* Es identificado con la corriente sinarquista
Romero Hicks, candidato de AN al gobierno de Guanajuato
* Con apoyo de Fox se impuso a Ling Altamirano y Martínez Pérez
Juan Manuel Venegas, enviado, y Manuel Carrillo, corresponsal, Irapuato, Gto., 30 de enero * Juan Carlos Romero Hicks, foxista, heredero de la corriente sinarquista y representante de los grupos con el más rancio conservadurismo guanajuatense, se convirtió hoy en el candidato panista al gobierno del estado, para los comicios que se celebrarán aquí el próximo 2 de julio.
Padre de 10 hijos, pues es un declarado opositor a los métodos anticonceptivos, Romero Hicks fue también rector de la Universidad de Guanajuato, apoyado por las corrientes sinarquistas que ahora lo impulsan hacia la gubernatura. Con apenas un año de militancia en el blanquiazul, pero con el respaldo de Fox Quesada, terminó por imponerse en una cerrada contienda interna al ex alcalde de León, Eliseo Martínez Pérez, y al senador Alfredo Ling Altamirano.
A final de cuentas de nada sirvieron ni la alianza de Martínez Pérez con Ling Altamirano ųen la segunda ronda de votación a que tuvo que llegar la Convención Estatal del PAN que se celebró en esta ciudadų ni los gritos de los panistas tradicionales exigiendo un abanderado con identificación partidista. "Panistas sí, externos no; panistas sí, externos no" y "duro panistas, duro" fueron las consignas que lanzaron este día, y que a la mera hora quedaron rebasadas por el foxismo y su aspirante.
Además del candidato presidencial, entre los personajes locales que apoyan a Romero Hicks destacan el empresario Elías Villegas, cofundador la asociación Amigos de Fox e identificado aquí como el "dueño" del PAN estatal. La mano de Villegas y el respaldo del Comité Directivo Estatal ųpresidido por Gerardo de los Cobos, otro de los ahijados del empresarioų que brindó a lo largo de todo el proceso interno a Romero Hicks, provocó que la convención de este domingo terminara abruptamente bajo acusaciones de fraude de parte de los seguidores de Martínez Pérez y Ling Altamirano.
Está también con el candidato panista el secretario de Educación de Guanajuato, Fernando Rivera, reconocido por sus intenciones de introducir conceptos religiosos en el sistema de educación pública. Este funcionario está plenamente identificado con el sinarquismo, y aun corresponde con la idea de acuñar monedas de plata con la imagen de Cristo Rey, a fin de financiar el Instituto de Educación Permanente de la entidad.
Otro de los que brindan apoyo a Romero Hicks es Eugenio Trueba, proveniente de una de las familias iniciadoras del movimiento cristero. Uno más que respalda al ex rector de la Universidad de Guanajuato, es el empresario Ricardo Alanís.
La ausencia de Vicente
Fue notoria en la convención del PAN en Guanajuato la ausencia de Fox Quesada. Algunos panistas de la directiva local explicaron que desde el jueves se acordó su inasistencia para evitar que los delegados se inclinaran hacia Romero Hicks en sus preferencias. Otros, como Juan Manuel Oliva, ex dirigente estatal, señalaron que el acuerdo va más allá: la propia directiva nacional pidió a Fox evitar alguna manifestación a favor de uno u otro precandidato, no sólo en Guanajuato, sino en cualquier estado de la República que tenga elecciones este año.
A la convención panista ųlarguísima, se extendió más 11 horasų asistieron 4 mil 851 delegados con voto, representantes de 45 de los 46 municipios que conforman el estado. El único comité municipal que no tuvo participación fue el de Atarjea, que por su escaso número de militantes no alcanzó el número de votos delegacionales que se requieren en la votación del blanquiazul.
Conato de violencia
Se registraron tres precandidaturas, las de los ya mencionados Martínez y Romero, así como la del senador Alfredo Ling Altamirano. El primero en hacer su presentación fue el ex alcalde de León, quien presumió su formación lasallista y su militancia en el PAN desde 1987, frente a la "inexperiencia política" de Romero Hicks. Enseguida tocó el turno a éste, cuyo presentador, Ricardo Torres Origel, apenas se escuchó debido a las constantes interrupciones y rechiflas que desde el sillerío instalado en el auditorio de la Expo Fresa lanzaban los seguidores de Martínez Pérez y Ling Altamirano.
Todo esto provocó que los ánimos se caldearan y los panistas estuvieran a punto de protagonizar una fenomenal bronca. Y es que en medio del griterío, a uno de los simpatizantes de Romero Hicks se le ocurrió sacar una playera con la propaganda de su precandidato. Para los eliseístas esto fue como una provocación, por lo que se le lanzaron encima arrebatándole la prenda, empujándolo y tirándole patadas. Se metieron los romeristas y cuando el enfrentamiento ya se cantaba, en medio de los dos bandos apareció la figura de De los Cobos, llamándolos al orden y amenazando a los rijosos con sacarlos del local, incluso por la fuerza.
La tensión terminó en cinco minutos. Los panistas desfogaron sus ímpetus en unas cuantas patadas, empujones y mentadas de madre. No pasó a mayores el incidente.
Finalmente se presentó Ling Altamirano, el más débil de los tres precandidatos, sólo para anticipar que en caso de ser necesaria una segunda vuelta, respaldaría a Martínez Pérez. Aunque al final demostró que no traía total control sobre sus huestes y su voto, pues Romero terminó por imponerse.
Los porcentajes de la votación en esta ronda habían quedado de la siguiente manera: 21.97 por ciento para Ling Altamirano; 33.90, Martínez Pérez, y 44.12 Romero Hicks. Ninguno pues, con el requerido 51 por ciento de la votación. Vendría la segunda ronda en la que Romero Hick alcanzaría 52.04 por ciento de los votos delegacionales mientras que Eliseo Martínez se quedaba rezagado con 47.96 por ciento.