* Generó opiniones encontradas la ''cruzada'' en favor de la universidad
Los 10 millones para la UNAM, una limosna: PRD
* Es una obligación, consideran panistas * Buscan intervenir en la institución, dicen investigadores
La convocatoria de una ''cruzada nacional para restaurar las instalaciones de la UNAM'', de la Asociación de Banqueros de México y su aportación inicial de 10 millones de pesos, recibió diversos calificativos. El PRD la consideró ''una grosería, pretenden curarse en salud quitándole un pelo a un gato''; para el PAN, es una ''obligación'', y para el PCD una ''acción positiva''; los investigadores de la UAM Xochimilco, en tanto, la consideraron una pichicatada.
Amalia García, dirigente nacional del PRD, dijo que los banqueros intentan quedar bien con los jóvenes; esos 10 millones de pesos son ''como una limosna''. Lo que tienen que explicar es por qué consideran legítimo y válido que se les canalicen 34 mil millones de pesos a través del IPAB, dijo.
Nuevamente exigió la liberación de todos los universitarios presos, porque de lo contrario el ambiente político seguirá enrarecido y además no podrá confiarse en la realización del congreso universitario. Agregó que no se puede tratar como delincuentes a los paristas que exigieron una educación gratuita, mientras que políticos como Rubén Figueroa ųen cuya administración en Guerrero ocurrió la matanza de Aguas Blancasų sigue libre e incluso se incorpora a la campaña del priísta Francisco Labastida. Persiste la impunidad de Carlos Salinas y de José Angel Gurría y Oscar Espinosa, con sus pensiones ilegales, señaló.
El asunto de la UNAM tiene que resolverse por la vía del diálogo y el gobierno federal reconocer que sin una educación pública y gratuita no habrá crecimiento con equidad ni el país podrá ser competitivo con el mundo. El progreso de una nación se mide por los recursos que destina a la educación, concluyó la dirigente perredista.
Si los banqueros quieren realmente apoyar a la universidad, que paguen sus impuestos, lo que no hacen desde 1995, o disminuyan los altos intereses que perciben por el Fobaproa en lugar de ofrecer ''ridículas aportaciones'' que no son nada frente a los 750 mil millones de pesos que recibieron por el rescate bancario, advirtió el senador del PRD, Jorge Calderón. Agregó que la UNAM no necesita de ''ese tipo de caridad dudosa''.
Por su parte, el vicecoordinador panista Juan Miguel Alcántara Soria afirmó que el beneficio que recibieron los banqueros al regularizarse la deuda del Fobaproa, los obliga doblemente a contribuir en los renglones básicos del país, como el de la investigación y la educación superior. Propuso que los recursos captados con la iniciativa en favor de la UNAM sean administrados por un organismo con presencia nacional que garantice la transparencia de su aplicación.
Alcántara Soria dijo que si bien los 10 millones de pesos que depositaron los banqueros ''no son nada'' para las necesidades actuales del país, lo importante es que las contribuciones provengan de recursos de los propios banqueros ''y no captados de los ahorros de terceros''.
Demandó que exista ''una transparencia total, un escrutinio abierto'', para que lo que se pueda captar a través de esta iniciativa se destine íntegramente a las universidades públicas, que no tienen el presupuesto que requieren. ''Si se somete al escrutinio, habría que establecer mecanismos de supervisión que inhiban algún uso indebido; pudiera celebrarse un convenio con la entidad superior de fiscalización de la Cámara de Diputados, para asegurar que no haya ningún desvío'', propuso el panista.
El legislador guanajuatense reconoció que los mexicanos ''hemos vivido experiencias traumáticas'' cuando algunos ''vivales'' han abusado de la buena fe de quienes aportan recursos o bienes para alguna causa, pero consideró que es necesario romper con ese círculo vicioso, ''y si no son los banqueros los que generan la mayor credibilidad, hay que buscar una entidad con presencia nacional que pudiera ser la captadora de las aportaciones para la UNAM'', enfatizó.
A su vez, Manuel Camacho Solís, candidato presidencial del PCD, manifestó que ''cualquier aportación que la iniciativa privada proporcione a la universidad es positiva'', sin embargo resaltó que las afirmaciones que ha hecho el secretario de Hacienda, José Angel Gurría, en el sentido de que habrá nuevos recursos para reparar los daños en la máxima casa de estudios ''son oportunismo político, pues en todo caso por qué si hay recursos no los ofrecieron antes''.
Camacho dijo en conferencia de prensa que ''si antes se hubieran ofrecido los recursos para la UNAM, este conflicto se hubiera resuelto de otra manera. ''ƑPor qué los bancos y el gobierno anuncian recursos después de la ocupación policiaca?''.
Los recursos de la máxima casa de estudios se redujeron entre 25 y 30 por ciento en la presente administración. Con el presidente Ernesto Zedillo se cayó el gasto a la educación, porque no es prioridad. El donativo de 10 millones de pesos por parte de los banqueros es un ingrediente más de los intentos por privatizar la educación pública y abre la puerta para que ese y otros sectores marquen o decidan el rumbo de la enseñanza superior de las instituciones autónomas del país, coincidieron en advertir los investigadores de la UAM Xochimilco, Guillermo Villaseñor y Hugo Aboites.
Para ambos académicos, ese ''gesto de bondad'' de los banqueros no se explica de otra manera, pues señalaron que además de ser el donativo una pichicatada, la banca no muestra la misma generosidad con los deudores. ''Se está aprovechando una coyuntura para la entrada del capital privado, y los banqueros ya están metiendo la mano a las universidades públicas para decidir su rumbo, pues el que paga manda'', acotó Villaseñor. A esto, agregó Aboites, ''con esos 10 millones, además de que los banqueros compran el derecho a opinar de manera decisiva sobre los planes y programas de estudio, se plantea una nueva refundación de la universidad pública sobre una convergencia de intereses y la creación de una telaraña para que otros sectores, como la Iglesia y los empresarios, intervengan en las instituciones de educación superior''. (Con información de Ciro Pérez, David Aponte, Andrea Becerril, Víctor Ballinas, María Esther Ibarra y Matilde Pérez)