Formaba parte de la exposición Libertad en bronce 2000


Roban escultura de Carrington

Bronce2 Merry Mac Masters * La escultura Corrunus, obra de Leonora Carrington y que formaba parte de la exposición Libertad en bronce 2000, fue robada el pasado sábado de Paseo de la Reforma, sobre el camellón que va de Gandhi al Museo Nacional de Antropología, donde se exhibía al aire libre junto con 87 piezas más de diversos creadores.

Además los ladrones también intentaron llevarse el bronce Luna león, de la misma artista, que fue dañado y quedó tirado en el suelo. De Corrunus, descrita como ''pieza clave" de la muestra, sólo quedó la base.

Al parecer los policías encargados de la custodia se percataron de los hechos cerca de las cuatro de la mañana. Incluso alcanzaron a ver que algo extraño ocurría y por ello frustraron la segunda acción.

Restaurada ayer, Luna león será reinstalada este martes en el contexto de una conferencia de prensa, convocada para efectuarse a partir de las 10:30 horas.

Isaac Masri, director de Impronta Editores, impulsora del proyecto, informó que con fin de ''no darle gusto al hampa", la muestra ųque debería haber concluido ayerų se prorrogará un mes más. Agregó que el robo no lo amedrenta porque la exhibición se hizo, precisamente, para ''ganarle terreno a la delincuencia".

Integrada por 88 obras de 11 artistas, la exposición ųinaugurada el pasado 5 de septiembreų era vigilada las 24 horas y contaba con iluminación especial. A lo largo de los casi cinco meses, el mismo Masri supervisaba que todo estuviera en orden. Sin embargo, reconoció que al montar Libertad en bronce 2000 en la vía pública ''estábamos conscientes del riesgo que corría la colección''.

El robo de Corrunus fue denunciado a las 16:00 horas del 29 de enero. El acta fue levantada en la agencia 11 del Ministerio Público de la delegación Miguel Hidalgo por Crisanto Cacho, en representación del Instituto de Cultura de la Ciudad de México, así como por Masri. Los hechos quedaron asentados en la averiguación previa 11/500/00/01. El seguro de la exposición fue gestionado por conducto del instituto.

 

Ofrecen 50 mil dólares de recompensa

 

Al parecer la pieza sustraída está valuada en unos 50 mil dólares. También se notificó del robo a Interpol México y a la Procuraduría General de la República. A fin de recuperar Corrunus, Agua Tinta, grupo propietario de la colección de bronces, ofreció una recompensa de 50 mil dólares a cualquiera que proporcione datos sobre la escultura. Para tal efecto puso a disposición de eventuales informantes el número telefónico 55-40-22-80.

Fue hasta el pasado domingo que el promotor de la exhibición pudo informar a Leonora Carrington del robo de su obra. La artista, de origen inglés y radicada en México, advirtió que Corrunus, antigua deidad celta, ''es un dios bueno, pero cuando se realizan las cosas por las malas va a castigar a los que hicieron esto".

Para Masri se trata de un robo ''por encargo". Recordó que el año pasado ocurrió la sustracción de varios cuadros de Rufino Tamayo de la Galería López Quiroga, justo un día antes de que terminara su exhibición.

Indicó que a los ladrones de la pieza de Carrington no les será nada fácil comercializarla, ya que el mercado de arte es ''muy cerrado". El que ordenó robar la obra, añadió, no podrá exhibirla y sólo la tendrá como ''trofeo" en su casa. Corrunus, con una pátina en color verde, pertenece a una serie de seis esculturas idénticas.

En la medida que la exposición fue concebida para tener un carácter itinerante, una vez concluida su estancia en la ciudad de México, a partir del 24 de marzo será exhibida durante dos meses en la ciudad de Colima, en el contexto de los festejos de primavera que allí se realizarán.

Si para entonces la escultura Corrunus todavía no ha sido localizada, se colocará una fotografía en su lugar para remplazarla, dijo por último Isaac Masri.

Los otros artistas participantes en Libertad en bronce 2000 son: José Luis Cuevas, Manuel Felguérez, Gunther Gerzso, Joy Laville, Fernando de Szyszlo, Brian Nissen, Irma Palacios, Vicente Rojo, Juan Soriano y Roger von Gunten.