Ť Antidemocráticas, las sanciones: Schuessel
Se manifiestan 12 mil personas contra el gobierno austriaco
Ť Holanda y Alemania critican a ministras de Francia y Bélgica
Afp, Ap, Dpa y Reuters, Viena, 12 de febrero Ť Más de 12 mil personas se manifestaron este sábado en esta capital y otras ciudades austriacas contra la coalición gubernamental del conservador Partido Popular y el ultraderechista Partido Liberal, en tanto que el canciller federal austriaco, Wolfgang Schuessel, dijo que los otros 14 estados de la Unión Europea han perjudicado a su país con las "antidemocráticas" sanciones por las que limitaron sus contactos diplomáticos con Viena.
Sin embargo, la oposición de la organización comunitaria contra la coalición gubernamental austriaca dio este sábado sus primeras muestras de división, cuando países como Holanda y Alemania criticaron la actitud de las ministras del Trabajo francesa y belga, Martine Aubry y Laurette Onkelinx, quienes el pasado viernes abandonaron una sesión de la Unión Europea en Lisboa cuando comenzó a hablar la ministra de Asuntos Sociales austriaca, Elisabeth Sickl, del Partido Liberal.
Para la canciller austriaca, la conservadora Benita Ferrero-Waldner, es evidente que "dos naciones forman la vanguardia" en el rechazo europeo contra Austria, y que los demás países comunitarios "los han seguido por solidaridad, pero a muchos de ellos no les gusta hacerlo".
No obstante, el ministro del Trabajo portugués, Eduardo Ferro Rodrigues, fue el único de los presentes en el encuentro que saludó a la funcionaria.
Unas 8 mil personas desfilaron por el centro de Viena este sábado en un ambiente que testigos describieron como "carnavalesco", y otras 3 mil personas participaron en una movilización similar en la ciudad de Linz, 2 mil lo hicieron en Innsbruck, otras 300 se movilizaron en Salzburgo y algunos cientos en Feldkirch.
En todos estos actos los oradores insistieron en que las protestas sirven para demostrar al mundo que no todos los austriacos eligieron a la coalición gubernamental conservadora-ultraderechista.
Por su parte, Schuessel afirmó hoy que las reacciones contra el nuevo gobierno de Austria son "exageradas y antidemocráticas", y sostuvo que las naciones de la Unión Europea no se hubiesen "ensañado" de esta manera contra un país más grande.
Alois Mock, ex ministro austriaco de Relaciones Exteriores, aseguró que las sanciones de la Unión Europea "son una ofensa para cada austriaco que estuvo en un campo de concentración y que transformó a Austria en un país libre y democrático" tras la Segunda Guerra Mundial.
Mock, incluso, afirmó que "hemos vivido en estos días un evidente abuso de las instituciones de la Unión Europea, al servicio de la Internacional Socialista.
Así, el ministro holandés del Trabajo, el socialista Klaas de Vries, calificó de "ridícula" la salida de Aubry y Onkelinx de la sesión sobre políticas laborales europeas del viernes en Lisboa, y para el ministro del Trabajo alemán, Walter Riester, el gesto "no fue constructivo".
Hoy trascendió que ambas funcionarias intentaron convencer, sin éxito, al resto de los representantes europeos de abandonar la sala en cuanto Sickl comenzara a hablar.
En alusión a esta noticia, Ferrero-Waldner señaló que son Francia y Bélgica los gobiernos que encabezan la tendencia antiaustriaca de la Unión Europea, aunque los demás países no comparten del todo el punto de vista de estos dos países.
Con todo, otros países han seguido el ejemplo de la Unión Europea, pues hoy el gobierno argentino llamó a consultas a su embajador en Viena y anunció que mantendrá relaciones diplomáticas con Austria "sólo a nivel técnico", y República Checa dijo que congelaría temporalmente sus contactos diplomáticos con Austria.
En tanto, el compositor estadunidense Lou Reed canceló un concierto que debía dar en Viena, y explicó que los austriacos son libres de elegir un gobierno de derecha "pero eso no significa que otras personas tengan que acercárceles".