SABADO 11 DE MARZO DE 2000
Ť Suprimen 23 artículos
Censuran diputados el proyecto de Ley Nacional de Archivos
Miryam Audiffred Ť Propuesta en principio para regular la actividad de los archivos públicos y privados, el proyecto de Ley Nacional de Archivos -presentada al pleno de la Cámara de Diputados hace casi dos años- ha sido víctima de la censura de los propios legisladores.
Según María Teresa Dorantes, presidenta de la Sociedad para el Desarrollo Científico de la Archivística -instancia que elaboró la iniciativa-, el Comité de Biblioteca e Informática de dicho órgano legislativo eliminó cerca de 23 artículos que reglamentarían el funcionamiento de los archivos eclesiásticos, empresariales y hacendarios ''sin brindar razón alguna".
Durante el foro público de consulta celebrado el jueves en el recinto de San Lázaro, la especialista reconoció que los diputados han actuado con discrecionalidad a pesar de que, en México, son pocos los archivos empresariales que se conservan.
Aseguró que en la historia se formaron ''grupos anquilosados que con indiferencia y desprecio han visto de soslayo el saqueo de la documentación mexicana".
Y es que los casos de robo y destrucción sobran, como señaló Dorantes, quien no obstante la ausencia de diputados refirió el robo de los documentos de Junípero Serra -religioso del siglo XVIII- extraídos del Archivo General de la Nación (AGN) en 1998 y el hurto, ese año, del acta original de matrimonio de Ernesto Che Guevara.
Tras aclarar que se recuperó el material documental en ambos casos, hizo énfasis en la desaparición de toda la documentación histórica del municipio de San Pedro Garza García (NL), y en la destrucción masiva ocurrida en Michoacán y Oaxaca.
AGN, labor insoslayable
La discrecionalidad no ha sido el único vicio imperante en el proceso de estudio y dictamen de esta iniciativa que, hasta el momento, sólo es aplicable a los acervos públicos. Y es que una de las ''grandes omisiones" señaladas por muchos de los asistentes a este acto fue el no reconocimiento a la labor del AGN.
Por eso, en un documento enviado por la titular de esta institución, Stella María González Cicero, se señaló la necesidad de reconocer la importancia de ese archivo en el diseño y difusión de normas y en el establecimiento de políticas públicas en administración de documentos.
''Debe refrendarse que el AGN es la cabeza normativa de los archivos en México y toda iniciativa de ley en la materia deberá atender la experiencia y las recomendaciones de la máxima entidad archivística de la nación.
''No hay una sola institución en México que no reconozca en el AGN autoridad en la materia: no sólo por custodiar el más valioso acervo del rico patrimonio documental del país, sino también y quizá principalmente por ser la que ha encabezado a lo largo de más de 200 años, las tareas para hacer de la documentación y los archivos un recurso útil a la sociedad."
Además de esta observación -que no estuvo acompañada de una propuesta clara- el foro permitió hablar de la urgencia de conformar un Sistema Nacional de Archivos y de la indispensable capacitación de quienes los atienden, pues más de 90 por ciento de los acervos mexicanos es organizado por personal improvisado.
''Urge impulsar nuevos programas de formación profesional y fortalecer los existentes privilegiando la educación a distancia'', expresó el director de la Escuela Nacional de Biblioteconomía y Archivonomía, Nahum Pérez Paz.