JUEVES 9 DE MARZO DE 2000
* Se reunió con líderes campesinos y luego con empresarios de Concamin
No se reformará el 27 constitucional, aclaró Labastida
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José Gil Olmos * Cerca de 300 mil jornaleros agrícolas en el país han sido contratados por el narco, denunciaron miembros del Congreso Agrario Permanente (CAP) al reunirse con el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la Presidencia de la República, Francisco Labastida, a quien le propusieron reformar el artículo 27 constitucional para recuperar el ejido y detener el nuevo nacimiento de latifundistas y terratenientes.
Ante dicha exigencia, el abanderado del tricolor se negó a hacer cambios a la reforma efectuada en 1992 por el entonces presidente Carlos Salinas, bajo el argumento de que no hay buena tierra que repartir sino montañas y zonas áridas. En cambio les propuso una ley de desarrollo agropecuario, mayores recursos económicos, firmar un acuerdo de impulso al campo mexicano y recuperar los créditos bancarios.
Por otra parte, ante los miembros de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), el sinaloense consideró que una vez que pasen las elecciones del 2 de julio las iniciativas de leyes financieras y económicas que se encuentran atoradas en el Poder Legislativo --entre ellas la ley fiscal y la de quiebras-- podrán ser aprobadas pues el partido que dijo apoyarlas junto con el PRI --presumiblemente el PAN-- tendrá que cumplir su palabra.
Ayer, como en pocas ocasiones en lo que va de su gira, Labastida sostuvo reuniones con dos grupos económicamente heterogéneos. Por la mañana con los líderes campesinos, y por la tarde con empresarios de la Concamin. Dos realidades polarizadas plantearon ambos, y a los dos sectores Labastida les pidió su voto bajo la promesa de cumplir sus demandas de reformar algunos artículos de la Constitución.
Los líderes de 11 de las organizaciones campesinas más grandes del país que integran el CAP presentaron al ex secretario de Agricultura un panorama desolador del campo: más de 14 millones de campesinos en extrema pobreza, surgimiento de latifundistas nacionales y extranjeros a raíz de las reformas salinistas al ejido, ausencia de créditos, necesidad de tierras fértiles, incremento de coyotes o intermediarios, caída de producción, migración, falta de servicios, marginación y maltrato de autoridades.
Hasta ahora, las reuniones que Labastida había tenido en torno al tema del campo en varios estados del país habían sido tersas. En las oficinas del CAP fue diferente, e incluso denunciaron que muchos campesinos están en la cárcel por defender sus tierras, cerca de 300 mil trabajan para el narco, otros decidieron incorporarse a los movimientos armados o se fueron a Estados Unidos a buscar mejores condiciones de vida.
Alvaro López, de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas, mencionó que la grave situación de miseria en el campo ha orillado a 300 mil trabajadores agrícolas a rentar su mano de obra al narcotráfico, pues resulta más fácil emplearse con ellos que con las maquiladoras, donde los salarios son bajos.
Señaló que otros han decidido integrarse a los grupos rebeldes y esta situación ha dado lugar a pensar que el campo mexicano se está colombianizando. ''Nos tratan como perros'', denunció un miembro del Consejo Agrarista Mexicano, al señalar que el gobernador de Morelos, Jorge Morales Barud, les ha dado ese trato frente a los fraccionadores del municipio de Tlayacapan. Luego del acto, integrantes de dicha agrupación advirtieron que si les tratan de quitar sus tierras ''habrá sangre y muertos'' porque las defenderán con todo.
En la reunión, el aspirante del PRI no contestó a todas las interrogantes y demandas que se le hicieron, entre ellas la de respetar la autonomía de los pueblos indígenas, recuperar las redes de comercialización de Conasupo, reformar nuevamente el artículo 27 constitucional --modificado por Salinas de Gortari para dar paso a la venta de la propiedad ejidal--, y recuperar la banca de crédito.
Sólo hasta que concluyo el encuentro, en breve entrevista Labastida dijo a los reporteros que en su propuesta de ley de desarrollo agropecuario no se considera tocar el artículo 27 porque la mayor preocupación es el rentismo, pero sólo 2 por ciento de los ejidos del país han cambiado su situación jurídica.
Más tarde, en la reunión con la Concamin, el presidente de esta cámara, Alejandro Martínez Gallardo, planteó cinco demandas: diversificar el comercio exterior, un nueva política fiscal, apoyo de la banca comercial, apertura al sector privado de empresas estatales como la eléctrica y la petroquímica, y crear una ley de fomento a la pequeña y mediana industria.
A todas ellas Labastida contestó afirmativamente y también a la petición de un programa más amplio de seguridad pública, para detener los altos índices de violencia que prevalecen en el país.