MIERCOLES 15 DE MARZO DE 2000
Ť En un estudio recoge 60 mil experiencias
Pobreza es más que un magro ingreso, dice el Banco Mundial
Ť Rechaza Wolfensohn la propuesta reformista del Congreso
Dpa, Washington, 14 de marzo Ť La pobreza implica mucho más que sólo un magro ingreso, señaló un nuevo estudio del Banco Mundial llamado Voces de los pobres, que recoge las experiencias de un periodo de 10 años de más de 60 mil hombres y mujeres que sobreviven en la pobreza en todos los continentes.
''Lo que los informes de experiencia nos transmiten es desilusionante. Nuestra tarea principal consiste en ayudar a las personas pobres a ayudarse a sí mismas'', dijo el presidente del BM, James Wolfensohn, en la introducción del estudio.
La pobreza significa ante todo --según los expertos del BM-- no tener posibilidades de acceder a posiciones influyentes, no tener voz en decisiones importantes ni estar representados en instituciones estatales o políticas. Las personas pobres sufren de hambre con frecuencia, les falta energía y son dependientes de otros.
Un crédito del BM por 3 mil millones de dólares para proyectos de desarrollo comunales atrajo, según el BM, un total de 5 mil millones de dólares en donaciones y dinero procedentes de gobiernos.
Más de 60 países organizaron con esos recursos fondos de desarrollo social, a partir de lo cual se financiaron más de 100 mil programas comunales en todo el mundo. Escuelas y clínicas recibieron apoyo, entre otras instituciones.
A su vez, el presidente del BM, James Wolfensohn, rechazó en un editorial publicado en The Washington Post y ante el National Press Club en Washington, las propuestas reformistas de la institución formuladas por una comisión de expertos del Congreso estadunidense, por considerarlas ''extremas y peligrosas''.
''Los pobres de los países en desarrollo saldrán perdiendo si esas propuestas (para reformar el BM) llegan a realizarse'', afirmó Wolfensohn. Criticó también la recomendación de no prestar más ayuda a los bancos de desarrollo regionales ya que esto, en su opinión, no sería aconsejable en la época de la globalización económica.
El Congreso instituyó la llamada Comisión Meltzer en 1998, coincidiendo con la aprobación de un incremento en la contribución de Estados Unidos al FMI. Entre los puntos principales contenidos en el informe del grupo de expertos, el Congreso propuso que sólo se concedieran préstamos a países con una renta per cápita anual inferior a 4 mil dólares, retirando con ello la ayuda a naciones más desarrolladas como China o México.
Los legisladores criticaron también que el BM concentre el 70 por ciento de sus créditos en sólo 11 países, sobre todo en América Latina y Asia, que gozan de un apoyo suficiente del capital privado.
Sin embargo, el director del BM resaltó que en estas regiones vive el 60 por ciento de los pobres y que los inversionistas privados ''no respaldarán las mejoras en el campo de la salud, la educación y otros servicios públicos que la gente necesita para salir de la pobreza. Las cargas recaerían principalmente en los 2 mil 200 millones de personas en Asia y América Latina que sobreviven con menos de 2 dólares diarios'', añadió.
''Para estar a la altura de los desafíos políticos y de desarrollo del siglo XXI es necesaria una estrategia general y multidimensional'', señaló Wolfensohn.