* Peligra Petricevic


Atlante sufrió su tercer descalabro, 0-1 ante Pumas

Marlene Santos A. * Con un mal juego, Pumas se adjudicó su primera victoria del torneo con pírrico 1-0, ante un desastroso Atlante que terminó con ocho hombres y que cosechó su tercera debacle, con lo que puso en la guillotina al técnico croata Zlatko Petricevic, quien abandonó el estadio Azteca furioso contra el arbitraje de Marco Antonio Rodríguez.

Ambos equipos derrocharon mediocridad, pero la UNAM desperdició una oportunidad de oro para dar espectáculo a su afición, pues aunque Potros fue local, la mayoría de los aproximadamente 30 mil asistentes al lugar eran seguidores de Pumas. El tanto del triunfo lo consiguió la Universidad hasta que tuvo enfrente a un disminuido rival, mediante un disparo del novato Manuel de la Torre.

El primer tiempo fue flojo con un monótono intercambio del balón, con dos oncenas incapaces de profundizar sus avances y que perdían el esférico con facilidad. Aun así, Pumas estuvo más cerca de la anotación con un remate de Federico Lagorio al poste y un cabezazo de Joaquín Beltrán, que resultó ligeramente desviado. Las escandalosas porras universitarias se encargaron de amenizar el ambiente con ingeniosas frases para insultar a Petricevic.

El segundo tiempo arrancó con mayor dinámica y un peligroso remate de Carlos Centurión que Sergio Bernal envió a corner, pero al minuto 56 Miguel Herrera, capitán de los locales, aplicó un codazo a Jesús Olalde y se ganó la expulsión directa. Cuatro minutos después el brasileño William de Jesús Méndes dio artera patada a De la Torre que le mereció el cartón rojo.

Hasta entonces, con nueve hombres enfrente, la UNAM logró el único tanto cuando Antonio Sancho avanzó por la derecha y centró hacia De la Torre, quien se sacudió la marca de un defensa y su trallazo fue desviado por Elvis Brajkovic para terminar anidando en la portería de Félix Fernández a los 65 de acción.

Manuel Sol reclamó airadamente una infracción previa de Sancho y por respuesta fue expulsado al minuto 66. Pumas intentó ampliar la ventaja en lo que parecía una inmejorable oportunidad; sin embargo, careció de movilidad, variantes y puntería.

En el vestidor local, Juan de Dios Ramírez Perales dijo que en Atlante todos deben mejorar, "no podemos culpar al árbitro, porque cuando un equipo está bien, el arbitraje pasa a segundo término" y recomendó calma para superar el mal momento.

Manuel Sol insistió en que el gol derivó de un banquito que Sancho aplicó a Miguel Gutiérrez; "le reclamé fuerte y me sacó la tarjeta roja... Cada vez está peor el equipo, ahora con tres suspendidos... Andamos todos mal y de malas". Petricevic apenas dijo: "No tengo nada que decir, analice usted la situación del árbitro".