Gabriel Covarrubias, el senador Raúl Juárez Valencia, el diputado federal Francisco Santillán Oceguera y Rafael González Pimienta. También pretende repetir el senador Eugenio Ruiz Orozco, derrotado hace seis años, y se incluye además al ex procurador general de la República Sergio García Ramírez por su prestigio, a pesar de que su carrera política la realizó lejos de su estado natal.
Todos podrían llevarse una sorpresa.
Habida cuenta que la elección de gobernador se realizará hasta noviembre, hay tiempo para que algunos o todos ellos sean incluidos en las listas para otros cargos de representación popular, como diputados y senadores, o bien para cargos directivos en diversas regiones de su estado, como responsables de hacer ganar a los candidatos de su partido en las elecciones presidenciales de julio.
Los que pasen esa prueba con mayor éxito, de forma natural, podrían quedar automáticamente inscritos como precandidatos al gobierno del estado. Así la decisión recaerá en los electores.
La cosecha
Por lo pronto, los aspirantes de Jalisco y de otros estados deberían atender a lo comentado ayer por el secretario de Operación y Acción Política del CEN priísta, el senador José Guadarrama Márquez, en el sentido de que los tiempos y los espacios para aspirar a candidaturas están marcados por los estatutos. Por lo tanto, quienes traten de adelantarse "no van a ganar nada y podrían promover situaciones que no corresponden a un desarrollo de oportunidades democráticas para todos los priístas"...Puede darse como un hecho que como preámbulo al debate de los candidatos presidenciales, habrá un enfrentamiento de los presidentes de los principales partidos políticos. Amalia García, del PRD, respondió de forma afirmativa a la propuesta de su contraparte del PRI, Dulce María Sauri Riancho. Falta la decisión del dirigente del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, quien de entrada estará en desventaja sentimental ante dos mujeres...