MIERCOLES 15 DE MARZO DE 2000

Ť Es falso, nosotros respetamos a todos los humanos, responde el mandatario

Acusa Salazar a Albores de amenazar su vida

Ť Ha dicho que aunque gane no voy a llegar, afirma el aspirante opositor al Ejecutivo de Chiapas

Angeles Mariscal, corresponsal, Tuxtla Gutiérrez, Chis., 14 de marzo Ť El candidato de la oposición al gobierno de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, denunció que el mandatario local, Roberto Albores Guillén, amenazó su integridad física al sostener que aun cuando gane las elecciones del 20 de agosto, "no va a llegar; es más, quién sabe si termine la campaña". El contendiente de la Alianza por Chiapas responsabilizó al gobernador de su seguridad, la de su familia y sus colaboradores, y le exigió un deslinde, "con hechos", de tales amenazas.

Según el aspirante opositor, Albores ha reiterado en reuniones privadas con sus operadores políticos que "Pablo Salazar no va ganar porque no tiene dinero... si gana, no va a llegar... Es más, quién sabe si termine su campaña".

"Cuando una expresión de éstas está en boca del Ejecutivo de Chiapas, es prácticamente una orden de jalar el gatillo. Implica una amenaza abierta, no solamente a la integridad física del candidato, sino a todo un proyecto social y político que ha sido abrazado por la sociedad", aseguró Salazar Mendiguchía.

En respuesta a la denuncia en su contra, el gobernador fue entrevistado durante una reunión con los responsables de la seguridad pública de la entidad, y dijo que "esas amenazas son falsas, nosotros respetamos a todos los seres humanos en Chiapas".

Evasivo, intentando en todo momento acabar con la entrevista, incluso hablando de él mismo en tercera persona, aseguró que el suyo "es un gobierno muy comprometido con la legalidad; aquí no se persigue a nadie por sus ideas políticas".

"El gobernador está garantizando la legalidad en el estado, tiene las manos fuera del proceso. Estamos convencidos de que va a haber paz y tranquilidad en la entidad. Al que llegue le levantaremos la mano todos los chiapanecos", aseguró.

Acompañado por los dirigentes locales de los partidos que lo postularon como su candidato al gobierno, Salazar dijo que en el marco de la cultura política del PRI, el testimonio que ha dejado sobre cómo resuelve sus diferencias políticas y hasta dónde está dispuesto a llegar, "es preferible creer y actuar que comprobar este tipo de amenazas.

"Este es un asunto de máxima gravedad política, lo que exigimos al mandatario es que haga un deslinde y asuma el compromiso, con hechos, de crear realmente un clima de civilidad y respeto a los contendientes. Que el gobierno saque las manos del proceso y que se comprometa simplemente a ser garante de que la elección se va a llevar en los mejores términos", demandó.

Sin embargo, Pablo Salazar descartó la posibilidad de presentar una denuncia penal, "a menos de que se intente hacer reales sus amenazas"

Incluso, negó la posibilidad de que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) le comisione guardias personales. "Este no es un asunto de más o menos policías, sino un problema grave de cultura política en un partido: el PRI".

Valoró que la clara simpatía que entre la sociedad ha generado la Alianza por Chiapas tiene preocupados al gobierno y a su partido. "También hay espionaje en nuestra contra, al menos 40 teléfonos están intervenidos, son los de mis amigos, mi familia. Es una brutal violación a nuestra integridad", acusó.

Por su parte, los dirigentes de PAN, PRD, PT, PVEM y cuatro partidos de nuevo registro manifestaron su solidaridad con el candidato y condenaron las actitudes del gobernador. Anunciaron que mantendrán una especial vigilancia en el proceso "y acudiremos a las instancias nacionales e internacionales para hacer las denuncias necesarias y proteger la integridad física del Pablo Salazar y sus colaboradores", explicó el dirigente perredista Gilberto de los Santos.