* Pálidos y angustiados, los paristas fueron subidos a vehículos foráneos
El diálogo deberá esperar; cientos de estudiantes, aprehendidos en CU
* A las 6:35 de la mañana, elementos de la Policía Federal Preventiva irrumpieron en el campus
Roberto Garduño y Karina Avilés * Por consenso, los comités de huelga decidieron regresar al diálogo... pero la suerte estaba echada.
Pasadas las tres de la mañana, hora que los rumores ubicaban como definitiva para el asalto policiaco a Ciudad Universitaria, la sesión del CGH tomó un respiro de alivio. Su dinámica retomó los pasos de otras asambleas: muchos estudiantes, extrañamente, abandonaron el recinto; los oradores discutían, la mesa de debates retardaba las definiciones políticas, en el butaquerío muchos dormitaban... y por consenso aprobaron regresar al diálogo resolutivo. De pronto, a las 6:35... se escuchó el sonido de las botas de los cuerpos de élite, y aquel grito ya no pudo ser de alerta: ''šCompañeros, ya viene la policía!''. Ya estaba ahí.
A las 6:30, sobre Insurgentes, los integrantes de la Policía Federal Preventiva descendieron de sus transportes. Apenas amanecía. La mayoría de los estudiantes dormitaba tras diez horas de debate. Nadie se percató de la movilización en el estacionamiento de Filosofía. Adentro, Vicente, de Trabajo Social, intervenía cuando dos muchachas ingresaron al auditorio de Filosofía con el aviso y se abrió paso a la confusión.
Los tres reporteros que permanecían en el recinto gritaban ''šprensa, prensa!''. Frente a ellos y a todos los estudiantes aparecieron los cuerpos de élite y paracaidistas de la PFP con pasamontañas, chalecos antibalas y cascos de campaña. Poco a poco fueron arrinconando en una de las alas del auditorio a los alumnos. Los huelguistas se apostaron junto a la pared. Francisco Ramírez, de la Facultad de Derecho, pedía ''tranquilidad, no pasa nada, no perdamos el orden''. En eso, un oficial encapuchado le arrebató la grabadora al reportero de este diario.
En cuestión de minutos, el pleno del CGH se vio rodeado de efectivos que no respondían a ninguna interrogante. Y en ese ínter, la dureza del oficial se transformó, regresó en dirección de los huelguistas y devolvió la grabadora. ''šJúntense, por favor compañeros, no griten! Hay que sentarse todos'', eran las súplicas. Aquello era una avalancha de confusiones: ''Vámonos tranquilamente sentando''; pocos respondieron. El grueso de la policía mantenía el mutis, observaba a los alumnos acorralados, y detrás de sus cuerpos... los toletes.
Ramírez, otra vez se acercó a los efectivos y les preguntó: ''ƑQué orden traen, qué sucede, qué procede? Finalmente ustedes tienen la fuerza''. Iván Zavala, el asesor del CGH, también preguntaba, pero no hubo respuesta. Detrás de ellos, el remolino de estudiantes guardaba silencio. Mario Benítez, Jorge Martínez Valero, Cristóbal Sánchez, Isaías Barrientos, Higinio Muñoz, Víctor Alejo, Joel Cimbrón, Concha, la integrante de la Comisión de Enlace, y cientos de sus compañeros se apretujaban y miraban. Los rostros palidecieron; lívidos, no articulaban nada.
Otra vez, Francisco Ramírez interrogaba: ''ƑEstamos detenidos? Nos pueden contestar si nos podemos retirar. Como ciudadano mexicano, les hago esa petición. ƑCómo tenemos que proceder? No queremos saber el nombre de quien está a cargo del operativo, queremos saber qué prosigue, la verdad''.
Desconcertados, los estudiantes comenzaron a levantar el brazo izquierdo y formaron la ''V'' de la victoria. Para entonces, la PFP había formado una valla que dividió por la mitad las butacas del auditorio de Filosofía. Mientras esto ocurría, en la otra mitad quedaron abandonadas las pertenencias de los alumnos que en su afán por resguardarse corrieron hacia el otro costado del recinto, y también los agentes del Ministerio Público Federal recogían documentos que estaban tirados en el suelo. Todo lo metieron en bolsas de plástico. A las sombras de angustia y duda que se cernían en ese lugar se sumó una actitud de autodefensa, y de nuevo los huelguistas hacían la ''V''.
Eran las 6:45, y un estudiante desdobló una bandera nacional, que fue sostenida por muchas manos. Los policías, inmutables, observaban y entonces un joven preguntó a sus compañeros: ''ƑPueden cantar?'', y otros le preguntaron: ƑCantamos el Himno a la Alegría? Y lo hicieron. Escucha hermano la canción de la alegría/el canto alegre del que espera un nuevo día, y ahí se ahogó el coro.
Horas antes, uno de los tantos rumores, el más insistente, el que provocó la movilización por todo el campus se refería a la intervención de la fuerza pública, pero a las 3 de la madrugada. No ocurrió nada, y el golpe sobrevino tres horas y media después. Fue rapidísimo. Los huelguistas buscaban dónde salvaguardarse, reconfortarse y asirse: ''Tú como periodista, quédate aquí para que hables con mi mamá y se tranquilice... Mamá, estoy aquí con un periodista, todo está tranquilo, no te preocupes''. Policías federales grababan con cámaras de televisión los rastros de la frustrada huida. Mientras, Karen, una joven estudiante, perdió el habla y sus compañeros solicitaron a los demás que buscaran el morral de la muchacha, postrada en una butaca. ''Aquí está, aquí está, son unas pastillas rojas'', respondieron.
Antes de las 7:00, rodeado de agentes del MP y judiciales, el subprocurador A de Procedimientos Penales, Everardo Moreno Cruz, ingresó al auditorio:
-ƑCuál es la situación de los estudiantes?
-La presencia nuestra obedece al cumplimiento de un mandato de juez que ordenó al procurador Madrazo la restitución de los bienes de la universidad a las autoridades universitarias.
-ƑQué juez?
-La juez segundo de distrito, en un acuerdo que dictó el pasado 4 de febrero.
-ƑCuál es la condición de los estudiantes?
-Los señores están cometiendo flagrantemente el delito de despojo.
-ƑY su suerte cuál será?
-Eso deberá determinarlo un juez.
-ƑA dónde los van a llevar?
-Bueno, yo les respondo con mucho gusto que esta acción responde a una averiguación que se integró desde mediados de julio del año pasado. Se vinieron acumulando otras denuncias, entre ellas las que presentó la misma universidad, y atendiendo el mandato del juez que ordenó a la PFP su participación es que estamos aquí.
-ƑQué tan grave es este delito?
-En principio, el Código Federal de Procedimientos Penales no lo considera grave.
Entre los estudiantes privaba el desconcierto. Los pocos teléfonos celulares que había fueron insuficientes para comunicar a los jóvenes con sus familias. Jorge Martínez Valero, de Ciencias Políticas, dijo: ''Fue sorpresivo para todos, ya lo veíamos venir pero no pensamos que se fuera a desatar con esta magnitud. En realidad, el movimiento no fue derrotado''.
A las 7:20 comenzó el desalojo, la prensa salió poco a poco confundida entre los alumnos. El escenario que se presentó en el estacionamiento de Filosofía se asemejaba al de un campo militarizado: cientos de policías federales, preventivos, judiciales federales, de la PFC y vehículos de asalto. Dos helicópteros sobrevolaban. Nadie de los que salían del inmueble entendía. Los que avanzaban hacia los camiones foráneos, muchachos y muchachas, hacían la ''V''. Muchos de ellos, casi niños, saludaban y otros lloraban. Quienes les siguieron se sujetaron de las manos, no se separaron. Había madres de familia, profesores y hasta hermanos de los huelguistas. En menos de una hora, los paristas abordaban los camiones que los condujeron a las oficinas del Ministerio Público Federal. Seguían subiendo.
Pero entre aquéllos apareció una persona de nombre Martín Ramos, a quien sujetaban dos policías encapuchados, y en lugar de trasladarlo al camión lo llevaron a una Van 3500 color negro. Mario Benítez siguió la misma suerte y en el trayecto alcanzó a decir: ''šEl movimiento va a ganar! La autonomía será defendida por el CGH. Hasta la victoria, siempre. Díganle a todo el pueblo que estamos defendiendo la educación de sus hijos...''.
Y la larga hilera de huelguistas siguió avanzando hacia los camiones. Pálidos, los estudiantes reflejaban en su rostro la sorpresa, y entre la valla policiaca alcanzaban a articular frases de enojo e impotencia: ''La universidad de nuevo abierta... a la fuerza''. Para entonces, regimientos de policías escudriñaban en el resto de las instalaciones del campus. Muy cerca de rectoría hallaron a dos niños de la calle que de inmediato fueron esposados e introducidos a uno de los camiones. Entre el maremágnum, el subprocurador Moreno Cruz fue informado del hallazgo de unas matas de mariguana. A un costado de donde salían los estudiantes se colocaron seis macetas en que la cannabis retoñaba. Aquella imagen fue más que suficiente para convertirse en un festín de camarógrafos y fotógrafos.
El funcionario de la PGR respondía a los periodistas:
-ƑSaldo blanco, señor?
-Ni siquiera ha habido un golpeado o un lastimado.
-ƑEs simultánea la acción en todas las instalaciones universitarias?
-Solamente de Ciudad Universitaria.
Entonces comenzaron a llegar al estacionamiento grupos de policías federales que traían a los alumnos aprehendidos en otros planteles aledaños. Y como la fila de jóvenes se extendía desde la entrada del auditorio, llegaban más camiones foráneos para trasladarlos. A Víctor Alejo le tocó la misma suerte que a Mario Benítez: lo llevaron a una panel, pero antes de abordarla gritó: ''šViva la huelga, venceremos, la represión no nos derrotará compañeros, adelante!''. Jorge Martínez Valero, también identificado como dirigente del comité de huelga de Ciencias Políticas, fue conducido a la panel donde ya estaba Alejo. Después, Higinio Muñoz subió a un camión, pero continuaba la labor de limpieza de los federales, que seguían llevando a grupos de tres o cuatro huelguistas que estaban en las facultades cercanas.
La policía federal solamente portaba toletes y escudos antimotines. Desencajados, los estudiantes caminaban una vez que eran revisadas sus pertenencias. Entre ellos Cristóbal Sánchez, alcanzó a decir: ''Me da pena ver así a mi universidad...''.
Todavía, con poco ánimo, del pasillo del auditorio se escuchaban los ''šhuelga, huelga, cachún cachún ra ra, cachún cachún ra ra, huelga, universidad!''
Todo el operativo era coordinado por Wilfrido Robledo, titular de la PFP, quien respondía enojado a reporteros que preguntaban sobre el estado de salud de dos jóvenes que habían subido a una ambulancia:
-Vimos a dos personas...
-Se desmayaron. Vayan a verlos a la ambulancia -decía de mala manera, mientras empujaba a la reportera Lénica Avila, de Radio Educación.
-ƑCuál es el saldo hasta el momento?
-Todavía no terminamos...
En ese ir y venir también salió Alberto Pacheco, El Diablo. ƑQué opinas de esto?, se le inquirió: ''šHasta la victoria, siempre!''. Mientras, El Mosh fue trasladado a una camioneta de la PFP; alcanzó a exclamar: ''šNi un paso atrás, compañeros. Este movimiento no claudicará jamás!''. Después Mario Benítez, Víctor Alejo, El Mosh, El Diablo, Martín Ramos e Iván Zavala fueron esposados y se les trasladó a un camión foráneo.
El primer visitador de la CNDH, Víctor Martínez, explicaba su presencia en el lugar: ''Nuestra preocupación es que no haya un maltrato a los detenidos y supervisar que no haya una agresión, que no estén golpeados, que no se torture''.
-ƑA dónde van a llevar a los estudiantes?
-A la delegación de la PGR, a Zaragoza, por lo menos eso fue lo que me informó el subprocurador y nuestra labor es estar presente.
-ƑCuáles son sus informes hasta ahora?
-Hasta el momento, no tenemos ningún informe. Hay 12 gentes (sic) de la CNDH en todas las áreas. Hasta ahora, no hay golpeados ni lastimados, salvo un incidente de una muchacha que se puso (sic) alterada de los nervios. Y hasta el momento eso es lo único que hay.
-ƑQué opina de este operativo?
-Hasta el momento, no tengo una opinión -respondió el funcionario.
-ƑYa no hubo más tiempo para el diálogo? _se insistió.
-Yo me imagino que lo que las autoridades consideraron es que se llegó a un límite donde ya no podían más.
-ƑA qué hora los enteraron?
-Yo me enteré a las 5 de la mañana.
En el último grupo que faltaba por abordar los autotransportes, Ernesto Almada, de Veterinaria, gritaba: ''No nos rendiremos ni nos venceremos ante las amenazas del gobierno. No nos arrodillaremos ante el poder del Estado. Este es nuestro único delito''.
Y a éste lo secundó otro estudiante de Ciencias: ''Cuando nuestro orden del día era cómo íbamos a dialogar, cuando estábamos discutiendo cómo tratar de solucionar este problema, llegan los cuerpos policiacos. Esta es la respuesta...''
A las 8:50 salieron los últimos estudiantes huelguistas del campus, que se encontraba acordonado en todos sus accesos. Fueron 14 los camiones que trasladaron a 432 integrantes del CGH, capturados en la Facultad de Filosofía y sus inmediaciones.
Lo que quedó...
En el vacío interior del auditorio de Filosofía y Letras, en el suelo se observaron las pertenencias de los estudiantes: bufandas, cobijas, gorras, bolsos, tupperwares donde guardaban su comida, zapatos, bolígrafos. Entre todo aquello figuraban los artículos personales de las jovencitas: lápices labiales, rímel, espejos, cepillos, botellitas de crema Atrix. Hasta una carta de amor, escrita por una alumna de la Preparatoria 6, Coyoacán, dirigida a su novio, que comenzaba diciendo: ''Querido Alfonso...''.
Los efectivos de la PFP revisaron los morrales. En el piso balones de futbol y basquetbol, libros, agendas, un breve diccionario político. La credencial de elector de Daniel Salvador Bravo Gómez. Volantes donde destacaban frases como ''hoy cerramos la universidad, para que mañana permanezca abierta para todos...''
* En tus ojos veo la muerte: alumna a un policía
Luego del desalojo, el silencio se apoderó de las aulas y oficinas
Karina Avilés * A eso de las 10 de la mañana, el clap, clap de las botas que resonó desde las 6.35 de la mañana en el campus se detuvo y un silencio triste recorrió aulas, oficinas, áreas verdes de esta casa de estudios que nunca volverá a ser la misma. Los miembros del CGH, los estudiantes, van a la cárcel. La PFP ocupa la universidad.
Poco después de las siete de la mañana empezaban a salir los autobuses repletos de jóvenes con los rostros oscurecidos por vidrios polarizados. Se miraban y movían como sombras, mudos, silenciados. Al pie de los autobuses, los federales formaron una valla. Padres, hermanos, primos encaraban a los policías, querían saber quiénes iban en los camiones, y una y otra vez los escudos policiacos los repelían.
''šEn tus ojos se ve la muerte y tu mirada nunca se me va a olvidar!'', gritaba una joven frente a los ojos ennegrecidos de un policía. ''ƑTienes hijos y mujer? ƑCuántos tienes? ƑEres del pueblo? šEres indígena, vete en un espejo, eres del pueblo y te jode igual que a mí o peor, porque no tienes ni un pinche gramo de dignidad! šJamás se me va a olvidar el odio con el que me miras! šTú quieres que los otros miren como tú!, Ƒverdad? Ve las miradas de los otros, todavía no tienen el odio que tú tienes. ƑSabes qué? šNunca en la vida te voy a olvidar! Y cuando te vea, te voy a mirar también con odio porque por tu culpa y por la culpa de gente como tú estamos aquí y šno vamos a desaparecer, que se te grabe bien! Aunque tus hijos y los hijos de tus hijos estén de aquel lado, šnosotros no''.
La joven alumna agrega: ''ƑVas a tener hijos o ya los tienes? šContéstame! ƑTe impiden aquéllos que hables? ƑAparte de la dignidad te quitaron la lengua? šTambién te quitaron la cabeza! ƑNo ves? šNo viste a mis compañeros que están en pie de lucha!".
Las voces de la gente, instalada en una de las entradas a Ciudad Universitaria en Insurgentes, parecían dar de lleno en la muralla de uniformados. Algunos bajaban la mirada, otros parecían no escuchar; había quienes se enardecían y amenazaban con atacar. Los policías, casi todos, apretaban las mandíbulas; los familiares de los muchachos que partían detenidos en los camiones, lloraban de coraje, de miedo, de terror, de impotencia. Minutos y minutos, las exigencias de los padres iban y regresaban en oleadas, eran siempre las mismas: querían saber de sus hijos, de sus familiares. Las imágenes se repetían y el reloj seguía corriendo.
A las ocho de la mañana aún se hallaba en la explanada de rectoría un helicóptero Bell 212, matrícula XA-SMW de la Federal Preventiva y allí, una bandera mexicana se escurría exactamente a la mitad del asta que la sostenía. Un poco más adelante, en el auditorio Che Guevara, una fila de policías resguardaba un pasillo por donde caminaban los cegeacheros rumbo a los camiones que, uno a uno, se llenaban de jóvenes y niños. A un pequeño de tres años, aferrado de su madre, lo trepan también al autobús; va aterrorizado y la señora no sabe qué decirle. Unos niños de la calle, que habían salido de la oscuridad de las coladeras para refugiarse en las facultades, se van dentro del grupo de los acusados.
Era como una grotesca danza de insaciables. Los muchachos llegaban a los autobuses donde desaparecían cuando sus puertas, como fauces, se cerraban. Desde temprano, varios cuerpos son trasladados en camilla a una extraña ambulancia -la única- sin identificación, sin placas, con apenas una pequeña cruz roja en los costados. Los del operativo dicen que ''sólo les dio un ataque de histeria''.
Desde el fondo del Che, sale rápido, como vomitado por el auditorio, el subprocurador Everardo Moreno. Toma un teléfono celular y contesta preguntas para la tele, luego toma otra llamada, le dicen que le habla ''Máximo'', pero ordena que le respondan que luego le habla. Lo rodean las cámaras de televisión, las grabadoras, las libretas de apuntes y el hombre habla con orgullo.
''Es una vergüenza para el país cómo están las instalaciones... Sí, se encontraron bombas molotov, solamente unas plantas de mariguana, šuna de metro y medio!, y algunos otras macetas con mariguana, un machete... No, ningún arma de fuego... Efectivamente, desde el viernes 4 de febrero la juez segunda dio la orden... Fue a partir de ese momento en que pudimos pensar en el operativo...
Unos policías chaparros marchan a través de los corredores. En las manos, como si fueran ofrendas, llevan las macetas con plantas y plantitas de mariguana. Una a una las van depositando en una caja que exponen en el estacionamiento de Filosofía para asombro de algunos comunicadores sin memoria. Vienen los flashazos, las cámaras de televisión. Las matas son parte del show que para ese entonces se viste con el ruido inconfundible de los informópteros. A las nueve de la mañana el sol aún no calienta y de pronto aparecen las patrullas de la Federal de Caminos. Sus ocupantes vienen armados -sí, armados, pese a que lo que se afirma- con pistolas 9 milímetros y pequeños tanques de gas paralizantes. Son parte del escenario del miedo.
Por fin, la última fila de estudiantes huelguistas sale del corredor del auditorio Che Guevara, que se mira como un túnel en donde bajo la penumbra sólo se ven los cascos, los escudos y las botas de los federales. Se metieron hasta el corazón de la Universidad Nacional y hallaron algunas plantas de mariguana, unas bombas molotov, un machete y cientos de estudiantes-niños condenados.
El auditorio de Filosofía y Letras queda atrás, sus olores, sus estudiantes, las discusiones interminables, los tiempos de lucha, de trifulca, de camaradería, de desesperación y esperanzas, ya no habitan en él. Se quedó solo junto con los rastros de las asambleas rojinegras...
* Se actuó con legalidad, pulcritud y eficacia, dice
Carrasco: razón y firmeza, ante la intolerancia reiterada
* Un pequeño grupo radicalizado se puso por encima de la ley
Alonso Urrutia * Bajo el argumento de que el conflicto en la UNAM ''dejó de ser un asunto entre universitarios y se convirtió en un asunto de Estado'' al alterar el orden público y derivar en delitos, el secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, justificó la intervención de la Policía Federal Preventiva en Ciudad Universitaria. En un mensaje, el funcionario reconoció que la restitución de las instalaciones a las autoridades no basta para resolver el conflicto, pero es indispensable para iniciar la reconciliación.
A continuación, el mensaje íntegro del secretario de Gobernación.
Pueblo de México:
Hace casi 10 meses la Universidad Nacional comenzó a transitar por un intenso proceso que abatió las posibilidades de que la institución cumpla con los altos fines que la sociedad le ha encomendado.
En el transcurso de ese lapso, la comunidad universitaria ha manifestado la necesidad de reflexionar sobre la misión profunda de la universidad y ha sensibilizado a la nación entera respecto a conducir esa reflexión hacia una nueva etapa, definida por los propios universitarios, a través del diálogo. Con el paso de los meses, tal propósito perdió su cauce legal y constructivo.
Después de graves trastornos a la vida universitaria y de los infructuosos intercambios efectuados en el Palacio de Minería a finales del año pasado, el plebiscito universitario del 20 de enero fue una acreditada expresión de la mayoría de los universitarios por recuperar la normalidad de la vida académica en sus instalaciones y proseguir en la organización de un congreso por todos planteado. A pesar de la contundencia con la cual quedó claramente manifiesta, la voluntad mayoritaria fue desconocida por una franca minoría que continuó en posesión de los edificios de la universidad.
El 4 de febrero el rector convocó a los paristas a entregar las instalaciones, asegurar el retorno a la vida académica y proseguir hacia la organización del congreso con la universidad abierta. La respuesta positiva nunca llegó.
En suma, un pequeño grupo radicalizado actuó por encima de la ley, sobre la voluntad de 180 mil de sus compañeros universitarios, contra la autonomía universitaria al impedir la cátedra, con violencia que causó heridos y arriesgó vidas humanas el pasado día primero en la Preparatoria Número 3, haciendo inevitable la intervención jurídica y operativa del Estado para prevenir mayores trastornos y delitos.
Con la mayoría de la sociedad, compartimos la convicción de que, ante la intolerancia reiterada, es necesario oponer la razón, la prudencia y la firmeza, para dar curso a la legalidad que a todos compete honrar y a la seguridad que nos brinda la ley.
Los espacios del diálogo se han agotado y es necesario reabrirlos. Se han desbordado los límites de la cordura, derivando en sucesos animados por intereses extrauniversitarios que ponen en riesgo la seguridad de la comunidad universitaria, impiden el ejercicio de la autonomía y dañan el patrimonio de la institución.
Hoy, en nombre del gobierno federal informamos, en estricto acatamiento al ordenamiento judicial correspondiente: la Policía Federal Preventiva ha actuado para restituir las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México.
El día de hoy, la operación de la Policía Federal Preventiva se llevó a cabo con absoluto sustento legal, pulcritud y eficacia. No se emplearon armas ni violencia. Se actuó en resguardo de los derechos humanos para proteger a la comunidad universitaria, procediendo a poner a los detenidos bajo custodia del Ministerio Público. Acudieron a dar testimonio notarios públicos y la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
Hemos actuado en apoyo de la comunidad universitaria, para dar curso a las deliberaciones y al imperio de la razón, asegurando el acceso de todos los universitarios a las instalaciones que les pertenecen y de las cuales habían sido despojados. El campo universitario no es ajeno al estado de derecho ni es permisible que se convierta en territorio de la impunidad.
Actuamos para disuadir sin reprimir, convencidos, como universitarios, que prolongar la huelga en un ámbito de violencia creciente significaba la cancelación de toda la vía de diálogo y solución al conflicto; más aún para atender los temas sustantivos asociados al destino de la UNAM que compete discernir únicamente a la comunidad universitaria, en ejercicio pleno de su autonomía.
Durante largos meses el gobierno federal respaldó a las autoridades universitarias sin intervenir directamente, hasta que el conflicto dejó de ser una controversia entre universitarios y se convirtió en un asunto de Estado al devenir en alteraciones del orden público, en amenaza a la integridad de mexicanos y en flagrante comisión de delitos.
Desde el inicio del conflicto, el presidente Ernesto Zedillo convocó incesantemente a los universitarios para que resolvieran sus diferencias a través de la razón y el diálogo y se comprometió a apoyar a la universidad cuando así lo requiera.
Hoy el gobierno de la República asume la responsabilidad de restablecer la paz que demanda el ejercicio pleno de la autonomía universitaria.
El gobierno federal está convencido que este paso no basta para resolver el conflicto, pero es indispensable para que los universitarios puedan, con libertad y responsabilidad, reconciliarse para debatir y conducir en armonía las transformaciones que definan el aporte fundamental de la Universidad Nacional Autónoma de México al desarrollo justo y pleno de la nación que todos queremos y merecemos.
Una sociedad democrática no puede admitir el secuestro de su Universidad Nacional. Hoy, la hemos restituido para dejar su destino autónomo, a plenitud, en manos de la comunidad universitaria.
Es por el bien de la universidad. Es por el bien de México.
Muchas gracias a todos por su atención.
* El fin, garantizar la salvaguarda de instalaciones universitarias, afirma
La PGR intervino al ya no existir conciliación: Madrazo
Alonso Urrutia * El procurador general de la República, Jorge Madrazo Cuéllar, dijo que la intervención de la fuerza pública federal en Ciudad Universitaria obedeció al cumplimiento estricto de la orden judicial -girada por la juez segundo de distrito en materia penal-, ''a fin de garantizar la salvaguarda de las instalaciones universitarias despojadas y dar cumplimiento, a través del Ministerio Público Federal'', a su devolución a la autoridades universitarias.
A continuación, el mensaje íntegro del procurador.
Señoras y señores:
A partir del mes de julio de 1999, la Procuraduría General de la República empezó a recibir diversas denuncias de maestros, investigadores, estudiantes y autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de México, mediante las cuales se hacía del conocimiento de la representación social de la Federación hecho presuntamente delictuoso, y surgidos con motivo de la paralización de las actividades sustantivas iniciadas el 20 de abril del año pasado.
Varias de estas denuncias fueron originalmente presentadas ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal y, posteriormente, remitidas a la General de la República por razón de competencia.
Los hechos denunciados fueron diversos: despojo, robo, privación de la libertad, motín, lesiones, daños al patrimonio universitario, por señalar los más importantes.
Las denuncias dieron origen a las averiguaciones previas correspondientes, muchas de las cuales, por tratarse de los mismos hechos, fueron acumuladas.
En cada caso, se solicitaron y obtuvieron las ratificaciones de las denuncias, muchas de las cuales provinieron de los representantes legales para asuntos judiciales de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Igualmente, se giraron los citatorios de ley a las personas que fueron indiciadas por los denunciantes.
El Ministerio Público de la Federación practicó las inspecciones y peritajes que correspondían, así como todas las diligencias tendientes a la integración y perfeccionamiento de las averiguaciones previas.
Siendo el Ministerio Público una institución de buena fe, con fundamento en lo dispuesto por el artículo 2, fracción 10 del Código Federal de Procedimientos Penales, asumió en todo momento una actitud tendiente a favorecer la posible conciliación de las partes.
Cuando esta posibilidad dejó de existir, dadas las repetidas expresiones de otras conductas delictivas por parte del grupo que de facto ha tenido en su poder las instalaciones universitarias, expresiones éstas que han sido del dominio público, determinó consignar diversas averiguaciones previas ejercitando la acción penal correspondiente en contra de las personas que fueron señaladas como presuntos responsables.
Estas consignaciones son independientes de aquellas que fueron presentadas con motivo de los muy lamentables hechos ocurridos en el plantel número 3 de la Escuela Nacional Preparatoria el pasado 1o. de febrero.
El día 4 de febrero del año en curso, la juez segundo de distrito en materia penal en el Distrito Federal resolvió librar orden de aprehensión en contra de 432 personas por su probable responsabilidad penal en la comisión del delito de despojo de cosas inmuebles, ilícito previsto y sancionado por el artículo 395, fracción 1, párrafo primero y penúltimo, segunda parte, del Código Penal Federal.
Tomando en consideración que los inmuebles objeto material del despojo se encuentran ocupados por las personas contra quienes se libró orden de aprehensión, la juez segundo de distrito autorizó el uso de la fuerza pública a fin de garantizar la salvaguarda de las instalaciones despojadas y dar cumplimiento exacto a su resolución, a través del Ministerio Público de la Federación.
Para ello, la juzgadora ordenó a la Policía Judicial Federal, a la Policía Federal Preventiva y a la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal prestar su auxilio al Ministerio Público, comisionando al número necesario de elementos bajo su mando.
Asimismo, la juzgadora ordenó restituir al organismo descentralizado ofendido, la Universidad Nacional Autónoma de México, en el disfrute y goce de todos los derechos de posesión que tiene sobre sus instalaciones, planteles e inmuebles.
El día de hoy, domingo 6 de febrero del año 2000, alrededor de las 6 horas, el Ministerio Público Federal, con el auxilio de la Policía Federal Preventiva, inició un operativo en las instalaciones de la Ciudad Universitaria del Pedregal, a fin de dar cumplimiento a lo ordenado por la juez segundo de distrito.
En estos momentos el operativo se encuentra en marcha y se desarrolla estrictamente conforme a derecho. De sus resultados, tanto por lo que hace al cumplimiento de los mandatos aprehensorios como de la orden para restituir a las autoridades de la UNAM en el goce y disfrute de sus inmuebles, se informará a la opinión pública a lo largo del día de hoy.
* Labastida justifica la medida extrema por la imposibilidad de dialogar
El gobierno, responsable del conflicto en la UNAM, coinciden 4 candidatos presidenciales
El candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Francisco Labastida Ochoa, consideró ''lamentable'' que el conflicto de la UNAM no se haya resuelto por el diálogo, y luego de aceptar la decisión tomada por el gobierno federal de ejecutar las órdenes de aprehensión en contra de los miembros del Consejo General de Huelga (CGH), argumentó que se hizo para evitar enfrentamientos violentos entre los universitarios. Fue una medida ''extrema'' a la que se llegó ante la imposibilidad de que el diálogo avanzara como vía de solución, advirtió.
En Tlapa, Guerrero, ante representantes de los medios de comunicación, el ex secretario de Gobernación esquivó opinar ante la decisión tomada por la dependencia de la que estuvo cargo, y no aceptó que fueron militares comisionados a la Policía Federal Preventiva (PFP) quienes detuvieron a los estudiantes. ''Son policías'', asentó.
Justificó la intervención de la fuerza pública. ''Cuando no hay diálogo no queda más que aplicar ley'', y afirmó que ''hubieran sido más lamentables enfrentamientos entre los universitarios''.
Labastida Ochoa, quien en otras ocasiones ha sostenido que grupos armados como EPR y EZLN tienen presencia entre los estudiantes paristas, en esta ocasión respondió que desconocía si esa había sido una de las razones por las cuales el gobierno federal decidió intervenir.
Negó que haya sido tardía la intervención gubernamental y opinó que las autoridades de la UNAM se esforzaron vanamente por encontrar una salida negociada. ''Creo que se evaluó que ya no se podía avanzar'', dijo al referirse a la rectoría.
Sobre la impresión de que al detener a los miembros del CGH ya terminó el conflicto en la UNAM, el abanderado del PRI contestó que eso se lo dejaba a los futurólogos, pues a los políticos les corresponde ayudar a resolverlo.
Las autoridades prolongaron el problema deliberadamente: Cárdenas
Cuauhtémoc Cárdenas desaprobó tajantemente el uso de la policía para tratar de solucionar el conflicto universitario, y afirmó que el desalojo no es la solución al problema, sino que sólo lo difiere. Se manifestó por la libertad inmediata e incondicional de los estudiantes detenidos, y acusó a las autoridades de la UNAM de intentar prolongar el problema.
Momentos antes de sostener una reunión con empresarios de Tlaxcala, Cuauhtémoc Cárdenas dijo: ''lamentamos que no se haya logrado una solución al conflicto y que haya tenido que procederse al desalojo con la PFP. Nos parece que el desalojo no es la solución al problema, solamente lo difiere y nos queda muy claro que la actitud asumida por las autoridades a lo largo del conflicto deliberadamente buscó prolongarlo hasta llevarlo a los tiempos de la contienda electoral''.
En conferencia de prensa planteó: ''Nos parece demasiada coincidencia que cuando se estaban acercando las partes a reanudar el diálogo se hayan dado las provocaciones de la Preparatoria 3 y se haya dado este desalojo de CU con la intervención, en ambos casos, de la PFP''.
Agregó: ''Esto nos deja ver que desde un principio no hubo intención de las autoridades y del gobierno de buscar una solución por la vía del razonamiento, del análisis, del diálogo y el entendimiento''.
El candidato presidencial de la Alianza por México recapituló el fondo que dio origen al problema universitario. ''No podemos desconocer el origen mismo del conflicto. Para nosotros radica en un atropello, en una interpretación, no sólo errónea sino contraria, a lo que establece la Constitución respecto de que toda la educación pública debe ser gratuita''.
Cárdenas enunció su posición: ''desde nuestro punto de vista procede en este momento, como medida de carácter político, que los detenidos sean puestos en libertad en forma inmediata e incondicional y se proceda de inmediato también a convocar el congreso universitario, para que determine cómo va a desarrollarse el sistema de educación superior y particularmente la UNAM''.
Concluyó: ''Ahí está la solución al conflicto, no en el desalojo, tampoco está en pensar en más medidas de violencia, sino en buscar la conciliación de intereses, en entender que lo que importa en este caso es la universidad, la educación superior del país, las oportunidades para los jóvenes, y no seguir profundizando los conflictos como parece ser la actitud que tienen las autoridades''.
La incapacidad política llevó a usar la fuerza, afirma Fox Quesada
El candidato pr esidencial del Partido Acción Nacional (PAN), Vicente Fox Quesada, resaltó en la ciudad de Querétaro que la incapacidad política del gobierno federal para encontrar una salida al conflicto universitario por medio del diálogo derivó en el uso de la fuerza pública para recuperar las instalaciones de la UNAM.
''Esto es lo que no me gusta de un gobierno, que pierde la capacidad política y al final tenga siempre que estar imponiendo soluciones o por corrupción o por imposición'', declaró al ser entrevistado antes de la Reunión Nacional de Propuesta Legislativa que sostuvieron integrantes del PAN en esa ciudad.
Fox Quesada confió en que luego de haber optado por esta medida le salgan bien las cosas al rector de la universidad Juan Ramón de la Fuente. ''Ahora que optó por este camino, me supongo que él dio la instrucción y la orden de que entrara la policía a la UNAM''.
El aspirante a la silla presidencial consideró que ''está dudoso el procedimiento'' mediante el cual fueron recuperadas las instalaciones de la UNAM. ''Aquí lo que demostró el gobierno federal es incapacidad política de haber resuelto el problema por otras vías'', recalcó.
Añadió que el único causante del conflicto en la UNAM fue el propio gobierno federal con la reducción del presupuesto a las universidades públicas que ''les obliga a conseguir recursos por otro lado''.
Podría desatarse la inestabilidad social, advierte Muñoz Ledo
Ante la intervención de la fuerza pública en la UNAM, ''es preocupante que el gobierno esté enorgulleciéndose de un hecho que le es imputable'', consideró el candidato presidencial del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM), Porfirio Muñoz Ledo, quien se manifestó por la reanudación del diálogo y el cese de los procedimientos policiacos en la máxima casa de estudios del país.
En rueda de prensa, luego de encabezar un acto en el Teatro Ocampo de esta capital y al que asistieron unas 500 personas, Muñoz Ledo no descartó que los hechos tendrán un efecto en el proceso electoral en marcha, al igual que podrían generar un clima de inestabilidad social.
''La comunidad universitaria tiene que encontrar un camino; hay actores que debieran sentarse en la mesa, debe haber representaciones estudiantiles válidas, no creo que perseguir hasta acabar con el adversario sea un buen método; debe restablecerse el diálogo con los actores responsables de la UNAM y uno de los temas de un diálogo es la distensión'', expuso.
En su opinión, en el conflicto de la UNAM hubo, ''por un lado, torpeza de la autoridad, reiterada, y por el otro, un rebasamiento de los más radicales''. Añadió que ''tendrá que saberse la verdad histórica del conflicto, quiénes pagaron, quiénes lo estimularon y lo llevaron a los extremos a los que llegó''. El extremo policiaco, agregó, ''revela la falta de previsiones y de capacidad del gobierno para resolverlo mediante el diálogo''.
Sobre un clima de inestabilidad a partir de los hechos de esta mañana, y advirtiendo que no quería asumir el papel de ''ave de mal agüero'' por predecirlo, Muñoz Ledo hizo una larga pregunta: ''ƑEste problema no se prolongó por un doble cálculo perverso, por un cálculo del gobierno y del PRI, de que complicándose para generar un clima de inestabilidad social y en donde volverían a tener a su favor el voto del miedo, como lo tuvieron en 94, y por un cálculo también torcido de las autoridades de la ciudad (de México), de que los estudiantes en la calle iban a ser un caldo de cultivo y un cuerpo electoral para ellos?''.
La toma, confesión del fracaso de una política, afirma Camacho Solís
El candidato pr esidencial del Partido de Centro Democrático (PCD), Manuel Camacho Solís, aseveró ayer que el presidente de la República, Ernesto Zedillo, es el responsable de que se haya generado el conflicto universitario y de haberlo dejado sin atender durante casi un año. ''La toma de la UNAM no es un éxito del gobierno, es el fracaso de una política''.
Camacho Solís sostuvo que ''la decisión que provocó el conflicto, el alza de cuotas en la universidad, la tomó el presidente Zedillo y la sostuvo su secretario de Gobernación, Francisco Labastida Ochoa. La falta de atención oportuna al conflicto, que hubiera evitado todos los costos en los que ya se incurrieron, fue decisión del Presidente y de su secretario de Gobernación''.
En conferencia de prensa ofrecida en las oficinas del PCD, insistió: ''La toma de la universidad por la policía es la confesión del fracaso de la política y es una decisión del Presidente quien, conforme a su propia declaración, comparte ya el poder con el candidato del PRI, Francisco Labastida''.
Camacho fijó su postura sobre la toma de la UNAM por la policía en el documento: En defensa de la UNAM y de la estabilidad política. Resaltó que ''fue el Presidente quien tomó la decisión de elevar las cuotas y quien no previó la reacción que habría; o peor aún, quien observando la dinámica de este movimiento, apostó a su descomposición y radicalización, para al final utilizarlo políticamente''.
El siguiente paso en la política gubernamental será decir ''o estás del lado de la ley o estás del lado del CGH. El dilema es falso porque hay otra manera de resolver los conflictos y de gobernar. Lo que ya ocurrió dentro de la UNAM lo van a querer llevar al terreno de la vida política nacional. La apuesta de la polarización, sabe el gobierno, es el recurso más seguro para provocar abstencionismo, desánimo y temor. Otra vez van por el voto del miedo. Sólo con el voto del miedo pueden mantener el status quo político'', sostuvo.
A los paristas, aplicar la ley con todo rigor, exige Rincón Gallardo
El candidato pres idencial del Partido Democracia Social (PDS), Gilberto Rincón Gallardo, se manifestó en Hermosillo, Sonora, por la aplicación de la ley con todo rigor para los paristas, por el daño irreparable cometido en perjuicio de la UNAM.
Demandó a las autoridades del Poder Judicial ''no fabricar pruebas'' para sentenciar a los paristas del Consejo General de Huelga (CGH) en prisión, como sucedió con algunos expedientes que fueron ''enterrados'' en relación con el movimiento estudiantil del 68. Llamó a las autoridades del Poder Judicial a no ceder a chantajes y presiones de familiares y simpatizantes del movimiento ni negociar las leyes en pro de la liberación de los paristas.
En gira proselitista por Sonora expresó que además de los procesos judiciales que se siguen contra los ''pseudo universitarios'', las autoridades de la UNAM deben restablecer el diálogo y tomar las medidas que permitan encontrar el camino para construir la reforma universitaria.
Manifestó que las partes en conflicto deben buscar los caminos políticos que exige la tolerancia para llevar a buen término este conflicto político-social que tanto daño ha causado a la comunidad universitaria y al país, toda vez que la imagen de México hacia el exterior se ha deteriorado ha consecuencia de esta problemática.
Explicó que se debe dar curso estrictamente legal a las demandas interpuestas contra los paristas y liberar a los que no tengan pruebas en contra. ''No se deben fabricar pruebas para no caer en errores como los del movimiento del 68''. (José Gil Olmos, Juan Antonio Zúñiga, José Antonio Román, Víctor Ballinas, y Alejandro González Anaya, Raúl López Téllez y Cristóbal García Bernal, corresponsales)
* Sólo el PRI respalda la decisión de desalojar instalaciones de la UNAM
Condenan partidos intervención policiaca
El deslinde de responsabilidades debe involucrar a Barnés y Labastida
Juan Antonio Zúñiga, enviado, Tlaxcala, Tlax., 6 de febrero * En torno a la intervención policiaca para desalojar las instalaciones universitarias, el CEN del PRD exigió que el deslinde de responsabilidades "involucre a los funcionarios que originaron el conflicto hace casi 10 meses: al ex rector Francisco Barnés y al ex secretario de Gobernación, Francisco Labastida".
La declaración perredista, dada a conocer por la noche, sostiene que el gobierno federal, "en su manía privatizadora, es el principal responsable de la generación del conflicto, así como de la pretendida solución policiaca del mismo"; pero también apunta: "Reiteramos nuestro desacuerdo con la parte del CGH que coincidió con el sector gubernamental y universitario que en todo momento obstaculizó una solución pronta y negociada de la huelga".
Hace un llamado a la sociedad en su conjunto, a la intelectualidad democrática y a los universitarios en particular, "a movilizarse para defender a la UNAM, que debe seguir siendo sede de la inteligencia, el conocimiento y la razón, así como para detener el avance de la intolerancia y de la fuerza en este momento crucial que vive nuestra patria".
La directiva nacional perredista hace un llamado urgente a la reconciliación entre los universitarios y a una solución de fondo y pacífica sobre las siguientes bases: retorno al diálogo mediante la salida inmediata de las fuerzas policiacas del campus universitario; respeto irrestricto de los derechos humanos; liberación de todos los menores de edad; retiro de las denuncias, "que a todas luces son exageradas contra la mayoría de los detenidos", así como el deslinde transparente y escrupuloso de responsabilidades penales.
En opinión del PRD, "esas medidas permitirían que, bajo distintas modalidades, los detenidos queden en libertad y se genere el clima de distensión que urge en estos momentos". Propone también que el Consejo Universitario formalice la derogación del Reglamento General de Pagos que dio origen a la huelga y lograr acuerdos que permitan realizar a la brevedad el congreso resolutivo, en el que se discuta y decida el futuro de la UNAM.
"Una vez más estamos frente al doble lenguaje del gobierno zedillista para engañar a la sociedad. Es inadmisible que quienes hasta hace dos días eran interlocutores válidos para la rectoría, el gobierno federal y la Comisión Nacional de Derechos Humanos ahora sean considerados delincuentes de alta peligrosidad."
Sin embargo, aclara: "Estamos conscientes de que la prolongación de la huelga ha provocado daños incalculables a la sociedad y ha sumido en la desesperación a decenas de miles de universitarios y sus familias, quienes en una porción importante han llegado a simpatizar con el regreso a clases a costa de lo que sea".
La dirección nacional perredista apunta que ese ambiente fue alimentado "con una estrategia de desinformación del propio gobierno, aunada a la incapacidad y lentitud para tomar iniciativas que atendieran las causas del conflicto".
El gobierno, parte del problema
y no de la solución: Bravo Mena
José Antonio Román, enviado, Querétaro, Qro., 6 de febrero * Con la intervención de la Policía Federal Preventiva (PFP) en Ciudad Universitaria quedó claro que el gobierno federal, en algún grado, ha sido parte del problema y no de la solución, afirmó el dirigente nacional del PAN, Luis Felipe Bravo Mena.
Pidió que no sólo se juzgue a los estudiantes que son acusados, sino también la conducta y los antecedentes de funcionarios públicos que por diversas razones, "en las que probablemente haya grados de incapacidad", hicieron que el conflicto universitario durara tanto tiempo y llegara a la intervención de la fuerza pública.
Luego de encabezar junto con Vicente Fox la reunión nacional de Propuesta Legislativa en el Teatro de La República, Bravo Mena fijó una postura "preliminar", tanto de su partido como de su abanderado presidencial, pues a esa hora no se tenían elementos suficientes para asumir una posición final.
"Debe haber, sin duda alguna, y esto que quede muy claro, una rendición de cuentas de todos los que han estado involucrados, funcionarios de todo tipo que hicieron que el conflicto llegara a esa situación."
Insistió: "El gobierno y las autoridades universitarias deben a los mexicanos todavía muchas respuestas. ƑEs realmente su intención mejorar la situación de la universidad o sólo dar un golpe político con propósitos electorales?"
Bravo Mena lamentó "profundamente" que la vía del diálogo no haya fructificado. Sin embargo, exhortó a las autoridades universitarias a hacer posible el diálogo a la brevedad posible y restablecer la vida académica y la discusión de fondo de los problemas que tiene la máxima casa de estudios del país.
"Pensamos que el llamado del rector al diálogo fue auténtico, pero queremos que se demuestre con los hechos en los días inmediatos. ƑO vamos a entrar a una nueva situación en la que nadie es responsable, como se ha visto en tantas ocasiones: en el error de diciembre, en el conflicto de Chiapas? ƑAhora simplemente en la universidad no hay responsables?"
Destacó que si bien los hechos ocurridos en la UNAM responden a una orden judicial, el PAN estará pendiente de que la actuación de las autoridades se ajuste precisamente al espíritu y a la norma legal y se cumpla el estado de derecho.
"Si la autoridad eligió ese camino, esperamos que se llegue a la solución pacífica y se logre la apertura de la universidad por el bien de todos los mexicanos, y eso redunde en el mejoramiento del sistema de educación pública".
Incapacidad oficial para lograr una salida política
La directiva nacional del PT condenó la toma de las instalaciones de la UNAM por la Policía Federal Preventiva. "Con esa medida se agudiza y polariza el problema universitario iniciado hace más de nueve meses", comentaron Alberto Anaya Gutiérrez y José Narro Robles, dirigentes de ese partido.
"La intervención de la PFP en la toma de las instalaciones de la UNAM violenta la autonomía de la vida universitaria, y deja en claro que para el gobierno federal la aplicación del uso de la fuerza es la única salida, ante la incapacidad de lograr una solución política que concilie los intereses superiores de la UNAM", agregó Anaya.
Narro Céspedes y Anaya Gutiérrez criticaron al secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, por asumir un papel que no le corresponde: "vocero de la UNAM". Ambos dirigentes pidieron al rector Juan Ramón de la Fuente que reinstale el diálogo con los universitarios, y que otras instancias del poder público, como el Congreso de la Unión, actúen como mediadoras ante la "incapacidad manifiesta" de las autoridades universitarias y del gobierno para resolver por la vía pacífica el conflicto.
Los líderes petistas insistieron en que la solución del conflicto debe buscarse sin la injerencia de organizaciones o de fuerzas externas a la UNAM ni del gobierno federal. Convocaron a las organizaciones sociales que "hayan apoyado abiertamente al Comité General de Huelga a que saquen las manos de la universidad y dejen que los universitarios, en el ámbito de su autonomía, encuentren una salida digna que fortalezca el papel de la UNAM como instancia rectora de la educación superior del país".
Narro y Anaya exigieron que los estudiantes detenidos sean liberados de inmediato, se investigue la existencia de grupos de seguridad al interior de la UNAM y se protejan los derechos humanos de los paristas. (Matilde Pérez U.)
El desalojo, apegado a la ley; era una demanda mayoritaria
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) respaldó ayer la decisión del gobierno de utilizar a la Policía Federal Preventiva (PFP) para "desalojar las instalaciones de la UNAM". Eso, manifestó, "se desarrolló de manera pacífica, en apego a la ley y con pleno respeto a los derechos humanos".
Según el PRI, el desalojo de las instalaciones de la universidad era una "demanda mayoritaria de la comunidad universitaria y de toda la sociedad. Con la recuperación de las instalaciones, los universitarios tienen la oportunidad de emprender la construcción de una universidad de excelencia, a la altura de los retos del nuevo siglo".
En un comunicado de prensa, el PRI destaca que "la eficacia y la plena vigencia del estado de derecho es condición indispensable de la construcción de una democracia moderna y madura". También hace un llamado a la reconciliación de los universitarios y a emprender la reconstrucción de la UNAM.
Cambio de oferta en 80 días
Karina Avilés * Bastaron 80 días desde que tomó posesión para que el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, cambiara la oferta del diálogo por la de la intervención de la fuerza pública. A continuación, algunos de sus dichos en momentos clave del conflicto:
19 de noviembre: Exhorto a los alumnos que han optado por el paro a dialogar con el respeto que nos merecemos unos y otros, en la mejor tradición universitaria. Un diálogo que permita ya avanzar en la solución del conflicto. (Discurso de su toma de posesión)
26 de noviembre: Convoco a los universitarios a delinear una propuesta institucional que recoja los puntos de convergencia y pueda responder dentro del marco jurídico vigente a los puntos del pliego petitorio del Consejo General de Huelga (CGH).
29 de noviembre: Me da, en verdad, mucho gusto poder sostener este encuentro con los delegados del CGH. Creo que tiene un profundo significado, porque representa un primer acercamiento que nos encamina hacia la solución del conflicto, y con base en el diálogo respetuoso que siempre ha caracterizado a los universitarios y un intercambio libre de ideas, en presencia de los medios de comunicación, estoy seguro de que vamos a poder avanzar... Los seis puntos del pliego petitorio del CGH los tenemos que resolver con quienes los han planteado, es decir, con el CGH. (Primer encuentro en el Palacio de Minería)
9 de diciembre: La vida institucional no puede eliminarse de la actividad universitaria... No se transgredirá un ápice el marco jurídico vigente en la UNAM.
14 de diciembre: La universidad debe emprender, con la participación de los diferentes sectores de la comunidad, pero sobre todo con una nutrida concurrencia de sus académicos, una reforma de alcances más amplios y más profundos que las transformaciones generales previstas en las políticas que venían orientando a la institución y que las demandas particulares emanadas del conflicto que actualmente vive. (Mensaje del rector en el antiguo Colegio de San Ildefonso)
14 de enero: El diálogo no está roto, está en receso, y vamos a seguir adelante con el plebiscito, que es la expresión democrática y mayoritaria de los universitarios. Cuando tengamos esa expresión, cuyo resultado aceptaré de antemano y espero que todos acepten, continuaremos el diálogo.
24 de enero: Exhorto al CGH a que reconozca y acate la voluntad general de la comunidad universitaria, y lo convoco a que a las 10 horas de mañana nos reunamos en la explanada de la torre de rectoría para que le entregue personal y formalmente el resultado del plebiscito y reanudemos de inmediato el diálogo en Ciudad Universitaria, con las instalaciones abiertas a todos los universitarios... Contra lo que han especulado quienes no parecen querer que el conflicto se resuelva, el plebiscito no es el fin del diálogo. Al contrario, implica el acotamiento preciso para continuarlo y el mandato de llevarlo a sus últimas consecuencias: la solución final del conflicto y la reforma de la Universidad Nacional. (Mensaje del rector en el antiguo Colegio de San Ildefonso)
25 de enero: Lo que en realidad está en juego en este México de inicios del nuevo siglo es si verdaderamente somos capaces de encontrar a un conflicto tan complejo como el universitario una salida pacífica, una salida democrática, una salida que permita que se respete el sentir de la mayoría... Que nos dejen a los universitarios resolver nuestros problemas, que los grupos externos dejen de una buena vez en paz a la UNAM. (Conferencia de prensa de en la Casa Club del Académico, luego de estar a unos pasos de la explanada de rectoría)
1o. de febrero: Ante los sucesos de violencia ocurridos en la Preparatoria 3, Juan Ramón de la Fuente exhortó a los antiparistas a evitar recuperar planteles en manos del CGH y a realizar asambleas en sedes alternas.
* Los organizadores calcularon 15 mil participantes
Multitudinaria manifestación en apoyo a los paristas arrestados
* "šNo están solos!", la principal consigna de los marchistas
Claudia Herrera Beltrán * Once horas y minutos después de la detención de más de 600 huelguistas, miles de personas marcharon del Angel de la Independencia al Monumento a la Revolución en demanda de la liberación de estudiantes y sindicalistas y en repudio al ingreso de la Policía Federal Preventiva al campus de la UNAM.
Los manifestantes, entre los que se encontraban estudiantes, académicos y trabajadores de la UNAM, además de alumnos de la UAM, de la UPN, del Instituto Politécnico Nacional y normalistas rurales, así como maestros de la CNTE e integrantes de la Central Unitaria de Trabajadores, responsabilizaron de la "represión" al presidente Ernesto Zedillo, al secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, y al rector de la máxima casa de estudios, Juan Ramón de la Fuente.
šNo están solos!, fue el grito de más de 10 mil personas (los organizadores hablaban de 15 mil y la Secretaría de Seguridad Pública de 7 mil) que caminaron a lo largo de Paseo de la Reforma y de avenida de La República hasta llegar a las puertas de la delegación de la PGR, donde hicieron un mitin en medio de granaderos y policías de la Montada que resguardaban el inmueble.
La segunda movilización del día congregó tal número de universitarios y representantes de organizaciones sociales y sindicales, que permitió la planeación de futuras acciones: una asamblea extraordinaria del Consejo General de Huelga hoy a las 12 horas en la Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco, una reunión de organismos sociales y padres de familia en la sede de la sección 9 del SNTE y una asamblea de académicos en el Centro Universitario Cultural.
Casi mil estudiantes detenidos en el país
La molestia de los marchistas se acrecentó al conocer que en todo el país suman cerca de mil los estudiantes detenidos, entre los 270 de la UNAM, aprehendidos la semana pasada, los más de 600 ayer y 81 de la Escuela Normal Rural de El Mexe, Hidalgo.
En la efervescencia llegó a hablarse hasta de un paro nacional de protesta, boicots a empresas importantes como Coca Cola y se hicieron llamados a los intelectuales a que se pronuncien a favor de la liberación de los jóvenes.
Y es que la tranquilidad de este domingo se rompió con una protesta que para muchos fue de una magnitud sorpresiva. "La gente se desbordó", comentaban miembros del Consejo General de Huelga que se salvaron de la aprehensión, cuando vieron que miles de personas comenzaron a llenar el Paseo de la Reforma reclamando que "el diálogo no sea el de los toletes".
Poco antes de las 17 horas, las escalinatas del Angel de la Independencia ya no daban cupo a los inconformes y media hora después, los carriles sur y norte de la avenida seguían recibiendo manifestantes provenientes de diversos puntos de la ciudad.
A las 17: 30 horas, encabezados por padres de familia de los estudiantes, los contingentes comenzaron a avanzar. Iban alumnos y académicos de los planteles de los colegios de Ciencias y Humanidades, de las nueve preparatorias, de las distintas facultades y escuelas universitarias, así como del Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM, estudiantes de la Universidad Autónoma Chapingo, de la Escuela Normal Rural de El Mexe y profesores de la Universidad Pedagógica Nacional. Atrás, profesores de la CNTE e integrantes del Frente Popular Francisco Villa.
Desperdigados, se encontraban muchos funcionarios perredistas del Gobierno del Distrito Federal, además de ex diputados federales y diputados locales de ese partido.
De mil formas expresaron su inconformidad. Llevaban pancartas, inventaron consignas, colgaron en sus coches carteles demandando la "liberación de los presos políticos" y dejaron pintas en paredes. Una de ellas preguntaba: Ƒestado de derecho?, y el responsable del 2 de octubre del 68, del halconazo de Acteal, de El Charco. ƑDe qué justicia se habla?"
Esto es el diálogo que les dijeron a nuestros hijos, exclamaba una de las madres que iba al frente de la marcha, y quien sostenía una cartulina que llevaba escrito el apellido del Presidente con una suástica en lugar de la z inicial. Como ésta, se multiplicaron las quejas contra lo que calificaron como un gobierno "fascista y represor".
En el trayecto se leyeron mensajes enviados por los paristas desde el Reclusorio Norte. Uno de ellos le daba la bienvenida a Zedillo a la "larga lista de traidores a la patria" por haber detenido a estudiantes que luchan por la gratuidad de la educación en vez de a los banqueros defraudadores del Fobaproa.
Los espontáneos y curiosos se colocaban en la acera derecha. Había desde entusiastas que aplaudían, hacían la señal de la "V" de la victoria, hasta los conductores molestos que tuvieron que circular por los carriles laterales, lo que ocasionó un fuerte problema vial en un pequeño tramo de Paseo de la Reforma.
Cuando comenzaba a caer la noche a la altura de Bucareli, los marchistas tuvieron la disyuntiva de ir a la izquierda o a la derecha. Prefirieron avanzar hacia el Monumento a la Revolución. Las dudas se generaron porque inicialmente se propuso llegar hasta la Secretaría de Gobernación y luego a la Plaza de la Constitución.
A punto de llegar a su destino, un anciano arengaba a la multitud con las manos y decía "tranquilos, hay muchos policías". La zona estaba rodeada de centenares de granaderos, concentrados enfrente de la PGR, así como de otros que discretamente se colocaron en las calles que confluyen en el lugar. Poco después, había unos 50 elementos de la Policía Montada.
Sin embargo, no hubo problemas, salvo las complicaciones que provocaron decenas de camiones que estaban estacionados en el lado poniente del monumento y que hicieron que los marchistas tuvieran que rodear para luego concentrarse en el interior.
Transcurrieron dos horas en las que decenas de oradores pronunciaron discursos reprobando la "violación de la autonomía universitaria". Mientras tanto, arreciaban las consignas frente al edificio de la PGR, donde se encontraban padres de familia en espera de poder platicar con sus hijos que desde temprana hora habían sido trasladados ahí.
Entonces se decidieron las acciones de protesta y reuniones que comenzarán a partir de hoy. Tiempo después, a las 21 horas, la mayoría de los marchistas ya se habían retirado y en las columnas del monumento de la gesta de 1910 quedaron carteles con los nombres de paristas detenidos o desaparecidos.
* Dos horas después del operativo cientos de personas se reunieron en Insurgentes
Espontáneo repudio popular a la acción de la PFP
David Aponte y Claudia Herrera * La movilización de los padres de familia y estudiantes comenzó dos horas después de la entrada de la Policía Federal Preventiva a Ciudad Universitaria. La primera marcha en protesta por la detención de más de 600 estudiantes logró reunir unas 3 mil personas.
A las ocho de la mañana, decenas de personas acudieron al cruce de Copilco e Insurgentes para "saber qué había pasado en las instalaciones de la UNAM". La policía Montada del Distrito Federal no les permitió el paso.
Los padres de familia y algunos estudiantes se replegaron hacia el Monumento a Alvaro Obregón. De manera espontánea elaboraron carteles con leyendas alusivas a la detención de universitarios. En unas cuantas horas organizaron la primera marcha de repudio contra "la política del presidente Ernesto Zedillo hacia los paristas y la solución de fuerza al conflicto universitario.
Para las 11 de la mañana, el contingente sumaba menos de 200 personas. Entre ellos comenzó a circular la propuesta para marchar al Monumento a la Revolución y hacer un mitin frente a las oficinas de la PGR, ubicadas en la Plaza de la República.
La marcha salió del Monumento a Alvaro Obregón a las 11:25 horas. Los padres de familia de los estudiantes detenidos encabezaron la protesta."šLa UNAM no es cuartel, fuera Ejército de él! šLos estudiantes son inocentes, el terrorista es De la Fuente! šLibertad, libertad, a los presos de la UNAM! šZedillo, De la Fuente, represor de la gente! šDe la Fuente, Zedillo, el mismo batidillo!", lanzaron al comienzo de la larga caminata.
Antes de llegar a Barranca del Muerto, la marcha aglomeraba ya a unos mil padres de familia y estudiantes.
El diputado perredista Gilberto López y Rivas llegó al lugar para acompañar a los inconformes. "Me parece injustificable que el rector piense que la entrada de la policía a la UNAM, sobre todo este cuerpo integrado por militares, sea la solución al conflicto. Este es el segundo objetivo de la línea represiva de Zedillo después de Chiapas. De tal forma que la elección presidencial del 2 de julio queda contaminada con esta decisión", opinó el integrante de la Cocopa.
Durante el recorrido, algunos automovilistas manifestaban su apoyo con la bocina y con la "V" de la victoria.
Margarita Gómez, mujer de unos 60 años de edad, gritaba en el crucero de Río Churubusco: "šAbajo Zedillo, abajo el rector!". El contingente arreció la arenga contra el Presidente y De la Fuente: "Ese plebiscito fue puro disimulo, que lo hagan rollito y se lo metan por el culo. Que renuncie De la Fuente por ojete y prepotente. De la Fuente no es rector, es un puto represor".
Uno de los padres de familia, al frente de la marcha, comentaba con otros: "No entiendo a Zedillo. El es hijo de un electricista y tuvo carrera gracias a la educ ación pública. Y ahora hace estas cosas. No lo entiendo".
Antes de llegar a Xola, estudiantes del IPN y algunos miembros del STUNAM se sumaron al contingente.
La primera marcha en contra de la intervención de la PFP en la UNAM llegó a su destino a las 14:30 horas. El contingente entró a la Plaza de la República, donde se topó con una valla de granaderos y de integrantes de la nueva corporación federal. Tan situación provocó tensión y gritos. Ahí, ya estaban cientos de personas que pedían información sobre los detenidos.
"Queremos ver que los muchachos estén bien y comprobar que la detención haya sido legal. Ver a mi hijo es mi derecho como padre de familia", comentó Cristóbal Guerra.
Así empezó la jornada de protestas en contra de la entrada de la PFP a la UNAM y de la detención masiva de paristas.
* Los dos grandes consorcios televisivos justificaron la intervención policiaca
Amplia cobertura en tv del Operativo UNAM
Ciro Pérez Silva * Poco después de las 7 de la mañana, las imágenes y narraciones del desalojo y aprehensión de paristas en Ciudad Universitaria empezaron a ser difundidas por las dos principales cadenas de televisión (Televisa y Tv Azteca) y la estación radiofónica Radio Red. Al tiempo en que se mostraba la remoción de escombros y el cerco policiaco en los alrededores de las instalaciones educativas, los diferentes conductores y reporteros presentes en el campus universitario iniciaron su intervención justificando ante la opinión pública la presencia de la Policía Federal Preventiva.
Reiteradamente informaron que la participación de los elementos de este grupo de seguridad respondía al cumplimiento de una orden obsequiada por la juez segunda de distrito, María del Carmen Flores Cervantes, para reintegrar las instalaciones a las autoridades universitarias y que la recuperación transcurrió "en completa calma y sin incidentes".
La presencia de estos medios electrónicos y de la PFP en Ciudad Universitaria fue simultánea. Las primeras imágenes al aire, filmadas antes del amanecer y transmitidas de forma diferida, dieron cuenta del despliegue de los uniformados frente a la explanada de rectoría y su posterior ingreso por los jardines y pasillos del campus, hasta cercar el auditorio Che Guevara. Se informaría más tarde que las barricadas se encontraban resguardadas por apenas 12 estudiantes.
Las cámaras siguieron a los tres contingentes de la Policía Federal Preventiva, integrados por 2 mil 260 elementos, en su despliegue por escuelas y facultades de Ciudad Universitaria, peinando salones, laboratorios, auditorios, estacionamientos y el túnel que comunica la explanada con avenida Insurgentes y el estadio olímpico México 68.
De los 632 detenidos que reportaron las televisoras, 430 fueron sorprendidos en el auditorio Che Guevara y escoltados, uno a uno, por elementos de la PFP hasta autobuses privados, en medio de una valla que separaba a los informadores del grupo de paristas. Los primeros estudiantes en salir del inmueble en su camino a los autobuses reflejaban sorpresa y desconcierto en el rostro, mientras que otros alzaban tímidamente el puño izquierdo o mostraban la "V" de la victoria; muy pocos lanzaron consignas.
Los dirigentes del Consejo General de Huelga que se encontraban también en el auditorio salieron esposados y su destino fue distinto al de sus compañeros. En lugar de abordar uno de los 30 camiones del servicio público como el resto de los paristas, fueron trasladados a camionetas con vidrios polarizados. En su camino, Alejandro Echevarría, El Mosh y Mario Benítez fueron captados mientras advertían a gritos que el CGH no dará "ni un paso atrás" y convocaban a los medios para que difundieran que "estamos luchando por la educación pública" de los hijos de los trabajadores.
Estas imágenes, al igual que la advertencia de que la Policía Federal Preventiva actuó atendiendo a una orden obsequiada por una juez y que en el operativo no hubo heridos ni uso de armas, se repitieron una y otra vez durante toda la emisión, que en el caso de Televisa concluyó a las 11:55 y en el de Tv Azteca a las 12:00, en ambos casos para dar paso a la transmisión de los partidos de futbol del domingo.
Una vez concluido el aseguramiento de los paristas, las cámaras de televisión mostraron, ya en transmisiones en vivo, 10 recipientes que servían para cultivar plantas de mariguana y algunas bombas molotov, además de un cuchillo y un taladro, que resultó ser todo el "arsenal" con el que contaban los estudiantes.
El análisis de los conductores se detuvo algunos minutos en las plantas de mariguana y en las bombas molotov, que los propios policías desplegaron en el piso para que pudieran ser captadas adecuadamente por las cámaras de video y fotográficas que buscaban nuevos ángulos de esta historia.
Vino luego el recorrido por el interior del auditorio Che Guevara. Se mostró el deterioro de las instalaciones, la basura acumulada en los rincones, las pintas y cobijas abandonadas en las butacas. Las escenas se repetían en otras escuelas y facultades como la de Derecho, donde se encontraron mesas cubiertas por recipientes de todo tipo que contenían restos de comida, y como una constante, pupitres destruidos, instalaciones dañadas y basura, mucha basura.
Antes de concluir la transmisión, Federico Reyes Heroles fue entrevistado vía telefónica. Habló primero con Guillermo Ortega, de Televisa. Dijo que en los últimos años, los mexicanos nos hemos centrado en la construcción de la democracia velando porque contemos con una representación adecuada, pero el otro lado de la democracia, dijo, es que nadie está por encima de la ley.
Como parte de la comisión que acompañó al rector Juan Ramón de la Fuente a la última reunión bilateral con los paristas el pasado viernes, Reyes Heroles narró las "12 horas tormentosas" que duró el encuentro y cómo los paristas retrocedían cuando parecía que empezaban a llegar a acuerdos. Parecía, dijo, que temían ser agredidos "incluso físicamente" si acordaban algún punto con el rector, "quien sostuvo siempre un diálogo abierto y franco" con los paristas.
Lamentó que no se lograra una solución política, pero consideró que en la dureza del CGH influyó la presencia de grupos que pretendían encontrar, a través del paro, beneficios políticos. "Para su desgracia se les revirtió, no resultó un buen negocio. Al interior de Ciudad Universitaria había pólvora y bombas molotov que evidentemente no son un mecanismo de diálogo".
Reyes Heroles fue entrevistado minutos después por Javier Alatorre, conductor de Tv Azteca, reiterando sus primeras declaraciones, al tiempo que se mostraban imágenes de los paristas al ingresar a los centros de la Procuraduría General de la República y de los helicópteros de las televisoras en su recorrido por Ciudad Universitaria y otros planteles universitarios.
En estas declaraciones coincidió el escritor Héctor Aguilar Camín. Entrevistado por Ortega Ruiz, el intelectual demandó que en la consignación de los paristas se actúe con estricto apego a la ley y no haya ninguna alteración o exageración de los cargos que se les imputan. Aseguró que todos debemos acostumbrarnos a la aplicación de la ley, frente a la que somos iguales.
En el mismo sentido se expresó el líder de los empresarios, Jorge Marín Santillán, quien se congratuló porque este domingo "se dio una muestra de que las instituciones prevalecen sobre los intereses de grupos minoritarios que se habían infiltrado en la UNAM", es, dijo, una clara muestra de que se establece el estado de derecho
Al mediodía, el amplio despliegue de ambas televisoras concluyó con la misma frase: la Policía Federal Preventiva intervino en cumplimiento a una orden judicial, librada por la juez segundo de lo penal, María del Carmen Flores Cervantes. Los policías ingresaron a Ciudad Universitaria únicamente con sus toletes, chalecos antibalas y escudos, sin que se registraran lesionados.
En su propia voz
Artistas e intelectuales expresaron su indignación ante el uso de la fuerza y la exigencia tenaz del diálogo como salida al conflicto, entre otros planteamientos, luego del amplio operativo que ejecutó el gobierno la madrugada del domingo en Ciudad Universitaria. A continuación, las opiniones de algunos integrantes de la comunidad de creadores mexicanos
Ha sido una trampa tras otra
Estoy desesperada porque creo que, como dice el dicho, "tú te lo guisas, tú te lo comes". Es decir, esto lo ha armado y desarmado la Secretaría de Gobernación. ƑQuién asegura que no se está desmantelando en estos momentos la UNAM? ƑQuién puede decir que no están en este momento saqueándola? Le han querido poner trampas al gobierno capitalino, pero Rosario Robles no ha caído en esas provocaciones. La cosa es complicada porque la policía del GDF está en la calle, obligada a ello. Tampoco es posible que la comunidad universitaria vigile lo que esta está haciendo una policía delincuente. Hay que exigir la liberación inmediata de los presos políticos y encontrar la manera de que la comunidad universitaria esté presente ya en CU, porque no tenemos idea de lo que está pasando allá adentro. Es una trampa, ha sido una tras otra, a tal grado que la comunidad universitaria está desconcertada. Esos pillos sin escrúpulos -Zedillo, Labastida y su banda- han sido muy hábiles; ahora tienen la sartén, el dinero y los medios por el mango. Ellos provocaron el conflicto universitario y ahora el rector De la Fuente sale con su cara de bueno, pidiendo benevolencia para los detenidos, sin dar explicaciones de lo que hizo en la Prepa 3, que fue una trampa para Rosario Robles. Es muy complicado. Una sociedad entera está puesta en vilo.
Jesusa Rodríguez, actriz
Se impide la solución del conflicto
Muestro mi absoluto rechazo a la intervención policiaca en asuntos universitarios, porque en definitiva no creo que eso ayude a resolver el problema. Desde que comenzó el conflicto ha habido voces sensatas que han mantenido que el diálogo es la única solución. No creo que el diálogo se puede realizar con 600 estudiantes en la cárcel, acusados de delitos excesivos. El primer paso será ponerlos en libertad.
Vicente Rojo, pintor
No augura clima de diálogo en el país
Siempre es condenable el uso de la fuerza pública para resolver asuntos universitarios. Es preocupante que se haya decidido tomar esa medida, y no augura un clima de diálogo en los demás conflictos que pueda haber en el país.
Alejandro Aura, escritor
Un alivio, la recuperación
Me causó un gran alivio que esta recuperación -e insisto en la palabra- de la UNAM se haya llevado a cabo en forma pacífica, sin violencia, sin ningún disturbio ni heridos. Es un gran alivio.
Fernando del Paso, escritor
Uso discrecional de la ley
Me preocupa mucho el uso discrecional de la ley en el conflicto de la UNAM. El procurador ha declarado que desde julio de 1999, se habían presentado demandas por actos delictivos relacionados con la UNAM, pero que la Procuraduría no actuó por buena fe en espera de que las partes en conflicto llegaran a un acuerdo; parece ser que esa buena fe terminó ahora, y me parece un despropósito que de manera retórica se finquen responsabilidades por causas delictivas que no se atendieron durante nueve meses. Considero que los cargos de terrorismo, con los que se inculpó a los alumnos a propósito de los acontecimientos en la Preparatoria número 3, son una aberración jurídica. No es posible que el CGH haya sido considerado una fuerza de negociación y ahora se ha visto en forma repentina como grupo delictivo. Me preocupa también que la salida judicial impida el desarrollo libre del congreso, necesario para reformar la universidad, y convierta el desenlace en una triste situación de vencidos y vencedores, en vez de la reconciliación racional que muchos esperábamos.
Juan Villoro, escritor
Simulación deleznable
Me parece que fue una verdadera atrocidad por parte del gobierno y una acción planificada con mucho cuidado desde hace varios meses. Jamás hubo la menor intención por parte del rector, la Secretaría de Gobernación y la Presidencia por solucionar el problema. Siempre tuvieron considerado aplastar a los muchachos y lo hicieron a través de los medios más deleznables de simulación, en la cual incluso cayeron intelectuales prestigiadísimos. Es un pésimo comienzo de año.
José Agustín, escritor
De nuevo, la farsa y la mentira
Estoy totalmente indignada. Una vez más hacen lo mismo: entran sorpresivamente un domingo por la mañana para que la sociedad no esté enterada. Una vez más la farsa y la mentira. šAsí no tratan a los que defraudan a los bancos y a los que defraudan a México! ƑEn qué país estamos? Deben liberar a los jóvenes presos, son estudiantes y menores de edad. ƑQué no se dan cuenta? ƑCómo es posible que los acusen de esos risibles y exagerados delitos? La intervención policiaca en Ciudad Universitaria es absolutamente reprobable. El diálogo y el congreso eran la salida. No se respetó la autonomía universitaria, y dicen que fue una acción pacífica, šsólo faltaba que les dispararan! Ya tenemos bastante con Acteal, con Aguas Blancas, con Chiapas. šYa basta!
María Rojo, actriz
Fabricaron pretextos para usar la fuerza
Es muy triste para el país. No era el método para resolver las cosas. Fabricaron los pretextos para llegar a esa solución de fuerza. Independientemente de las actitudes intransigentes y criticables que acompañaron al movimiento estudiantil, los muchachos mantuvieron una posición que merecía el respeto de todos, por su defensa de la educación gratuita y su pliego petitorio. El plebiscito, que era un instrumento de diálogo en el que mucha gente participó, no debieron haberlo rematado de esa manera. No es lo mejor para nuestros hijos ni para nosotros, que aprendimos en la universidad a soñar un mundo mejor. La entrada de la policía, que es la entrada del Ejército, puede acarrear un crecimiento de la militarización del país, un incremento de las actitudes autoritarias y un enfrentamiento entre miembros de la comunidad universitaria.
Guillermo Briseño, compositor
Efecto olla express
Ponerle una tapadera policiaca a toda esa presión producirá el efecto olla express: por algún lado tendrán que salir la rabia y el desconsuelo. Esa no era la salida. Me sumo a la cadena de voces que exige la liberación de los niños y jóvenes acusados de sedición, motín y terrorismo. Condeno esa arbitrariedad. Me avergüenza y me reprime.
Myriam Moscona, poeta
Signos funestos
La intervención policiaca no era la salida. Tomar las instalaciones no sólo no soluciona el conflicto, sino que es una regresión terrible. Tengo la impresión de que Juan Ramón de la Fuente había mantenido una posición favorable al diálogo, pero parece que la Secretaría de Gobernación intentó ponerle un cuatro al empeño del rector. Se está creando un escenario que recuerda a 1968 en sus peores elementos; un ejemplo son esos inaceptables cargos de terrorismo, motín y asociación delictuosa contra los estudiantes. Es muy grave que 30 años después hablemos todavía de presos políticos. El rector debió mantener el diálogo a toda costa; lo más indicado era convocar para el sábado y declararse en sesión permanente y seguir el debate. Se está creando una situación propicia para repetir el voto del miedo en las próximas elecciones. Cuando escuché esta mañana al secretario de Gobernación, parecía que estaba oyendo el mismo anuncio de cuando el Ejército intervino en Chiapas; si ésa va a ser la manera como se van a resolver los conflictos en el país, entonces los signos me parecen funestos.
Carlos Aguirre Rojas, historiador
Liberación, diálogo y congreso
Es un lamentable acontecimiento, una pésima solución para un conflicto generado y mal cuidado. Lo importante es exigir la liberación de los chicos presos, porque si no los liberan no habrá espacio para el diálogo y no se resolverá el conflicto en la universidad ni podrá organizarse el congreso. No sé si los años no enseñaran que, de los males, el menos; pero por el momento no me trago este mal sabor. Es preocupante el ingreso de la fuerza pública a un espacio autónomo. Para que la nación recobre la fuerza que le da el nervio de la universidad, insisto en que primero tenemos que exigir la liberación de los estudiantes y después efectuar el diálogo y el congreso.
Carmen Boullosa, escritora
Juventud en abandono
Estoy muy consternado porque las cosas tuvieran que llegar a este punto. Lamento mucho que no prosperaran las negociaciones entre las autoridades universitarias y los estudiantes del CGH. Eso me da mucha pena y me preocupan las consecuencias. Espero que no haya repercusiones graves. Debemos tener calma todos y pensar cómo vamos a actuar, porque ahora están enardecidas las mentes, tanto de las autoridades, como de los estudiantes. No puedo dejar de mencionar que los jóvenes mexicanos han estado abandonados; sus necesidades no han sido cubiertas como deberían, y eso también es parte del problema.
Pedro Armendáriz, actor
Apertura para el congreso
Es lamentable que así haya tenido que ser. Si bien no es una medida definitiva, me parece que -me guste o no- la intervención abre las puertas a la realización de un congreso universitario que permita reorganizar a la UNAM.
Manuel Felguérez, pintor
Confrontación entre ultras
El conflicto fue tomando dimensiones de una confrontación entre ultras del aparato gubernamental contra ultras del movimiento. La masa auténticamente democrática (la palabra democracia ha sido demasiado sobada durante todo ese largo conflicto), la que quiere una universidad no populista, sino actualizada, con acceso a una población que no tiene recursos para otro tipo de casa de estudio, la que quiere que la universidad siga conservando sus altos niveles de investigación, ya sea de los paristas o de los no paristas, plantea el programa de recuperación, por un lado, de lo mucho perdido; y por el otro, la aplicación de una justicia sin la menor mancha. Cualquier universitario (alumno, profesor, investigador, funcionario) que en estos momentos se manche las manos con actos o declaraciones inadecuadas, no será la fuerza necesaria e indispensable para los días que vienen.
Raquel Tibol, crítica de arte
Necesario, un serio análisis
La universidad es un lugar donde se sigue ejerciendo el poder. Continuamente aflora ese problema con diferentes motivos políticos, sociales. La universidad sí necesita, de parte la sociedad y el gobierno, un serio análisis a efecto de que se arreglen de raíz los graves problemas allí enquistados.
Héctor García, fotógrafo
Estamos peor que antes
Es de una tristeza profunda que un lugar donde se supone está la inteligencia, la imaginación, la creación de un país, esté en esa situación tan terrible, porque debería de ser lo contrario. Deberían estar preparando médicos, antropólogos, historiadores, periodistas, para mejorar este país que tanto lo necesita. Lo que están creando es que cada día salgan personas menos preparadas. Dan ganas de llorar. Me quedo con un sabor de gran tristeza habiendo yo participado en el movimiento de 68, que fue una especie de aliento hacia un estado de libertad y una gran tragedia. Han pasado tantos años y estamos peor.
Carmen Parra, pintora
Terrorismo de Estado
Repruebo contundentemente el terrorismo de Estado, que defino como el uso de la violencia para resolver conflictos que de manera pacífica podrían ser solucionados. Si rectoría asegura tener el apoyo de gran parte de la comunidad universitaria, sólo hubiera necesitado que quienes avalaron el plebiscito se presentaran pacíficamente para exigir el cumplimento de su mandato. Pero no fue así. A partir de este momento, vivir en el terror será un riesgo de quienes luchamos por la democracia.
Carlos Blas Galindo, crítico de arte
Urge continuar la reforma universitaria
Me duele muchísimo que el conflicto en la UNAM haya ido de menos a más. La toma de las instalaciones por parte de la PFP no resuelve el problema de fondo. Que saquen a los muchachos de la cárcel. Que continúe el diálogo, porque urge que continúe la necesarísima reforma universitaria.
Guillermo Arriaga, coreógrafo
Represión desatinada
Es muy desatinada la decisión del gobierno de utilizar la vía de la represión. Es indignante, a muchos nos duele, nos preocupa la situación.
Gabriel Castorena, músico
Intereses políticos corruptos
Ocupar el espacio universitario por la fuerza no es nunca solución, sean estudiantes o policías quienes lo hagan. Sin ese espacio de diálogo, se está en la dictadura. El momento actual es de reconciliación. La UNAM no ha sido durante estos nueve meses dueña de sí misma, sino violada por los más corruptos intereses políticos, y no necesariamente del PRD, al que se ha querido implicar sistemáticamente como causante del problema.
Julio Estrada, compositor
Ejercicio de autoridad arbitrario
Es lamentable que no se continúe con el diálogo. Es reprobable que osen meter así a la fuerza pública, en lo que constituye un atentado contra la autonomía de la universidad. Si esa fue la solución para el conflicto universitario, Ƒqué más nos espera? Es indignante y arbitrario tal ejercicio de autoridad, en lugar de inventar mecanismos para escuchar a los estudiantes. Es el momento de que todos hagamos algo.
Laura Rocha, coreógrafa
Ignoto futuro de la UNAM
Utilizar la fuerza pública fue muy fuerte. Hay poca información al respecto. El diálogo debió haber continuado. Ahora ya no sabemos qué va a pasar con la UNAM y eso es lamentable.
Francisco Illescas, coreógrafo
Necesaria, una acción fuerte
Es difícil opinar, por las características de la situación. Las posibilidades de diálogo se agotaron y la UNAM no puede estar fuera de la legalidad. No me gusta la forma en que se recuperaron las instalaciones, pero el estado de violencia que estaba tomando el problema exigía una acción fuerte. Me parece que las personas que seguían apoyando el paro eran la minoría de la comunidad universitaria. Ni siquiera entre los miembros del CGH había diálogo. La posición ultra era negativa.
Cecilia Lugo, coreógrafa
Demasiada intolerancia del CGH
Era el momento, no podía seguir la situación igual. En estado de derecho, se hizo bien en acudir a la fuerza pública; era necesario porque la intolerancia por parte del CGH fue demasiada. Me dan miedo las consecuencias que podría traer esto y que los estudiantes lleven al país a una situación de violencia. Los argumentos del CGH fueron muy deficientes, hubo falta de respeto a jerarquías y eso los llevó al fracaso. No tuvieron respeto por las ideas y por los planteamientos de las autoridades. Me dan miedo las represalias y la anarquía que prevalecen en el pensamiento de los huelguistas.
Paulina Lavista, fotógrafa
Las quejas, patadas de ahogado
Es una medida de mano de mago: Ƒcómo llamar al diálogo y a la vez dar un descontón? Si ya sabemos cómo reacciona el gobierno, Ƒpor qué el CGH utilizó una táctica política equivocada? La atomización del CGH se debe a que ha sido manoseado por todo mundo. Sabíamos que en la huelga estaba metido Juan de la Chingada. El desgaste del CGH se debe a que no ha sabido buscar el apoyo de la izquierda, de los intelectuales y artistas, independientemente de las diversas posturas. La sociedad en general está a favor del desalojo de los estudiantes. Nos quejamos del desalojo violento, pero esas son patadas de ahogado.
Héctor Bonilla, actor
Manipulación política desde el gobierno
No había que llegar a tanto. ƑPor qué no se realizó un plebiscito para saber si queríamos que la Policía Federal Preventiva entrara? Los paristas manifestaban mediante su protesta una crítica contra el sistema, contra la pobreza, contra el desamparo en que el gobierno tiene a las grandes mayorías de nuestra población. No obstante, pienso que no supieron manejar políticamente el asunto. La revolución no se puede hacer desde las aulas. Ojalá fueran liberados (los paristas) sin represalias, ya que existen muchas personas involucradas con una actitud limpia y correcta. Esos hechos fueron manejados por políticos profesionales y colmilludos del gobierno. Creo que le faltó al CGH saber cómo los manejaban políticamente desde el gobierno.
Héctor Ortega, actor
Rescatar a la UNAM del vandalismo
El Estado tiene la obligación de preservar la universidad para los fines que fue creada. El gobierno no ha hecho más que cumplir con la ley, por encima de todo. Ahora se puede esperar que la universidad vuelva a funcionar y que se rescate totalmente del vandalismo. La UNAM es una institución de educación y de cultura que interesa a todo el país, y no sólo a un pequeño grupo. La mayoría de la sociedad está porque la universidad sea recuperada, porque vuelva a funcionar y porque sea a través del diálogo lo que resta por resolverse.
Ignacio López Tarso, actor
Manejo de fuerzas políticas
Siento que se tomaron demasiada libertad para provocar una situación de tal naturaleza. Fui maestra 33 años y estoy asustada del desorden que adquirió la situación. Los muchachos se sienten unos genios, unos superdotados, pero son manejados por fuerzas políticas; eso ha sucedido siempre.
Enriqueta Ochoa, poeta
Libertad, diálogo y no violencia
Hay que pedir la libertad de los estudiantes. Ellos son hasta heroicos porque su intención primaria era de un cambio positivo. El movimiento tiene un génesis de resistencia y de lucha. Veo claro que después el movimiento se contaminó, pero hay que reconocer ese impulso primario y esa mística de los estudiantes. Después de la toma de las instalaciones se necesita un esfuerzo renovado para que la universidad vuelva a funcionar. Mi idea central es la no violencia, la libertad y el diálogo.
Alberto Castro Leñero, pintor
No había otra opción
Lamento mucho el desalojo, no debía haberse llegado a ese límite; pero no había otra opción porque realmente no había diálogo. El Consejo General de Huelga había caído en una intransigencia y no dialogaba ni negociaba. Esperé, como muchos mexicanos, que en la reunión del viernes pasado entre rectoría y el CGH se llegara a algún acuerdo. Esperaba, por ejemplo, que los huelguistas dijeran: "Liberen a los estudiantes presos y nosotros entregamos las instalaciones de la universidad".
Natalio Hernández, escritor indígena
Medida drástica y violenta
Estoy en contra de la actitud del rector, por la manera tan drástica como se procedió, pero parece que era la única salida. Hubiera habido un diálogo más profundo para que por medio de palabras se solucionara el conflicto. Sin embargo, parece que el rector está pidiendo el perdón judicial para todos los estudiantes. El desalojo y la detención, no obstante, es una medida muy drástica y violenta; estoy seguro de que será censurada por la gran mayoría de la sociedad.
Raúl Renán, poeta
Estado de derecho conculcado
Queda claro que el Estado ha conculcado el estado de derecho y que no entiende más diálogo que poner de rodillas al interlocutor con rehenes y amenazas. Lo mismo en Chiapas que en la UNAM.
Alberto Híjar, investigador
Se tardaron 10 meses
Esta medida debieron tomarla hace 10 meses, no hasta ahora. La universidad es irremplazable. Se ha cometido, por parte de los delincuentes que tenían a la universidad, un atentado contra el pueblo, debido a la apatía de quienes debieron tomar esa medida. Las cosas por su nombre.
Arturo Schroeder, jurista e investigador
Ejemplo de cómo funciona el país
Me parece muy grave la entrada de la fuerza pública federal a un recinto autónomo. Es un asunto más de la forma en que funciona este país. También responde a la incapacidad de ambas partes. Si algo nos enseñó el 68 fue a dialogar. Hago un llamado para que no haya venganza. Debe vigilarse que se respeten los derechos humanos de los chavos que se llevaron a los separos policiacos.
Demián Bichir, actor
Elena Poniatowska * Para mí fue un choque en la mañana y una indignación, sobre todo porque ayer estuve en el Reclusorio Norte hablando con muchachos muy jóvenes que me parecieron muy articulados y la noche anterior en el Consejo Tutelar para Menores hablando con las madres y padres de familia que me causaron una impresión muy buena. Pienso que estamos despreciando un México valiosísimo, el del futuro, el México de hoy, que lo ignoramos, que no sabemos de sus peticiones y a mí me reprocharon muchísimo haber firmado el plebiscito. Si yo hubiera sabido que iba a entrar la policía a las cuatro de la mañana jamás hubiera firmado: me avergonzé de mí misma. Viendo a la gente que está en la cárcel y a las madres, uno también sabe que hay un problema de clase, nosotros estamos aquí muy bien vestiditos. En la cárcel sólo tienen un suéter, sus jeans, no es que quiera hacer sentimentalismo, siempre se me ha acusado de eso, pero hay una diferencia bárbara entre los que están en las alturas, en el poder y los que quieren estudiar. Por ejemplo, en el sector femenil, a diferencia del 68, hay 46 mujeres y la población femenina es de 250, es un número enorme de mujeres que tienen cosas que decir, que no hemos escuchado, que se les pudiera ir y que eso es importantísimo. Es un acto de democracia. Queremos nosotros la mejor universidad, el nivel académico más alto, pero no sabemos cual es la situación de la población universitaria.
(Angel Vargas, Arturo Jiménez, Carlos Paul, Merry Mac Masters, Miryam Audiffred, Mónica Mateos, Pablo Espinosa y Yanireth Israde)
* Los rumores de ocupación comenzaron a las 3:00
Del desconcierto frente a la toma, al duro tránsito hacia la realidad
* Los paristas, mermados por la fatiga, creyeron que era borrego
Roberto Garduño y Karina Avilés * Horas de desconcierto y el tránsito a la realidad.
La asamblea general del Consejo General de Huelga en el auditorio de la Facultad de Filosofía y Letras estuvo precedida de avisos anónimos y rumores que anunciaban la intervención de la fuerza pública en la máxima casa de estudios.
Sábado, 24:00.- Los comités de huelga que conforman el CGH daban lectura a sus resolutivos. Para entonces, la tendencia conducía al pleno a aceptar por consenso el regreso al diálogo resolutivo con las autoridades universitarias. A esas horas, reporteros de distintos medios de comunicación que cubrían las incidencias en el pleno del consejo de huelga habían recibido mensajes en el sentido de que se preparaba un operativo de la fuerza pública en el campus de Ciudad Universitaria.
Domingo, 01:00.- El rumor cobró fuerza, e incluso se aseguraba que la intervención de la PFP ocurriría a las tres de la madrugada. Aún continuaba la asamblea que decidió discutir como primer punto el tema del diálogo, después el congreso universitario, y por último el plan de acción.
02:00.- La mesa del pleno decretó un receso de dos horas. Para entonces muchos estudiantes que llenaban el auditorio de la Facultad de Filosofía y Letras comenzaron a abandonar Ciudad Universitaria. Se vivieron momentos de zozobra y dudas, pues muchos de los que se quedaron insistían sobre la posible intervención policial. En el circuito universitario ocurrió una salida permanente de vehículos en dirección de la avenida Insurgentes. Otros estudiantes se organizaron en grupos para dar rondines en sus vehículos, unos en el interior del campus y otros por las zonas aledañas a éste.
03:00.- Reporteros, huelguistas, profesores y padres de familia prosiguieron la tarea de la vigilancia. Por vez primera un grupo de informadores se apostó en el acceso principal al campus en espera de cualquier movilización de las fuerzas federales. Mientras el tiempo transcurría y se cum- plía el plazo perentorio -que se conoció desde la media noche-- tanto estudiantes como periodistas bromeaban en relación con aquel borrego: "ya hoy no habrá nada, mejor vamos a echarnos una cascarita con el envase de la leche Lala", y los alumnos juguetearon un rato.
04:00.- Una vez que se disipó la sombra de duda y el frío arreciaba, los huelguistas que salieron a hacer rondines, entre ellos Jorge Martínez Valeros, Francisco Ramírez y Cristóbal Sánchez, regresaron poco a poco a la sede de su asamblea. El pleno, al que asistió un número importante de alumnos de las escuelas que conforman el CGH, reinició con la lectura de los resolutivos. Efectivamente, la aprehensión de sus compañeros a causa del enfrentamiento en la Preparatoria 3 causaba un efecto negativo, pues para los comités de huelga que ahí se encontraban ese asunto es de suma importancia. No obstante optaron por colocar el asunto del diálogo como prioritario en la discusión.
05:00.- Antes de abordar el tema citado, la actuación de la delegación de los diez que asistió a la Antigua Escuela de Medicina se trajo a colación, pues despertó suspicacias al verificarse en un recinto cerrado sin la presencia de los medios, y con su única contraparte: el rector Juan Ramón de la Fuente, José Narro Robles y la comisión de garantías de la rectoría. Al frente del auditorio pasaron Higinio Muñoz, Isaías Barrientos, Cristóbal Sánchez y un alumno de nombre Tomás, de la ENEP Iztacala, quien criticó a sus compañeros de la delegación porque a su parecer habían violado resolutivos del CGH anterior. La queja de Tomás se refería a que, según él, el pleno los mandató para llegar al Antiguo Palacio de la Inquisición con la tarea de leer un comunicado, argumentarlo y después retirarse, porque antes de reiniciar el diálogo resolutivo se tendría que garantizar la libertad de los detenidos en la Preparatoria 3. Cristóbal Sánchez, Higinio Muñoz e Isaías Barrientos expusieron que en ningún momento habían violado este acuerdo. Y evidenciaron al estudiante de Iztacala porque nunca conoció el contenido de este documento. Para entonces, los rumores aún permeaban entre los huelguistas, pero el cansancio los fue mermando.
06:00.- Minutos antes de esta hora, una vez que se acordó no reincidir en ese tipo de discusiones baladíes, los integrantes del CGH iniciaron el debate sobre el diálogo. Veintidós escuelas propusieron reiniciar, y convocar a las autoridades universitarias al diálogo resolutivo en el Palacio de Minería, y tres de ellas lo rechazaron hasta que se lograra la liberación de sus compañeros. Por consenso, la mesa anunció que el tema era aprobado, y solo habría de matizar algunos puntos de cómo acudir al citado recinto. En esas estaban cuando todo cambió...muchos dormitaban.
06:35.- Dos estudiantes anunciaron el inmediato arribo de la Policía Federal Preventiva. Todos los huelguistas se arrinconaron en un costado de las butacas del auditorio y fueron rodeados por una valla de policías que cargaban su escudo antimotines y un tolete. Así permanecieron, en silencio y en medio de la preocupación: Ƒqué nos pasará?
07:20.- Dio comienzo el desalojo de estudiantes del auditorio Che Guevara de la Facultad de Filosofía y Letras, el cual prosiguió durante hora y media. Se podían presenciar múltiples escenas de desolación. Los huelguistas palidecieron y así abandonaron aquel recinto.
08:50.- Culminó el desalojo. Por primera vez desde hace nueve meses, en la Universidad Nacional Autónoma de México ya no había estudiantes en huelga.
* El reglamento de cuotas, detonante del movimiento universitario
Se presagiaba tormenta y nadie la quiso ver
* Los cegehacheros rechazaron todas las ofertas de rectoría y cerraron las puertas a una solución
Elena Gallegos, Rosa Elvira Vargas y Georgina Saldierna * Aquel jueves 11 de febrero y a propósito de una broma, Ernesto Zedillo pareció colocar a su secretario de Salud, el doctor Juan Ramón de la Fuente, en la carrera por la sucesión presidencial. Lo hizo decir ante los reporteros que cubrían una gira por Campeche que se quitarían "los candados" y produjo una ola de especulaciones en torno a las posibilidades del psiquiatra.
En esas fechas, el PRI todavía no se inventaba su consulta interna y la clase política se devanaba los sesos por adelantar como sería el destape. La tarde de ese mismo día, pero en la ciudad de México, el rector Francisco Barnés de Castro anunciaba, con montos y todo, que a partir de agosto se incrementarían las cuotas por inscripción y servicios en la UNAM. Se presagió entonces la tormenta... Pero nadie lo quiso ver.
Casi un año después y luego del erróneo cálculo que se hizo para decidir el alza de cuotas, el presidente Zedillo asumió la responsabilidad de la entrada de la fuerza pública al campus universitario. Juan Ramón de la Fuente no fue candidato pero sí es rector de una comunidad convulsionada y agraviada, y Francisco Barnés de Castro mira, desde su casa, los acontecimientos que desencadenó.
Todo fue un despropósito desde el comienzo de la huelga que duró 295 días y a la que la Policía Federal Preventiva (PGP) puso fin ayer: en el proyecto de Presupuesto que el Ejecutivo presentó en noviembre de 1998, los recursos destinados a las universidades públicas sufrían un sensible recorte. Eso produjo que Barnés y rectores de otras casas de estudios pusieran el grito en el cielo. Finalmente, y gracias a recursos no ejercidos en el sector social -concretamente del programa Progresa-, se les otorgaron 2 mil millones de pesos adicionales, 385 de los cuales serían para la UNAM.
A partir de entonces comenzó a decirse que tal concesión respondía a un compromiso que selló el rector Barnés con el gobierno federal para implementar las medidas que llevaran al aumento de las cuotas de inscripción -intocadas desde 1948 y que equivalen a 20 centavos a precios actuales-, la única condición que se ponía era que dicha iniciativa no generara la rebeldía estudiantil.
Todo bajo control
Feliz porque en 1997 prácticamente acabó con el pase automático sin que la protesta de los jóvenes prendiera, el rector y su staff dieron todas las garantías de que eso no ocurriría tampoco esta vez. No sólo eso, argumentaron en todos lados que como la iniciativa no afectaba a los estudiantes ya inscritos sino a las nuevas generaciones, entonces no había motivos para preocuparse.
Cuentan que el ex rector José Sarukhán -a quien en el último momento y por intervención de Manuel Camacho, el presidente Salinas le impidió el incremento unos años antes- y su grupo respaldaban incondicionalmente a Barnés y lo alentaban a seguir adelante.
Fue así como la rectoría vendió en el ámbito gubernamental la certeza de que todo estaba bajo control. Incluso, otra mala medición que se hizo fue el que muchos de los más experimentados activistas estudiantiles habían abandonado la Universidad para integrarse al gobierno perredista de la ciudad.
Y era tanta la confianza de la burocracia universitaria que el día que el rector dio a conocer con detalles su proyecto -precisamente el 10 de febrero del 99-, el secretario de Planeación de la UNAM, Salvador Malo, se dejó entrevistar y ufano aseguró que hasta Cuauhtémoc Cárdenas estaba de acuerdo. De inmediato el jefe del gobierno capitalino lo desmintió. "šYo no soy autoridad universitaria para aprobar iniciativas!", dijo, y precisó: "mi posición siempre ha sido y será a favor de la gratuidad de la educación pública".
Los muchachos dijeron que se estaba gestando un conflicto. Barnés los desestimó y, en cambio, inició una campaña para divulgar su propuesta: las cuotas anuales de inscripción serían de mil 360 pesos para el bachillerato y de 2 mil 40 pesos para la licenciatura. Además, aumentaba considerablemente el costo de otros servicios proporcionados por la Universidad a sus estudiantes.
Apenas unas semanas después, el rector tuvo las primeras señales de que, efectivamente, se estaba incubando una protesta de alcances inesperados y no lo quiso ver: más de 90 mil alumnos efectuaron un paro de labores el 11 de marzo.
Se multiplicaron las voces que exigían se consultara a la comunidad, antes de tomar la medida. Tampoco escuchó. Al contrario, Barnés apresuró su decisión y el 15 de marzo -frente a la oposición estudiantil- no tuvo ningún rubor para sacar del campus al Consejo Universitario que sesionó en el Instituto Nacional de Cardiología. Otro agravio más.
En esa sesión se puso en entredicho la consistencia de la iniciativa del rector. Sin más, se hizo la primera rebaja: ya no serían mil 360 pesos anuales para el bachillerato sino mil 20 pesos, mientras que las inscripciones de licenciatura ya no costarían 2 mil 40 sino mil 360. Nadie explicó con qué base se fijaban las nuevas cantidades.
Los estudiantes intensificaron sus movilizaciones: en salones y auditorios se discutía con vehemencia lo sucedido. Estaban dispuestos a defender la gratuidad de la educación pública. Se empeñaban además en imprimir un carácter inequívocamente democrático a su movimiento. Por eso, organizaron el primer plebiscito.
El 15 de abril, más de 100 mil estudiantes votaron y decidieron la huelga. El día 20 de ese mes, el paro de labores académicas estalló. En el inter, el rector Barnés insistió que no cedería "ante amenazas ni presiones". Las distintas corrientes que confluían en el movimiento crearon primero la Asamblea Estudiantil Universitaria y una vez que colocaron las banderas rojinegras, se constituyeron en Consejo General de Huelga (CGH).
Las dos partes intercambiaron advertencias: "estoy preparado para una huelga larga", dijo Barnés. "Nosotros también podemos resistir una huelga larga", respondió el CGH.
Los demonios de Barnés
En esos momentos el PRI había iniciado su proceso de selección de candidato a la Presidencia de la República. Francisco Labastida Ochoa ocupaba la Secretaría de Gobernación y trabajaba por su postulación. Pronto, el CGH lo acusó de "meter las manos" en el conflicto y le exigió que las sacara. Pronto también permeó en la esfera gubernamental la tentación de que el problema universitario "sólo se administrara" para endosar el costo político al gobierno de la ciudad y por ende a Cuauhtémoc Cárdenas. Esta última estrategia era compartida cabalmente por la rectoría, que buscaba cobrar sus propias facturas.
En esa lógica, no tardaron en aparecer en Excélsior fotografías de una reunión que se efectuó en casa del delegado de la Benito Juárez, Ricardo Pascoe, y a la que asistieron algunos de los dirigentes estudiantiles más conocidos. En el encuentro estuvo el ex líder del CEU Carlos Imaz, quien un mes antes había ganado la presidencia del PRD en la capital.
Era la evidencia que Gobernación y Barnés ofrecían para apoyar su discurso de que el PRD estaba detrás del conflicto. "No estamos detrás sino a un lado", se quitó Imaz. Con el paso del tiempo, los grupos más duros del CGH harían pagar un alto costo a esos muchachos.
Porque al mismo tiempo, y para saldar una vieja cuenta -la pérdida de la dirección política del movimiento del 87 contra el plan Carpizo-, los brigadistas (conocidos en este movimiento como la corriente En Lucha), proyectaron en las asambleas un video llamado La traición y se dieron a la tarea de desacreditar a todo aquél que tuviera cualquier vínculo con la dirigencia del CEU-Histórico. Esto es con Imanol Ordorika, Antonio Santos y el propio Imaz.
A la vuelta de las semanas a los herederos del CEU-Histórico -pusieron en el mismo costal a las diversas corrientes que integraron la Coalición Democrática Estudiantil- se les adjetivó como "reformistas" y más tarde como "moderados". Muchos de ellos fueron "expulsados" de las asambleas. Se les acusó de buscar "pistas cortas con las autoridades" y terminaron por desdibujarse.
Las discusiones entre los estudiantes subieron, poco a poco, de tono. Obviamente, las baterías se enfocaron contra los llamados "moderados" y el PRD. Se insistía en que el gobierno de la ciudad quería "negociar" al movimiento para evitarse problemas que le significaran pérdidas en el proceso electoral del 2000.
Además, se metió al CGH en la dinámica de que no debía haber una dirigencia. Es decir, la estructura tenía que ser completamente horizontal. Lo cual no sonaba nada mal. "Los líderes -argumentaban los brigadistas- sólo sirven para la foto". Aunque en los hechos, aquello fue una falacia. El CGH sí acabó teniendo una dirección política que quedó en manos precisamente de En Lucha y La Contracorriente. Esto reflejaba claramente la actitud de los paristas, jóvenes que han vivido permanentemente en la crisis y que se sienten (lo están) excluidos de todo, tendiente a inclinarse por las posiciones más duras.
En medio, siempre en medio, se ubicó el Comité Estudiantil Metropolitano (CEM), lidereado por Higinio Muñoz. Ese órgano -al igual que le ocurrió a los moderados-, perdió muchos espacios y no aprovechó su papel como fiel de la balanza.
Mientras todo eso pasaba, lo único que no cambiaba era la postura de la autoridad universitaria. A Barnés se le iba en quejarse del PRD. En sus encuentros con los funcionarios del más alto nivel, advertía irremediablemente que ese partido estaba atrás. También lo decía en público, aunque no lo llamaba por su nombre: "desde que fui estudiante no había visto nunca una intervención tan clara, tan abierta, de un partido político en la vida de la UNAM".
Y se dedicó a tratar de vencer a su demonio... el perredismo. Su antecesor, Sarukhán, compartía esa obsesión. Incluso, narró alguno de los que ahí estuvo, en una plática de ex rectores con el Presidente, y luego de que Zedillo les expresara de distintos modos que no se convertiría en el hombre que reprimiera a los estudiantes, Sarukhán le contestó: "pero puede convertirse en el presidente que le entregue la Universidad al PRD".
Por lo demás, se usaron viejos esquemas para el nuevo problema: Barnés insistió en que manos ajenas y extrañas estaban detrás de los muchachos. Esto es, repitió lo mismo que dijeron el presidente Emilio Portes Gil cuando la revuelta por la autonomía que el rector Jorge Carpizo -por mencionar sólo algunos-, cuando fracasó su plan: los sucesos eran generados por intereses oscuros y no por la torpeza de sus decisiones.
Los días pasados, el rector Juan Ramón de la Fuente sumó su nombre a esta larga lista de descubridores de conjuras. Habló de "intereses ajenos a la Universidad" y de organizaciones de obreros, colonos y campesinos como instigadoras del problema. Secundó además lo expresado por el candidato del PRI, Francisco Labastida, en el sentido de que el Ejército Popular Revolucionario (EPR) apoyaba al CGH.
La comunidad se polariza
El 28 de abril, ocho días después del estallamiento, las clases extramuros comenzaron a impartirse en distintas sedes alternas. Los paristas buscaron impedirlas. No lo consiguieron. Esto aceleró la polarización de la comunidad. Aparecieron grupos como "las mujeres de blanco" y eméritos de derecho como Ignacio Burgoa Orihuela y Raúl Carrancá y Rivas, presentaron demandas contra los estudiantes "por despojo". Se exacerbaron las posturas que presionaban por una salida de fuerza -estuvieron presentes a lo largo de estos meses-y no tardó en perfilarse el grupo UDUAL integrado por ex rectores y académicos reacios a que se hiciera cualquier concesión a los jóvenes.
El contacto entre las dos partes se estableció formalmente hasta junio. Para ello, Barnés creó una Comisión de Encuentro a la que le dio carácter resolutivo. No se llegó a nada. Los operadores políticos del rector, entre ellos su jefe de asesores Raúl Carvajal Moreno; el ex rector de la UAM, Sergio Reyes Luján, y el ex director de la Facultad de Ciencias, Francisco Ramos, iban de fracaso en fracaso. La huelga continuaba.
El 7 de junio -hubo quienes afirmaron que este acuerdo era producto de una negociación entre un ala del PRD y el gobierno federal-, el Consejo Universitario aprobó modificaciones a las reformas que apenas en marzo había hecho al Reglamento General de Pagos. Las cuotas ya no serían obligatorias sino voluntarias. Se condicionó a la entrega de instalaciones la reanudación del diálogo. Este discurso sería recurrente. El CGH -que ya había agregado otros puntos a su pliego, entre ellos el de un congreso resolutivo- rechazó la enmienda y la calificó como "una provocación para tratar de dividir al movimiento".
Las movilizaciones siguieron. Los paristas realizaron bloqueos en importantes avenidas de la ciudad, incluido el Periférico. Pero también se fueron ahondando las diferencias al interior del movimiento. Se registraron discusiones muy ríspidas y hasta golpes en las asambleas -fue así como se llegó al extremo de proteger a la mesa de debates tras una alambrada de púas-, y los muchachos se lanzaron contra los medios de comunicación que, en su mayoría, acusaban los cegeacheros, efectuaban intensas campañas tendientes a ganarles el repudio de la sociedad.
A su vez, los antiparistas y la burocracia universitaria organizaron también sus movilizaciones. El 24 de junio Barnés encabezó una concentración en la Plaza de Santo Domingo para exigir la devolución de las instalaciones. Esa fue sólo una de muchas acciones impulsadas por las autoridades -en una de esas marchas al ex rector Sarukhán le llovieron reclamos-, pero la huelga iba... Simultáneamente, en distintos sectores se cuestionaba la indiferencia con la que el gobierno federal y el Presidente observaban los acontecimientos. Las cosas se enredaban cada vez más.
Entre académicos e investigadores surgieron iniciativas para tratar de acercar a las partes. Ninguna prosperó. Quizá una de las más importantes fue la lanzada por ocho maestros eméritos el 27 de julio. Adolfo Sánchez Vázquez, Miguel Léon Portilla, Héctor Fix Zamudio, Manuel Peimbert, Luis Villoro, Luis Esteva Maraboto, Alfredo López Austin y Alejandro Rossi, hicieron una serie de propuestas que sirvieran de base para la discusión. Pero era ya tal la desconfianza que casi sin analizarla el CGH la descartó. Cuando quiso retomarla las circunstancias ya eran otras.
Tanto las autoridades universitarias como los funcionarios del gobierno se llenaban la boca para repetir con insistencia que nunca se acudiría al recurso de la fuerza para terminar el conflicto. En cambio, las alas más duras del movimiento alertaron permanentemente contra el fantasma de la represión y señalaron, una y otra vez, que esto acabaría mal para ellos. Tal y como ocurrió.
En los últimos meses, se agudizaron los desencuentros en el CGH. Núcleos de paristas de varias escuelas -CUEC, ENEO, etcétera- se alejaron de las asambleas. Fructificaron las iniciativas más duras: la toma de institutos, por ejemplo. Hubo secuestros -aunque algunos se pusieron en entredicho- y, salvo pequeños grupos, académicos e investigadores no tuvieron espacios para expresarse.
Ya para octubre, el rechazo a la política informativa de los medios de comunicación crispaba los ánimos en el CGH. Se decidió expresar el malestar frente a las televisoras. La protesta culminó con una violenta trifulca en la que granaderos golpearon brutalmente a varios activistas. Las críticas se enfilaron a la policía del gobierno perredista. Esto produjo que se organizara una nueva marcha en el Periférico que, a la postre, se convirtió en la más publicitada de las realizadas hasta esa fecha.
Incapaz de construir una solución, Barnés de Castro tuvo que irse el 12 de noviembre. Cinco días después y luego que no pudieron armar una alianza que llevara a José Narro a la rectoría -aseguran que Sarukhán y su grupo lo vetaron-, Juan Ramón de la Fuente fue designado por la Junta de Gobierno para el relevo.
Al tomar posesión, lamentó la larga noche que vivía la UNAM y empeñó su palabra en que buscaría una salida de diálogo. En lo que va de su breve gestión, se escenificaron los encuentros con el CGH en el Palacio de Minería, se crearon nuevas comisiones, se efectuó el plebiscito y la estrategia de recuperar en asambleas las instalaciones culminó con los hechos del martes pasado en la Preparatoria 3.
En la desconfianza y el temor, los cegeacheros rechazaron las ofertas. La salida de fuerza comenzó a vislumbrarse. Las partes se encontraron por última vez en la Antigua Escuela de Medicina. Imposible enmendar nada. La mañana de este domingo, la Policía Federal Preventiva entró a Ciudad Universitaria.
* El universitario se reservó el derecho a declarar
Higinio Muñoz y 15 personas más, acusados de despojo
Gustavo Castillo * Higinio Muñoz y 15 personas más conocieron al filo de la medianoche la acusación que por despojo les imputan autoridades universitarias y otras personas.
Asimismo, se les informó que tienen derecho a su libertad bajo fianza ya que del delito que se les acusa, consistente en despojo, no está considerado como grave; sin embargo, hasta ayer aún no se les notificaba el monto de la fianza.
Hasta el cierre de esta edición el estudiante de la Facultad de Ciencias declaraba sus generales a funcionarios del juzgado segundo de distrito en materia penal con sede en el Reclusorio Norte.
Al igual que sus compañeros, Muñoz se acogió a los beneficios del artículo 20 constitucional y se reservó el derecho a hacer cualquier declaración o responder preguntas del Ministerio Público Federal.
En el juzgado segundo comparecerán todos aquellos que sean consignados por la Procuraduría General de la República, luego de la toma de Ciudad Universitaria, que sean mayores de edad y que estén relacionados con los delitos de despojo y daño.
* Tomaron una foto
A las 20:53 horas entró la PFP a la ENEP Acatlán
Silvia Chávez * A las 20:53 horas 40 elementos de la PFP entraron a las instalaciones de la ENEP Acatlán ubicadas en San Juan Totoltepec, donde no se permitió el acceso de los medios de comunicación. En cambio, 10 agentes de ministerios públicos acudieron para levantar el acta ministerial correspondiente.
El momento fue utilizado por profesores del plantel, quienes se tomaron una fotografía en grupo cuando los federales ingresaron al plantel; en tanto que José Meléndrez, profesor de Derecho y funcionario del ayuntamiento de Naucalpan, acompañado por 10 estudiantes trepaba por las rejas de la escuela, retiraban barricadas, carteles y mantas rojinegras, ubicadas en el acceso principal.
En una acción casi simultánea, a las 9:20 horas otro camión con 35 elementos de la PFP y tres agentes de ministerios públicos arribó al acceso principal del CCH Naucalpan, donde los policías brincaron la puerta atada con un grueso lazo y una cadena.
Afuera permanecía el director del plantel, Rafael Familiar, quien estuvo en el lugar desde las 8 de la mañana.
* Operativo de la PFP en instalaciones universitarias
Abandonan paristas planteles luego de la ocupación de CU
* Realizan manifestaciones en apoyo de huelguistas detenidos
El gris y negro de los uniformes de la Policía Federal Preventiva (PFP) es el nuevo color que impera en terrenos universitarios. Pocas horas después de que esta agrupación ocupó las instalaciones de Ciudad Universitaria, los huelguistas abandonaron las 40 dependencias de la UNAM y los padres de familia, profesores y alumnos comenzaron manifestaciones, tanto en inmuebles periféricos de la institución educativa como en las principales avenidas de la ciudad de México, en apoyo de los paristas detenidos.
Los familiares de los universitarios aprehendidos les reiteraron su "total apoyo". Sus quejas e insultos fueron contra el rector Juan Ramón de la Fuente; el secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco; el presidente Ernesto Zedillo, y el PRI. "šQué bueno que el nuevo PRI mostró su verdadera cara antes de las elecciones; nos veremos el 2 de julio!" "šLa PFP fue creada exclusivamente para acabar con el movimiento estudiantil!", fueron algunas de las consignas.
A lo largo del domingo, el operativo de la PFP se extendió a los diferentes planteles de la Escuela Nacional Preparatoria (ENP) y del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH), a las escuelas nacionales de Estudios Profesionales (ENEP) y la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán, e incluso la Escuela Nacional de Antropología e Historia. En cada una de ellas se desplegó una constante vigilancia de la policías capitalina y del estado de México.
Antes de que amaneciera, los paristas ya sabían que en cualquier momento las escuelas periféricas serían tomadas por la PFP. Al confirmar su temor, en su huida dejaron fogatas prendidas, mochilas y comida. Pasado el mediodía, brigadas de estudiantes pegaron cartulinas en distintos planteles, en las que se avisó a paristas que en las embajadas de España, Nepal, Francia y Austria podían pedir asilo político.
Estudiantes y padres de familia que se encontraban en el CCH Sur y en las ENP 1 y 8 lograron evadir el cerco policiaco y se refugiaron en la Universidad Pedagógica Nacional; otros se reunieron en la UAM Xochimilco y en el parque de La Bombilla, para volverse a organizar.
Desde temprano, autoridades del CCH Naucalpan y la ENEP Acatlán se trasladaron a esos planteles ya desocupados, en espera del arribo de la PFP y de recibir instrucciones de la rectoría. Rafael Familiar, director del primer plantel, dijo que por la mañana recibió la instrucción de José de Jesús Bazán, director general del CCH, para que acudiera al inmueble a su cargo y no se retirara hasta la llegada de autoridades judiciales. Allí advirtió a profesores que apoyan a los paristas que tienen un plazo de cinco días para presentarse a laborar, de lo contrario se les levantarán las actas administrativas correspondientes y se solicitará formalmente su baja de la universidad.
Entre las 17:50 y las 18 horas, la PFP ingresó a los plantes de las ENEP Iztacala y Aragón; una hora después, los agentes del Ministerio Público iniciaron el levantamiento del acta de inspección a las instalaciones. A la primera se presentó el secretario administrativo del plantel, José Luis Castañón Zurita, quien aseguró que las autoridades de la UNAM no han dado la autorización para que ingrese a las instalaciones ningún universitario.
Informó que hasta el sábado pasado se tenía conocimiento de la presencia de 38 paristas en el interior de la ENEP Iztacala. La docena de paristas de la ENEP Aragón abandonaron la sede al filo de las 9 de la mañana. Durante siete horas los padres de familia permanecieron en el exterior para "continuar con la huelga y el resguardo del plantel, como lo hacían nuestros hijos".
Más de 100 elementos de la PFP, encabezados por Gerardo Soto Gálvez, de la Subprocuraduría de Procesos Penales B de la PGR, cinco agentes del Ministerio Público y autoridades universitarias entraron en las instalaciones de los tres campos de la FES Cuautitlán para su resguardo, sin que se registraran incidentes. Los cerca de 30 paristas ya habían abandonado el sitio.
Los integrantes del comité de huelga de la FES Zaragoza abandonaron la escuela en las primeras horas de la mañana; sin embargo, algunos regresaron más tarde para informar sobre las acciones a seguir.
A las nueve de la mañana imperaba la desolación en la Prepa 5. Minutos antes los paristas la habían abandonado. Del otro lado de la acera, un pequeño grupo de padres de familia se mostró hostil con la prensa o guardó silencio, y preguntaban: "ƑEntró ya la policía? ƑAgarraron estudiantes?" En la Alameda del Sur, algunos alumnos se congregaron e informaron que dejaron la Prepa porque se enteraron de la entrada de la policía a CU por unos compañeros que estaban afuera del Consejo Tutelar para Menores. Allí se organizaron para asistir a la marcha. "Esperemos que el pueblo de México despierte para que no sigan estas chingaderas". A las dos de la tarde la PFP recorrió las instalaciones y reportó: "No encontramos bombas molotov, armas ni drogas".
Desde las 8:30, en la Prepa 4 se presentaron el jefe de la Unidad Administrativa, Jesús Macías; el delegado sindical, Jorge Salazar, y el secretario del director, mientras que el abogado del plantel, Francisco Sámano, se reunía con el Jurídico de la universidad. Los funcionarios y algunos padres de familia se concentraron del otro lado de la avenida Observatorio, para evitar algún tipo de enfrentamiento.
A las 14:00 llegó un autobús del Servicio Público Federal, placas 006HAZ, escoltado por la patrulla 6885 de la Policía Federal de Caminos, con unos 40 policías de la PFP, acompañados de un agente del Ministerio Público, quienes brincaron las bardas del plantel y luego rompieron las cadenas con que los paristas habían cerrado las rejas.
En la Preparatoria 7, trabajadores del STUNAM y vecinos vigilaron el plantel al ser abandonado por los paristas. Familiares de los estudiantes pegaron cartulinas en las que exigen que el conflicto sea resuelto por la vía del diálogo, el cese a la represión, rechazo a la violencia y repudio a la ocupación de los campus por parte de la PFP.
Antes de las 8 de la mañana, los paristas abandonaron la Preparatoria 2, ubicada en Río Churubusco y Tezontle. En el transcurso del día llegaron padres de familia a ese plantel, en cuyos zaguanes se pegaron cartulinas convocándolos a reunirse en el Monumento a Alvaro Obregón para marchar de Insurgentes al Zócalo, con la exigencia de que sean liberados los estudiantes detenidos, a quienes llamaron "presos políticos", y que por la vía del diálogo se reanuden las negociaciones con la rectoría.
A las 13:45, la PFP entró en las instalaciones de la Preparatoria 6, ya abandonada. En el interior, y luego de un minucioso recorrido, los policías informaban al Ministerio Público que "no se habían encontrado armas ni bombas molotov".
Similar tensa calma se observó en los CCH Oriente, Vallejo y Azcapotzalco, donde padres de familia también concurrieron en busca de sus hijos y a definir acciones inmediatas. Había indignación entre la gente y los estudiantes. (De la redacción)
* Exigen la liberación inmediata de todos los estudiantes presos
Repudio unánime de ex dirigentes a la ocupación de CU
Elena Gallegos y Rosa Elvira Vargas * Aún con las primeras imágenes de lo ocurrido la mañana de ayer en Ciudad Universitaria, ex dirigentes estudiantiles de la UNAM mostraron en forma unánime su repudio a la entrada de la Policía Federal Preventiva (PFP) a las instalaciones de la institución y exigieron la inmediata liberación de todos los presos del movimiento estudiantil.
Así, para quienes en momentos fundamentales de la lucha universitaria jugaron un papel destacado, estos sucesos constituyen una flagrante violación a la autonomía de la UNAM. Además, establecen que en modo alguno la recuperación de las instalaciones por la policía representa la solución al conflicto, y en cambio puede sentar un grave precedente para la solución de otras protestas en el país.
Para el cineasta Carlos Mendoza -quien ha documentado filmográficamente los últimos movimientos estudiantiles en la UNAM-, el rector Juan Ramón de la Fuente debe renunciar, "y si no lo hace que instaure la cátedra Brígido Navarrete" para que la impartan "los intelectuales" que firmaron desplegados para apoyar el regreso del Ejército "disfrazado de policía" al campus.
A continuación, algunos de los conceptos vertidos:
Raúl Alvarez Garín, dirigente del CNH en el 68: La indignación es absoluta. A los huelguistas no los van a doblegar con procedimientos de fuerza y de humillación, y es muy importante que esto se resuelva bien porque hay otros problemas sociales que estallarán con igual o más fuerza. Estas medidas complican la situación y dejan tremendamente lastimada y herida a la comunidad universitaria. Si ellos han escogido el camino de la fuerza, sólo con la fuerza pueden sostener las implicaciones de lo que desencadenaron. Los presos, que son indudablemente presos políticos, tienen que salir todos y de inmediato. La vida universitaria no se normalizará sólo con abrir escuelas y reiniciar clases. En 1968 el movimiento fue aplastado en octubre y hasta mediados de 69 no se había normalizado la situación en la comunidad. De la Fuente pide la libertad de algunos de los presos, pero la comunidad está pidiendo que se libere a todos. Decimos no a la política de regateo con rehenes. El rector debería cesar de manera fulminante a Brígido Navarrete y a otros implicados para que muestre una disposición a acabar con los funcionarios a los que se ha señalado como responsables de acciones de represión encubierta dentro de la Universidad. Hoy mismo hay una reacción de respuesta: una marcha de 10 mil personas. Recomponer un clima de vida universitaria sana es absolutamente fundamental para el país. La UNAM no puede estar polarizada y fracturada como lo está ahora. La intervención de la PFP en la UNAM plantea un problema que rebasa con mucho el pliego y sus seis puntos.
Carlos Imaz, ex líder estudiantil: No nos imaginamos nunca esto y produce una enorme tristeza ver a la policía en donde tenía que haber estudiantes. La preocupación mayor es que suena a una estrategia de provocar problemas, administrar el conflicto, no entrar a la solución política, construir a través de linchamientos y provocaciones la opinión de que la única salida es la de la fuerza. Esto preocupa en otros casos como Chiapas. Hacer uso de la fuerza y no la fuerza de la política, es a todas luces reprobable. šDe ninguna manera será posible la reconciliación! Me parece que la lógica de provocación no ha terminado, el conflicto se va a las calles, a la lucha por la libertad de los presos, donde el gobierno federal se lavará las manos y colocará el conflicto en el ámbito del gobierno de la ciudad. Debe liberarse ya a todos los detenidos, porque hacer huelga no es un delito y mucho menos de terrorismo. Acteal y Aguas Blancas son terrorismo de Estado y todos los responsables están libres.
Imanol Ordorika, ex líder estudiantil: Es un acto criminal, es una acción inaceptable de las autoridades universitarias y del gobierno. Cuando se recurre a la fuerza como respuesta a las demandas de los jóvenes, de los estudiantes, sólo se muestra incapacidad política. Es una agresión en contra nuestra, un agravio. šHan abierto una herida en la Universidad! Es pues un hecho inaceptable, una violación a la autonomía universitaria que debemos repudiar con toda nuestra fuerza. En este momento, en primer lugar, necesitamos lograr la liberación de todos estos estudiantes y seguir exigiendo a las autoridades universitarias y al gobierno que se garantice la gratuidad de la educación superior y que se dé paso a un Congreso verdaderamente participativo de la comunidad. Pero lo primero, insisto, es repudiar la acción y lograr la liberación de los estudiantes. Vamos a ir a la calle y haremos todo lo que podamos para revertir esta acción. Están tan preocupados del proceso electoral y de la dinámica política en las alturas, que no se dieron cuenta que en la UNAM estaba en juego el país entero. A fin de cuentas la única manera que tienen para lidiar con los excluidos, con los marginados del sistema político, es el uso de la fuerza y la represión. Eso hicieron en Chiapas y es lo que acaban de hacer en Ciudad Universitaria.
Inti Muñoz, ex dirigente estudiantil: Es unánime la condena a esta violación a la autonomía universitaria. Ojalá y el gobierno federal y la rectoría sean conscientes de que el conflicto no termina con la ocupación de Ciudad Universitaria, y que hasta que estén libres todos los presos se podría hablar en principio de una solución real. Es lamentable lo ocurrido. En primer lugar, porque las autoridades universitarias no tuvieron la capacidad de resolver el conflicto a través de la política. La UNAM atraviesa en este momento por su más grave crisis y es tarea de todos la reconstrucción de la Universidad a partir de una reforma democrática. Sin embargo, los sucesos de este domingo incidirán en que el proceso de transformación sea un trance mucho más traumático, difícil y doloroso. Hace un tiempo hubo suficientes elementos para que el conflicto se solucionara por la vía del diálogo y la negociación y las partes no supieron aprovecharlo.
Carlos Mendoza, director del Canal 6 de Julio que produjo durante la huelga los videos: Las píldoras del doctor Barnés y UNAM: memoria del caos: Si bien la conducción del CGH fue completamente equivocada, no hay que olvidar que el rector Barnés y el gobierno federal iniciaron caprichosamente el conflicto. La ocupación de las instalaciones universitarias es un agravio a los estudiantes, académicos e investigadores, y el rector De la Fuente debe renunciar, y si no lo hace, que instaure la cátedra "Brígido Navarrete" para que la impartan todos los intelectuales que firmaron desplegados a favor de que el Ejército disfrazado de policía entrara a Ciudad Universitaria.
Oscar Moreno, ex líder estudiantil del CEU: Es una abierta violación a la autonomía universitaria, una muestra de incapacidad y falta de voluntad política para resolver un conflicto que tiene solución. šEs un acto de brutalidad! Estamos hablando de más de 800 estudiantes aprehendidos. Toda la ciudadanía debe exigir su libertad. Esto no resuelve sino ahonda el problema. Es algo que pensamos que no puede, ni debe ocurrir en nuestro país. Los muchachos fueron detenidos por convicciones políticas, por lo cual son presos políticos. Si ellos no salen de las cárceles, no podrá pensarse en ningún proceso de reconciliación en la comunidad universitaria.
* Dramática contribución de intelectuales a la violencia
La intervención policiaca amplía el conflicto universitario: Aboites
* Al rector, la historia ya lo colocó en su lugar por pedir represión
María Esther Ibarra * El conflicto universitario no se resuelve con la intervención y ocupación policiaca de las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), por el contrario, se profundiza y amplía a otras instituciones de educación superior, que las pone en alerta de cómo se solucionarán en adelante los problemas, advirtió Hugo Aboites, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y uno de los asesores del Consejo General de Huelga (CGH).
De efectuarse el congreso universitario, Aboites manifestó que se llevará a cabo bajo el "compás marcado" por la Policía Federal Preventiva, en el cual, además, "sin lugar a dudas, la derecha de la UNAM se opondrá a cualquier modificación propuesta por los estudiantes en su pliego petitorio, no tanto porque les preocupe los 20 centavos de las cuotas, sino que se constituya un organismo estudiantil que haga contrapeso a la estructura vertical y autoritaria de la Universidad Nacional.
"Al rector Juan Ramón de la Fuente ya lo colocó la historia en su lugar, al apelar a la fuerza pública y a la violencia", expresó en alusión a la demanda surgida entre algunos miembros del CGH de que renuncie a su cargo en la máxima casa de estudios.
De ahí que, asegura el investigador de la UAM, el regreso a la "normalidad" será muy difícil, pues además de que la comunidad "está dividida, se dará en medio de las acciones de miles de universitarios en demanda de la libertad de los detenidos del CGH"; y mucho menos ve viable un diálogo serio y confiable por parte de las autoridades -"en todo momento los estudiantes lo demandaron"-, pues hace el parangón con lo "ocurrido con los acuerdos de San Andrés, incumplidos por el gobierno federal".
En su opinión, resulta "dramático" que un grupo de intelectuales y artistas "muy importantes en la vida del país hayan cooperado en un desplegado a la intervención de la fuerza pública y la violencia". Prueba de ello, dice Aboites, es que en declaraciones a la revista Proceso, "Guillermo Velasco, que promovió dicho documento, aseguró textual que contribuyó a la decisión del Estado mexicano de que interviniera la policía en Ciudad Universitaria. Lamentablemente se aliaron con las autoridades de la UNAM, abierta y explícitamente, para ese tipo de medidas".
Para Aboites, no se toma en cuenta que las cosas llegaron a este punto no por la "radicalidad del CGH, sino por la terquedad de la derecha universitaria, apapachada por las autoridades de la UNAM, dada su resuelta oposición a acceder sobre cuestiones tan elementales como la gratuidad de la educación, la no comercialización del ingreso a la universidad, el rechazo de los estudiantes a ser calificados por un organismo externo (el Ceneval); fijar plazos perentorios para la permanencia y egreso, y también por una demanda tan evidente como el congreso.
"Estos son puntos de carácter universitario, y no implican un caos como el que está sufriendo la universidad. Por el contrario, significan una definición muy clara de la UNAM como una institución pública y gratuita en un México con grandes carencias".
E insiste: "La terquedad de la derecha universitaria fue lo que propició el alargamiento del conflicto y la salida represiva, a partir de un plebiscito apoyado por tantas personalidades e investigadores, pero que finalmente se preveía, como mucha gente lo advirtió, sería un antecedente de la represión".
Retoma el tema del escalamiento del conflicto al ámbito nacional: "Creo que en estos momentos habrá una serie de iniciativas espontáneas y múltiples de organización y de protesta muchos más amplia de la que se ha dado en la UNAM". No duda, entre los escenarios previsibles para los próximos días, el establecimiento de un "gran debate sobre la gratuidad de la educación, la represión policiaca a movimientos sociales y paros en protesta por la intervención de la policía, lo que repercute en la educación superior".
* Ajena a la UNAM
La PFP también tomó instalaciones de la ENAH
Alma E. Muñoz * La Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) también fue tomada ayer por la Policía Federal Preventiva, a pesar de no pertenecer a la UNAM y de no estar en huelga.
Los pocos académicos que llegaron al lugar consideraron la medida consecuencia de la declaración vertida el miércoles pasado por Mario Benítez, líder del CGH, en el sentido de que los paristas utilizarían ese plantel para continuar la huelga en el exilio, en caso de que la policía tomara CU.
Cerca de las 14 horas, 60 elementos de la PFP llegaron sorpresivamente a la ENAH, dependiente del Instituto Nacional de Antropología e Historia. La mayoría se apostó afuera del plantel y otros más ingresaron al mismo. Luego entró un agente del Ministerio Público para dar fe de las condiciones en que se encontraba la escuela.
La acción impidió que estudiantes del plantel realizaran una asamblea de apoyo al CGH por el ingreso de la PFP a la UNAM y las consecuentes detenciones de universitarios. Una estudiante mencionó que recibieron amenazas de María del Sorroco Villar, secretaria del Departamento Jurídico de la ENAH, de que se librarían órdenes de aprehensión si intentamos ingresar".
-ƑCuál es la actitud de la directora Florencia Peña?
-Se mantiene al margen, nos dijo que no puede abrir la escuela.
* De la Fuente, represor
Liberar a todos los detenidos, nueva demanda del CGH
A sus seis demandas originales, el CGH anunció ayer, mediante un comunicado, una más: "La libertad incondicional de absolutamente todos nuestros compañeros presos, sin excepción", y condenó "las hipócritas declaraciones" del rector Juan Ramón de la Fuente quien "hoy, ya sin su careta de democrático, ha mostrado su verdadero rostro: el de represor".
Aseguró que a pesar del "ataque brutal" que violentó la autonomía universitaria en un operativo preparado con antelación por el gobierno federal y las autoridades universitarias, no se terminó con el CGH. "Seguiremos firmes en nuestra lucha. No lograrán arrodillarnos. Es cierto que esta es una acción que golpea al movimiento estudiantil, pero tiene otro filo: nos afianza en nuestra convicción de lucha. Sus policías militares y cárceles no podrán derrotar nuestras ideas y nuestros principios".
Reiteró que la imposición de De la Fuente en la rectoría tuvo como fin preparar el "golpe" al movimiento estudiantil. "Un ejemplo de ello fue el ensayo del pasado primero de febrero, al utilizar el recurso de la provocación por parte de la policía política de la UNAM y golpeadores contratados por rectoría.
A quienes fueron detenidos les piden que "aguanten" y ofrecen liberarlos para juntos conseguir la solución a sus demandas. "Vamos a ganar". Convocan a los universitarios del país a luchar para defender la educación pública y gratuita. "A toda la población le decimos que levante su voz y muestre su indignación ante el brutal ataque contra los estudiantes".
Hacen un llamado a todos los huelguistas a concentrarse hoy a las 10 horas en la UAM Xochimilco, y a estudiantes, trabajadores, profesores, amas de casa y a "todo el pueblo" a participar en la marcha del próximo martes, a las 16 horas, del Angel de la Independencia al Zócalo, pasando por Gobernación.
* Lamenta el desenlace
Reitera la Junta de Gobierno "pleno apoyo" al rector
Karina Avilés * Ante la intervención de la fuerza pública en la UNAM, la Junta de Gobierno reiteró "su pleno apoyo" al rector Juan Ramón de la Fuente, por considerar que "puso todo su esfuerzo y agotó todos los medios a su alcance en busca de una solución de consenso entre los universitarios".
En un comunicado la UNAM señaló que en reunión matutina con el rector -mientras la Policía Federal Preventiva (PFP) inundaba el campus universitario- la Junta de Gobierno "fue informada de los acontecimientos que hoy conoce la sociedad".
Lamentó "profundamente" el desenlace del conflicto, y exhortó "a todos los universitarios a iniciar la reconciliación y encauzar sus esfuerzos a la reconstrucción de la universidad como el espacio de libertad que nunca debe dejar de ser".
La UNAM dijo que a las 7 de la mañana de ayer De la Fuente fue informado por el secretario de Gobernación "de que, en cumplimiento de una orden judicial, la PFP se encontraba en ese momento desalojando la Ciudad Universitaria". También señaló que al rector se le comunicó que el desalojo "se realizaba en presencia de observadores de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, agentes del Ministerio Público y notarios públicos, y que todo sería videograbado".
Indicó que De la Fuente se reunió ayer con sus colaboradores más cercanos, miembros de la Junta de Gobierno y directores de las dependencias universitarias. Además, señaló que el abogado de la UNAM, Fernando Serrano, se reunió con el procurador Jorge Madrazo y otros funcionarios de la dependencia, "para definir los mecanismos que permitan a la autoridad universitaria empezar a laborar" en sus instalaciones y "llevar a efecto los ofrecimientos" del rector.
* Hay jóvenes aislados, denuncian padres de familia
Declaran hoy en el Reclusorio Norte tres líderes del CGH
* Echevarría, Pacheco y Benítez, los primeros en ser remitidos
Enrique Méndez y Gustavo Castillo * Tres de los líderes del Consejo General de Huelga (CGH), Alejandro Echevarría, El Mosh; Alberto Pacheco, El Diablo, y Mario Benítez, El Gato, rendirán hoy su declaración preparatoria ante la juez segundo de distrito en materia penal, con sede en el Reclusorio Norte, María del Carmen Flores, luego de que ayer por la tarde fueron consignados junto con otros 33 paristas aprehendidos durante el operativo de ayer realizado por la Policía Federal Preventiva (PFP) en Ciudad Universitaria.
Echevarría y Pacheco están acusados de robo calificado, mientras que Benítez y los demás paristas que ingresaron el domingo, de despojo.
Los tres dirigentes fueron los primeros en ser remitidos al reclusorio. Llegaron escoltados por el subprocurador de Procesos Penales de la PGR, Everardo Moreno Gómez. En la delegación de la Policía Judicial Federal (PJF) se informó que también fueron trasladados a ese centro los líderes Higinio Muñoz, Carlos Alberto Serrato, Joel Simbrón del Pilar y Carlos Federico Montalvo González
El resto de los detenidos llegaron en autobuses y camionetas Suburban, en medio de un operativo que involucró a 60 agentes de la PFP y a una decena de judiciales federales. Familiares y algunos estudiantes se manifestaron a las afueras del reclusorio, gritando consignas en contra de la detención de los universitarios; incluso arremetieron contra reporteros algunos reporteros: "šPrensa vendida!", "šdigan la verdad!", exigían. A un camarógrafo de Televisa lo golpearon en la espalda con una pila de nueve voltios.
Otro grupo de paristas fue conducido en dos camionetas a las 14:30 horas, y más tarde se dieron a conocer sus nombres: Juan Carlos Guzmán Pérez, José Damián Peralta, Mario Alejandro Rosas, Jorge Martínez Valero y Mariñé Larenas, así como Atenea Bonilla Robles, novia de El Mosh, quien enfrenta cargos de robo calificado y despojo, así como Tania Campos.
Poco antes de las 17 horas ingresaron Arturo Morales Chávez, Ernesto Amador Ramírez e Ibel Taiche Moreno. A las 17:35, un autobús de Servitur, escoltado por dos camiones con agentes de la PFP, ingresó a la aduana del reclusorio. Eran 16 hombres, y seis mujeres más.
Antes de pasar al área de ingreso, fueron puestos contra la pared y las piernas separadas. Cuando los custodios se dieron cuenta que eran vistos por reporteros y fotógrafos taparon una rendija.
Paralelamente, el secretario de acuerdos del juzgado segundo, Arturo Burillo, informó que a partir de las 11 horas de hoy comenzarían a declarar los consignados, iniciando por El Mosh.
Digna Ochoa, abogada del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, denunció que durante las declaraciones ante el Ministerio Público no se permitió que los estudiantes fueran auxiliados por un abogado o una persona de su confianza, como exige este tipo de diligencias judiciales. Ella y el padre de familia Cristóbal Guerra, a quienes se les permitió el ingreso, informaron que la mayoría de los detenidos eran menores de edad.
Padres de familia presentes en las instalaciones de la PJF aseguraron que seis estudiantes fueron aislados; ellos son Francisco Tomás Ramírez Méndez, Alejandro Meave, Juan Carlos de la Cruz, Valentín Santos Cano, María Elena Juárez Bernal y Elizabeth Pérez Valdés.
Por la noche los perredistas Rosalbina Garabito y Jesús Martín del Campo pidieron ingresar a las instalaciones para conocer el estado físico de los detenidos.
* Estrategia de recuperación violenta del campus
Condenan ONG la irrupción policiaca en la universidad
* Impiden a defensores ingresar a PGR y Reclusorio Norte, denuncian
Triunfo Elizalde * Las organizaciones no gubernamentales de derechos humanos (ONG) condenaron la toma de las instalaciones de la UNAM por parte de la Policía Federal Preventiva (PFP), el cerco de fuerzas públicas dispuesto en torno Ciudad Universitaria y la detención de varios cientos de paristas, entre ellos algunos de los líderes principales.
Consideran que se ha violado la autonomía universitaria, que el operativo forma parte de una estrategia de recuperación violenta; que jamás se pensó resolver, mediante el diálogo político, el problema y que la mejor prueba fue el uso de la razón de la fuerza y no la fuerza de la razón.
Oscar González, presidente de la Academia Mexicana de Derechos Humanos: "En estos hechos se está jugando el destino del país con serias repercusiones en los próximos 5 o 10 años. Sus efectos se dejarán sentir de inmediato en las elecciones de julio, la democracia está en peligro. Se quieren cerrar todas las vías que conduzcan al uso de la política mediante el uso de la fuerza. El gobierno y la derecha están desatados. La estructura de la violencia y del poder está cambiando, ignorando que la oposición es ya también poder y cuenta. šPor supuesto que hay una cabeza responsable de todo lo sucedido para la cual el diálogo ya no cuenta, y es el presidente Ernesto Zedillo! Lo que sí creo es que si se cierra la universidad, se acabará a la vez con el STUNAM. Esta es una prueba de fuego para el Poder Judicial en la procuración y administración de justicia".
Edgar Cortés, director del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez: "En este hecho violatorio de la autonomía universitaria está en peligro la existencia de la UNAM. Se decidió por el camino de la fuerza antes que resolver un problema en forma política, como era de esperar. Está en juego el futuro de la educación en México. Este paso es uno más en la escala de la violencia oficial, que interpreta a su manera las leyes, no como están asentadas, sino como las autoridades, básicamente las federales, las están interpretando. Se ha sentado un precedente de fuerza que se utilizará contra toda manifestación de protesta contra la actuación del gobierno. Sí temo que esto repercuta en Chiapas, donde el operativo contra el EZLN sería el Ejército que de hecho lo rodea. También estoy de acuerdo en que hay una acción en contra del trabajo de las ONG y los defensores de derechos humanos".
Desconocimiento de garantías
Benjamín Laureano Luna, presidente del Frente Mexicano Pro Derechos Humanos: "Esperemos. La reacción a este hecho habrá de manifestarse de diversas maneras. Pudieran, diversos sectores de la sociedad, llegar a pedir las renuncias de los funcionarios directamente involucrados, los titulares de Gobernación, de la PGR, del rector y del presidente de la CNDH. Está en peligro la desaparición del sindicalismo en México, si es que se busca a la vez acabar con el sindicato de los trabajadores de la UNAM. Estos hechos ponen en crisis a las ONG contra las que se ha iniciado abiertamente una labor de desconocimiento a su labor a favor del respeto a los derechos fundamentales de la sociedad. Habrá que esperar la conducta del Poder Judicial, que es el que tiene que demostrar su apego a la ley y su divorcio con consignas políticas".
Pilar Noriega, defensora de víctimas de violaciones de derechos humanos: "Yo creo, número uno, que se ha violado la autonomía de la UNAM; dos, la intervención de la Policía Federal Preventiva en asuntos de competencia exclusiva de universitarios, y tres, esto demuestra que este cuerpo policiaco no fue creado para combatir el crimen organizado, sino para hacerlo intervenir en contra de la sociedad en general, por encima de las leyes y de las garantías constitucionales. Todo estaba preparado y se nos hizo creer que la salida que se buscaba era la del diálogo, cuando ya se tenía decidido el uso de la fuerza para acabar con el paro universitario. Lo más importante de tomar en cuenta es que en un año de elecciones presidenciales se haya decidido por la existencia de presos políticos, y que todo es político, por lo que no se puede hablar de democracia."
Adrián Ramírez, director de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos: "Jurídicamente lo expresado por el rector no significa absolutamente nada, puesto que los delitos de que se acusa a los estudiantes se persiguen de oficio; para lograr la libertad de los detenidos se requeriría del desistimiento de la acción iniciada por la PGR. De hecho, y con apego al Código de Procedimientos Penales, la aprehensión de los estudiantes en Ciudad Universitaria y en otras instalaciones, incluidos los detenidos el día primero en la Preparatoria 3, correspondía a la Policía Judicial Federal y no a la PFP. Estamos integrando un informe detallado de las violaciones de lesa humanidad que se han cometido contra algunos de los detenidos en el Reclusorio Norte, a donde llegaron torturados física y sicológicamente por la PFP. Les dijeron que iban a matarlos y a tirar sus cuerpos a una barranca y se mofaron de ellos, incluso, cuando una jovencita se resbaló, los agentes, que sí iban armados dentro de los vehículos, cortaron cartucho.
Cuando el rector pide se deje en libertad a aquellos muchachos 'que nada tienen que ver', tácitamente reconoce que muchos inocentes fueron aprehendidos de manera ilegal y no por orden judicial expresa. Hasta el momento no se ha permitido la entrada a la PGR ni al reclusorio de defensores particulares y personas de confianza".
* Comunicado de Robles
Urgente que la PFP salga de la UNAM y liberar a estudiantes
Ricardo Olayo * En un pronunciamiento leído anoche por Rosario Robles, el Gobierno capitalino planteó "la urgencia de que la Policía Federal Preventiva salga de las instalaciones universitarias y sean liberados los estudiantes detenidos", con el fin de evitar un conflicto en la ciudad de México. De otra manera no será posible avanzar por el camino de la reconciliación y de la reforma democrática de la UNAM, subrayó la jefa de Gobierno, quien consideró que la acción judicial ejecutada por la Policía Federal Preventiva (PFP) canceló la posibilidad de que el asunto fuera resuelto por la comunidad.
Además hizo un exhorto a los padres de familia y a la comunidad universitaria para que las protestas que realicen se den en los cauces de la ley y que "eviten a toda costa cualquier provocación que los confronte con el Gobierno de la ciudad, que es ajeno a la decisión tomada por las autoridades federales y universitarias".
En este momento se impone "la prudencia y la necesidad de recuperar de manera inmediata la vía del diálogo y poner de nuevo en manos de los universitarios la decisión del futuro de su institución", dijo Robles en la lectura del comunicado dirigido a los habitantes del DF, después del cual no respondió preguntas.
Dijo que en los últimos meses muchas voces, como la del Gobierno del DF, señalaron la necesidad de levantar el paro pacíficamente y consolidar los triunfos obtenidos, entre otros la defensa de la universidad pública y gratuita y un congreso resolutivo.
Con anticipación la autoridad capitalina subrayó que una salida violenta y a través del uso de la fuerza pública no resolvería el problema de fondo y sólo alargaría la solución. Con ese antecedente, ayer, "por orden judicial, la PFP entró a las instalaciones de la UNAM, cancelando con ello la posibilidad de que fueran los universitarios los que se dotaran de una salida pacífica, que reconciliara a la comunidad", dijo Robles.
Acompañada de algunos funcionarios del DF, entre ellos el secretario Leonel Godoy, en sus oficinas, la jefa de Gobierno indicó: "Podrán decir que recuperaron los edificios universitarios. Pero el conflicto no está resuelto, pues se optó por la fuerza construida con toda claridad desde los acontecimientos del primero de febrero en la Preparatoria 3, justamente cuando se estaba encontrando cauces de diálogo y de entendimiento".
Dijo que se requiere prudencia para retornar las decisiones al terreno de los universitarios y agregó: "Para evitar que el DF enfrente un conflicto que no está en sus manos resolver, urge que la PFP salga de las instalaciones y que sean liberados los estudiantes presos".
* Condena la represión
Convoca el PRD a un magna marcha para este miércoles
Raúl Llanos Samaniego * La directiva capitalina del PRD y su candidato al Gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador, convocaron ayer a una magna concentración el próximo miércoles para marchar del Angel de la Independencia al Zócalo de esta ciudad para exigir la liberación de los jóvenes universitarios detenidos la mañana de ayer y la salida de los elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP) de la UNAM.
Primero fue el dirigente del PRD-DF, Carlos Imaz, quien, a nombre de la directiva de su partido, condenó la represión y el uso de la fuerza pública en la máxima casa de estudios, y aseguró que el presidente Ernesto Zedillo y el candidato presidencial del PRI, Francisco Labastida -siendo secretario de Gobernación-, "construyeron la provocación y estrategia de alargamiento del conflicto".
Esta no es la salida, no es la solución, dijo, sino la que se estaba empezando a construir y que fue abortada por el gobierno federal y las autoridades universitarias, que era la del diálogo y el acercamiento. Dolores Padierna, secretaria general de ese partido, añadió que "militarizar la UNAM es la vía más peligrosa, inconveniente e inconstitucional y sólo agudiza el problema, complica la situación y no resuelve nada de manera definitiva".
Mientras, el aspirante del PRD al Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, consideró ayer que los jóvenes universitarios detenidos "no pueden ser rehenes de las estrategias perversas" del presidente Ernesto Zedillo, expresadas en acciones como la asumida la mañana de ayer, con el "asalto" a las instalaciones de la UNAM.
Aunado a ello, pidió a los estudiantes prudencia y serenidad; "hay que tener la cabeza fría aunque tengamos el corazón caliente", para evitar errores y caer en la provocación "de los infiltrados" del gobierno federal.
Por su parte, Martí Batres, coordinador del PRD en la Asamblea Legislativa, consideró que era injustificada la intervención de la PFP en el campus universitario. Además, responsabilizó al gobierno federal de estar en el origen de todo el conflicto, pues ellos fueron los que propusieron la disminución del presupuesto a la UNAM.
De igual manera, acusó al candidato presidencial del PRI, Francisco Labastida Ochoa, de haber sido incapaz de resolver la huelga, siendo secretario de Gobernación, y al rector De la Fuente de haber "engañado a todo mundo", pues ofreció diálogo y dio paso a la intervención de la Federal Preventiva.
A su vez, el diputado del PRI y presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la ALDF, José Alfonso Rivera, calificó la acción de la PFP como "muy acertada" y sostuvo que estuvo apegada a la ley.
* Inaceptables, acusaciones contra paristas, considera
Lamentable, el desenlace del conflicto en la UNAM: CDHDF
* Pide devolver las instituciones a las autoridades y diálogo
Ricardo Olayo * La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) indicó que "sería inaceptable la formulación de acusaciones desproporcionadas y jurídicamente insostenibles, tales como terrorismo y sabotaje," en contra de los paristas de la UNAM detenidos en los días recientes.
En un comunicado, el organismo pidió que a la brevedad se entreguen las instalaciones a las autoridades universitarias para que se reanude el diálogo y también la actividad académica, "lo que exige un clima de concordia sin vencedores ni vencidos".
La institución consideró la posibilidad de que algunos de los detenidos queden libres, de acuerdo con la ley, para lo cual se deben realizar "las gestiones que permitan la pronta liberación de los universitarios detenidos por su participación no violenta en el paro".
El desalojo de Ciudad Universitaria y la detención de sus ocupantes, efectuados por la Procuraduría General de la República en cumplimiento de una orden judicial, "es un lamentable desenlace de un conflicto que pudo y debió resolverse sin la intervención de fuerzas policiacas", sostiene la CDHDF.
El escrito establece que por razones de competencia legal no corresponde al ombudsman del DF pronunciarse sobre la resolución del juez que libró las órdenes de aprehensión ni sobre la actuación del Ministerio Público y de la Policía Federal Preventiva (PFP). En este caso, la facultad es de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), pues es la encargada de "supervisar el respeto irrestricto de los derechos humanos de los detenidos".
No obstante, el organismo capitalino indicó que "sería inaceptable" que la Procuraduría General de la República formule acusaciones sin proporción ni sustento jurídico como los delitos de terrorismo y sabotaje.
La CDHDF, cuyo presidente es Luis de la Barreda -también integrante de la comisión de garantías del plebiscito realizado hace dos semanas en la UNAM-, subrayó que los resultados de esa consulta a la comunidad universitaria sentaron las bases de "una salida democrática que suponía la devolución de las instalaciones", pues "ningún grupo puede arrogarse la representación de la voluntad del conjunto de los universitarios".
El conflicto debió resolverse por otra vía, pero en la circunstancia actual, el campus debe regresar a posesión de las autoridades universitarias, para reiniciar el diálogo y, en el caso del proceso penal, se logre la liberación de aquellos que no cometieron delitos violentos, subrayó.
* Comisión del PRD
Defensores de los derechos humanos, por la salida de la PFP
La Secretaría de Derechos Humanos del PRD exigió la salida inmediata de la Policía Federal Preventiva de las instalaciones de la UNAM y al rector le demandó el reinicio del diálogo con los universitarios; este asunto no debe resolverse con el uso de la fuerza pública sino con una discusión serena.
"El conflicto no está resuelto, ya que lo único que hicieron las autoridades universitarias fue recuperar las instalaciones con el uso de la PFP", dijo María Rosa Márquez, secretaria de Derechos Humanos del PRD. Al manifestar su preocupación por "la falta de capacidad de las autoridades universitarias para resolver la huelga por la vía del diálogo", Márquez informó que el área jurídica de su partido interpondrá amparos a favor de los universitarios detenidos.
Criticó al secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, por "erigirse en el vocero de la UNAM, pues evidencia la confusión y distorsión que hay en el gobierno federal y en distintas instancias".
El conflicto universitario fue analizado el pasado fin de semana por defensores de los derechos humanos, y se acordó realizar una marcha este miércoles en apoyo a los estudiantes detenidos. (Matilde Pérez)
* En tela de juicio, la actuación de CNDH y CDHDF
Zedillo utilizó inconstitucionalmente al ejército en el operativo: ANAD
* "Lamenta" Soberanes que la solución no haya sido por vía del diálogo
La Asociación Nacional de Abogados Democráticos responsabilizó al presidente Ernesto Zedillo de la intervención de la PFP en la toma de instalaciones de la UNAM. "Congruente con su política, Zedillo utilizó al ejército disfrazado de cuerpo de PFP para apresar en la madrugada de ayer a los paristas, aduciendo la presunta comisión de ilícitos penales contra la seguridad nacional, como motín, sabotaje y terrorismo".
También lo acusó de violar la Constitución (artículos 1, 29 y 136) al suspender el régimen de garantías individuales y sociales, utilizando al Ejército fuera del marco de ese ordenamiento. "Con esas acciones, el gobierno propicia un clima de inseguridad jurídica y violencia que podría desembocar en el uso del Ejército y la anulación de las garantías individuales y sociales a fin de reprimir las luchas sociales, como la de Chiapas, y una eventual inconformidad con un resultado fraudulento en el próximo proceso electoral".
Informaron que a pedido de padres de familia, la organización asumió la defensa de los detenidos en el operativo de ayer. Los abogados Bárbara Zamora, José Santos García, Jorge Fuentes Morúa y Oscar Alzaga, integran el grupo de 16 abogados que asistirá jurídicamente a 40 detenidos.
Irregularidades preocupantes en cuanto a protección de derechos
María Esther Ibarra * El doble discurso de las autoridades de la UNAM quedó evidenciado pues, por un lado, plantean el diálogo, y por el otro, alientan el hostigamiento, persecución y amenazas permanentes a los miembros del CGH, acusó la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todos.
En un comunicado, cuestionaron también la actuación de organismos gubernamentales en la materia, como las comisiones Nacional y del Distrito Federal de Derechos Humanos, que "durante los últimos hechos en las instalaciones universitarias y ministeriales se han concretado a avalar la actuación represiva de las autoridades".
Para la red, tanto en los hechos del martes pasado como en los de ayer, se detectaron irregularidades preocupantes en cuanto a derechos humanos, entre ellos la dudosa actuación "legal" de PFP y PGR, y el maltrato físico y psicológico y la incomunicación de los detenidos al impedírseles ser asistidos por abogados particulares.
Comunicado de la CNDH
El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, José Luis Soberanes, lamentó en un comunicado de prensa que no haya sido por vía del diálogo, la tolerancia y el entendimiento como se recuperaran las sedes universitarias, y exigió que las diligencias que marca la ley se realicen con respeto a las garantías individuales.
Informó que cerca de las 5 de la mañana del domingo recibió información de la Secretaría de Gobernación sobre el operativo, instruyendo de inmediato a los visitadores de la CNDH para vigilarlo. En las horas siguientes verificaron que las acciones se efectuaran por personal desarmado y con respeto a la integridad física y a los derechos fundamentales de las personas.
* Exigen la liberación inmediata de estudiantes
Repudian partidos, ONG y universidades la toma de CU
* Anuncian protestas en diversos estados; demandan diálogo
Luis A. Boffil Gómez, corresponsal, Mérida, Yuc., 6 de febrero * PRI, PAN y PRD se pronunciaron hoy en contra de la violencia y la intervención policiaca para recuperar las instalaciones de la UNAM.
La directiva estatal del blanquiazul señaló que el conflicto de la universidad es una muestra de la ingobernabilidad que prevalece en el país y de los abusos comandados por las fuerzas de seguridad pública.
El líder perredista Néstor Santín Velázquez coincidió con el PAN en que es el momento de analizar la posible renuncia del rector Juan Ramón de la Fuente, quien -según estos institutos políticos- es producto del dedazo del presidente Ernesto Zedillo.
A su vez, el PRI apoyó la intervención policiaca para recuperar la UNAM, pero indicó que el diálogo tiene que prevalecer en el futuro inmediato y externo su apoyo al rector universitario.
Mitin de apoyo en Michoacán
Raúl López Téllez, corresponsal, Morelia, Mich. * Aproximadamente 800 estudiantes de la universidad michoacana de San Nicolás de Hidalgo y miembros de la sección 18 del SNTE se concentraron esta tarde frente al palacio de gobierno de ciudad para demandar la libertad inmediata de los detenidos en el campus de la UNAM, la reanudación del diálogo entre autoridades universitarias y el cumplimiento de los seis puntos del pliego petitorio del Consejo General de Huelga.
Los oradores del mitin insistieron en que la salida represiva en la UNAM se dio "ante la incapacidad del gobierno para resolver, mediante el diálogo, las peticiones de los universitarios", y responsabilizaron de la misma al presidente Ernesto Zedillo, al rector Juan Ramón de la Fuente y a la jefa de Gobierno del DF, Rosario Robles.
Problema creado por las autoridades
Elio Henríquez, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis. * Cerca de 100 integrantes de diversas organizaciones marcharon esta noche por las principales calles de San Cristóbal para solidarizarse con los estudiantes de la UNAM y para exigir la liberación de los más de 600 detenidos durante el desalojo policiaco, así como de los más de 200 aprehendidos en la Prepa 3.
"De esta forma, las autoridades neoliberales pretenden solucionar el conflicto en la UNAM, que ellos mismos generaron al intentar privatizar la educación", dijeron los manifestantes durante un mitin realizado en la plaza Catedral.
Asumirán defensa jurídica en Morelos
La Jornada Morelos, Cuernavaca, Mor. * Integrantes de organizaciones no gubernamentales y estudiantiles realizaron una marcha de protesta contra la represión y desalojo de paristas de la UNAM, por parte de cuerpos policíacos, y demandaron la liberación de mil presos políticos, entre ellos siete estudiantes universitarios morelenses.
En el monumento María Morelos y Pavón, utilizado como tribuna de la denuncia, integrantes de la Comisión Independiente de Derechos Humanos (CIDH) y de la Coordinadora Nacional de Estudiantes exigieron la liberación de los miembros del CGH.
Con lágrimas en los ojos y consternada por la noticia, la madre de una estudiante de 23 años de las facultades de Derecho y Filosofía y Letras de la UAEM manifestó que familiares de la ciudad de México le informaron sobre la detención de su hija y que había sido trasladada al reclusorio: "Mi hija no es ninguna maleante, está por concluir su carrera en derecho y estudia el quinto semestre de filosofía, solo pido justicia y que los padres de familia me ayuden".
Las organizaciones consideraron a Zedillo represor y violento ante los hechos en la UNAM, y exigieron la liberación de presos políticos, la desocupación de las instalaciones de la universidad por parte de los cuerpos policíacos y el cese a las represalias en contra de los paristas.
Asimismo, acordaron iniciar movilizaciones en los 33 municipios de la entidad, formar un comité proliberación de los detenidos, asumir la defensa jurídica de los estudiantes morelenses.
Acto de barbarie, dicen en Puebla
La Jornada de Oriente, Puebla, Pue. * Horas después de que se dio el desalojo de los miembros del CGH en la UNAM, diferentes organizaciones populares de Puebla se congregaron en el Zócalo de la capital para protestar y calificar la acción policiaca como una muestra de que en México hay un estado fascista que privilegia el uso de la fuerza y de la contrainsurgencia, en lugar de emplear el diálogo como vía de solución de los conflictos sociales.
Ante los sucesos ocurrido en la mañana de este domingo, dichas organizaciones anunciaron que emprenderán dos acciones para apoyar a los paristas universitarios. La primera será difundir "información alternativa" de lo que ocurre en la UNAM, y la segunda, se movilizarán cuando así lo solicite el CGH, dijo Efraín Rojas Brucheta, quien en nombre de las organizaciones dio la información.
La intención de dar información "alternativa", explicó, es para contrarrestar la estrategia de "miedo" que el gobierno pretende imponer para que la sociedad civil no se involucre en el conflicto universitario y se pueda utilizar la violencia de manera impune.
Entre las organizaciones que ayer se manifestaron frente al asta bandera del Zócalo de la Angelópolis se encontraban miembros del Frente Zapatista, quienes informaron que también participarán en el apoyó a los paristas de la UNAM, la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre, la Coordinadora de Contacto con el EZLN, el Sindicato Unitario de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Puebla y miembros del Sindicato de Telefonistas.
En un comunicado, las organizaciones antes mencionadas consideraron: "Meter la policía a Ciudad Universitaria es un acto de barbarie política y de desestabilización social".
* Fue el día más negro para la institución, afirman
Atentado contra la UNAM y el libre pensamiento: moderados
* Los sectores democráticos deben exigir la libertad de estudiantes
Integrantes del sector moderado del movimiento universitario condenaron ayer la entrada de la Policía Federal Preventiva (PFP) a las instalaciones de la UNAM. Es el "día más negro para la máxima casa de estudios desde septiembre de 1968, cuando el Ejército ocupó Ciudad Universitaria", manifestaron.
Fernando Belauzarán opinó que la participación de la nueva corporación en el conflicto universitario representa un "atentado" contra la institución y la libertad de pensamiento y discusión. "Hoy se impuso una vez más el grito de muera la inteligencia. Todos los sectores democráticos del país deben unirse para exigir la libertad de los estudiantes detenidos y la salida de la policía federal", agregó.
Marjorie González dijo que la comunidad universitaria vive ahora "el terrorismo estatal" y la persecución abierta de los dirigentes del CGH. La intervención del gobierno viene además en momentos en que algunos sectores de la UNAM estaban haciendo a un lado sus diferencias frente al conflicto, indicó.
Rodrigo Figueroa manifestó que el operativo policiaco en la UNAM significa el triunfo de la cerrazón y la violencia frente al diálogo y la negociación política. "Los grupos de extrema derecha del país presionaron al Estado para que actuara en esta forma y con ello violar la autonomía de la universidad. Esto sienta un precedente muy delicado en la vida de las universidades públicas del país".
Los integrantes del sector moderado hicieron un llamado a la sociedad mexicana para que ésta exija la liberación de los universitarios. (David Aponte)
* Intromisión en CU
Manifiesta STUNAM su absoluto rechazo a las acciones de la PFP
Elizabeth Velasco C. * El Sindicato de Trabajadores de la UNAM (STUNAM) manifestó su "absoluto rechazo y profunda indignación por la intromisión" de la Policía Federal Preventiva en las instalaciones de la máxima casa de estudios, y tras exigir en forma enérgica la salida de la fuerza policiaca estableció que ante la falta de garantías de seguridad y "la violación plena" a la autonomía universitaria, los integrantes de esa organización no trabajarán en ninguno de los planteles hasta que la PFP no los abandone.
El dirigente del STUNAM, Agustín Rodríguez, también exigió al rector Juan Ramón de la Fuente la inmediata liberación de los estudiantes e integrantes del CGH y de 25 trabajadores sindicalizados que realizaban acciones de vigilancia en el momento en que la PFP ingresó a CU, así como el restablecimiento de condiciones que permitan volver a la mesa del diálogo para dar solución al pliego petitorio del CGH.
Asimismo, "exigimos una reunión inmediata con el rector para que se defina, primero, la salida de los agentes policiacos y, segundo, las condiciones en que habrán de desarrollarse las actividades de los trabajadores", expresó en rueda de prensa en la sede del sindicato.
Rodríguez puso en tela de juicio que la toma de las instalaciones haya sido pacífica y sin violencia; "nosotros lo dudamos", dijo.
* La juez María del Carmen Flores le pidió realizar acciones preventivas
Apoyó la SSP con mil elementos el Operativo UNAM
Angel Bolaños, Elia Baltazar y Teresa Gómez * A petición de las autoridades judiciales federales, la Secretaría de Seguridad Pública del DF dispuso de mil elementos para acordonar, vigilar y realizar los cortes viales pertinentes en el perímetro de las instalaciones de Ciudad Universitaria, en las sedes de la Procuraduría General de la República y durante las marchas que se realizaron ayer.
La orden de la juez segunda de distrito, María del Carmen Flores Cervantes, para desalojar la universidad llegó a manos del titular de la SSP, Alejandro Gertz Manero, a las 4:30 de la madrugada de ayer, y fue entregada en su mismo domicilio por un funcionario de la PGR.
En entrevista, Gertz explicó que la juez María del Carmen Flores Cervantes pidió a las policías Federal Preventiva, Judicial Federal y Preventiva del DF apoyar el trabajo del Ministerio Público, que llevó a cabo las diligencias y restituir provisionalmente a las autoridades universitarias su derecho sobre los inmuebles de CU.
Fue a partir de las 6:15 de la mañana que se inició la movilización de los policías federales preventivos. Ya estaban listos también los efectivos de la SSP, encabezados por los directores de control sectorial, David León Méndez (Halcón), y de la Policía Metropolitana, Marco Antonio del Prado Rodríguez (Azteca).
A las 7:08 horas, una vez instalado el acordonamiento con una "valla de tres", el personal de la PFP rompió las barricadas para ingresar a las instalaciones. Los efectivos de la SSP mantuvieron una estricta vigilancia para prevenir y evitar acciones violentes, según instrucción de sus superiores.
Desde las 7:15 horas, el puesto de mando de la SSP ordenó a los 52 sectores policiacos de la ciudad mantenerse en estado de alerta para prevenir posibles actos de violencia.
A las 8:54, personal de la policía sectorial de Azcapotzalco se trasladaron a la sede de la subdelegación de la PGR, en donde se encontraban aproximadamente 800 estudiantes del estado de México que apoyaba y demandaban la salida de los detenidos.
En Insurgentes y Eje 10 la policía reportó que 50 paristas y padres de familia se tiraron al asfalto para intentar bloquear el paso de un autobús que trasladaba estudiantes detenidos a las instalaciones de la PGR, pero fracasaron.
A las 10:30 horas, la SSP reportó que los efectivos de la PFP "tienen bajo su control total las instalaciones de CU".
En medio de la acción judicial emprendida por la PFP y frente a las instalaciones de la PGR en Azcapotzalco, un reportero de Tv Azteca fue agredido por un desconocido que huyó en un automóvil Chevy, modelo 99, color rojo, placas 707-KKY.
Luego de esta agresión fue trasladado al lugar un pelotón del 52 agrupamiento de la Policía Auxiliar y 40 granaderos, quienes arribaron en siete camionetas Suburban de la corporación.
Más tarde, unos 400 policías auxiliares y 50 granaderos arribaron a la Plaza de la República para resguardar la sede de la PGR, a donde arribaron más de 600 padres de familia y estudiantes que protestaron por la detención, quienes partieron de diversos puntos de la ciudad en marcha.