MARTES 29 DE FEBRERO DE 2000

Ť Pese a vallas de huelguistas se realizó la consulta para determinar acciones


Tensa situación prevalece en Ciencias

Ť A discusión, los resultados Ť El director de la facultad se deslinda de la organización del referéndum

Roberto Garduño e Yssel Hernández Ť Sin encontrar el camino para avanzar juntos en la solución del conflicto que vive la Facultad de Ciencias, alumnos que decidieron cerrar las aulas, la dirección y oficinas administrativas, y los que pugnan por que la comunidad opte si el plantel permanecerá abierto o cerrado mediante la consulta, expresaron posturas irreconciliables.

La jornada en esa escuela, considerada por muchos como el bastión del CGH, y por otros tantos como la facultad donde se dirimirá el futuro del movimiento estudiantil a través del diálogo, transcurrió desde temprano en medio del conflicto. Los salones, la dirección y las oficinas administrativas permanecían cerradas a manos de aquellos que desde el jueves pasado anunciaron un paro parcial, pero los integrantes de la comunidad que asistieron a sus actividades académicas terminaron por abrirlas.

Desde las 8:00 horas, otro grupo de estudiantes que prepararon la consulta instalaron las dos casillas, donde los alumnos, trabajadores y profesores emitirían sus votos para definir qué hacer en relación con los integrantes del CGH presos y decidir sobre el cierre o apertura del plantel. Al final, participaron mil 680 personas.

El director de la facultad, Fernando Magaña Solís, acompañado de profesores e investigadores, observaba el intento de unos por instalar las urnas y la acción de otros por impedirlo.

Mientras dos vallas de huelguistas rodearon las casillas, los votantes extendían por encima de éstas sus credenciales, y en ocasiones tenían que saltarlas para depositar las papeletas en las urnas. Magaña Solís encontró que las chapas de la dirección habían sido soldadas y otras rellenadas con pegamento para impedir su acceso.

Una pieza más en el juego político

Antes del medio día, los trabajadores de mantenimiento abrieron las chapas y el director ingresó a su oficina. Ahí, el funcionario desmintió que la consulta fue organizada por las autoridades; "no, es al revés, el sector estudiantil se encargó de todo y fue apoyado por sus profesores".

-ƑDicen que detrás está usted?

-Un director en estas circunstancias está satanizado, lo que diga un director necesariamente está mal visto, es mentira, es tramposo, es engañoso aunque hable con la verdad. Este referéndum surgió de los muchachos, espontáneamente para recalcar y remarcar la intención que tienen de retomar su vida académica, y la descalificación constante por parte del CGH siempre es así.

-ƑCuál sería su postura ante los resultados de esta consulta?

-Ya se demostró la voluntad de la mayoría de retornar a la vida académica, cada clase es un plebiscito en favor de dar clases. Mi postura es la del 20 de enero: tratar de retomar los hilos, de dialogar con los inconformes y tratar de que se suban al carro de la transformación de la UNAM, y que ahí canalicen sus inquietudes.

-ƑHasta dónde llegará la tolerancia?

-La tolerancia y el respeto se ha ido imponiendo a pesar de todo. Hoy anunciaron tomar la escuela, y ya estamos trabajando alrededor de 75 u 80 por ciento, y no hemos usado la violencia para nada. Se está imponiendo la razón en esta facultad.

-ƑSeguirá el trabajo y el CGH contará con áreas y salones?

-El CGH no tiene ningún salón en este momento, no tiene ninguna área, lo que h paristas-consulta-ciencias-jpg ace es interferir con las labores administrativas, de apoyo a los estudiantes. En estos momentos pretendimos volver a abrir la sección escolar para culminar la inscripción de alumnos de primer ingreso, y unos cuantos, seis o siete lo impidieron. Son grupos violentos que impiden una labor al ciento por ciento, pero eso dista muchísimo de un paro en la facultad.

-Algunos sectores insisten en que usted es una persona non-grata. Le pidieron su renuncia...

-Siempre he dado mi clase con entrega, esas agresiones e insultos no las puedo tomar personales, se que soy una pieza más en un juego político que rebasa con mucho el ámbito de la Facultad de Ciencias; hay en juego muchas otras cosas, sobre todo ante la llegada de las elecciones en julio.

-ƑComo qué?

-Como el cambio de poder en el país, las elecciones, juegos políticos partidistas...

-Ahora Ciencias es el foco rojo dentro de la normalidad en la UNAM...

-Hay que entender algunas cosas, este era el cuartel general del CGH...

-Era, Ƒya no es?

-Siento que ya no, porque se programó una huelga en una semana a partir de hoy, y aquí está usted conversando conmigo dentro de las instalaciones.

-ƑQué hará si mañana llega y encuentra cerrado el plantel?

-Lo intentaremos día con día, hora con hora, noto que hay una especie de amortiguamiento en la intensidad de la situación, es cosa de tener paciencia y que finalmente impere el espíritu universitario.

-Existe la creencia de que el director es el culpable de todos los males.

-No puedo atizar el fuego de ninguna manera, al contrario, un científico no puede estar argumentando con los puños. Tenemos gente con gran diversidad, de diferentes ideologías, los que tienen problemas familiares, gente resentida socialmente, gente que juega a ser revolucionaria viniendo de una familia acomodada, gente con trinchera dogmática.

Las diferencias

Durante nueve horas, las dos casillas instaladas en Ciencias permanecieron bloquedas por sendas vallas de estudiantes huelguistas. No obstante, las personas que votaron traspasaron esas barreras, y participaron en agrias discusiones con sus contrapartes. De un lado flotó la modestia e intolerancia contra los académicos e investigadores que participaron en el ejercicio. Sobre todo la figura de la doctora Rosaura Ruiz fue, otra vez, la más atacada: "ustedes sólo obedecen a los perredistas y a Rosaura Ruiz", era el slogan más recurrente.

La consulta terminó entradas las 18 horas. Participaron mil 600 personas: mil 141 estudiantes; 407 académicos; 79 trabajadores; 51 alumnos y dos tesistas. Los cálculos preliminares señalaban que se trató de 35 por ciento de la comunidad de Ciencias.

Al concluir la jornada se hizo un llamado "a la asamblea de la facultad, a las células de discusión y a las instancias institucionales correspondientes a contemplar y discutir exhaustiva y abiertamente los resultado de la consulta en el análisis y perspectiva del movimiento universitario".

La misma asamblea sesionó por la noche en la zona conocida como el lagartijero, donde se concluyó cerrar la dirección; hacer un cierre simbólico en salones y oficinas, encabezar una marcha interna y conminar a la comunidad a no ingresar hoy al plantel.

La Dirección General de Información de la UNAM dio a conocer que "en la Facultad de Ciencias el trabajo académico y administrativo fue normal. Los estudiantes efectuaron una consulta con la comunidad para dar a conocer cómo seguirán trabajando y los resultados se tendrán mañana".